El presidente de Ucrania quiere acabar la guerra en el Este aunque no a cualquier precio
Volod¨ªmir Zelenski teme que Europa suavice su postura respecto a Rusia
El fin de la guerra en el este de Ucrania es la gran prioridad del presidente Volod¨ªmir Zelenski, pero en el entorno del flamante y popular mandatario ucranio hay inquietud por el precio a pagar por la reintegraci¨®n de las zonas de Donetsk y Lugansk, ahora controladas por separatistas prorrusos. As¨ª se evidenciaba en intervenciones y pasillos durante la celebraci¨®n de la conferencia anual de Estrategia Europea de Yalta (YES, en sus siglas en ingl¨¦s). Este evento, organizado por el oligarca V¨ªctor Pinchuk, comenz¨® en 2004 en Crimea y se celebra en Kiev desde la anexi¨®n de la pen¨ªnsula por Rusia en 2014.
El precio de la reintegraci¨®n del Este depende hoy en gran medida de Mosc¨², aunque no solo, porque cinco a?os de guerra han marcado a los ucranios de uno y otro lado de la l¨ªnea de frente. Adem¨¢s de sostener a las denominadas rep¨²blicas populares de Donetsk y Lugansk, Rusia (con Ucrania, Francia y Alemania) es uno de los cuatro integrantes del Cuarteto de Normand¨ªa y del proceso de Minsk, el ¨²nico cauce internacional para aplicar los acuerdos firmados por los l¨ªderes de los cuatro pa¨ªses en febrero de 2015 bajo la ¨¦gida de la OSCE.
Los miembros del Cuarteto de Normand¨ªa preparan ahora una nueva cumbre de jefes de Estado, que ser¨¢ la primera a la que asista Zelenski. Francia y Ucrania consideraban posible una cumbre en septiembre, pero Mosc¨² se decanta por octubre cuando el presidente Zelenski haya vuelto de su primer viaje oficial a EE UU.
El memor¨¢ndum de Minsk se firm¨® en un mal momento para Ucrania (con mort¨ªferos desastres b¨¦licos en el Este como tel¨®n de fondo). El presidente Petr¨® Poroshenko, antecesor de Zelenski, dio largas al documento, que se atasc¨® en torno a las diferentes interpretaciones sobre el orden de aplicaci¨®n de sus puntos. La cuesti¨®n hoy es c¨®mo superar las divergencias sobre el memor¨¢ndum de Minsk¡ªb¨¢sicamente ¡°seguridad primero y pol¨ªtica despu¨¦s¡±, como quiere Kiev, o ¡°pol¨ªtica primero y seguridad despu¨¦s¡±, como quiere Mosc¨². Una posibilidad de compromiso es el llamado ¡°plan Steinmeier¡± (elaborado por el exministro de Exteriores alem¨¢n Frank-Walter Steinmeier), seg¨²n el cual se garantizar¨ªa la seguridad en las elecciones locales, a celebrar seg¨²n la legislaci¨®n ucrania y bajo control de la OSCE. Si los comicios cumplieran los criterios internacionales, se dar¨ªa luz verde a los otros puntos del memor¨¢ndum de Minsk.
En v¨ªsperas del relanzamiento de Minsk, el presidente franc¨¦s Emmanuel Macr¨®n se declar¨® a favor de una ¡°Europa de Lisboa a Vladivostok¡± y de ¡°reinventar una arquitectura de seguridad basada en la confianza entre la UE y Rusia¡±. Las palabras de Macr¨®n satisfacen a Mosc¨², pero en Kiev se interpretan como una presi¨®n para que Ucrania llegue a un acuerdo que facilite eliminar parte de las sanciones europeas sobre Rusia.
¡°Ustedes est¨¢n perdiendo dinero, lo siento, pero nosotros estamos perdiendo a nuestra gente¡±, dijo Zelenski en su intervenci¨®n del pasado viernes en la cumbre de YES. Zelenski, que se dirig¨ªa a quienes quieren eliminar las sanciones sobre Rusia, abog¨® por mantenerlas hasta que se ¡°restaure la paz¡±.
¡°Lo que me preocupa de la posici¨®n europea es que no existe, porque los jefes de Estado se reunieron por ¨²ltima vez en el Cuarteto de Normand¨ªa en octubre de 2016 y despu¨¦s no hicieron nada m¨¢s¡±, manifestaba a este peri¨®dico Leonid Kuchma, expresidente de Ucrania y jefe del grupo negociador de su pa¨ªs en el llamado ¡°grupo trilateral¡± en Minsk (Rusia, Ucrania y los secesionistas).
¡°Para ellos la prioridad es Rusia¡±, opin¨® Kuchma refiri¨¦ndose a los socios occidentales en el Cuarteto de Normand¨ªa. A su juicio, la posici¨®n occidental ha comenzado a ¡°cambiar en el peor sentido¡±, mientras la posici¨®n de Rusia se mantiene estable aunque ¡°con peque?os cambios en lo que se refiere al intercambio de prisioneros¡±. Tras el reciente intercambio de 70 personas (35 por 35), Zelenski conf¨ªa en que pronto ser¨¢ posible un nuevo canje.
¡°Rusia ha sobrevivido a las sanciones y tiene montones de oportunidades de salt¨¢rselas, aunque sufra algunas p¨¦rdidas ?De qu¨¦ sanciones hablamos si los alemanes abren f¨¢bricas de coches?¡±, se?al¨® Kuchma. ¡°Para los europeos lo m¨¢s importante es el dinero¡±, afirm¨® el expresidente, que era esc¨¦ptico sobre la posibilidad de un acuerdo con Rusia sobre las elecciones. ¡°En ese sentido, Putin es un interlocutor muy malo. Mire cu¨¢ntos conflictos hay en el espacio postsovi¨¦tico y ninguno de ellos est¨¢ resuelto¡±, afirma refiri¨¦ndose a Abjasia, Osetia del Sur, el Alto Karabaj y Transdnistria. ¡°Si alguien cree que el t¨ªo Volodia (Putin) ceder¨¢ enseguida si se habla con ¨¦l, yo no tengo la misma convicci¨®n, pero no tenemos otro camino¡±, sentenci¨®. ¡°El problema se puede resolver de forma quir¨²rgica o terap¨¦utica. Yo soy partidario de lo segundo. Ninguna acci¨®n militar¡±, exclam¨® Kuchma, que hab¨ªa comparado la situaci¨®n en el Este con un ¡°tumor¡±.
En los pasillos de la cumbre de YES algunos veteranos diplom¨¢ticos ucranios abogaban por una neutralizaci¨®n de Ucrania, es decir un pa¨ªs no integrado en los bloques, que pudiera beneficiarse de sus relaciones con el Este y el Oeste. No obstante, la opini¨®n p¨²blica ucraniana es hoy favorable a la OTAN (antes de 2014 era contraria) y el ingreso en la Alianza fue incorporado como objetivo a la Constituci¨®n en ¨¦poca de Poroshenko.
?Podr¨ªa el expresidente Kuchma ver una Ucrania situada en una posici¨®n parecida a la de Finlandia o la de Austria, que no est¨¢n en bloques militares? ¡°Pr¨¢cticamente, est¨¢bamos en ese estado¡±, dice Kuchma, que no es partidario de cambiar la Constituci¨®n, pero cree que el ingreso de Ucrania en la OTAN no se dar¨¢ ¡°en el futuro previsible. Creo que hay que dejar de hablar del tema. Si a uno no lo quieren, hay que dejar de golpear en la puerta cerrada¡±, afirm¨®.
Un reforzamiento econ¨®mico de Ucrania influir¨ªa positivamente en su posici¨®n negociadora, seg¨²n el consenso de la clase pol¨ªtica en Kiev. El nuevo Gobierno ucranio presume de juventud y tiene ambiciosas metas. En su intervenci¨®n en el YES, el primer ministro, Alex¨¦i Goncharuk, de 36 a?os, anunci¨® un crecimiento de la econom¨ªa del 3% para 2019, del 5% para 2020 y espera un 7% anual en el periodo 2021-2024. Entre los planes inmediatos, privatizaci¨®n de la tierra para 2020, lucha contra los monopolios, inventario de todos los bienes del Estado y digitalizaci¨®n de los servicios estatales para evitar la corrupci¨®n. Ucrania, ha dicho Goncharuk, ¡°ser¨¢ el pa¨ªs con mayor crecimiento del mundo¡±. El equipo de Zelenski es ducho en t¨¦cnicas medi¨¢ticas, pero las pruebas de fuego de su gesti¨®n est¨¢n en realidades como la guerra en el Este, la corrupci¨®n y el sometimiento de los oligarcas d¨ªscolos a una pol¨ªtica de Estado.
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