El Movimiento 5 Estrellas quiere expulsar a su principal ministro por criticar al partido sobre la guerra

El Movimiento 5 Estrellas (M5S), el partido que gan¨® las ¨²ltimas elecciones generales en Italia y obtuvo en 2018 el 33% de los votos, atraviesa una prolongada ca¨ªda que lo acerca cada vez m¨¢s a la descomposici¨®n. La formaci¨®n antisistema, signo entonces de unos tiempos convulsos y euroesc¨¦pticos, no ha logrado sobreponerse a todos sus errores. La ¨²ltima implosi¨®n ha sido provocada por las duras cr¨ªticas del actual ministro de Exteriores y exl¨ªder de la formaci¨®n, Luigi Di Maio, al jefe del partido, Giuseppe Conte. Este fin de semana le acus¨® de tener una l¨ªnea alejada de la Uni¨®n Europea y de la OTAN respecto al conflicto ucranio, lo que desencaden¨® la ira del ex primer ministro y de parte de la militancia. El partido discute ahora si debe expulsar a Di Maio y cerrar as¨ª un cap¨ªtulo de su historia. El riesgo, despu¨¦s de haber perdido decenas de parlamentarios y votantes en esta legislatura, es que clausure tambi¨¦n su propia andadura.

El M5S celebr¨® el domingo por la noche un consejo nacional extraordinario donde discuti¨® la cuesti¨®n hasta la madrugada y puso a Di Maio, de 37 a?os y que fue vicepresidente del Gobierno italiano, en la diana. ¡°Est¨¢ m¨¢s fuera que dentro. Falta el respeto al partido, al l¨ªder. Y practica un doble juego¡±, explica una fuente del M5S a este peri¨®dico. ?l respondi¨® que se sent¨ªa atacado y que ve¨ªa mucho odio en la formaci¨®n que hab¨ªa dirigido. Tambi¨¦n que no pod¨ªa reconocerse en ese aire anti Gobierno que destila hoy el partido que contribuy¨® a fundar y cuyas riendas le confi¨® el c¨®mico Beppe Grillo. Es el mismo Di Maio que durante su etapa de l¨ªder del M5S denunci¨® la cercan¨ªa de los partidos con un supuesto establishment; el mismo pol¨ªtico que lleg¨® a proponer una censura al presidente de la Rep¨²blica, Sergio Mattarella, y a viajar a Francia de tapadillo para reunirse con el movimiento de los chalecos amarillos.

El conflicto se escenificar¨¢ hoy en el Senado, cuando el primer ministro, Mario Draghi, comparecer¨¢ para informar sobre la posici¨®n de Italia en el Consejo Europeo del mi¨¦rcoles. El M5S quiere aprovechar para presentar una resoluci¨®n contra el env¨ªo de armas a Ucrania que agudizar¨ªa todav¨ªa m¨¢s la divisi¨®n.

La guerra interna en el M5S muestra varios elementos m¨¢s que la propia refriega entre los dos l¨ªderes. Desde hace tiempo, el Gobierno de unidad que preside Draghi en Italia ha creado una fractura entre los ministros que lo integran y sus respectivos partidos. El Gabinete ha formado una suerte de partido asumiendo las tesis del primer ministro, muchas veces alejadas de las de las propias formaciones, especialmente en el tema de la guerra en Ucrania. En muchas ocasiones, los ministros se han visto obligados a elegir entre las directrices del partido y las que se propon¨ªan desde el Palacio Chigi: la mayor¨ªa de veces ha triunfado la opci¨®n de Gobierno.

El caso de Di Maio, convertido en el mayor defensor de las tesis de Draghi y en adalid de los valores de la UE y la OTAN ¨Ddurante mucho tiempo propuso que Italia dejase de formar parte del club europeo¡ª es paradigm¨¢tico. Pero ha sucedido tambi¨¦n con los ministros de Forza Italia (como Mara Carfagna, Mariastella Gelmini o Renato Brunetta), que han terminado enfrentados en mayor o menor medida con Silvio Berlusconi. Incluso se ha visto ese desajuste en La Liga con Giancarlo Giorgetti, ministro de Desarrollo Econ¨®mico y otrora hombre de confianza de Matteo Salvini, convertido hoy en el principal foco de oposici¨®n interna. El caso de Di Maio, sin embargo, es algo distinto.

Los intereses del ministro de Exteriores, un autodidacta sin apenas conocimientos ni estudios cuando entr¨® en pol¨ªtica, hace tiempo que se separaron de los de su partido. Los movimientos de ruptura coinciden con la pr¨®xima confirmaci¨®n de la regla interna del M5S de la limitaci¨®n de dos mandatos, seg¨²n la cual Di Maio no podr¨ªa optar a unas siguientes elecciones y perder¨ªa todos sus cargos, responsabilidades y privilegios al llevar ya ocho a?os en la pol¨ªtica activa. El grillino estar¨ªa ya preparando su salida del partido ¨Den el M5S lo daban ayer por hecho¡ª y la entrada a un gran grupo de centro que concurrir¨ªa a las pr¨®ximas elecciones. Unos 20 parlamentarios, se?alaba el lunes La Repubblica, estar¨ªan dispuestos a seguirle si pone rumbo a otro proyecto.

El M5S es un barco a la deriva, y Di Maio lo sabe. El partido que lidera Conte ha logrado en las ¨²ltimas elecciones locales una media del 3% de los votos. El partido no sabe, ni siquiera, si Giuseppe Conte ser¨¢ el candidato a los pr¨®ximos comicios. Un problema para el Partido Democr¨¢tico, que hab¨ªa apostado el ¨¦xito de la siguiente campa?a a la formaci¨®n de una coalici¨®n con los grillinos. El vac¨ªo que dejan ha impulsado los movimientos para crear un gran grupo de centro. Un espacio ideol¨®gico sin due?o desde la descomposici¨®n de la vieja Democracia Cristiana. El partido, en realidad, en el que m¨¢s encajar¨ªa hoy el perfil de Di Maio.

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