Arabia Saud¨ª anuncia la supresi¨®n de las condenas a muerte a menores
La noticia, tras conocerse que tambi¨¦n va a abolirse la flagelaci¨®n, apunta a una reforma de su muy criticado sistema penal
Arabia Saud¨ª va a suprimir las condenas a muerte a quienes fueran menores de edad en el momento del delito, seg¨²n ha anunciado este domingo la Comisi¨®n de Derechos Humanos (CDH, un organismo estatal), que hace referencia a un decreto real. Aunque se desconoce a partir de cu¨¢ndo va a aplicarse la medida, parece tratarse de una reforma m¨¢s amplia del sistema penal, ya que poco antes se hab¨ªa filtrado que el castigo de flagelaci¨®n iba a sustituirse por c¨¢rcel o multas.
¡°El decreto significa que cual...
Arabia Saud¨ª va a suprimir las condenas a muerte a quienes fueran menores de edad en el momento del delito, seg¨²n ha anunciado este domingo la Comisi¨®n de Derechos Humanos (CDH, un organismo estatal), que hace referencia a un decreto real. Aunque se desconoce a partir de cu¨¢ndo va a aplicarse la medida, parece tratarse de una reforma m¨¢s amplia del sistema penal, ya que poco antes se hab¨ªa filtrado que el castigo de flagelaci¨®n iba a sustituirse por c¨¢rcel o multas.
¡°El decreto significa que cualquier persona que reciba una sentencia de muerte por delitos cometidos cuando fuera menor de edad ya no ser¨¢ ejecutada. En su lugar, la persona recibir¨¢ una pena de prisi¨®n de un m¨¢ximo de diez a?os en un centro de detenci¨®n juvenil¡±, asegura el presidente de la CDH, Awwad al Awwad, en un comunicado del que se hace eco la agencia Reuters.
De la informaci¨®n disponible no queda claro cu¨¢ndo se ha publicado dicho decreto ni a partir de cu¨¢ndo ser¨¢ efectivo, ya que los medios oficiales no lo han mencionado. La noticia supone un giro en el sistema judicial saud¨ª donde los menores son juzgados como adultos y, si se les considera culpables de alguno de los delitos castigados con la pena capital, se les ejecuta una vez que cumplen la mayor¨ªa de edad.
Activistas y organizaciones de derechos humanos ha criticado con dureza esa pr¨¢ctica que contraviene la Convenci¨®n Internacional sobre los Derechos de la Infancia. En su informe sobre la pena de muerte en 2019, Amnist¨ªa Internacional sit¨²a a Arabia Saud¨ª como el tercer pa¨ªs con mayor n¨²mero de ejecuciones (184), despu¨¦s de China (miles) e Ir¨¢n (251), ambos con una poblaci¨®n mucho mayor.
La noticia sigue a la filtraci¨®n de un documento interno del Tribunal Supremo que prev¨¦ abolir el castigo de flagelaci¨®n y sustituirlo por c¨¢rcel o multas. No hay datos sobre con qu¨¦ frecuencia los tribunales utilizan la pena de flagelaci¨®n que en el pasado se ha visto aplicada a acusados de embriaguez en p¨²blico, acoso o disidencia. Como sucede con las ejecuciones de menores, los crueles castigos f¨ªsicos que ampara el sistema penal saud¨ª han granjeado muchas cr¨ªticas al reino.
Los medios saud¨ªes se han referido a la abolici¨®n de los azotes como parte de las reformas emprendidas por el rey Salm¨¢n y su hijo y gobernante de hecho, el pr¨ªncipe heredero Mohamed Bin Salm¨¢n. Bajo su reinado, se han introducido llamativas y largamente esperadas medidas como restringir los poderes de la polic¨ªa religiosa, levantar la prohibici¨®n de que las mujeres conduzcan, la ley contra el acoso o la relajaci¨®n del sistema de tutela. Pero la detenci¨®n de disidentes o meros cr¨ªticos, incluidas las activistas por el derecho a conducir, o el asesinato del periodista Jamal Kashoggi ponen en duda el objetivo de la reforma.
De hecho, poco antes de que se filtrara a la prensa la supresi¨®n de la pena de flagelaci¨®n, se conoci¨® la muerte el pasado viernes de Abdullah al Hamid, uno de los m¨¢s prominentes activistas pol¨ªticos saud¨ªes. Al Hamid, que se encontraba encarcelado desde 2013, sufri¨® un derrame cerebral que sus colegas atribuyen a falta de atenci¨®n m¨¦dica.
A falta de un texto penal codificado, los jueces tienen un amplio margen de maniobra para interpretar la ley isl¨¢mica (Shar¨ªa); a menudo una tanda de azotes complementa otros castigos. Tal fue el caso del librepensador y bloguero Raif Badawi quien, tras ser declarado culpable de insultar al islam y violar las leyes cibern¨¦ticas saud¨ªes, fue condenado a 10 a?os de c¨¢rcel, 1.000 latigazos y una multa de un mill¨®n de riales (230.000 euros) a finales de 2014. Para m¨¢s inri, la propia sentencia establec¨ªa que la flagelaci¨®n se llevara a cabo en sesiones de 50 azotes semanales. La condena internacional y las noticias de que estuvo al borde de la muerte tras la primera tanda (realizada en una plaza p¨²blica y de la que se filtr¨® un v¨ªdeo) frenaron el resto por prescripci¨®n m¨¦dica.
Sin duda, las autoridades del reino han comprendido el grave da?o que la flagelaci¨®n causa a su imagen. Sin embargo, para los activistas de derechos abolirla es un peque?o paso en la necesaria humanizaci¨®n de un corpus penal que sigue incluyendo la amputaci¨®n por robo, la lapidaci¨®n para ad¨²lteros y la decapitaci¨®n por asesinato o terrorismo.
¡°Es un cambio bienvenido, pero deber¨ªa haberse producido antes. No hay nada que impida a Arabia Saud¨ª reformar su injusto sistema judicial¡±, ha declarado Adam Coogle, vicedirector para Oriente Pr¨®ximo de Human Rights Watch, citado por Reuters.