La OTAN eleva el tono frente a China al situarla entre los grandes desaf¨ªos de seguridad global

La primera cumbre de la OTAN en la era de Joe Biden ha colocado a China en la lista de principales desaf¨ªos junto al tradicional rival que era Rusia. La Alianza, adem¨¢s, ha establecido una nueva l¨ªnea de defensa contra el riesgo de ciberataques a la vista del creciente n¨²mero de incidentes y agresiones procedentes, en muchas ocasiones, de territorio ruso. Los 30 aliados occidentales entran as¨ª en una nueva etapa marcada por el impulso del nuevo presidente de EE UU y por la necesidad de afrontar un escenario geoestrat¨¦gico muy inestable y plagado de amenazas h¨ªbridas que van m¨¢s all¨¢ de la estrategia militar tradicional.

La reuni¨®n celebrada en la sede de la OTAN en Bruselas ha permitido visualizar el compromiso de la nueva Administraci¨®n estadounidense con una Alianza cuya utilidad fue cuestionada por el anterior presidente, Donald Trump, que lleg¨® a poner en duda su supervivencia. La cita de este lunes, en cambio, ha sido la ocasi¨®n para un reencuentro transatl¨¢ntico basado en la buena sinton¨ªa y con un ambiente de ¡°primer d¨ªa de colegio¡±, seg¨²n el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, por tratarse de una de las primeras citas con presencia f¨ªsica desde el inicio de la pandemia.

Biden ha hecho una profesi¨®n de fe en la relaci¨®n transatl¨¢ntica y en el futuro de la Alianza que ha reconfortado a los aliados. El renovado ¨ªmpetu apunta claramente hacia Rusia, que aparece mencionada 61 veces en el comunicado final de la cumbre y que sigue siendo la principal amenaza para la Alianza. Pero los 30 miembros de la OTAN subrayan tambi¨¦n el ¡°desaf¨ªo sist¨¦mico¡± que supone China, que aparece mencionada 10 veces en el comunicado. Y los aliados occidentales apuntan con inquietud al riesgo de que ambos pa¨ªses autoritarios a¨²nen fuerzas para desafiar a las democracias occidentales porque China ¡°est¨¢ tambi¨¦n cooperando militarmente con Rusia, incluida su participaci¨®n en maniobras rusas en la zona euroatl¨¢ntica¡±.

La Alianza empieza ya a plantear exigencias concretas a Pek¨ªn y a adoptar medidas que tienen en el punto de mira tanto a Rusia como al Gobierno de Xi Jinping. ¡°Pedimos a China que respete sus compromisos internacionales y que act¨²e con responsabilidad en el sistema internacional, incluido el espacio, el ciberespacio y los territorios mar¨ªtimos, en l¨ªnea con su papel como gran potencia¡±, se?ala el comunicado final de la cumbre de la OTAN.

Los aliados occidentales colocan a China, adem¨¢s, en el nuevo campo de batalla del siglo XXI caracterizado por ¡°un creciente n¨²mero de amenazas cibern¨¦ticas, h¨ªbridas y asim¨¦tricas, incluidas las campa?as de desinformaci¨®n, el uso malicioso y cada vez m¨¢s sofisticado de tecnolog¨ªas emergentes y disruptivas¡±.

Varios aliados han sufrido ciberataques en los ¨²ltimos meses, desde el que afect¨® a las bases inform¨¢ticas del sistema de salud en Irlanda al que paraliz¨® un oleoducto en EE UU. Aunque en principio los ataques son reivindicados por grupos de piratas inform¨¢ticos a la caza de un rescate multimillonario, las autoridades occidentales sospechan que en ciertos casos puede tratarse de t¨¦cnicas desestabilizadoras para la econom¨ªa y la democracia orquestadas o toleradas por gobiernos autoritarios.

La OTAN reafirma su intenci¨®n de juzgar esos ataques caso por caso y se reserva la posibilidad de calificarlos como agresi¨®n y activar el art¨ªculo 5 de su tratado, que establece la ayuda mutua entre los aliados. El comunicado de la cumbre se?ala que ¡°los aliados reconocen que el impacto acumulado de ciberactividades maliciosas significativas podr¨ªa, en ciertas circunstancias, ser considerado equivalente a un ataque armado¡±.

La OTAN, de momento, ha acordado en la cumbre la puesta en marcha de una pol¨ªtica de ciberdefensa extensa, basada en la disuasi¨®n y el desarrollo de nuevas capacidades. Y se declara dispuesta ¡°a emplear todas nuestras capacidades en cualquier momento para evitar, defendernos de o contrarrestar el espectro completo de ciberamenazas, incluidas aquellas que forman parte de campa?as h¨ªbridas¡±.

Los aliados advierten tambi¨¦n: ¡°Si es necesario impondremos costes a quienes nos golpean¡±. Y avisan de que la respuesta ¡°no necesita restringirse al terreno cibern¨¦tico¡±. Una amenaza de represalia asim¨¦trica que probablemente llamar¨¢ la atenci¨®n en Mosc¨² o en Pek¨ªn.

Arsenal nuclear

La cumbre de la OTAN no ha llegado a calificar a China como ¡°enemigo¡± o ¡°rival¡±, pero el lenguaje del comunicado final deja clara la creciente tensi¨®n con el gigante asi¨¢tico. ¡°Las ambiciones declaradas de China y su conducta asertiva presentan desaf¨ªos sist¨¦micos para el orden internacional y en ¨¢reas relevantes para la seguridad de la Alianza¡±, se?ala el texto aprobado por unanimidad. Los presidentes de Gobierno o Estado de esos pa¨ªses aliados a?aden: ¡°Estamos preocupados por las pol¨ªticas de coerci¨®n [de Pek¨ªn]¡± y recuerdan que ¡°China est¨¢ expandiendo r¨¢pidamente su arsenal nuclear¡± y mantiene ¡°la opacidad sobre el desarrollo de su modernizaci¨®n militar¡±.

Stoltenberg ha precisado que la estrategia frente a China no consistir¨¢ tanto en la presencia de la OTAN en Asia como en el fortalecimiento de las defensas en el propio territorio de la Alianza: ¡°Porque es China la que est¨¢ viniendo hacia nosotros¡±. Entre los aliados, sin embargo, hay numerosos matices sobre la relaci¨®n con Pek¨ªn y varios de los pa¨ªses europeos, como Alemania o Francia, se resisten a embarcarse en una especie de guerra fr¨ªa con el gigante asi¨¢tico.

¡°No hay que confundir los objetivos¡±, ha se?alado el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, al t¨¦rmino de la cumbre. ¡°La OTAN es una organizaci¨®n militar, pero nuestra relaci¨®n con China no es solo militar¡±, ha dicho Macron. Y ha subrayado: ¡°China es una gran potencia con la que trabajamos en ¨¢reas internacionales muy importantes¡±, en alusi¨®n a la lucha contra el cambio clim¨¢tico o el control de armamentos.

Pero a pesar de las reticencias europeas, la Alianza endurece progresivamente su tono hacia China. La OTAN ya hab¨ªa identificado a ese pa¨ªs como uno de sus principales desaf¨ªos en la cumbre de diciembre de 2019, en gran parte por la presi¨®n de Trump. El presidente Biden no solo ha mantenido la presi¨®n del anterior inquilino de la Casa Blanca, sino que incluso la ha redoblado.