Corea del Sur y Jap¨®n dan pasos para destensar su relaci¨®n

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Se¨²l y Tokio parecen abrir la puerta para relajar las fuertes tensiones, por motivos hist¨®ricos, que afectan a su relaci¨®n bilateral desde hace meses. El Gobierno del presidente Moon Jae-in ha confirmado este viernes que renovar¨¢ condicionalmente su acuerdo para compartir datos de inteligencia militar con Tokio, un d¨ªa antes de la fecha prevista para que el pacto expirase. Jap¨®n, por su parte, se ha mostrado abierto a revisar las restricciones comerciales que impone desde este verano a su pa¨ªs vecino.

¡°Este Gobierno ha decidido suspender nuestro aviso del 23 de agosto sobre el acuerdo de colaboraci¨®n de inteligencia Corea del Sur-Jap¨®n, a condici¨®n de que el acuerdo se pueda rescindir en cualquier momento¡±, ha indicado el subdirector de la oficina de Seguridad Nacional del Gobierno surcoreano, Kim You-geun.

Se¨²l hab¨ªa anunciado ese 23 de agosto que no renovar¨ªa el pacto para intercambiar datos sobre Corea del Norte, conocido como Gsomia por sus siglas en ingl¨¦s, cuando expirase en la medianoche del 22 al 23 de noviembre. Aunque entonces asegur¨® que tomaba esa decisi¨®n por cuestiones de seguridad nacional, los analistas lo interpretaron como una respuesta a las restricciones comerciales que Jap¨®n le hab¨ªa impuesto este a?o, incluidas limitaciones a las exportaciones para fabricar semiconductores, el producto estrella de las ventas de Corea del Sur al exterior. Se¨²l tambi¨¦n impuso, a su vez, restricciones al comercio japon¨¦s.

Ahora, el Gobierno surcoreano ha alegado el ¡°inter¨¦s nacional¡± para evitar que el Gsomia expirase. ¡°Esperamos que los lazos amistosos entre Corea del Sur y Jap¨®n se restablezcan con normalidad y continuaremos los esfuerzos para ello¡±, ha declarado Kim.

El primer ministro japon¨¦s, Shinzo Abe, ha expresado su satisfacci¨®n por la decisi¨®n de Se¨²l de mantener el acuerdo, vigente desde 2016 y facilitado por Estados Unidos. Su ministro de Exteriores, Toshimitsu Motegi, declar¨® que la cooperaci¨®n de seguridad entre los dos pa¨ªses es vital. ¡°Entiendo que el Gobierno surcoreano tom¨® esta decisi¨®n estrat¨¦gica, dado el actual clima de seguridad¡±, indic¨® Motegi, citado por la agencia Reuters.

El anuncio llega despu¨¦s de que en los ¨²ltimos d¨ªas Se¨²l y su principal aliado, Washington, hayan roto sus conversaciones sobre defensa esta semana. Ambos mantienen un profundo desacuerdo sobre el reparto de los costes para mantener el contingente estadounidense que defiende a Corea del Sur de un posible ataque de su vecino del norte. Se¨²l paga unos mil millones de d¨®lares anuales, y Estados Unidos pretende que esa cantidad se multiplique por cinco.

Gsomia permite que Jap¨®n y Corea del Sur intercambien directamente informaci¨®n sobre el programa de armamento nuclear norcoreano, lo que les permite coordinarse con m¨¢s eficacia en su respuesta. Las fortalezas de ambos son complementarias para desentra?ar los secretos del armamento norcoreano: mientras que Tokio cuenta con una mejor cadena de sat¨¦lites, Se¨²l alardea de la mejor red de espionaje humano, formada por desertores y agentes desplazados por todo el mundo.

En reciprocidad al gesto surcoreano, Jap¨®n ha confirmado el restablecimiento de las negociaciones para levantar las respectivas medidas de control de exportaciones. Motegi, no obstante, insisti¨® en la postura nipona de que el "acuerdo bilateral de defensa y los controles sobre las exportaciones [surcoreanas] son dos asuntos distintos y no relacionados¡±, explica Efe.

Corea del Sur considera que las restricciones comerciales niponas, que tambi¨¦n incluyeron eliminar a Se¨²l de su ¡°lista blanca¡± de socios comerciales preferentes, representan una represalia contra una decisi¨®n del Supremo en Se¨²l en octubre pasado. Entonces, esa corte abri¨® la puerta a que las v¨ªctimas surcoreanas de trabajos forzados para empresas japonesas durante la etapa colonial (1910-1945) puedan reclamar indemnizaciones.