La citaci¨®n de ?lvaro Uribe en la Corte Suprema agita Colombia
El expresidente y senador debe responder ante la Corte Suprema, el pr¨®ximo 8 de octubre, por un presunto caso de manipulaci¨®n de testigos
Tanto sus fieles m¨¢s leales como sus m¨¢s f¨¦rreos detractores ya tienen la fecha anotada en el calendario. El pr¨®ximo 8 de octubre el senador ?lvaro Uribe, presidente de Colombia entre 2002 y 2010, responder¨¢ formalmente ante la Corte Suprema de Justicia por un caso de manipulaci¨®n de testigos. En esa postergada cita que ha mantenido en vilo al pa¨ªs podr¨¢ dar sus explicaciones para defenderse ante los supuestos delitos de fraude procesal y soborno.
El llamado, como suele ocurrir con las controversias que rodean al influyente exmandatario, ha agitado el ambiente pol¨ªtico en un pa¨ªs de antemano polarizado. Sus simpatizantes han salido a advertir que cualquier acci¨®n contra Uribe incendiar¨¢ Colombia, mientras sus cr¨ªticos celebran que se hayan acabado las dilaciones de la justicia. Militantes y opinadores de lado y lado ya comienzan a copar tanto las tertulias radiales como las redes sociales. Nada apunta a que la crispaci¨®n vaya a amainar, y por el contrario es probable que entre en campa?a, pues Uribe acudir¨¢ a la Corte a d¨ªas de las elecciones locales y regionales del 27 de octubre.
Es la primera ocasi¨®n en que un expresidente es llamado a indagatoria por la Corte Suprema, con competencias sobre los congresistas. La citaci¨®n se produce m¨¢s de un a?o despu¨¦s de que la Sala Penal del alto tribunal lo convoc¨® por primera vez, cuando abri¨® una investigaci¨®n formal que ha tenido todo tipo de demoras procesales. Uribe, el l¨ªder indiscutible del Centro Democr¨¢tico, el partido de Gobierno, incluso anunci¨® en su momento que renunciaba a su esca?o para dedicarse a su defensa al sentirse ¡°moralmente impedido para ser senador¡±, aunque poco tiempo despu¨¦s se ech¨® para atr¨¢s. Desde entonces mantiene una notoria influencia tanto en el Legislativo como en el Gobierno de Iv¨¢n Duque, su ahijado pol¨ªtico.
El caso se remonta a 2012, cuando el tambi¨¦n senador Iv¨¢n Cepeda intent¨® demostrar los v¨ªnculos de Uribe con el paramilitarismo. El exmandatario present¨® una denuncia contra Cepeda ante la Corte por un supuesto complot, con falsos testigos en c¨¢rceles colombianas, a fin de involucrarlo en actividades criminales de los grupos de ultraderecha que combatieron por d¨¦cadas a las guerrillas. Pero fue hasta mediados de 2018 cuando el caso tuvo un giro inesperado, pues el alto tribunal decidi¨® archivar el proceso contra Cepeda, del izquierdista Polo Democr¨¢tico, y pidi¨® en su lugar investigar al exmandatario por manipular testigos como Juan Guillermo Monsalve, un exparamilitar que lo ha se?alado ante la justicia.
"Yo no he ido a c¨¢rceles a manipular testigos, mis abogados han ido por alguna informaci¨®n que me ha llegado¡±, se?al¨® Uribe este martes en una entrevista con W Radio. ¡°He pedido p¨²blicamente que los colombianos que sepan que est¨¢n manipulando testigos en mi contra, me lo cuenten¡±, a?adi¨®. Su defensa alega que solo contactaron a Monsalve despu¨¦s de haber recibido informaci¨®n de que quer¨ªa retractarse.
Cepeda, por su parte, explic¨® a la misma emisora que sus actuaciones no se pueden equiparar con las de Uribe y ?lvaro Hern¨¢n Prada, el otro congresista del Centro Democr¨¢tico implicado en el caso, ya que la Corte Suprema determin¨® que ¨¦l no ha manipulado testigos. ¡°En mi caso hubo una investigaci¨®n de pr¨¢cticamente seis a?os", apunt¨®. "Lo que hay que examinar ahora, y ese es el asunto que deben explicar el senador Uribe y el representante Prada, son sus propias actuaciones¡±.
Despu¨¦s de escuchar a Uribe en la Corte, los magistrados tendr¨¢n diez d¨ªas h¨¢biles para resolver su situaci¨®n jur¨ªdica. Una decisi¨®n que puede saldarse con una medida de aseguramiento en un centro carcelario, la prohibici¨®n de salir del pa¨ªs o sencillamente con que siga afrontando el proceso en libertad.
Aunque su popularidad se ha ido resquebrajando, Uribe mantiene plena vigencia en la pol¨ªtica colombiana. Tras cumplir sus dos periodos en la Casa de Nari?o, se consolid¨® como un gran fen¨®meno electoral. Fue el m¨¢s duro cr¨ªtico de los di¨¢logos de paz con la exguerrilla de las FARC durante los dos mandatos de Juan Manuel Santos (2010-2018), y luego de fundar en 2013 el Centro Democr¨¢tico congreg¨® en torno al partido a los sectores m¨¢s religiosos y conservadores. Su estrategia rindi¨® frutos. En las legislativas de 2018 se convirti¨® en el senador m¨¢s votado de la historia con m¨¢s 800.000 votos, y su partido alcanz¨® la mayor bancada con 19 de los 108 senadores.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.