Francia vive su huelga m¨¢s larga: ¡°Preferimos perder unas navidades que nuestras pensiones¡±
Tras casi un mes en huelga, los trabajadores de los transportes p¨²blicos franceses se dicen dispuestos a continuar el paro hasta la retirada de la reforma de las pensiones
Despu¨¦s de casi un mes en huelga contra la reforma de las pensiones?impulsada por el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, las cuentas de quienes la est¨¢n secundando empiezan a pesar. Los paros ininterrumpidos desde el 5 de diciembre ya le han costado a uno de ellos, Patrick Sivadier, conductor de una l¨ªnea de cercan¨ªas de Par¨ªs, casi 2.000 euros, pr¨¢cticamente un mes de salario. Una p¨¦rdida que hay que multiplicar por dos porque su esposa, Patricia, agente de estaci¨®n de la misma compa?¨ªa de transporte p¨²blico parisina, tambi¨¦n apoya la protesta. "Hace semanas, empezamos a acaparar arroz y pasta, por si acaso", cuenta. Las celebraciones de Navidad han sido m¨¢s sobrias este a?o y la cuesta de enero promete ser m¨¢s dura que nunca. Pero pese al coste econ¨®mico, los Sivadier siguen acudiendo a cada manifestaci¨®n que convocan los sindicatos ¡ªjunto a su hijo Lo?c, un universitario de 20 a?os que se ha saltado varias clases para acudir a las protestas con sus padres¡ª y est¨¢n dispuestos a mantener el pulso con el Gobierno el tiempo que haga falta.
¡°Preferimos sacrificar un salario que nuestras pensiones y las de nuestros hijos y las de los hijos de todos los franceses¡±, corrobora Karim, un conductor de tranv¨ªa en Par¨ªs de 34 a?os que prefiere no dar su apellido y que est¨¢ tambi¨¦n en huelga desde el primer d¨ªa en que pararon los servicios metropolitanos de transporte p¨²blico y los trabajadores del servicio nacional de ferrocarriles (SNCF). Su salario es el ¨²nico que entra en un hogar con dos ni?os peque?os, pero afirma que su familia lo apoya, aunque estas navidades tambi¨¦n hayan sido m¨¢s dif¨ªciles para todos. ¡°Un Pap¨¢ Noel perdido no es grave. Preferimos perder unas navidades que las pensiones¡±, martillea.
El viernes, el d¨ªa en que la huelga super¨® a la protesta de referencia hasta ahora, los 22 d¨ªas que en 1995 obligaron al Gobierno del entonces primer ministro, Alain Jupp¨¦, a retirar su reforma de pensiones, Philippe Martinez, l¨ªder de uno de los sindicatos m¨¢s combativos en esta movilizaci¨®n, la CGT, llam¨® a no rendirse. ¡°El momento es ahora o jam¨¢s lo ser¨¢¡±, advirti¨® ante un piquete en las afueras de Par¨ªs.
El conductor Patrick Sivadier coincide con el sindicalista: ¡°Si cedemos ahora, no hay nada despu¨¦s, as¨ª que vamos a aguantar todo lo que podamos¡±. La huelga, sostiene, va mucho m¨¢s all¨¢ que la lucha contra una reforma de pensiones que busca sustituir los 42 reg¨ªmenes diferentes actuales en Francia por un sistema ¡°universal¡± por puntos. ¡°Tenemos que decidir qu¨¦ sociedad queremos. Estamos ante un punto de inflexi¨®n. O seguimos teniendo una sociedad solidaria, o pasamos a una sociedad puramente individualista donde cada uno debe cuidarse por s¨ª mismo¡±, argumenta.
Patrick Planque, obrero de mantenimiento de la SNCF en Trappes, en las afueras de Par¨ªs, considera que esta huelga es tambi¨¦n una cuesti¨®n de ¡°orgullo¡±. ¡°Tras a?os de contarnos que el Gobierno y las patronales son m¨¢s fuertes, este movimiento de huelga demuestra que los trabajadores somos capaces de volver a levantar la cabeza y decir no, no estamos de acuerdo. Y eso es lo m¨¢s importante de la huelga, hemos recuperado el orgullo. Estamos orgullosos de hacer este movimiento, de hacer la huelga y de mantenerla¡±. Planque que sabe bien lo dura que puede ser una huelga: entr¨® en la SNCF despu¨¦s de que el grupo automovil¨ªstico PSA cerrara en 2013 una de sus plantas en las afueras de Par¨ªs. La huelga que sostuvo entonces con otros 3.000 compa?eros¡ª¡°sin paga alguna¡±, subraya¡ª se prolong¨® durante cuatro meses.
Mantener la huelga tanto tiempo no es sencillo. ¡°Es mucho m¨¢s dif¨ªcil que ir a trabajar¡±, afirma. Todos los d¨ªas Planque acude, como sea ¡ªa veces en coche, en transporte p¨²blico cuando funciona¡ª al piquete ¡°a discutir con los colegas que han vuelto al trabajo o que todav¨ªa no est¨¢n convencidos¡±. Tambi¨¦n charlan con grupos de ciudadanos y ¡°con otras empresas de la zona¡±. A ello hay que unir la cita diaria con los compa?eros en huelga. ¡°Tenemos asambleas generales todos los d¨ªas para decidir entre nosotros c¨®mo continuar¡±.
Adem¨¢s de todo eso, est¨¢ la organizaci¨®n de las protestas y de las colectas para ayudar a los compa?eros. En esas anda Karim, que suele situarse al frente de las manifestaciones con una caja de cart¨®n reconvertida en "hucha solidaria¡±. Anima a los viandantes a ayudar a los huelguistas. Suelen caer bastantes monedas, lo que considera como una muestra del apoyo ciudadano ¡ªuna colecta por Internet supera ya el mill¨®n de euros¡ª a una protesta que, insiste, hacen para todos los franceses. ¡°No es por nuestros privilegios¡±, coincide Planque. ¡°Los privilegios hay que buscarlos del lado de Macron, del Gobierno. Y de los Arnault, Bouygues, Lagard¨¨re, Bollor¨¦¡±, cita refiri¨¦ndose a las grandes fortunas francesas. ¡°?Qu¨¦ son privilegios hoy? No es ganar mil euros. Privilegio es ganar 800.000 euros a la semana. Esos son los verdaderos privilegios y es para satisfacer esos intereses por los que hoy nos intentan hacer creer que somos nosotros los que costamos dinero a la sociedad¡±, protesta.
Por el momento, los miles de trabajadores ferroviarios y del transporte p¨²blico que paralizan buena parte de Francia estas semanas se dicen dispuestos a no ceder hasta que el Gobierno retire completamente su proyecto. La pr¨®xima cita entre Ejecutivo y sindicatos est¨¢ fijada para el 7 de enero. Los Sivadier, que al menos pudieron celebrar por una vez la Nochebuena todos juntos, ya que normalmente uno de los padres est¨¢ de guardia, tambi¨¦n planean pasar en familia la Nochevieja. Eso s¨ª, subraya el padre, ¡°lo haremos en un piquete¡±.
El Gobierno cede ante los bailarines de la ?pera de Par¨ªs
Es una victoria peque?a, pero simb¨®lica. El Gobierno ha cedido ante un grupo minoritario pero muy visible de los trabajadores en huelga contra su reforma de las pensiones: los bailarines de la ?pera de Par¨ªs. Seg¨²n Les Echos, el Ejecutivo propone ahora que el nuevo r¨¦gimen por puntos solo se aplique a los artistas reclutados a partir de 2022. El resto, podr¨¢ seguir retir¨¢ndose a los 42 a?os, un privilegio que forma parte del r¨¦gimen especial del que gozan estos bailarines desde la ¨¦poca de Luis XIV. La protesta de los bailarines y m¨²sicos del ballet parisino ha provocado la cancelaci¨®n de decenas de representaciones, con p¨¦rdidas por ocho millones de euros, seg¨²n la instituci¨®n. La noticia se conoci¨® en el mismo d¨ªa en que miles de personas volvieron a salir en toda Francia para reclamar la retirada del proyecto gubernamental, en el 24 d¨ªa de movilizaciones y fuertes perturbaciones del tr¨¢fico ferroviario en todo el pa¨ªs y las grandes ciudades.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.