El Supremo de Brasil advierte a Bolsonaro: ¡°Nadie va a cerrar esta Corte¡±
El alto tribunal asegura que si el presidente cumple con su amenaza de desobedecer los fallos ser¨¢ acusado de un delito contra la Constituci¨®n
El Tribunal Supremo de Brasil, la instituci¨®n que concentra las iras del bolsonarismo en los ¨²ltimos tiempos, ha respondido este mi¨¦rcoles con contundencia a las amenazas lanzadas la v¨ªspera por el presidente de la Rep¨²blica, Jair Bolsonaro, ante decenas de miles de sus seguidores. Despu¨¦s de que el ultraderechista dijera que pretende desobedecer las ¨®rdenes de la m¨¢xima corte, el presidente del tribunal, Luiz Fux, le ha acusado de atacar la democracia y advertido de que ¡°el Tribunal Supremo no va a tolerar amenazas a la autoridad de sus decisiones¡±. Fux ha a?adido que, si Bolsonaro cumple su amenaza de desobedecer, ser¨¢ acusado de un delito contra la Constituci¨®n que juzgar¨ªa el Congreso.
La del presidente del Supremo ha sido la reacci¨®n m¨¢s dura, pero no la ¨²nica al beligerante discurso de Bolsonaro durante la exhibici¨®n de fuerza que protagoniz¨® el martes con sendas manifestaciones multitudinarias en S?o Paulo y Brasilia. Los mercados han reaccionado mal en la reapertura tras el festivo del martes, D¨ªa de la Independencia. La Bolsa ha cerrado con una ca¨ªda del 3,7%, la mayor desde que las condenas del expresidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva fueron anuladas. Y el d¨®lar ha subido, de modo que se cambia a 5,3 reales.
El presidente de la C¨¢mara de Diputados, Arthur Lira, aliado del Bolsonaro, tambi¨¦n ha hecho un pronunciamiento, pero en un tono m¨¢s tibio que el del magistrado; b¨¢sicamente ha pedido el fin de la escalada ret¨®rica y armon¨ªa entre los poderes.
La m¨¢xima corte brasile?a es un activo actor pol¨ªtico, sobre todo a partir de las investigaciones de los ¨²ltimos a?os contra la corrupci¨®n. El presidente del Supremo, un magistrado de carrera a diferencia de algunos de los 11 miembros restantes del tribunal, se ha pronunciado en unos t¨¦rminos inusualmente duros y expl¨ªcitos en ¨¦l y en la pol¨ªtica brasile?a. Fux ha afirmado tajante: ¡° va a cerrar esta Corte¡±. Tambi¨¦n ha acusado al jefe del Estado de haber cruzado el umbral de la cr¨ªtica leg¨ªtima, de ¡°instigar el odio¡± y de ¡°practicar una pol¨ªtica del caos¡±.
El m¨¦todo de gobernar de Bolsonaro requiere enemigos para mantener prietas las filas del n¨²cleo duro de sus seguidores. Y m¨¢s ahora, que lleva meses viendo c¨®mo pierde apoyo y aumenta el rechazo contra ¨¦l, seg¨²n indican las encuestas a las que tan aficionados son los brasile?os.
Con la polarizaci¨®n consolidada y el presidente en una ofensiva constante contra las instituciones que erosiona la democracia, las peticiones de impeachment se acumulan en la mesa del presidente de la C¨¢mara de diputados, la persona que tiene la potestad de darles tr¨¢mite. Y para asegurarse de que eso no ocurra, Bolsonaro logr¨® colocar en el puesto a un aliado. En su intervenci¨®n de este mi¨¦rcoles, Lira ha criticado ¡°los radicalismos y excesos¡± y ha instado al presidente Bolsonaro a que no insista m¨¢s en pedir cambios al sistema de votaci¨®n. ¡°No puedo admitir el cuestionamiento de decisiones ya tomadas y superadas, como el voto impreso. Una vez decidido, hay que pasar p¨¢gina¡±, ha dicho, en referencia a la propuesta patrocinada por Bolsonaro que los diputados rechazaron hace unas semanas. Lira es uno de los dirigentes del Centr?o, que encarna la vieja pol¨ªtica que Bolsonaro dec¨ªa que quer¨ªa combatir. La suya no es una alianza ideol¨®gica sino de intereses.
Durante los casi tres a?os que Bolsonaro lleva en el poder, son muchas las veces en que sus amenazas golpistas han encendido las alarmas, pero esas alertas son cada vez m¨¢s fuentes. Escribe el analista Oliver Stuenkel, de la Fundaci¨®n Getulio Vargas, en un art¨ªculo publicado en EL PA?S Brasil que, ¡°m¨¢s que una ruptura democr¨¢tica inmediata, el mayor riesgo es una crisis constitucional permanente, que consume al pa¨ªs sin avanzar en ninguna agenda pol¨ªtica relevante¡±.
El alto tribunal es ahora el principal objeto de los ataques del presidente y sus fieles como lo fue al principio de la legislatura el Congreso. La investigaci¨®n que abri¨® hace tiempo el Supremo contra las redes bolsonaristas que difunden noticias falsas y campa?as de desinformaci¨®n en Internet y las recientes detenciones de varios seguidores de Bolsonaro acusados de amenazar a los magistrados y de financiar actos antidemocr¨¢ticos han tocado un nervio en el mandatario y el movimiento que lo llev¨® al poder hace casi tres a?os. Los que salieron este martes a las calles sostienen que Brasil sufre ¡°una dictadura de las togas¡± por culpa del Tribunal Supremo, al que acusan de cercenar la libertad de expresi¨®n.
Aunque la pandemia persiste y queda m¨¢s de un a?o para las elecciones, el ambiente entre los pol¨ªticos y la prensa es claramente de precampa?a electoral. Este domingo hay prevista una nueva manifestaci¨®n. Los convocantes no son los habituales ¡ªBolsonaro y los movimientos de izquierda¡ª, sino el Movimiento Brasil Livre, creado por un grupo de j¨®venes liberales de derechas que consigui¨® que la ciudadan¨ªa se movilizara para echar a la izquierdista Dilma Rousseff del poder. Aunque respaldaron la elecci¨®n de Bolsonaro ahora se han distanciado de ¨¦l. Como buena parte del poder econ¨®mico, desencantado con Bolsonaro porque no ha sacado adelante las reformas liberalizadoras que prometi¨®, son partidarios de una tercera v¨ªa, pero pese al empe?o pasan los meses y no cuaja. Salvo sorpresa, las elecciones de 2022 ser¨¢n un duelo entre Bolsonaro y el expresidente Lula.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.