El futuro que Xi Jinping vislumbra para China
El l¨ªder se prepara para eternizarse en el poder y convertir a su pa¨ªs en una ¡°naci¨®n socialista moderna¡± en 2035 y una gran potencia ¡°fuerte y pr¨®spera¡± en 2049
M¨¢s presi¨®n sobre las grandes fortunas, y nuevas reglamentaciones contra los monopolios y oligopolios. M¨¢s impuestos, que incluir¨¢n muy probablemente una tasa sobre la propiedad. Nuevas oportunidades para todos en la educaci¨®n. Desarrollo de la innovaci¨®n, que ser¨¢ una de las grandes herramientas para la lucha contra el deterioro medioambiental. Un marco regulador para el uso y control de datos. Una relaci¨®n comercial con el exterior en la que China proporcione tecnolog¨ªa puntera al resto de los pa¨ªses, y el gigante asi¨¢tico est¨¦ protegido del impacto de los vaivenes geopol¨ªticos o problemas en las cadenas de suministro.
Si todo esto suena a programa electoral es porque, en cierto modo, lo es. Todas estas medidas se han puesto ya en marcha en el ¨²ltimo a?o y medio, se encuentran en ciernes o se han entrevisto en declaraciones de Xi Jinping. Forman parte de la ambiciosa plataforma de medidas y reformas con la que el presidente chino, que se prepara para renovar su mandato sine die, pretende alcanzar en los pr¨®ximos a?os la meta de convertir al pa¨ªs en una ¡°naci¨®n socialista moderna¡± para 2035, y en una gran potencia ¡°pr¨®spera¡± y ¡°fuerte¡± para 2049.
El Sexto Pleno del 19 Comit¨¦ Central del Partido Comunista de China se encuentra reunido esta semana en Pek¨ªn en una sesi¨®n que, al aprobar una resoluci¨®n sobre la historia del partido, consagrar¨¢ la supremac¨ªa de Xi como l¨ªder del pa¨ªs y del partido y allanar¨¢ el camino para que el actual presidente renueve su mandato en 2022 para al menos cinco a?os m¨¢s, su tercera legislatura. La resoluci¨®n tambi¨¦n se har¨¢ eco de su visi¨®n sobre el futuro del pa¨ªs, lo que convertir¨¢ su programa de reformas ¡ªy, en general, sus opiniones¡ª en dogma indiscutible del partido, un apoyo m¨¢s en el proceso para renovar su mandato en el 20 Congreso del partido el a?o pr¨®ximo.
¡°C¨®mo Xi interprete los desaf¨ªos y acontecimientos que se vayan produciendo ser¨¢ el factor m¨¢s importante desde el a?o pr¨®ximo, en su tercer mandato¡±, a la hora de tomar decisiones sobre nuevas regulaciones o pol¨ªticas a adoptar, apuntaba el analista Jude Blanchette, del Centro de Estudios Estrat¨¦gicos Internacionales (CSIS) de Washington en una reciente videoconferencia.
La visi¨®n del l¨ªder ya se ha ido perfilando; y su puesta en marcha se ha acelerado en el ¨²ltimo a?o y medio, a ra¨ªz de la pandemia y las tensiones con Estados Unidos. Esta incluye la proyecci¨®n de fortaleza en el escenario internacional ¡ªlo que Xi describe como ¡°rejuvenecimiento de la naci¨®n china¡±, la vuelta de la grandeza diplom¨¢tica, econ¨®mica y militar del pa¨ªs¡ª e, internamente, una sociedad m¨¢s igualitaria y cohesionada, unida por la ¡°prosperidad com¨²n¡± bajo el manto, la legitimidad y el control del partido.
El t¨¦rmino ¡°prosperidad com¨²n¡± no es nuevo ni casual. Ya lo utilizaron los grandes l¨ªderes del pasado Mao Zedong y Deng Xiaoping, aunque en contextos diferentes. Seg¨²n lo ha descrito el propio Xi en el discurso en el que present¨®, el pasado agosto, esta campa?a, la idea es atajar la profunda desigualdad que existe en la China actual, entre las distintas capas sociales y, sobre todo, entre la ciudad y el campo. ?La raz¨®n para hacerlo? En algunos pa¨ªses, apunta el presidente, la desigualdad ha provocado el desplome de la clase media y ¡°ricos y pobres est¨¢n polarizados. Eso ha llevado a la desintegraci¨®n social, la polarizaci¨®n pol¨ªtica y un populismo rampante¡±.
Contra la polarizaci¨®n
Por tanto, apunta Xi ¡ªun ¨¢vido estudioso de la historia y que tiene la ca¨ªda de la Uni¨®n Sovi¨¦tica y su PCUS como el gran anatema cuya repetici¨®n en China debe evitarse a toda costa¡ª, las lecciones que deben extraer son ¡°profundas¡±. ¡°Nuestro pa¨ªs debe protegerse con determinaci¨®n contra la polarizaci¨®n, buscar la prosperidad com¨²n y mantener la armon¨ªa y estabilidad sociales¡±, a?ade.
Piensa hacerlo, seg¨²n se deduce del texto ¡ªpublicado ¨ªntegro solo el mes pasado¡ª, mediante un mayor pago de impuestos y m¨¢s presi¨®n para que los grandes millonarios donen parte de su fortuna a causas filantr¨®picas, as¨ª como a trav¨¦s de una mayor inversi¨®n en programas sociales y la educaci¨®n. Pero el discurso tambi¨¦n deja clara la percepci¨®n de Xi acerca de su visi¨®n de la sociedad china futura, y esa visi¨®n no parece precisamente radical: el bienestar, puntualiza el presidente depender¨¢ del trabajo duro y la innovaci¨®n, y se alentar¨¢ la empresa privada. Aunque se proporcionar¨¢n servicios b¨¢sicos, ¡°no debemos fijar objetivos demasiado altos, o garantizar demasiadas prestaciones. Debemos evitar caer en la trampa de generar vagos por proporcionar un sistema de excesivas coberturas¡±.
Es posible que la resoluci¨®n mencione tambi¨¦n la estrategia de ¡°circulaci¨®n dual¡±, que se propuso el a?o pasado en plenas tensiones con Estados Unidos y las consecuencias de la covid, y que ha quedado consagrada en el plan quinquenal aprobado este a?o. La estrategia busca impermeabilizar a China contra posibles choques externos ¡ªun deterioro a¨²n mayor de la relaci¨®n con Washington, una crisis econ¨®mica global derivada de la pandemia...¡ª. Y pretende hacerlo mediante el incentivo del consumo dentro de su territorio (circulaci¨®n interna), la autosuficiencia en los sectores que considere estrat¨¦gicos y la conversi¨®n de China en un pa¨ªs l¨ªder en innovaci¨®n que exporte tecnolog¨ªa a otras naciones (circulaci¨®n externa).
Se espera asimismo que la resoluci¨®n aluda a Taiw¨¢n, la isla autogobernada que Pek¨ªn considera parte de su territorio, y repita los llamamientos a la unificaci¨®n entre ambos lados del Estrecho. Y, dada la importancia que Xi adjudica al control del Partido Comunista de China ¡ª¡°este, oeste, norte, sur, centro, el partido lo domina todo¡±, ha subrayado en m¨¢s de una ocasi¨®n¡ª, que haga referencia a la necesidad de mantener la disciplina y la vigilancia dentro del partido. Porque, seg¨²n Blanchette, entre las convicciones clave de Xi, la fundamental es que ¡°con un partido d¨¦bil todos los caminos llevan al desastre¡±.
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