El sabotaje a los gasoductos Nord Stream: un acto de guerra h¨ªbrida con la colaboraci¨®n de un actor estatal
La investigaci¨®n se demorar¨¢ semanas y podr¨ªa no llegar a ser concluyente, avisan los expertos, mientras todo tipo de teor¨ªas inundan las redes sociales
La Uni¨®n Europea y la OTAN han prometido una ¡°respuesta contundente¡± al sabotaje de los gasoductos rusos Nord Stream 1 y 2 en el mar B¨¢ltico. Pero, ?contra qui¨¦n? De momento, ninguna organizaci¨®n culpa abiertamente a ning¨²n actor de las explosiones en las tuber¨ªas, que han causado un desastre medioambiental y expuesto la vulnerabilidad de las infraestructuras claves europeas. Pero una cosa es lo que dicen (y no dicen) y otra lo que sospechan. Los expertos creen que un ataque de esta complejidad solo ha podido llevarse a cabo de la mano de un ¡°actor estatal¡±, es decir, contando con los medios y la inteligencia de un ej¨¦rcito o una agencia de inteligencia. Y a la hora de se?alar a alg¨²n pa¨ªs como autor m¨¢s probable de los sabotajes, todo apunta a Rusia.
Analistas especializados y fuentes europeas y de la Alianza coinciden en que podr¨ªa tratarse del inicio de una nueva fase en el conflicto que mantiene Rusia con Occidente desde la invasi¨®n de Ucrania. De una guerra puramente econ¨®mica, Mosc¨² habr¨ªa pasado a una guerra h¨ªbrida, con ataques a infraestructuras f¨ªsicas que pretenden desestabilizar y provocar caos, incertidumbre y, quiz¨¢, la desuni¨®n de sus enemigos. El jefe de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa, Fatih Birol, ha afirmado este jueves que es ¡°muy obvio¡± qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de las fugas, pero no lleg¨® a mencionar a Rusia.
Mientras comienza la investigaci¨®n sobre la autor¨ªa, que puede demorarse semanas porque el gas sigue escap¨¢ndose por los agujeros de las tuber¨ªas y ni siquiera se ha podido bajar a comprobar en qu¨¦ estado est¨¢n, el ataque empieza a tener efecto por el lado de la confusi¨®n. Se est¨¢n difundiendo todo tipo de teor¨ªas en redes sociales, sin pruebas que las sustenten. Algunas alimentadas incluso por eurodiputados. El exministro polaco Radek Sikorski public¨® en su Twitter una foto de la fuga en la superficie del mar con el texto ¡°Gracias, EE UU¡±. La ha borrado, pero estuvo horas en su perfil y enseguida fue citada y amplificada por cuentas rusas, empezando por la portavoz de Exteriores del Gobierno de Vlad¨ªmir Putin, Mar¨ªa Zaj¨¢rova.
Redes sociales
Ese tuit fue compartido por quienes creen que el sabotaje lo ha orquestado Washington, la OTAN, Ucrania o cualquiera que no sea el Kremlin. Quienes difunden esta hip¨®tesis esgrimen tambi¨¦n un v¨ªdeo en el que el presidente estadounidense, Joe Biden, aseguraba en febrero, poco antes de que empezara la invasi¨®n, que Estados Unidos pondr¨ªa fin al Nord Stream 2 si Rusia atacaba a Ucrania.
Los expertos advierten de que quiz¨¢ nunca se pueda atribuir el ataque con pruebas concluyentes, y el atacante nunca lo reconocer¨¢ porque su intenci¨®n es sembrar la mayor confusi¨®n posible. ¡°Es precisamente una de las caracter¨ªsticas de la guerra h¨ªbrida¡±, explica Carsten Rasmussen, general de brigada dan¨¦s y ex agregado militar en Mosc¨²: ¡°Cometer acciones que sea plausible negar¡±. Rasmussen tampoco asegura que el culpable sea Rusia porque ¡°no hay pruebas¡±, se?ala en conversaci¨®n telef¨®nica con EL PA?S, pero en funci¨®n de su experiencia ve ¡°una acci¨®n clar¨ªsima de guerra h¨ªbrida cuyos efectos apuntan directamente al culpable¡±.
Uno de esos efectos es generar en Europa el temor a que el suministro energ¨¦tico no sea suficiente este invierno. ¡°Aunque es un temor irracional¡±, asegura, porque ninguno de los dos gasoductos estaba bombeando gas y los pa¨ªses m¨¢s dependientes del gas ruso, como Alemania, tienen los dep¨®sitos llenos y suministro alternativo para superar los meses fr¨ªos. El ataque tambi¨¦n busca desestabilizar pol¨ªticamente, a?ade, y eso lo estar¨ªa consiguiendo culpando a terceros y dando p¨¢bulo a otras teor¨ªas. El momento no es casual, apunta Rasmussen. Coincide con los falsos referendos para preparar la anexi¨®n de territorio ucranio. ¡°Quienquiera que ideara esto ha conseguido distraer la atenci¨®n de lo que sucede all¨ª con un sabotaje de un alcance que no se ve¨ªa desde la II Guerra Mundial¡±, se?ala.
Como no se puede acceder a las tuber¨ªas, la informaci¨®n disponible es a¨²n escasa, pero la magnitud de las explosiones y la cantidad de gas que est¨¢ saliendo indican que no se trata de fisuras, sino de grandes agujeros. Las canalizaciones discurren por el lecho marino, a unos 70 metros de profundidad, en una ruta de 1.200 kil¨®metros que atraviesa aguas territoriales de cinco pa¨ªses: Rusia, Finlandia, Suecia, Dinamarca y Alemania. La tuber¨ªa del Nord Stream 2 mide 1,1 metros de di¨¢metro y el grosor de sus paredes es de 4,1 cent¨ªmetros.
Fuentes de la inteligencia alemana citadas por Der Spiegel creen que se emplearon explosivos de gran potencia, comparables a 500 kilos de TNT. Este jueves, Suecia y Dinamarca ofrecieron nuevos datos sobre el sabotaje que lo corroboran: seg¨²n una carta de los dos pa¨ªses al Consejo de Seguridad de la ONU, las fugas fueron causadas por detonaciones equivalentes a ¡°cientos de kilos de explosivos¡±.
Una de las teor¨ªas que se manejan es que varios buzos pudieron colocar las cargas explosivas en los dos tubos del Nord Stream 1, que empez¨® a operar en 2011, y en uno de los dos del Nord Stream 2, el nuevo gasoducto que Berl¨ªn paraliz¨® pocos d¨ªas antes de la invasi¨®n rusa de Ucrania. Pudieron emplearse tambi¨¦n minisubmarinos o el equipamiento (peque?os robots) con el que normalmente se hace el mantenimiento de los gasoductos. En cualquier caso, expertos como Julian Pawlak, analista del Instituto Alem¨¢n de Defensa y Estudios Estrat¨¦gicos (GIDS), tienen claro que ¡°un ataque de este tipo no est¨¢ al alcance de actores no estatales¡±.
Las autoridades examinan ahora im¨¢genes de sat¨¦lite en busca de embarcaciones sospechosas en la zona, pero Pawlak se?ala al tel¨¦fono que los explosivos pudieron colocarse d¨ªas, meses e incluso a?os antes. No se puede descartar que estuvieran all¨ª desde la construcci¨®n del Nord Stream 2, que termin¨® en 2021, por ejemplo. El sabotaje demuestra que por muy vigilado que tenga la OTAN el mar B¨¢ltico, con constantes patrullas de los pa¨ªses ribere?os, es imposible monitorizarlo entero las 24 horas. Que no se hayan detectado embarcaciones militares sospechosas tampoco quiere decir nada, apunta. La operaci¨®n se podr¨ªa haber dirigido desde un barco comercial.
Capacidad para atacar
Como Rasmussen, Pawlak cree que la hip¨®tesis rusa es sin duda la m¨¢s plausible. ¡°Se trata de mostrar a Occidente lo que son capaces de hacer. El sabotaje no ha tenido consecuencia directa para la seguridad energ¨¦tica, pero lanza el mensaje de que tienen capacidad para atacar otra infraestructura cr¨ªtica¡±, se?ala. Ser¨ªa una se?al dirigida a Europa, especialmente a Alemania y a Polonia, de que podr¨ªa hacer lo mismo con los gasoductos que son mucho m¨¢s importantes para la seguridad energ¨¦tica del continente: los que transportan el gas de Noruega.
Una de las l¨ªneas del Nord Stream 2 ¡ªcada gasoducto consta de dos tuber¨ªas paralelas¡ª est¨¢ intacta, seg¨²n ha apuntado el operador, la empresa Nord Stream AG, con sede en Suiza. Te¨®ricamente, podr¨ªa volver a bombear gas. Tiene una capacidad anual de 27.500 millones de metros c¨²bicos. Distintos analistas apuntan a que Rusia podr¨ªa haberse guardado esa carta en la manga para aumentar la presi¨®n sobre Alemania y jugarla si el malestar interno en el pa¨ªs aumenta por los disparados precios de la energ¨ªa. La presi¨®n, seg¨²n esta hip¨®tesis, podr¨ªa obligar a Berl¨ªn a aceptar de nuevo el gas ruso.
Con el ataque, explica Johannes Peters, experto del Instituto de Pol¨ªticas de Seguridad de Kiel (ISPK), Mosc¨² estar¨ªa mandando el mensaje: ¡°No os confi¨¦is en que est¨¢is preparados para pasar un invierno agradable y en que pod¨¦is compensar nuestro gas¡±, sostuvo en la televisi¨®n p¨²blica, donde descart¨® la tesis de un ataque de Estados Unidos para, supuestamente, impedir para siempre que Alemania volviera al gas ruso.
El sabotaje se produjo el mismo d¨ªa que se inauguraba un nuevo conducto entre Noruega y Polonia, el Baltic Pipe, algo que los analistas no creen que sea casual. Noruega es ahora el principal suministrador de gas natural de Alemania, despu¨¦s de que Rusia cerrara el grifo del Nord Stream 1 a principios de mes en represalia por las sanciones europeas. El canciller alem¨¢n, Olaf Scholz, asegura que el pa¨ªs est¨¢ preparado para aguantar la temporada de fr¨ªo gracias a las reservas acumuladas, que ya superan el 90%.
En Alemania tampoco se atreven todav¨ªa a nombrar un culpable. El servicio secreto exterior alem¨¢n, el BND, est¨¢ participando en la investigaci¨®n junto con Dinamarca y Suecia, en cuyas aguas se produjeron los ataques.
Bruselas quiere pruebas de resistencia de la infraestructura energ¨¦tica europea
La comisaria europea de Energía, Kadri Simson, ha dicho este viernes que quiere que los Veintisiete sometan “lo antes posible” a pruebas de resistencia su infraestructura energética. Además, ha prometido el “apoyo” de Bruselas para que los Estados “aumenten su prevención y preparación”, así como “su capacidad para reparar infraestructuras críticas en caso de un ataque”.
La responsable europea de energía se ha felicitado también de la próxima entrada en vigor de una actualización de las reglas europeas de resiliencia de la denominada “infraestructura crítica”, con lo que espera contar en breve con una “legislación mejor y más ambiciosa”.
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