Berl¨ªn vota a favor de expropiar 240.000 viviendas en manos de grandes empresas

Berl¨ªn se ha despertado este lunes con dos noticias de calado y un mandato claro. Los socialdem¨®cratas volver¨¢n a encabezar la coalici¨®n que gobierne la ciudad tras ganar las elecciones celebradas el domingo. Franzisca Giffey, ministra socialdem¨®crata del Gobierno de Angela Merkel hasta mayo pasado, ser¨¢, si nada se tuerce, la pr¨®xima alcaldesa de la ciudad-Estado de Berl¨ªn. Se convertir¨¢ en la primera mujer que ocupe ese cargo ¨Dexceptuando un breve per¨ªodo de Louise Schr?der en el Berl¨ªn de posguerra¨D. Y un tema estar¨¢ sobre su mesa en cuanto tome posesi¨®n: el problema de la vivienda asequible en la capital alemana. El s¨ª gan¨® en el pol¨¦mico refer¨¦ndum que el domingo pregunt¨® a los berlineses si el Senado ¨Del Gobierno regional¨D debe expropiar a los grandes propietarios de pisos, las inmobiliarias y fondos que poseen m¨¢s de 3.000 apartamentos.

El escrutinio termin¨® de madrugada, despu¨¦s de que se contaran los votos de las elecciones generales y las regionales, y dio como resultado que un 56,4% de los votantes est¨¢n a favor de comprar con dinero p¨²blico unas 240.000 viviendas y crear una nueva empresa de vivienda que gestione los alquileres. Un 39% de los berlineses votaron que no. La consulta no es vinculante. El s¨ª no quiere decir que el Senado se ponga manos a la obra para iniciar el tr¨¢mite, pero los partidos que formen el nuevo Gobierno tienen un claro mandato de los ciudadanos para abordar la cuesti¨®n. La expropiaci¨®n protagonizar¨¢ las conversaciones para acordar una coalici¨®n.

Giffey ha anunciado que negociar¨¢ con Los Verdes, pero tambi¨¦n con la CDU. Quiere ¡°una mayor¨ªa estable¡± para gobernar una ciudad de 3,6 millones de personas que ha estado dirigida por los socialdem¨®cratas desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas. Giffey obtuvo el 21,4% de los votos, por delante de Los Verdes, que se quedaron en un 18,9% pese a que las estimaciones iniciales de las empresas demosc¨®picas les situaron en cabeza el domingo por la noche. Los democristianos consiguieron el 18,1% de las papeletas. Die Linke, la izquierda poscomunista, no se qued¨® muy atr¨¢s, con un 14%. Hasta ahora el alcalde del SPD, Michael M¨¹ller, gobernaba con un tripartito con los ecologistas y Die Linke. Los Verdes han conseguido mejorar sus resultados de 2016 en 3,7 puntos. Los perdedores han sido la formaci¨®n de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD), que se ha dejado m¨¢s de seis puntos en la capital hasta quedar en el 8% de votos.

Entre los partidos que optan a formar una coalici¨®n solo Die Linke est¨¢ claramente a favor de la expropiaci¨®n. Giffey y el SPD creen que no solucionar¨¢ los problemas de una ciudad donde m¨¢s del 85% de sus habitantes vive de alquiler y que ha visto c¨®mo los precios se disparaban en la ¨²ltima d¨¦cada. ¡°Sigo pensando que las expropiaciones no ayudan a crear ni un solo apartamento nuevo que ayude a paliar el problema de la vivienda asequible¡±, ha dicho esta ma?ana la pr¨®xima alcaldesa a la televisi¨®n p¨²blica ARD. De todas formas, encargar¨¢ al nuevo Gobierno de la capital que redacte una propuesta y la someta a an¨¢lisis jur¨ªdico. ¡°Si los expertos determinan que no es constitucional, no podremos hacerlo¡±, ha se?alado. Los Verdes se han mantenido ambiguos sobre la cuesti¨®n durante la campa?a. Annalena Baerbock, la candidata ecologista a la Canciller¨ªa, suele repetir que la expropiaci¨®n es ¡°la ¨²ltima opci¨®n¡±.

La iniciativa para comprar ¨Den muchos casos recomprar, ya que Berl¨ªn vendi¨® vivienda p¨²blica a principios de los 2000 acuciada por las deudas¨D parti¨® de la organizaci¨®n Expropiar a Deutsche Wohnen y compa?¨ªa, nacida en 2018 y que ha recogido las firmas necesarias para celebrar el refer¨¦ndum. La ley berlinesa establece que al menos el 7% del electorado debe pedir con su firma que se celebre una consulta, que no ser¨¢ vinculante. Los organizadores est¨¢n convencidos de que la expropiaci¨®n s¨ª est¨¢ amparada por la constituci¨®n. La base legal es el art¨ªculo 15 de la ley fundamental alemana, que reza: ¡°Con fines de socializaci¨®n, el suelo, los recursos naturales y los medios de producci¨®n pueden ser situados bajo un r¨¦gimen de propiedad colectiva [¡­] por una ley que fije el modo y el monto de la indemnizaci¨®n¡±. Desde 1949 nunca se ha hecho uso de ese precepto.

La presi¨®n social que exige viviendas asequibles en Berl¨ªn ya oblig¨® a los pol¨ªticos berlineses a actuar en 2019. El Gobierno de coalici¨®n de socialdem¨®cratas (SPD), Los Verdes y Die Linke aprob¨® una ley que establec¨ªa topes al precio de los alquileres (en funci¨®n del a?o de construcci¨®n y de las reformas del inmueble) y que las rentas quedaran congeladas durante cinco a?os. Se conoce como mietendeckel, literalmente tapa del alquiler. En abril pasado el Tribunal Constitucional alem¨¢n tumb¨® la ley al considerar que el Parlamento regional no era competente para regular las rentas por ley.

Seg¨²n la propuesta de los activistas, la ciudad tendr¨ªa que crear una entidad de derecho p¨²blico que pedir¨ªa financiaci¨®n a los bancos con el valor de los terrenos y los pisos como garant¨ªa para poder hacer frente a la compra de las 240.000 viviendas. Contar¨ªa adem¨¢s con los ingresos mensuales de los alquileres. Hasta ahora se han barajado distintas cifras de lo que le costar¨ªa la expropiaci¨®n a una ciudad que sigue endeudada, y todas tienen muchos ceros. El Gobierno ha calculado 36.000 millones de euros; los activistas, entre 8.000 y 11.000 millones, y un estudio reciente de dos acad¨¦micos habla de una horquilla de entre 14.500 y 22.800 millones.

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