Las reformas de Putin descolocan a la oposici¨®n
Activistas y opositores rusos preparan una campa?a contra el cambio constitucional y enmiendas alternativas
El sorpresivo anuncio de Vlad¨ªmir Putin de una reforma sustancial de la Constituci¨®n ha pillado a la oposici¨®n descolocada. El movimiento del presidente ruso ha sido tan r¨¢pido que los opositores han tardado un poco en reaccionar y barajar sus opciones para contrarrestar las reformas con las que Putin, seg¨²n los analistas, busca permanecer en alg¨²n cargo de influencia supremo tras acabar su mandato presidencial en 2024.
Mientras que la oposici¨®n parlamentaria es leal a Putin y ha apoyado la reforma constitucional, la oposici¨®n extraparlamentaria ¨Cla ¡°verdadera¡±, seg¨²n sus miembros¡ª se est¨¢ movilizando para protestar contra lo que algunos tildan de ¡°golpe constitucional¡± y prepara una campa?a por el no en la consulta popular anunciada por el Kremlin.
¡°La aspiraci¨®n de Putin es conservar el poder supremo en el pa¨ªs¡±, critica Nikolai Ribakov, l¨ªder del partido Y¨¢bloko. ¡°Es un hombre que viene de los servicios secretos especiales. Lo que est¨¢ ocurriendo ahora es una operaci¨®n especial, y debe ser r¨¢pida para no dar tiempo para pensar a nadie¡±, a?ade Ribakov en la sede de su partido en Mosc¨². Esta formaci¨®n pol¨ªtica socioliberal, que no tiene representaci¨®n parlamentaria, ha creado un consejo de juristas, activistas, pol¨ªticos y ciudadanos de todo tipo, que prepara sus propias propuestas alternativas de enmiendas a la Constituci¨®n. Una de ellas es recuperar el mandato presidencial de cuatro a?os, en lugar de los seis actuales.
La reforma, que tambi¨¦n incluye elementos sociales como la protecci¨®n de las pensiones, es todo un terremoto pol¨ªtico, pero la movilizaci¨®n ciudadana ha sido escasa. La letra peque?a y la especializaci¨®n es demasiada. Apenas ha habido algunos manifestantes solitarios. Aunque Y¨¢bloko y otros partidos de la oposici¨®n planean una manifestaci¨®n a finales de febrero.
P¨¢vel Grudinin, pol¨ªtico y empresario agr¨ªcola y candidato a la presidencia en 2018 contra Putin, es muy cr¨ªtico con las reformas pese a que el Partido Comunista, que le apoy¨® en esos comicios, ha dado su aprobaci¨®n a las medidas. Para ¨¦l, la clave tambi¨¦n es la rapidez. ¡°Todos saben que nada sale bien si se hace con mucha prisa. Se hace as¨ª para no dar tiempo para pensar y discutir, se hace r¨¢pido y eficaz¡±, comenta por tel¨¦fono.
Grudinin, que acab¨® segundo en las presidenciales de hace dos a?os con un 11,77% de los votos, cree que Putin elegir¨¢ presidir un renovado Consejo de Estado. ¡°As¨ª se situar¨¢ entre las ramas de poder o por encima de ellas para poder conservar la influencia tras 2024¡±, pronostica. Su opini¨®n es la de muchos analistas, que sostienen que con las atribuciones que le dan las enmiendas de ¡°coordinar las pol¨ªticas interiores y exteriores¡±, ese transformado Consejo de Estado ¨Cque ahora es un ¨®rgano consultivo y casi sin atribuciones-- ser¨ªa un lugar apetitoso para Putin.
Nikolai Ribakov, sin embargo, tiene otra idea. ¡°Putin busca maneras de permanecer en el poder y la m¨¢s adecuada para ¨¦l es una uni¨®n con Bielorrusia; dejar de ser presidente de Rusia y convertirse en el presidente de una especie de URSS 2.0 compuesta por Rusia, Bielorrusia, Abjasia y Osetia del Sur¡±, plantea el l¨ªder de Y¨¢bloko.
¡°Putin est¨¢ buscando ser el l¨ªder supremo de toda la vida¡±, ha criticado Alexei Navalni en las redes sociales. El opositor y bloguero anticorrupci¨®n ha cargado contra unas medidas que ¡°no son¡± lo que la ciudadan¨ªa rusa est¨¢ buscando.
?Pero la letra peque?a de la reforma incluye otro elemento "alarmante" y con efectos claros y directos en la ciudadan¨ªa, seg¨²n el l¨ªder de Y¨¢bloko. "Si finalmente cristaliza la idea de que la ley nacional debe tener siempre prioridad sobre la internacional, el Estado podr¨ªa dejar de cumplir deberes sobre derechos sociales, ecolog¨ªa etc", alerta. "Esas leyes internacionales ya obligaron a Rusia a prestar atenci¨®n a cuestiones de derechos y libertades de las personas y eso podr¨ªa perderse¡±, dice. En funci¨®n de c¨®mo se redacten, la ciudadan¨ªa rusa perder¨ªa la baza, por ejemplo, de acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Las dudas son muchas m¨¢s que las certezas. ¡°Nadie sabe qu¨¦ es lo que busca Putin. La opini¨®n general es que quiere gobernar eternamente y hacerlo antes de que su ¨ªndice de aprobaci¨®n, que ha ca¨ªdo, se desplome por completo¡±, incide Mija¨ªl Jodorkovski, uno de los opositores m¨¢s conocidos en Occidente, que vive exiliado en Reino Unido.
El magnate cree que estos cambios suponen un verdadero cambio de juego. ¡°Su reforma consiste en el fortalecimiento del poder unipersonal. Levantar¨¢n las restricciones m¨ªnimas que tiene el dictador: el presidente podr¨¢ despedir a cualquier juez de los tribunales Supremo y Constitucional, al primer ministro manteniendo al mismo tiempo a su Gabinete, y los Gobiernos locales (regionales) se incorporan en la ¡®vertical del poder¡¯ con lo que dejan de ser autogobiernos, los fiscales de las regiones de la Federaci¨®n ahora ser¨¢n designados desde Mosc¨²¡±, comenta el magnate por escrito. ¡°Es el fin del federalismo¡±, diagnostica.
Con las medidas propuestas,?que endurecen los requisitos de nacionalidad y residencia, el magnate Jodorkovski, que pas¨® diez a?os en la c¨¢rcel y sali¨® por "motivos humanitarios", tendr¨ªa vetado el acceso a cargos p¨²blicos de alto nivel o a presentarse a unas elecciones. "En este r¨¦gimen nadie que no est¨¦ aprobado por el Kremlin no puede ser elegido. Y cuando el r¨¦gimen caiga ?a qui¨¦n le interesar¨¢n sus leyes?", relativiza.
Un voto a todo o nada
Las propuestas de enmienda pasar¨¢n su segunda lectura en la Duma el 9 de febrero, si todo sale seg¨²n lo previsto. Y se comenta que el ¡°sufragio¡± ¡ªel Kremlin ha eludido referirse a ello como refer¨¦ndum¡ª sobre las enmiendas a la Constituci¨®n se celebrar¨¢ en abril. Y ser¨¢ un todo o nada. No se podr¨¢ votar s¨ª a una parte de las propuestas, las que hablan de garantizar las pensiones, por ejemplo, y votar que no a otra, como la creaci¨®n del Consejo de Estado.
¡°Es una t¨¢ctica para acusar a los que no quieren que la ley internacional prevalezca sobre la nacional de que est¨¢n en contra del aumento de las pensiones o una mayor ¡°rol¡± del Parlamento¡±, dice P¨¢vel Grudinin. ¡°Es necesario separar las enmiendas. Si se vota enmienda por enmienda, traer¨¢ resultados indeseables para el poder¡±, a?ade quien fue candidato a las presidenciales en 2018, apoyado por el Partido Comunista.
Putin y su c¨ªrculo han rechazado aclarar c¨®mo se celebrar¨¢ esa votaci¨®n, si ser¨¢ vinculante o si habr¨¢ un m¨ªnimo necesario de participaci¨®n para que cuente.
Los observadores se?alan tambi¨¦n que la rapidez con la que se est¨¢ realizando el proceso se debe no solo a la situaci¨®n interna. Putin desear¨ªa dejar todo zanjado para presentarse como un l¨ªder renovado y con todo aquilatado para el 9 de mayo, cuando Rusia conmemora la derrota por el Ej¨¦rcito rojo de los nazis con grandes actos a los que ha invitado a l¨ªderes como Emmanuel Macron o Donald Trump.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.