Johnson y Von der Leyen se reunir¨¢n en Bruselas para intentar atar un acuerdo

Londres y Bruselas han decidido este lunes que es el momento de pasar de la negociaci¨®n t¨¦cnica a la pol¨ªtica. Tras constatar las enormes diferencias que persisten entre ambas partes, la presidenta de la Comisi¨®n, Ursula von der Leyen, y el primer ministro Boris Johnson se emplazaron a una reuni¨®n en Bruselas ¡°en los pr¨®ximos d¨ªas¡± para explorar las posibilidades de un acuerdo. Antes, el Gobierno de Johnson hab¨ªa hecho un gesto de buena voluntad de ¨²ltima hora con la promesa de enmendar su proyecto de ley que violaba el Acuerdo de Retirada en caso de pacto.

La opci¨®n de que el Reino Unido deje la Uni¨®n Europea el pr¨®ximo 1 de enero dando un portazo sigue ganando enteros en Bruselas. El negociador europeo, Michel Barnier, ha informado a los Veintisiete de que los avances logrados desde que el domingo desembarcara en la capital europea el equipo negociador, liderado por David Frost, no son suficientes para vislumbrar un pacto antes del Consejo Europeo del jueves. A la vista de ese bloqueo, la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen y Boris Johnson decidieron, seg¨²n un comunicado conjunto, emplazar a sus equipos a que preparen una descripci¨®n de las diferencias existentes ¡°para debatirlas en una reuni¨®n f¨ªsica en Bruselas en los pr¨®ximos d¨ªas¡±.

Antes de la reuni¨®n, Johnson hab¨ªa ense?ado la rama de olivo a los jefes de Estado y de Gobierno, que se re¨²nen el pr¨®ximo jueves. ¡°Si las soluciones que se han discutido estos d¨ªas [en las negociaciones del Brexit] son acordadas, el Gobierno del Reino Unido estar¨ªa dispuesto a eliminar las cl¨¢usulas 44, 45 y 47 de la Ley del Mercado Interior [las referentes a exportaciones y ayudas p¨²blicas en Irlanda del Norte, que violaban lo acordado con la UE], de modo que solo se aplicaran si fueran consistentes con los derechos y obligaciones internacionales del Reino Unido¡±, dec¨ªa un comunicado difundido por Downing Street.

La clave de la aparente cesi¨®n est¨¢ en esas ¨²ltimas palabras. Es decir, el Gobierno de Johnson estar¨ªa dispuesto a cumplir con sus obligaciones legales internacionales. La pol¨¦mica ley provoc¨® indignaci¨®n en Bruselas, hasta el punto de que la UE inici¨® el procedimiento para llevar al Reino Unido al Tribunal de Justicia de la UE si se consumaba la amenaza. La ley regres¨® este lunes a la C¨¢mara de los Comunes, despu¨¦s de que la C¨¢mara de los Lores eliminara las pol¨¦micas cl¨¢usulas, pero, como hab¨ªa anunciado el Ejecutivo brit¨¢nico, la mayor¨ªa conservadora volvi¨® a incluirlas. En este juego de ¨®rdagos y falsas amenazas en el que se han convertido las negociaciones del Brexit, sin embargo, Downing Street cuenta con el margen que le ofrece el hecho de que el texto regresar¨¢ a los Lores en una segunda lectura el mismo mi¨¦rcoles. Para entonces, si hay acuerdo con Bruselas, ya no habr¨¢ problema en permitir a la C¨¢mara alta que vuelva a enmendarlo. Cuatro a?os de trauma nacional y de enfrentamiento entre Londres y Bruselas, pendiente del ping-pong (como se denomina en la jerga pol¨ªtica brit¨¢nica) entre ambos lados del palacio de Westminster.

Bruselas sigue prepar¨¢ndose para la posibilidad de una salida sin acuerdo ante los enormes escollos que quedan por resolver. Seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, Barnier explic¨® que el bloqueo persiste en tres grandes ¨¢reas: la pol¨ªtica de competencia, la pesca y el marco de gobernanza de la relaci¨®n futura entre ambas partes.

Bruselas ve con preocupaci¨®n que, despu¨¦s de meses de negociaci¨®n, los tres grandes asuntos sigan enquistados. Y de estos, uno se antoja muy dif¨ªcil de resolver en horas, puesto que las posiciones est¨¢n muy alejadas. Se trata de la pol¨ªtica de competencia. Los Veintisiete no quieren bajo ning¨²n concepto hallarse con un rival de 66,5 millones de habitantes y semejante m¨²sculo financiero a solo 34 kil¨®metros de la costa de la UE que pueda competir deslealmente rebajando est¨¢ndares laborales o medioambientales. Desde La Haya, que defiende a capa y espada el Mercado ?nico, hasta Bucarest, que teme el dumping (competencia desleal) en el transporte, cierran filas en esa carpeta. Sin embargo, el cors¨¦ en pol¨ªtica de competencia sigue generando enormes dificultades en Londres.

Los equipos de Barnier y Frost tampoco pudieron resolver en las ¨²ltimas 48 horas ¡ªlas que se dieron Von der Leyen y Johnson el s¨¢bado para negociar antes de hablar de nuevo¡ª en los otros dosieres que hay sobre la mesa. Fuentes diplom¨¢ticas afirmaron que el resultado todav¨ªa es incierto, puesto que podr¨ªa decantarse hacia un lado u otro. En palabras del primer ministro irland¨¦s, Miche¨¢l Martin, en la televisi¨®n irlandesa RTE, se trata un ¡°50/50¡±.

La situaci¨®n tiene la incertidumbre suficiente para que los mercados elevaran el riesgo del no deal (un no acuerdo) con un descalabro de m¨¢s del 1% de la libra esterlina, el mayor en tres meses. Los diplom¨¢ticos comunitarios ven complejo que se pueda alcanzar un pacto con tan poco tiempo. Y a su vez, no ven otra salida que comprometerse a un texto con premura, puesto que debe ser ratificado por los Veintisiete, la C¨¢mara de los Comunes y el Parlamento Europeo. Por ello, ambas partes creen imprescindible pasar de la negociaci¨®n t¨¦cnica a la pol¨ªtica.

Espa?a pidi¨® en el consejo de ministros de Exteriores de este lunes seguir dando prioridad a la consecuci¨®n de un pacto, aun en un ¡°momento muy complicado¡±. ¡°Preferimos un acuerdo a una salida sin acuerdo¡±, sostuvo la ministra de Exteriores, Arancha Gonz¨¢lez Laya, quien dio su total apoyo a Barnier para alcanzar un ¡°paquete equilibrado¡±.

Bruselas lamenta, sin embargo, que el Reino Unido haya malgastado los ¨²ltimos meses. Barnier ha denunciado tras casi cada negociaci¨®n la negativa de Londres de moverse de sus planteamientos. Es m¨¢s, en los ¨²ltimos meses denunci¨® que se estaba echando atr¨¢s de algunos de sus compromisos iniciales, lo que llev¨® a buena parte de diplom¨¢ticos y funcionarios al convencimiento de que Londres no quer¨ªa un acuerdo comercial. O al menos, no en los t¨¦rminos en los que se hab¨ªa planteado la negociaci¨®n.

La UE, adem¨¢s, afronta una semana muy compleja que culminar¨¢ en un Consejo Europeo en el que deber¨¢ abordar puntos clave para su futuro. El principal, el del paquete presupuestario y del fondo de recuperaci¨®n, amenazado por el veto de Polonia y Hungr¨ªa por su vinculaci¨®n al respeto al Estado de derecho. Pero sobre la mesa tambi¨¦n est¨¢n un acuerdo sobre los objetivos de reducci¨®n de emisiones de di¨®xido de carbono para 2030, que debe aprobar si quiere mantener su liderazgo mundial en la lucha contra el cambio clim¨¢tico, y las relaciones con Turqu¨ªa.