El plan franco-alem¨¢n de reparto de migrantes no logra convencer a los socios de la UE

La UE intenta hilvanar una f¨®rmula para responder a las llegadas de migrantes por el Mediterr¨¢neo, pero sigue sin haber consenso. Los ministros del Interior debatieron ayer en Luxemburgo la propuesta de Alemania, Francia, Italia y Malta para reubicar a solicitantes de asilo rescatados en alta mar, pero la jornada concluy¨® con el ¨²nico apoyo de Portugal, Luxemburgo e Irlanda. Espa?a, que reivindica ampliar el reparto a los migrantes econ¨®micos que llegan a sus costas, celebr¨® al menos un enfoque m¨¢s solidario con los pa¨ªses receptores.

El primer paso de este plan, que debe ser concretado en las pr¨®ximas semanas en sucesivas reuniones t¨¦cnicas, es implementar un ¡°proyecto piloto¡± que se limitar¨¢ al Mediterr¨¢neo central, la ruta usada por los migrantes que salen de T¨²nez y Libia hacia Malta e Italia. La f¨®rmula plantea una r¨¢pida reubicaci¨®n en otros pa¨ªses de los solicitantes de asilo ¡ªy no de los llamados migrantes econ¨®micos¡ª rescatados por cualquier embarcaci¨®n en alta mar. Este flanco del Mediterr¨¢neo es actualmente el que menos presi¨®n migratoria soporta, pero es el que m¨¢s tensiones ha generado el ¨²ltimo a?o ante la negativa de Roma y La Valeta a abrir sus puertos a barcos de rescate.

El acuerdo a¨²n no est¨¢ cerrado y m¨¢s pa¨ªses pueden unirse, pero algunos de sus participantes no han escondido su decepci¨®n ante la falta de adhesiones. ¡°?ramos siete ayer, ¨¦ramos siete esta ma?ana y seguimos siendo siete esta noche¡±, lament¨® en una rueda de prensa el ministro de Interior luxemburgu¨¦s, Jean Asselborn, tras confirmar que tan solo Irlanda, Portugal y Luxemburgo han expresado su disposici¨®n a contribuir en el proyecto. La ministra de Interior italiana, Luciana Lamorgese, quiso tambi¨¦n rebajar el entusiasmo sobre la capacidad del mecanismo para atajar futuras crisis. ¡°La inmigraci¨®n es un problema complejo que no se resolver¨¢ de un d¨ªa para otro¡±, explic¨® al t¨¦rmino de la reuni¨®n.

Espa?a y Grecia no se beneficiar¨¢n de este reparto, pero nadie espera, por otro lado, que est¨¦n entre los pa¨ªses de acogida. ¡°Hay un punto en el que todos los pa¨ªses est¨¢n de acuerdo y es que los pa¨ªses de primera llegada [incluidos Malta e Italia] no deben participar en la acogida¡±, explican fuentes de la delegaci¨®n espa?ola.

El planteamiento del ¡°proyecto piloto¡± provoc¨® un en¨¦rgico rechazo de Grecia, Chipre y Bulgaria. Este bloque de pa¨ªses firm¨® una declaraci¨®n conjunta en la que llaman a extender el pacto a su ¨¢rea de influencia, convertida de nuevo en la ruta migratoria preferida para alcanzar Europa. Reivindican que la UE debe poner el foco en su frontera m¨¢s ¡°vulnerable¡±.

Los datos avalan esa creciente preocupaci¨®n: en agosto, se produjo el mayor n¨²mero de llegadas a Grecia desde la firma del pacto con Turqu¨ªa en 2016. Y en Chipre se han multiplicado las entradas de 300 en los nueve primeros meses de 2018 a 5.000 en el mismo periodo de este a?o. La ruta es adem¨¢s la m¨¢s usada por refugiados que huyen de guerras y conflictos. La mayor¨ªa de los solicitantes de asilo en la zona procede de Afganist¨¢n, y los tres pa¨ªses temen, adem¨¢s, que la pr¨®xima incursi¨®n de las fuerzas turcas de Recep Tayyip Erdogan en las zonas controladas por las milicias kurdas pueda provocar un nuevo ¨¦xodo que desborde las previsiones.

Todas las rutas

El ministro espa?ol, Fernando Grande-Marlaska, que se hab¨ªa mostrado muy cr¨ªtico ante cualquier mecanismo que no incluyese todas las rutas mediterr¨¢neas y todos los rescatados (no solo los solicitantes de asilo), evit¨® esta vez rechazar de plano la f¨®rmula debatida ayer. La comitiva espa?ola no comparte el planteamiento y pide concreci¨®n, pero celebra la comprensi¨®n que ha percibido entre sus socios. ¡°Espa?a saluda este encuentro porque todos los pa¨ªses han estado de acuerdo en que los pa¨ªses de llegada hacen un gran esfuerzo y han coincidido en que no se puede limitar la soluci¨®n a un ¨¢rea del Mediterr¨¢neo¡±, se?alan fuentes del Ministerio del Interior espa?ol.

El plan franco-alem¨¢n comenz¨® a gestarse en febrero con la vocaci¨®n de aliviar las tensiones recurrentes por los desembarcos en Malta e Italia. Durante m¨¢s de un a?o, los barcos de ONG que realizaban rescates en el Mediterr¨¢neo central enfrentaron bloqueos en alta mar ante la negativa de Roma y La Valeta a abrir sus puertos si no exist¨ªa un acuerdo previo de distribuci¨®n de los rescatados. Los n¨²meros siempre fueron modestos, pero la falta de solidaridad del conjunto del bloque europeo ha sido combustible para los discursos antiinmigraci¨®n.

Del 27 de junio de 2018 hasta el pasado 24 de septiembre, apenas 1.097 personas han sido aceptadas por otros Estados miembros y Noruega en el marco de acuerdos de redistribuci¨®n improvisados en cada ocasi¨®n. 818 desde Malta y solo 279 desde Italia, seg¨²n recoge un informe interno de la Comisi¨®n Europea. En ese tiempo, Espa?a acogi¨® a m¨¢s de mil rescatados en el Mediterr¨¢neo central que llegaron a puertos espa?oles a bordo de buques como el Aquarius y el Open Arms.

La nueva coalici¨®n italiana formada por el Partido Democr¨¢tico y el Movimiento 5 Estrellas ha recibido esta negociaci¨®n como un bal¨®n de ox¨ªgeno europeo poco despu¨¦s de la abrupta salida del ministro del Interior Matteo Salvini, de la Liga, que hizo de la pol¨ªtica de puertos cerrados una estrategia electoral. La apuesta por este plan, aun siendo provisional, es precisamente un intento de neutralizar el surgimiento de nuevas fuerzas populistas.