Trump anuncia el reinicio de las conversaciones con los talibanes en una visita sorpresa a Afganist¨¢n

Donald Trump visit¨® por sorpresa este jueves, D¨ªa de Acci¨®n de Gracias, a las tropas estadounidenses desplegadas en Afganist¨¢n y anunci¨® la reactivaci¨®n de las conversaciones de paz con los talibanes, rotas el pasado septiembre. En su primer viaje a este pa¨ªs ¡ªel segundo a una zona de guerra, tras Irak en la Navidad de 2018¡ª, el presidente de Estados Unidos se?al¨® que la milicia ¡°quiere un acuerdo¡± y que se reunir¨ªan con ellos para buscar el fin de un conflicto que ya ha cumplido 18 a?os y que se ha convertido en una tela de ara?a para Washington.

Trump parti¨® sin previo aviso de la base a¨¦rea militar de Andrews, cercana a la capital estadounidense, el mi¨¦rcoles, unos minutos antes de las diez de la noche y aterriz¨® el jueves a las 20.33 (hora local), en la base de Bagram, la mayor de Estados Unidos en Afganist¨¢n, donde sirvi¨® pavo a los soldados y se tom¨® fotograf¨ªas con ellos. Tambi¨¦n mantuvo una reuni¨®n bilateral con el presidente afgano, Ashraf Ghani, en la que comunic¨® el restablecimiento de las negociaciones y reafirm¨® su deseo de reducir el n¨²mero de efectivos desplegados en el pa¨ªs de unos 13.000 a unos 8.600.

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¡°Los talibanes quieren llegar a un acuerdo y nos vamos a reunir con ellos¡±, dijo Trump, quien se?al¨® de forma muy entusiasta que solo hay dos alternativas en este conflicto, el acuerdo o ¡°la victoria total¡±. Esta, sin embargo, se hace de rogar. La Administraci¨®n de George W. Bush anunci¨® la invasi¨®n de Afganist¨¢n el 7 de octubre de 2001, menos de un mes despu¨¦s de la masacre terrorista del 11-S, tras acusar a los talibanes de dar cobijo a Osama bin Laden y otros cabecillas de Al Qaeda. Desde entonces, cada presidente ha tratado de cerrar este conflicto sin ¨¦xito y los talibanes controlan ahora m¨¢s territorio que nunca.

En este contexto, el presidente Trump se ha afanado en buscar un acuerdo de paz con los talibanes, hasta el punto de que el pasado septiembre lleg¨® a convocar una cumbre con l¨ªderes de la milicia en Camp David, cita muy pol¨¦mica ¡ªcoincid¨ªa ni m¨¢s ni menos que con los d¨ªas previos al vig¨¦simo octavo aniversario del 11-S¡ª de la que se tuvo noticia despu¨¦s de anularse. ¡°Sin que casi nadie lo supiera, los principales l¨ªderes talibanes y, por separado, el presidente de Afganist¨¢n iban a reunirse conmigo en secreto este domingo en Camp David. Llegaban esta noche a Estados Unidos¡±, dijo, pero agreg¨® que hab¨ªa dado marcha atr¨¢s por un atentado perpetrado en Kabul.

Los talibanes reaccionaron amenazando con ¡°hacer sufrir¡± a Estados Unidos, pero algo se ha movido en esos casi tres meses. Esta visita y el anuncio tienen lugar pocos d¨ªas despu¨¦s de que los talibanes liberasen al reh¨¦n estadounidense Kevin King y al australiano Timothy Weeks, que llevaban secuestrados desde 2016. Dentro su doctrina del ¡°Am¨¦rica, primero¡± (America first), Trump ha tratado de retirar a Estados Unidos de la mayor parte de conflictos posible, anunciando en ocasiones bruscas retiradas, como en el caso de Siria, pero la realidad -lo complejo de estos conflictos y la repercusi¨®n en aliados- le ha ido doblando el brazo y obligando a actuar de forma mucho m¨¢s gradual.