El ¡°milagro econ¨®mico¡± de Bolivia se agrieta
El Banco Central sufre una escasez de d¨®lares agravada por la repentina demanda de la poblaci¨®n, que hace largas filas para comprar divisas
Largas colas se han formado los ¨²ltimos d¨ªas ante las ventanillas abiertas por el Banco Central de Bolivia (BCB) para vender d¨®lares al p¨²blico. Su personal atiende de 7 de la ma?ana a 9 de la noche, pero no da abasto porque los bancos no tienen d¨®lares suficientes y en las casas de cambio los hay un d¨ªa s¨ª otro no. En las calles de las principales ciudades se pueden encontrar cantidades peque?as a un precio algunos centavos mayor que el oficial, que es de 6,89 bolivianos por d¨®lar. El Gobierno asegura que se trata de una ¡°situaci¨®n transitoria¡± y sin mucha importancia. Los economistas de oposici¨®n consideran que la escasez de d¨®lares prueba sus tesis sobre la poca solidez del ¡°milagro econ¨®mico¡± boliviano, como lo llam¨® la prensa internacional en 2014.
Todo comenz¨® con la ca¨ªda de las reservas de d¨®lares que el BCB posee en efectivo, que pasaron de 620 millones el 24 de enero a 372 millones el 8 de febrero. Este monto no representa el total de las reservas internacionales del pa¨ªs, que son de 3.538 millones de d¨®lares, sino solamente las de disponibilidad inmediata; el resto se encuentra invertido en oro y otros activos.
Tras el revuelo que la cifra caus¨® en la prensa, el BCB decidi¨® comprar d¨®lares a los exportadores a un precio ¡°especial¡±, un poco m¨¢s alto, de 6,95 bolivianos. Se comenz¨® a hablar de la ¡°desesperaci¨®n¡± de las autoridades econ¨®micas por conseguir d¨®lares y entonces se produjo lo que estas han descrito como una ¡°demanda inusitada y especulativa¡± de divisas. Como suele ocurrir durante estos fen¨®menos, cada nuevo evento, incluso las medidas oficiales, amplificaron la preocupaci¨®n y la demanda de d¨®lares. Contribuy¨® a ello, en especial, que el fiscalizador gubernamental de los bancos amenazara con procesar a quienes fueran descubiertos especulando con divisas.
Desde entonces, el BCB est¨¢ inyectando d¨®lares al mercado, pero las cantidades de las que ha podido disponer no han conseguido tranquilizarlo completamente. Su decisi¨®n de vender directamente las divisas en sus oficinas est¨¢ generando colas que dan lugar a que el tema se trate diariamente en los medios de comunicaci¨®n. El nivel exacto en el que se encuentran las reservas no ha sido publicado.
Trascendi¨® que el Gobierno est¨¢ esperando que Argentina pague 600 millones de d¨®lares que le debe por compras de gas natural. Tambi¨¦n est¨¢ apresurando la aprobaci¨®n parlamentaria de varios pr¨¦stamos del Banco Interamericano de Desarrollo y otros organismos multilaterales, que encuentra dificultades por la divisi¨®n de la bancada oficialista en la Asamblea Legislativa en dos facciones, una que apoya a al presidente Luis Arce y otra que sigue al jefe del Movimiento al Socialismo (MAS), Evo Morales.
Las escasez de d¨®lares no ha creado hasta ahora grandes turbulencias financieras por varias razones: el Gobierno ha descartado completamente una devaluaci¨®n que cambie el sistema de cambio fijo que est¨¢ vigente en Bolivia desde 2011; la inflaci¨®n es baja ¨Cel a?o pasado Bolivia brill¨® por tener una inflaci¨®n de algo m¨¢s del 3% interanual, la menor de la regi¨®n¨C, y alrededor del 90% de los dep¨®sitos y cr¨¦ditos est¨¢n nominados en moneda nacional. Este ¨²ltimo es uno de los grandes logros del modelo econ¨®mico montado por Morales, como presidente del pa¨ªs durante una d¨¦cada y media, y por Arce, como su ministro de Econom¨ªa.
La mayor¨ªa de los economistas considera que, mientras la poblaci¨®n no saque sus dep¨®sitos en bolivianos de los bancos para tratar de cambiarlos por d¨®lares ¨Calgo que no tiene necesidad de hacer dada la baja inflaci¨®n¨C, entonces el riesgo de que se produzca una crisis financiera es limitado. ¡°El hecho de la cartera de cr¨¦ditos y los dep¨®sitos est¨¦n en bolivianos es una fortaleza importante, eso es fundamental¡±, declar¨® el analista Jaime Dunn al diario El Deber.
Lo que ha tensado las clavijas del modelo econ¨®mico izquierdista boliviano ha sido el crecimiento en valor y volumen de las importaciones de combustibles, que en 2022 llegaron a ser de 4.200 millones de d¨®lares, el 32% de las importaciones totales. Al mismo tiempo, las exportaciones de gas solo fueron de 3.400 millones de d¨®lares, lo que convirti¨® al pa¨ªs, despu¨¦s de muchas d¨¦cadas, en importador de hidrocarburos. Esta nueva realidad se debe al agotamiento de los yacimientos y la consiguiente disminuci¨®n de la producci¨®n de gas, que cay¨® un tercio desde 2014.
La oposici¨®n critica al MAS por haber cobrado demasiados impuestos a las empresas petroleras y haber bloqueado, con ello, las inversiones en exploraci¨®n de nuevos yacimientos.
Arce ha defendido siempre que el modelo boliviano no se basaba en el comercio exterior, sino en la fortaleza de la demanda interna, que hab¨ªa sido lograda con medidas como la ¡°bolivianizaci¨®n¡± de las operaciones bancarias. Sin embargo, como todos los pa¨ªses que comercian en monedas extranjeras, Bolivia necesita exportar el valor necesario para poder financiar sus importaciones. Y estas se han elevado mucho, justamente por el impulso a la demanda interna.
El presidente boliviano lo sab¨ªa y ten¨ªa la situaci¨®n bajo control, pese al debilitamiento de las exportaciones de gas, pero se le cruz¨® en el camino la guerra en Ucrania y la crisis energ¨¦tica mundial, que cambiaron la magnitud de las necesidades de d¨®lares del pa¨ªs. Simult¨¢neamente, los efectos de la guerra encarecieron el d¨®lar y est¨¢n llevando los capitales latinoamericanos, entre ellos los bolivianos, al norte, donde las tasas de inter¨¦s suben significativamente.
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