La crisis econ¨®mica en Bolivia pasa la factura al presidente Luis Arce
El pol¨ªtico de izquierda ya no es el favorito de los sondeos para las presidenciales de 2025
El presidente Luis Arce ya no es el pol¨ªtico boliviano m¨¢s popular. Pierde pie en las encuestas por causa de la crisis econ¨®mica del pa¨ªs, cuya existencia el mandatario niega, pero que el 80% de los bolivianos considera una realidad. Tambi¨¦n lo perjudican los casos de corrupci¨®n dentro de su Gobierno. Un estudio que acaba de aparecer se?ala que no ser¨ªa el mejor candidato de la izquierda en las elecciones de 2025, de acuerdo a los electores de esta corriente. El oficialismo se?al¨® que se trata de ¡°un mal momento y pasar¨¢¡±.
¡°Somos la econom¨ªa m¨¢s estable, el sistema financiero est¨¢ totalmente estable, los indicadores financieros de solvencia y liquidez que tiene el sistema financiero son buenos, no hay duda al respecto¡±, se jact¨® hace un mes Arce en una entrevista televisiva. La ¨²ltima de las encuesta que publica peri¨®dicamente el diario P¨¢gina Siete, que se consideran cr¨ªticas con el Gobierno, encontr¨® que la gente no le cree: 44% de los bolivianos piensa que hay una ¡°crisis econ¨®mica fuerte¡± y 38%, una ¡°crisis moderada¡±. Y solo el 31% cree que Arce tiene la capacidad de resolverla. Entre los esc¨¦pticos est¨¢n, de acuerdo a este sondeo, un 20% de votantes del presidente boliviano en las elecciones que gan¨® por mayor¨ªa absoluta en 2020.
Es posible que los desilusionados sean simpatizantes del expresidente Evo Morales, que ya no respalda a Arce, pese a que este fue electo con los colores del Movimiento al Socialismo (MAS), que Morales dirige. Otro estudio de la empresa Diagnosis indica que la aprobaci¨®n de la gesti¨®n del mandatario cay¨® desde su mejor momento, a mediados del a?o pasado y que ahora, con un 37%, es diez puntos menor que entonces. La encuesta muestra que esta p¨¦rdida de posiciones est¨¢ relacionada con la aparici¨®n de un grupo demogr¨¢fico (de alrededor del 16% de la poblaci¨®n) que se manifiesta ¡°indiferente¡± respecto a la gesti¨®n gubernamental. Este grupo no sale de los sectores sociales tradicionalmente opositores al MAS, que son las clases medias acomodadas del pa¨ªs, sino de los segmentos menos educados y m¨¢s pobres del electorado que constantemente ha votado por el MAS. De ah¨ª que Diagnosis considere que se trata de ¡°evistas¡± que han dejado de apoyar al Gobierno.
La divisi¨®n de la izquierda boliviana en dos alas comenz¨® por el antagonismo entre Morales y Arce respecto a la forma en que el segundo deb¨ªa gobernar y con qui¨¦n deb¨ªa hacerlo. El fondo del conflicto reside en que Morales, que ya ha sido presidente de Bolivia tres veces, quiere volver al poder en 2025, mientras que Arce tambi¨¦n acaricia el sue?o de su reelecci¨®n. Las agresiones mutuas entre ambas alas han sido tantas y tan fuertes que una reconciliaci¨®n resulta muy improbable, pese a que, seg¨²n las cifras de los sondeos, si las elecciones fueran ahora, la oposici¨®n ganar¨ªa ampliamente frente a las dos facciones del MAS.
Lo dif¨ªcil para la corriente opositora ser¨¢ encontrar la forma de definir un candidato ¨²nico. Aunque la ley boliviana establece la obligaci¨®n de realizar primarias, pocos piensan que esta ser¨¢ la forma de resolver la fragmentaci¨®n oficialista y opositora. En Bolivia no existe la tradici¨®n pol¨ªtica de acudir a las urnas para resolver asuntos partidarios. De acuerdo a la encuesta de P¨¢gina Siete, si de todas maneras eso ocurriera, Arce perder¨ªa frente a Morales en la primaria del MAS.
Los l¨ªderes m¨¢s conocidos de la oposici¨®n no aparecen en buenas posiciones en los sondeos. En cambio, se detecta el deseo de la poblaci¨®n de que aparezca una figura nueva que renueve las alternativas para salir del ciclo de gobiernos izquierdistas que comenz¨® en 2006. En este momento, el opositor con mayor intenci¨®n de voto es Luis Fernando Camacho, el gobernador de Santa Cruz que se halla preso en una instituci¨®n carcelaria de La Paz. Est¨¢ acusado por su participaci¨®n en el derrocamiento de Evo Morales, que ¨¦l considera puramente pol¨ªtica, pero que el MAS califica como conspirativa y criminal.
Desde Santa Cruz, Camacho dirigi¨® las protestas que enmarcaron la renuncia de Morales el 10 de noviembre de 2019. Se lo considera el ¡°Bolsonaro boliviano¡± y su elevaci¨®n en las encuestas se debe a su situaci¨®n personal, pero tambi¨¦n coincide con las tendencia regional y mundial de fortalecimiento de las opciones de ultraderecha
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