Meloni resucita su cruzada contra las ONG de rescate a migrantes

Giorgia Meloni ha roto la fugaz tregua que parec¨ªa haber alcanzado con las organizaciones no gubernamentales (ONG) de salvamento humanitario y ha vuelto a la carga contra ellas por rescatar a migrantes en el Mediterr¨¢neo. La primera ministra italiana ha reactivado las sanciones y las multas contra los barcos de estas organizaciones, despu¨¦s de haberles pedido ayuda para asistir a las personas que quedaban a la deriva en el mar. Roma recurri¨® a ellas en las ¨²ltimas semanas debido a un aumento del n¨²mero de llegadas, ante las que los guardacostas italianos, sin medios humanos y t¨¦cnicos suficientes, no daban abasto para gestionar solos la situaci¨®n.

En los ¨²ltimos d¨ªas, el Gobierno liderado por la ultraderechista ha inmovilizado administrativamente a tres barcos de diferentes ONG, que ahora tendr¨¢n que permanecer en puerto 20 d¨ªas, en una medida que ha sido muy criticada por la oposici¨®n. Adem¨¢s, las ONG deber¨¢n pagar una multa por actuar, supuestamente, al margen de la nueva ley italiana que regula las operaciones de salvamento, a pesar de que las propias autoridades les hayan dado instrucciones en repetidas ocasiones que contradicen esa normativa.

Las sanciones impuestas recientemente a las ONG en los ¨²ltimos d¨ªas han sido muy criticadas por la oposici¨®n. La secretaria del Partido Democr¨¢tico, Elly Schlein, ha acusado al Gobierno de Meloni de ¡°haber convertido la solidaridad en un delito¡± y de actuar de manera ¡°inhumana¡±. ¡°Multan a las ONG porque han salvado a demasiadas personas en el mar, ?qu¨¦ iban a hacer con las dem¨¢s [por los segundos y terceros rescates], dejar que se ahogaran?¡±, ha lanzado la l¨ªder de la oposici¨®n. La primera ministra ha respondido se?alando que su Ejecutivo se limita a ¡°aplicar leyes y principios que siempre han existido en todos los Estados, porque no est¨¢ permitido facilitar la inmigraci¨®n ilegal y favorecer directa o indirectamente el tr¨¢fico de seres humanos¡±.

Es el caso de la ONG espa?ola Open Arms. En agosto, su barco ha participado en numerosas operaciones coordinadas por la Guardia Costera italiana y ha realizado rescates m¨²ltiples, es decir, ha socorrido a varias embarcaciones en la misma traves¨ªa antes de dirigirse a puerto, siguiendo indicaciones de las autoridades mar¨ªtimas italianas. Aunque el reglamento aprobado por Meloni a inicios de a?o dice justo lo contrario: que debe realizarse un ¨²nico operativo por traves¨ªa para regresar a puerto inmediatamente despu¨¦s.

Embargo y multa a Open Arms

El Ejecutivo italiano ha impuesto esta semana a la ONG un embargo administrativo de 20 d¨ªas para el barco y una multa de hasta 10.000 euros por sacar del mar a 196 personas en tres operaciones diferentes durante su ¨²ltima misi¨®n. La organizaci¨®n se ha defendido asegurando que despu¨¦s del primer salvamento, cuando se dirig¨ªan al puerto asignado por Italia, que se encontraba a cuatro d¨ªas de navegaci¨®n, recibieron un aviso que alertaba de dos embarcaciones en peligro cerca de su posici¨®n y se dirigieron al lugar.

Al poco tiempo, Italia les pidi¨® que abandonaran la b¨²squeda y continuaran hacia el puerto, alegando que ¡°las autoridades competentes estaban encarg¨¢ndose del caso¡±. El barco espa?ol afirma en un comunicado que pregunt¨® detalles como la hora de llegada de la asistencia y, al no obtener respuesta, se dirigi¨® a la posici¨®n en la que se encontraban las barcazas en peligro, siguiendo ¡°lo exigido por los convenios internacionales y el derecho mar¨ªtimo internacional¡±. Al llegar, socorri¨® a 132 personas. ¡°En las m¨¢s de dos horas que dur¨® el rescate no se present¨® all¨ª ninguna autoridad, confirmando que una vez m¨¢s eran vidas abandonadas a la deriva¡±, reprocha la ONG. Y denuncia que, durante el ¨²ltimo mes, ¡°el mismo remolcador ha salvado en varias operaciones a 734 personas y ha prestado asistencia a otras 540, todo bajo la coordinaci¨®n directa de la Guardia Costera italiana¡±.

Hace unas semanas, los guardacostas italianos, ante decenas de embarcaciones precarias cargadas de migrantes en apuros en alta mar e ¡°incapaces de atender solos todas las demandas de auxilio¡± pidieron ayuda a la ONG espa?ola, que siguiendo sus instrucciones llev¨® a cabo siete operaciones de rescate y 18 de asistencia en un solo d¨ªa. ¡°Las embarcaciones humanitarias quedan a merced de decisiones arbitrarias y completamente inconstitucionales, en ocasiones actuando en reemplazo de la Guardia Costera y en otras como objeto de multas y detenciones¡±, ha protestado la ONG. Y ha criticado tambi¨¦n la normativa de Meloni y sus contradicciones. ¡°Un decreto que obstaculiza el salvamento de vidas no puede ser considerado leg¨ªtimo. Esta afirmaci¨®n es a¨²n m¨¢s cierta cuando es reiteradamente transgredido por las mismas autoridades que deber¨ªan velar por su cumplimiento¡±, ha dicho.

En 2023, las llegadas de migrantes a Italia a trav¨¦s del mar Mediterr¨¢neo han registrado un repunte considerable. Hasta el 24 de agosto, llegaron 106.000 personas, m¨¢s del doble que en el mismo periodo de 2022 y casi el triple que en 2021. Entre junio y agosto, las ONG hab¨ªan llevado a cabo decenas de operaciones que, de forma un tanto inesperada, hab¨ªan sido solicitadas por las propias autoridades italianas, probablemente obligadas por las circunstancias cr¨ªticas y el volumen de llegadas.

El cambio de enfoque del Gobierno italiano es evidente. Tanto que tuvo que negar que se tratara de una colaboraci¨®n sistem¨¢tica con las ONG. El subsecretario de Interior, Nicola Molteni, aclar¨® que la cooperaci¨®n con los barcos humanitarios representaba solamente ¡°casos aislados¡±, que se hab¨ªan producido ¡°una, dos o como m¨¢ximo tres veces¡± y que ¡°no son ni se convertir¨¢n en regla¡±.

En los ¨²ltimos d¨ªas, el Ejecutivo que encabeza Meloni parece haber vuelto a aplicar estrictamente las leyes con el objetivo de disuadir a las ONG.

Las autoridades han confiscado tambi¨¦n el barco Aurora, de la ONG alemana Sea Watch, que deber¨¢ pagar una multa de entre 2.500 y 10.000 euros despu¨¦s de desembarcar a 72 personas en el puerto de Lampedusa, contraviniendo las instrucciones del Gobierno, que le hab¨ªa asignado el puerto de Trapani, en Sicilia. La ONG advirti¨® de que les resultaba imposible llegar hasta all¨ª, ya que no ten¨ªan agua, ni comida, ni carburante suficiente. Entonces, Roma les indic¨® que se dirigieran a T¨²nez, un lugar que no se considera puerto seguro, que carece de sistema de acogida, donde se han registrado persecuciones y deportaciones y donde las organizaciones denuncian que no se respetan los derechos humanos de los migrantes.

La portavoz de esta ONG, Giorgia Linardi, se?ala en un art¨ªculo publicado por el diario La Stampa que el bloqueo de los barcos de las ONG es ¡°un mero movimiento propagand¨ªstico¡± del Gobierno, ¡°utilizado como arma de distracci¨®n masiva por la incapacidad de frenar las salidas, como hab¨ªan anunciado durante la campa?a electoral¡±. Recuerda tambi¨¦n que ¡°solo el 4,5% de las personas que han desembarcado en 2023 fueron auxiliadas por ONG¡±. Y apunta: ¡°El Gobierno lo sabe, pero le preocupa que, tras ensalzar el bloqueo naval contra los migrantes, se registre ahora el pico de llegadas m¨¢s alto en a?os, a pesar de un Ejecutivo hiperactivo en materia migratoria, con una sucesi¨®n de iniciativas nacionales y supranacionales, que, por ahora, se han quedado en papel mojado¡±.

Las autoridades italianas tambi¨¦n han sancionado con 20 d¨ªas de detenci¨®n y 3.000 euros de multa al barco de la ONG alemana Sea-Eye despu¨¦s de desembarcar a 114 personas en Salerno recogidas de tres operaciones. ¡°Si no lo hubi¨¦ramos hecho, la gente habr¨ªa perdido la vida¡± ha explicado en un comunicado Gorden Isler, presidente de la organizaci¨®n. Adem¨¢s, ha denunciado que cuando llegaron a la zona del tercer rescate encontraron a cuatro migrantes que hab¨ªan perdido el conocimiento dentro de la precaria embarcaci¨®n en la que viajaban. ¡°Para las autoridades no son razones suficientes. M¨¢s de 2.100 personas han muerto ya este a?o al intentar cruzar el Mediterr¨¢neo para buscar refugio en Europa¡±, ha protestado Isler.

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