Suecia confirma el sabotaje del gasoducto Nord Stream tras hallar trazas de explosivos
Las autoridades alemanas, suecas y danesas colaboran en la investigaci¨®n para identificar a los responsables de las fugas en septiembre de los gasoductos en el mar B¨¢ltico
La sospecha ya es oficial. Suecia asegura haber confirmado qu¨¦ ocurri¨® en septiembre pasado, cuando la presi¨®n en los gasoductos Nord Stream baj¨® de repente y empez¨® a salir gas a borbotones en varios puntos cerca de la isla danesa de Bornholm. Fue ¡°un sabotaje flagrante¡±, han informado este viernes las autoridades del pa¨ªs. Sus investigadores han encontrado restos del explosivo empleado para detonar los conductos en ¡°varios de los objetos extra?os encontrados¡± en el lecho del mar B¨¢ltico.
Lo que sigue siendo un misterio, y no est¨¢ claro que alg¨²n d¨ªa pueda aclararse fehacientemente, es la autor¨ªa del ataque, aunque las investigaciones, que son ¡°complejas y extensas¡±, contin¨²an, ha dicho el fiscal sueco encargado del caso, Mats Ljungqvist. ¡°La investigaci¨®n mostrar¨¢ si alguien puede ser sospechoso de un delito¡±, ha se?alado en un comunicado en el que pide paciencia y anuncia que no va a atender a los periodistas para poder trabajar tranquilamente.
El principal sospechoso para los gobiernos implicados y los analistas que han estudiado el sabotaje es Rusia, pero hasta ahora nadie se ha atrevido a acusar formalmente a Mosc¨² de ordenar la voladura de los conductos que transportaban gas a Alemania por el lecho del mar B¨¢ltico. El Kremlin lo niega y apunta a Occidente. El Reino Unido ha salido a desmentir las acusaciones de Mosc¨² de que fue la Marina brit¨¢nica la autora de las explosiones. La teor¨ªa de la participaci¨®n de Washington, y de Ucrania, basada en que ambas se beneficiar¨ªan del ataque, tambi¨¦n corre por las redes sociales alentada por Mosc¨², pero los analistas no le dan validez.
El sabotaje, ocurrido el 26 de septiembre, ha puesto en alerta a los pa¨ªses ribere?os del B¨¢ltico y de la OTAN en su conjunto, que se han apresurado a mejorar la protecci¨®n de sus infraestructuras cr¨ªticas. Los gasoductos Nord Stream han sido protagonistas de intensas tensiones geopol¨ªticas desde mucho antes de la invasi¨®n rusa de Ucrania. La decisi¨®n de Mosc¨² de usar los hidrocarburos como arma contra Europa y a modo de represalia por las sanciones occidentales deriv¨® en la interrupci¨®n del suministro de gas hacia pa¨ªses muy dependientes de ¨¦l, como Alemania.
El Nord Stream 1 llevaba sin transportar gas desde finales de agosto, tras alegar Mosc¨² una fuga de aceite en la ¨²nica estaci¨®n compresora rusa que a¨²n operaba. El Nord Stream 2 nunca lleg¨® a entrar en funcionamiento. Alemania suspendi¨® su certificaci¨®n en febrero, tres d¨ªas antes de que Rusia iniciara la invasi¨®n de Ucrania, en respuesta al reconocimiento por parte de Putin de la independencia de las regiones separatistas prorrusas.
Tanto Suecia como Dinamarca, pa¨ªses en cuya zona econ¨®mica se produjeron las explosiones, como Alemania, receptora del gas ruso, llevan a cabo sus propias investigaciones. Hay colaboraci¨®n entre pa¨ªses, pero la propuesta alemana de crear un equipo conjunto fue rechazada por Suecia por las implicaciones que tendr¨ªa para la seguridad nacional, inform¨® la revista Der Spiegel. En un momento de m¨¢xima tensi¨®n en la regi¨®n, nadie quiere arriesgarse a compartir informaci¨®n confidencial con terceros pa¨ªses.
Los expertos creen que un ataque de esta complejidad solo ha podido llevarse a cabo de la mano de un ¡°actor estatal¡±, es decir, contando con los medios y el an¨¢lisis de un ej¨¦rcito o una agencia de inteligencia. Solo Ucrania y Polonia han apuntado directamente a Rusia. El jefe de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa, Fatih Birol, asegur¨® que es ¡°muy obvio¡± qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de las fugas, pero no lleg¨® a mencionar a Mosc¨². Analistas especializados y fuentes europeas y de la Alianza coinciden en que el sabotaje es un ejemplo claro de guerra h¨ªbrida, con ataques a infraestructuras f¨ªsicas que pretenden desestabilizar y provocar el caos y que nunca van a ser reconocidos, precisamente para poder generar confusi¨®n y teor¨ªas alternativas sin fin.
Estas ¡°amenazas h¨ªbridas¡± preocupan a los ministros del Interior del G-7, que se reunieron este viernes en Eltville (oeste de Alemania) para tratar cuestiones de seguridad derivadas de la invasi¨®n rusa de Ucrania. ¡°Las amenazas h¨ªbridas a nuestras infraestructuras cr¨ªticas, adem¨¢s de la manipulaci¨®n de la informaci¨®n han aumentado significativamente desde el inicio de la guerra de agresi¨®n de Rusia contra Ucrania¡±, asegura la declaraci¨®n final. La ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, asegur¨® que se ha detectado un incremento llamativo de la desinformaci¨®n y la propaganda rusas que tiene el objetivo claro de socavar la confianza en las instituciones y sembrar la divisi¨®n dentro de los pa¨ªses y entre los aliados internacionales.
El Kremlin ha asegurado este viernes que el hallazgo de Suecia ¡°confirma de nuevo las informaciones rusas¡± y ha insistido, a trav¨¦s de su portavoz, Dimitri Peskov, en que es necesario localizar ¡°a los que estuvieron detr¨¢s de esta explosi¨®n¡±. Vlad¨ªmir Putin ha descrito repetidamente el incidente como un ataque terrorista, sugiriendo que Estados Unidos, Polonia y Ucrania est¨¢n detr¨¢s. Otras veces ha hablado de la responsabilidad de ¡°pa¨ªses anglosajones¡±.
Mosc¨² todav¨ªa habla de la posibilidad de recuperar el gasoducto. Poco despu¨¦s del sabotaje la estatal rusa Gazprom sugiri¨® a Alemania que podr¨ªa enviarle de nuevo gas por el ¨²nico ramal del Nord Stream 2 que no result¨® da?ado en el sabotaje. Berl¨ªn, que ha reducido su dependencia del gas ruso del 55% al 9% y pretende rebajarla a cero, lo descarta completamente.
La investigaci¨®n de la Fiscal¨ªa sueca no ofrece informaci¨®n sobre el tipo de explosivo empleado, algo que podr¨ªa dar pistas sobre la autor¨ªa. El comunicado agrega que ¡°el trabajo contin¨²a para poder alcanzar conclusiones m¨¢s determinantes sobre el incidente¡±. Las pesquisas en Dinamarca tampoco han divulgado este tipo de datos. Las autoridades daneses confirmaron que se produjeron ¡°fuertes explosiones¡± y el diario sueco Expressen ha publicado im¨¢genes grabadas con un dron submarino en las que se aprecia que faltan hasta 50 metros de la tuber¨ªa. De la investigaci¨®n alemana no ha trascendido nada todav¨ªa.
Los gobiernos de Dinamarca y Suecia informaron el 27 de septiembre de que los conductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2, infraestructuras destinadas al transporte de gas desde el noroeste de Rusia hasta Alemania, hab¨ªan sufrido da?os y presentaban fugas en sus aguas territoriales. Horas antes, los sism¨®grafos de la isla danesa de Bornholm hab¨ªan detectado dos explosiones en la zona. Las dos infraestructuras estaban ya entonces fuera de servicio, pero llenas de gas.
La empresa operadora del Nord Stream, Nord Stream AG, indic¨® tras los sucesos de septiembre que los da?os sufridos por tres de los conductos ¡°no tienen precedentes¡±. Las autoridades de Alemania, Dinamarca y Suecia han excluido a Rusia de las investigaciones sobre lo ocurrido, lo que ha desembocado en una protesta formal de Mosc¨², que ha advertido que no reconocer¨¢ el resultado de ning¨²n informe en el que no haya participado.
El Nord Stream protagoniza hace a?os un delicado conflicto geoestrat¨¦gico que ha dividido a la Uni¨®n Europea y enfadado a Estados Unidos. Polonia y los b¨¢lticos siempre advirtieron a Alemania ¡ªprimero al canciller Gerhard Schr?der y luego a Angela Merkel¡ª de que el gasoducto era un tent¨¢culo m¨¢s de la influencia de Mosc¨² y de que no era buena idea aumentar la dependencia energ¨¦tica de los hidrocarburos rusos. Washington impuso sanciones pero ni eso detuvo la construcci¨®n del segundo gasoducto. La instalaci¨®n estaba terminada y lista para empezar a bombear gas cuando el canciller alem¨¢n Olaf Scholz la par¨® d¨ªas antes de la invasi¨®n de Ucrania.
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