Alberto Fern¨¢ndez: ¡°Nuestra mayor verg¨¹enza es el hambre¡±
El candidato peronista a la presidencia de Argentina propone controlar los precios de los alimentos b¨¢sicos
Alberto Fern¨¢ndez, el candidato peronista que acude como gran favorito a la elecci¨®n presidencial argentina, empieza a perfilar sus prioridades de gobierno. El lunes, present¨® una iniciativa para acabar con el hambre en el pa¨ªs. ¡°Nuestra mayor verg¨¹enza es el hambre¡±, dijo. Fern¨¢ndez y el diputado Daniel Arroyo propusieron ¡°reperfilar¡±, es decir, reducir el coste de una canasta b¨¢sica de alimentos, cosa que requerir¨ªa al menos un control parcial de ciertos precios, y crear un Consejo Federal Argentino contra el Hambre, dependiente del poder Ejecutivo.
El candidato a la presidencia fue enf¨¢tico en cuanto a la descripci¨®n de la gravedad del problema, pero vago en cuanto a las soluciones. En un acto celebrado en la Facultad de Agronom¨ªa y Veterinaria de la Universidad de Buenos Aires, en compa?¨ªa de personalidades como el premio Nobel de la Paz Adolfo P¨¦rez Esquivel, el dirigente piquetero Juan Grabois, la jefa de las Abuelas de la Plaza de Mayo Estela de Carlotto y varios dirigentes sindicales, Fern¨¢ndez consider¨® escandaloso que una Argentina exportadora de alimentos fuera incapaz de alimentar correctamente a 14 millones de sus ciudadanos, y que los precios de productos b¨¢sicos como el pan y la leche fueran comparativamente m¨¢s altos que en otros pa¨ªses. Un litro de leche cuesta en Argentina lo mismo que en Espa?a, donde la renta per c¨¢pita es m¨¢s del doble.
El Parlamento, a instancias del Partido Justicialista, acaba de aprobar una ley de urgencia alimentaria. Para Fern¨¢ndez, es insuficiente. Las ¨²ltimas cifras oficiales sobre la pobreza, seg¨²n las cuales m¨¢s del 35% de los argentinos, y la mitad de los menores de 15 a?os, no pueden alimentarse correctamente, han causado alarma. El candidato presidencial plantea la posibilidad de crear una tarjeta para la adquisici¨®n de comida, algo que puede sonar a cartilla de racionamiento, y quiere dar m¨¢s posibilidades a las peque?as empresas y a los llamados ¡°centros de econom¨ªa popular¡± dedicados a la producci¨®n de alimentos. Alberto Fern¨¢ndez anunci¨® que la compa?¨ªa de semillas Syngenta donar¨ªa ¡°durante la campa?a¡± el 1% de su producci¨®n y pidi¨® m¨¢s ofertas de ese tipo.
A falta de un programa definido, el candidato peronista ha lanzado en los ¨²ltimos d¨ªas varias propuestas econ¨®micas. Ha insistido, por ejemplo, en acabar con los elevad¨ªsimos intereses (superiores al 80% anual) que se pagan a los bancos por las Letras de Liquidez, y dedicar el dinero ahorrado por esa v¨ªa a programas sociales, aunque sin precisar c¨®mo se evitar¨¢ entonces que el ahorro bancario se destine a comprar d¨®lares y provoque nuevas devaluaciones del peso. Tambi¨¦n sugiere la necesidad de elevar el impuesto sobre los bienes personales (patrimonio), que en Argentina paga cualquiera que posea propiedades valoradas en m¨¢s de dos millones de pesos, unos 33.000 d¨®lares al cambio actual. Las sucesivas devaluaciones han extendido al conjunto de la clase media un impuesto que en 1991, cuando se cre¨®, solo afectaba a los patrimonios superiores a los 100.000 d¨®lares. Mauricio Macri prometi¨® que abolir¨ªa el impuesto sobre los bienes personales, que apenas supone el 0,5% de la recaudaci¨®n fiscal, pero luego no lo hizo.
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