El horror de tres menores peruanos explotados por sus hermanos para producir pornograf¨ªa infantil

Todo comenz¨® con una alerta que recibi¨® el Centro Nacional para Ni?os Desaparecidos y Explotados (NCMEC por sus siglas en ingl¨¦s), una ONG estadounidense, en febrero pasado: a trav¨¦s de una denuncia realizada a trav¨¦s de internet, se detect¨® que en Lima un usuario ¡ªregistrado con un correo de Gmail y asociado a dos n¨²meros telef¨®nicos¡ª distribu¨ªa y comercializaba material con contenido de abuso sexual infantil en diversas plataformas digitales. El caso se deriv¨® a la Fiscal¨ªa Especializada de Trata de Personas de Lima, que desde entonces trabaj¨® en conjunto con el Departamento de Ciberprotecci¨®n Infantil de la Divisi¨®n de Investigaci¨®n de Delitos de Alta Tecnolog¨ªa (DIVINDAT) de la Polic¨ªa Nacional de Per¨² y tambi¨¦n con la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (HSI por sus siglas en ingl¨¦s).

Los seis meses de seguimiento dieron como fruto un cuadro escalofriante: seg¨²n las pesquisas, un ni?o de 6 a?os, una ni?a de 10 y una adolescente de 16 eran explotados por un grupo de adultos, quienes grababan las vejaciones y las difund¨ªan en grupos de WhatsApp y Telegram a cambio de elevadas sumas de dinero. El detalle es que todo indicaba que los presuntos agresores eran parientes directos de las v¨ªctimas: sus medios hermanos.

Las sospechas se confirmaron el mi¨¦rcoles de esta semana, en un megaoperativo que ha convulsionado a la sociedad. Las fuerzas de seguridad allanaron una humilde vivienda en el distrito de Lur¨ªn, al sur de Lima. En medio de un hogar en desorden absoluto, que seg¨²n la investigaci¨®n emanaba un olor desagradable, los agentes rescataron a los tres menores de edad y detuvieron a Johan Jos¨¦ Mar¨ªa Del Mar La Rosa y Jim Anthony Chumpitaz La Rosa, de 20 y 31 a?os, respectivamente. Ambos son investigados por los presuntos delitos de pornograf¨ªa infantil agravada, en perjuicio de menores de edad. Permanecer¨¢n detenidos durante una semana, junto a un tercer integrante, de 36 a?os, cuyo nombre no ha sido revelado, que fue detenido posteriormente y al que se le hall¨® un celular con contenido pornogr¨¢fico de menores.

¡°Los ni?os han estado completamente abandonados. No han ido ni siquiera al colegio¡±, cont¨® uno de los altos mandos policiales. La madre de las v¨ªctimas ha negado tener conocimiento alguno de los abusos que se comet¨ªan en su casa. Sostiene que no sol¨ªa acudir nunca al hogar, porque deb¨ªa rebusc¨¢rselas en la calle, reciclando pl¨¢sticos, cartones y metales. Del padre no se tiene noticias.

¡°Nosotros tenemos entendido que una de las ni?as ya le hab¨ªa comentado a su familia, en mayo de este a?o, que hab¨ªa sufrido violencia sexual, por lo que ya ten¨ªan conocimiento¡±, la ha desmentido el comandante Jimmy C¨¢ceres, de la Divisi¨®n de Investigaci¨®n Criminal (Dirincri). Un hecho que ha consternado todav¨ªa m¨¢s a la poblaci¨®n es que la menor de 16 a?os est¨¢ embarazada. ¡°Se presume que el padre ser¨ªa uno de los hermanos¡±, sostiene C¨¢ceres.

Como ha explicado la fiscal especializada en delito de trata de personas, Evelyn Taboada, los hermanos Del Mar La Rosa y Chumpitaz La Rosa publicaban el material pornogr¨¢fico en grupos cerrados con suscripciones mensuales a usuarios de diversos pa¨ªses. Por ello no se descarta que ambos sean un eslab¨®n de una red de pedofilia internacional. ¡°En estos d¨ªas, la fiscal a cargo de la investigaci¨®n est¨¢ recabando todas las evidencias que ha incautado en el lugar de los hechos. No se descarta que en ella se pueda encontrar m¨¢s n¨²meros vinculados, m¨¢s cuentas y m¨¢s tel¨¦fonos¡±, ha informado Roc¨ªo Gala, coordinadora de las Fiscal¨ªas Especializadas en Trata de Personas.

Se estima que los packs de fotos podr¨ªan superar los cien d¨®lares. ¡°Mientras va subiendo la edad de la v¨ªctima, el precio va bajando. Si se trata de un menor de cuatro a?os, es mucho m¨¢s caro¡±, explica el coronel Luis Huam¨¢n, jefe de la DIVINDAT. Uno de los prop¨®sitos de los agentes es recuperar evidencia que probablemente haya sido borrada por los detenidos en sus celulares y dispositivos electr¨®nicos.

Mientras tanto, los tres menores de edad est¨¢n recibiendo el apoyo de la Unidad de Protecci¨®n Especial (UPE), un organismo del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), que est¨¢n evaluando medidas de protecci¨®n. En breve podr¨ªan ser trasladados a alg¨²n albergue temporal o tambi¨¦n a alg¨²n entorno familiar seguro. Lo principal, por ahora, es separarlos de cualquier situaci¨®n que los ponga en peligro nuevamente.

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