La laicidad y el islam en Francia dividen a la izquierda
El Partido Socialista y figuras destacadas del progresismo se desmarcan de la marcha contra la islamofobia en Par¨ªs
Manuel Valls, ex primer ministro franc¨¦s y hoy concejal en Barcelona, hablaba hace unos a?os de ¡°las dos izquierdas irreconciliables¡±. La fractura se evidenci¨®, una vez m¨¢s, este domingo con la manifestaci¨®n que, bajo el eslogan: ¡°Stop a la islamofobia¡±, desfil¨® entre la Estaci¨®n del Norte y la Plaza de la Naci¨®n en Par¨ªs. Una parte de los partidos y militantes de izquierdas asistieron a la marcha para denunciar los actos de violencia y discriminaci¨®n contra musulmanes en Francia. Otros se desmarcaron, inc¨®modos con el concepto de islamofobia, con el cuestionamiento de algunas leyes recientes y con la presencia de personas consideradas en la ¨®rbita islamista.
¡°Solidaridad con la mujeres que llevan velo¡±, cantaban los manifestantes en una marcha m¨¢s significativa por el contexto en el que se ha celebrado y por los debates que ha hecho aflorar, que por la capacidad de convocatoria, unas 13.500 personas seg¨²n un recuento citado por la agencia France Presse. Entre los asistentes, se ve¨ªan a veteranos militantes de izquierdas y tambi¨¦n a mujeres con el cabello cubierto por un pa?uelo y hombres barbudos.
La convocatoria de la manifestaci¨®n se origin¨® en una tribuna publicada el 1 de noviembre en el diario Lib¨¦ration y firmada, entre otros, por pol¨ªticos del partido de izquierda radical La Francia Insumisa, por periodistas como Edwy Plenel y por universitarios de prestigio como el fil¨®sofo ?tienne Balibar o la historiadora Ludivine Bantigny. Entre los promotores, figuraba el Colectivo contra la islamofobia en Francia (CCIF). Esta organizaci¨®n ha sido acusada de ¡°comunitarismo¡± ¡ªes decir, de promover la divisi¨®n de los franceses en comunidades ¨¦tnicas o religiosas¡ª y de proximidad con los Hermanos Musulmanes, extremo que ellos niegan.
La tribuna part¨ªa de dos episodios recientes. El primero ocurri¨® el 11 de octubre, cuando un cargo del partido de extrema derecha Reagrupamiento Nacional exigi¨® retirar el velo a una madre que acompa?aba a un grupo escolar en una excursi¨®n a la sede del Consejo Regional de la regi¨®n Borgo?a-Franco-Condado. El segundo fue el atentado contra la mezquita de Bayona, el 28 de octubre, en el que dos fieles resultaron heridos. ¡°Desde hace a?os, los actos que apuntan [a los musulmanes] se intensifican: tanto si se trata de discriminaciones como de proyectos o leyes liberticidas, de agresiones f¨ªsicas a mujeres que llevan el pa?uelo, ataques contra mezquitas o imanes y hasta tentativas de asesinato¡±, se le¨ªa en el texto.?
El llamamiento en seguida suscit¨® divisiones. El Partido Socialista se desmarc¨®. Tambi¨¦n algunos firmantes originales como Yannick Jadot, el l¨ªder de Europa Ecolog¨ªa Los Verdes, o miembros destacados de La Francia Insumisa como Fran?ois Ruffin.
El motivo para la ausencia era triple. Primero, el uso de la palabra ¡°islamofobia¡±. Algunos prefieren usar expresiones como ¡°racismo contra los musulmanes¡±, u otras, e incluso reclaman el derecho a sentir fobia por una religi¨®n en abstracto, sea el islam, el cristianismo o cualquier otra. El segundo motivo es la cr¨ªtica, en la tribuna, a las ¡°leyes liberticidas¡±, alusi¨®n velada a la ley de 2004 que prohibi¨® el uso de signos religiosos ostentatorios en las escuelas y la de 2010 que prohibi¨® llevar, en los espacios p¨²blicos, h¨¢bitos que cubriesen el rostro. El tercer motivo que llev¨® a varios pol¨ªticos de izquierdas a marcar distancias fue la presencia entre los que se adhirieron al manifiesto tras publicarse en Lib¨¦ration de personas controvertidas, como un im¨¢n que en el pasado justific¨® la violaci¨®n dentro del matrimonio, o el papel central del CCIF en la organizaci¨®n de la marcha.
En el centro de las divisiones, se encuentra la lectura distinta de la laicidad, codificada en la ley de 1905, que garantiza la libertad de culto y a la vez la neutralidad de la Rep¨²blica ante las religiones. Algunos manifestantes en Par¨ªs reclamaban la laicidad como escudo protector ante la discriminaci¨®n de los musulmanes, pero el mismo concepto se ha manipulado para apuntar a una religi¨®n espec¨ªfica. La manifestaci¨®n, adem¨¢s de exponer la fractura de la izquierda, tambi¨¦n revel¨® la distancia abismal, sobre este tema, entre el populismo de derechas (Le Pen) y el de izquierdas (M¨¦lenchon).
¡°Franceses y musulmanes, orgullosos de nuestras identidades¡±, se le¨ªa en una pancarta. Y en otra: ¡°No toques mi velo. Respeta mi decisi¨®n. No a la islamofobia¡±. Hab¨ªa alguna bandera argelina y palestina, pero tambi¨¦n mujeres con la cabeza cubierta con un velo con los colores de la bandera francesa.
¡°Dulce Francia / querido pa¨ªs de mi infancia / por qu¨¦ todos estos sufrimientos¡±, dec¨ªa el cartel que llevaba Mina, una mujer de 39 a?os con velo que no quiso dar su apellido porque, explic¨®, era funcionaria p¨²blica. El texto alud¨ªa a la cl¨¢sica tonadilla Douce France de Charles Trenet.
¡°Los medios y los pol¨ªticos nos estigmatizan. Las mujeres musulmanas ya no nos sentimos libres ni felices como antes en Francia. ?Por qu¨¦ hoy ya no podemos ser francesas como queramos?¡±, dijo Mina. ¡°Que dejen de decirme que soy sumisa, es una elecci¨®n libre en mi pa¨ªs, el pa¨ªs de mi infancia, mi dulce Francia¡±. A la pregunta sobre la raz¨®n por la que lleva el velo, respondi¨®: ¡°?Por qu¨¦ no? ?Por qu¨¦ no podr¨ªa llevarlo? No tendr¨ªa ni por qu¨¦ explicarlo¡±.
Un 42% de los musulmanes franceses se han sentido discriminados alguna vez en su vida, seg¨²n un sondeo encargado por el Gobierno franc¨¦s y publicado esta semana. Al mismo tiempo, el n¨²mero de actos antimusulmanes cay¨® a cien en 2018, el nivel m¨¢s bajo desde 2010, seg¨²n datos oficiales.?
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