M¨¢s de 20 polic¨ªas heridos al intentar disolver una fiesta ilegal en el sur de Londres

Las autoridades policiales del Reino Unido advirtieron despu¨¦s de los primeros conatos de violencia en las manifestaciones del Black Lives Matter que se avecinaba un ¡°verano caliente¡±. El barrio de Brixton, en el sur de Londres, vivi¨® este mi¨¦rcoles su particular noche de San Juan, con duros enfrentamientos entre los participantes de una fiesta callejera ilegal y decenas de agentes de polic¨ªa que acudieron a disolverla y se vieron obligados a retroceder. Veintid¨®s de ellos resultaron heridos y requirieron de atenci¨®n m¨¦dica, aunque ninguno se halla en situaci¨®n de gravedad. La tensi¨®n acumulada despu¨¦s de tres meses de confinamiento por la pandemia, la particular incidencia que han tenido en el Reino Unido las manifestaciones antirracistas y la peculiar historia de Brixton, el lugar donde ha estallado la chispa, se confabularon para desatar la locura. V¨ªdeos propagados por las redes sociales mostraron a grupos de j¨®venes persiguiendo a agentes para arrojarles una mesa, enfrent¨¢ndose a ellos con armas improvisadas -hasta lo que parec¨ªa una espada- y saltando sobre los veh¨ªculos policiales abandonados en la acera para destrozar a patadas el cristal del parabrisas.

La ministra del Interior, Priti Patel, que ha sido la voz m¨¢s dura del Gobierno a la hora de describir los episodios de violencia de las ¨²ltimas semanas, ha definido lo ocurrido como ¡°moralmente repugnante¡±. En una primera reacci¨®n publicada en su cuenta de la red social Twitter ha recordado la labor de la polic¨ªa frente al ataque del pasado fin de semana en Reading, cuando Hairi Shaadal¨¢ asesin¨® a tres personas a cuchilladas en un parque p¨²blico. ¡°Justo este fin de semana, todo el pa¨ªs se uni¨® en ensalzar a nuestras heroicas fuerzas policiales por poner su vida en riesgo para garantizar nuestra seguridad¡±, ha dicho Patel.

Brixton ha evolucionado mucho en las ¨²ltimas d¨¦cadas, para convertirse en otro barrio londinense atractivo y bohemio al que se ha mudado un gran n¨²mero de ciudadanos de clase media. Pero tiene una historia de conflicto racial que estalla de modo recurrente. All¨ª se instalaron gran parte de los inmigrantes procedentes de las Antillas, que llegaron al Reino Unido a bordo del Empire Windrush en 1948. La llamada generaci¨®n Windrush es el embri¨®n del multiculturalismo de una ciudad en la que pr¨¢cticamente un 30% de su poblaci¨®n pertenece a una minor¨ªa ¨¦tnica. En Brixton puso en marcha la polic¨ªa la Operaci¨®n Ci¨¦naga (Operation Swamp) a principios de la d¨¦cada de los ochenta, para hacer frente a las bravas a una ola creciente de criminalidad en medio de ¨ªndices intolerables de desempleo y pobreza. Se permiti¨® legalmente a los agentes arrestar y cachear a cualquier individuo que tuviera un aspecto sospechoso. M¨¢s de 1.000 personas sufrieron el trance en menos de cinco d¨ªas, pr¨¢cticamente todos ellos j¨®venes de raza negra. La indignaci¨®n vecinal estall¨® en forma de disturbios que provocaron decenas de polic¨ªas y manifestantes heridos, veh¨ªculos incendiados y edificios destrozados o en llamas. Una comisi¨®n independiente acab¨® poco despu¨¦s con una pr¨¢ctica policial ¡°desproporcionada y discriminatoria¡±.

La creciente tensi¨®n que se vive en las calles del Reino Unido durante los ¨²ltimos d¨ªas est¨¢ calentando el ¨¢nimo de las fuerzas de seguridad. La Federaci¨®n de Polic¨ªa Metropolitana ha advertido de que los agentes no son ¡°sacos de boxeo¡± y ha calificado lo sucedido en Brixton de ¡°incidente desgraciado¡±. El presidente de la Federaci¨®n de Polic¨ªa de Inglaterra y Gales, John Apter, ha acusado a los medios de comunicaci¨®n de publicar ¡°informaciones inexactas e inflamatorias¡± que han convertido a los agentes ¡°en objetivo f¨¢cil de aquellos que no necesitan muchas excusas¡±. ¡°No se merecen esto¡±, ha a?adido. El alcalde de la ciudad, el laborista Sadiq Khan, ha acusado a los responsables de convocar la fiesta callejera de ¡°poner en riesgo las vidas de otras personas¡±. ¡°No toleraremos la violencia contra la polic¨ªa¡±, ha advertido Khan.