Hacinamiento y esperas eternas en una Lampedusa con m¨¢s migrantes que residentes

Una l¨ªnea recta de apenas unos metros de ancho en el mar, en medio del puerto, traza una especie de frontera imaginaria entre las dos realidades de Lampedusa. A un lado, hay una hilera embarcaciones de recreo, con los cascos blancos brillantes e impolutos. En algunas se escucha m¨²sica alegre y entran y salen sin parar turistas en ba?ador con copas en la mano. Al otro, se hacina una pila de barcazas vac¨ªas, algunas de metal oxidadas y otras de madera, todas estropeadas y castigadas por el agua. En este lado destacan las sirenas de las ambulancias y se percibe el traj¨ªn de los sanitarios y los voluntarios de organizaciones humanitarias que van de un lado para otro con mantas t¨¦rmicas de emergencia.

Los desembarcos de migrantes en Lampedusa, aunque se han reducido considerablemente en los ¨²ltimos dos d¨ªas, no cesan. La tarde del viernes, decenas de migrantes reci¨¦n llegados a la isla esperaban en el muelle bajo un sol que abrasaba, con una expresi¨®n a caballo entre la desesperaci¨®n y la resignaci¨®n, a recibir asistencia y a ser trasladados al centro de acogida. Mientras tanto, un barco de las Fuerzas Armadas italianas desembarcaba a otro nutrido grupo que hab¨ªa rescatado en el mar. Tras el pico de llegadas, las autoridades no dan abasto para contar las llegadas. La noche del jueves al viernes llegaron algo m¨¢s de 200 migrantes.

Las autoridades y decenas de voluntarios trabajan a destajo para recuperar la normalidad, que todav¨ªa parece lejana, despu¨¦s de los r¨¦cords registrados a mediados de esta semana, cuando, en apenas cuatro d¨ªas, llegaron a Lampedusa cerca de 12.000 migrantes a trav¨¦s del mar. La peque?a isla, de apenas 6.000 habitantes y que est¨¢ m¨¢s cerca de ?frica que de Italia, nunca hab¨ªa visto cifras as¨ª. ¡°Es el valor m¨¢s alto nunca registrado. En cuatro d¨ªas ha llegado el mismo n¨²mero de migrantes que en todo 2019 a toda Italia (11.471)¡±, se?ala el investigador Matteo Villa, investigador del Instituto de Estudios de Pol¨ªtica Internacional (Ispi).

El viernes por la ma?ana, como explica a este diario la Cruz Roja, que gestiona la acogida en Lampedusa, hab¨ªa 3.800 personas en el centro de primera acogida, pensado para identificar a los migrantes y para que pasen el m¨ªnimo tiempo posible en ¨¦l, con una capacidad te¨®rica de 400 hu¨¦spedes. A lo largo del d¨ªa, las autoridades trasladaron a unos 2.500 migrantes a otros centros de acogida de Sicilia y de la pen¨ªnsula. ¡°Los m¨¢s de 130 operarios y voluntarios de la Cruz Roja italiana est¨¢n haciendo m¨¢s all¨¢ de lo imposible para garantizar las necesidades b¨¢sicas de los hu¨¦spedes¡±, subraya el presidente de la organizaci¨®n en Italia, Rosario Valastro. Y explica que el jueves repartieron 5.000 comidas para el almuerzo y otras 5.000 para la cena. ¡°Estamos exhaustos, pero seguimos operativos. Para nosotros lo primero son las personas¡±, se?ala.

Tumultos en el reparto de comida

El centro ha rozado el colapso estos d¨ªas, cuando no hab¨ªa ni espacio ni comida suficiente para tantas personas. En algunos momentos durante el reparto de alimentos se formaron peque?os tumultos y la polic¨ªa carg¨® contra los migrantes. Muchos tuvieron que pedir agua y comida directamente a los habitantes de Lampedusa que les abrieron las puertas de sus casas y les ofrecieron un sustento.

Mohamed, de 15 a?os, procedente de Gambia, se cobija bajo la sombra de un ¨¢rbol junto a sus compatriotas Ibrahim, de 17 a?os, y Buhakar, de 19. ¡°Hace demasiado calor¡±, se lamenta. Las temperaturas estos d¨ªas rondan los 30? en Lampedusa, pero la sensaci¨®n de bochorno es mayor debido a la elevada humedad. Los tres llevan agua y comida en una bolsa de pl¨¢stico que les han dado unos vecinos de la isla.

¡°La gente aqu¨ª es buena, ha tratado de ayudarnos¡±, dice Mohamed t¨ªmidamente. Lleva cuatro d¨ªas en la isla y aunque es menor y viaja solo, las autoridades a¨²n no han gestionado su caso para trasladarlo a un centro de acogida especial para menores no acompa?ados. Los tres relatan que atravesaron Mal¨ª y Argelia y pasaron cerca de un mes en T¨²nez, donde vivieron una ¡°pesadilla¡±, antes de partir hacia Italia, desde Sfax. A Mohamed le gustar¨ªa quedarse en Italia; Ibrahim quiere partir hacia Alemania, y Buhakar, a Francia.

En el puerto, cerca de dos centenares de migrantes se hacinan bajo unas carpas que los protegen del sol mientras esperan que llegue el barco que los trasladar¨¢ a Sicilia. Los que quedan fuera del cobijo de los toldos se resguardan del calor coloc¨¢ndose toallas mojadas en la cabeza. ¡°Llevo cuatro d¨ªas sin comer¡±, protesta Mihaid, de 23 a?os, procedente de Liberia y que lleg¨® a Lampedusa el domingo pasado, procedente de T¨²nez. ¡°Hace demasiado calor aqu¨ª, esto es desesperante, estoy feliz por estar en Europa, pero quiero irme ya de aqu¨ª¡±, dice. Y relata que planea quedarse en Italia y estudiar, ¡°tal vez en N¨¢poles¡±. Voluntarios de la Cruz Roja les reparten bocadillos y agua antes de embarcar y se crean unos instantes de tensi¨®n cuando piensan que de nuevo no va a haber comida para todos, pero esta vez las reservas s¨ª llegan para alimentar al grupo completo.

El traj¨ªn es constante en Lampedusa. En el centro de primera acogida, vallado y vigilado por el ej¨¦rcito italiano, entran y salen polic¨ªas acompa?ando a grandes grupos de migrantes. A unos los llevan a los autobuses que van para el puerto donde deber¨¢n embarcar hacia otros centros de acogida fuera de la isla y a otros los escoltan en el camino inverso para identificarlos en el centro.

Desde una colina cercana se vislumbran grandes grupos de personas que deambulan por el interior, algunos hacen fila para recibir comida o instrucciones, otros se sientan en el suelo como pueden a descansar, muchos se resguardan en las pocas sombras que hay. De las ventanas de la estructura cuelga ropa tendida, el murmullo es constante y apenas se aprecian espacios vac¨ªos.

Tensi¨®n pol¨ªtica

Fuera de la isla, la tensi¨®n migratoria ha sacudido a la pol¨ªtica y ha traspasado las fronteras italianas. El Gobierno italiano, encabezado por la ultraderechista Giorgia Meloni, ha asignado recientemente 45 millones de euros a Lampedusa para ayudar a la isla a gestionar la situaci¨®n migratoria. Pero ante un repunte tan excepcional de las llegadas, queda patente la falta de recursos para hacer frente a la situaci¨®n. La primera ministra, elegida hace un a?o con la promesa de poner fin a la migraci¨®n masiva, ha pedido ayuda a Europa. Meloni ha revelado, a trav¨¦s de un mensaje de v¨ªdeo, que ha invitado a la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, a viajar junto a ella a Lampedusa para constatar la situaci¨®n que se vive en la isla.

La primera ministra italiana tambi¨¦n ha anunciado que el lunes, en un Consejo de Ministros, su Gobierno aprobar¨¢ nuevas medidas migratorias, entre ellas, la creaci¨®n y ampliaci¨®n de nuevos Centros de Identificaci¨®n y Expulsi¨®n, los denominados Cies, para ¡°inmigrantes ilegales¡±, en palabras de Meloni, que ha lanzado un mensaje a los migrantes: ¡°No conviene que os confi¨¦is a los traficantes de personas, que os piden mucho dinero y os colocan en embarcaciones precarias, porque si entr¨¢is ilegalmente en Italia, ser¨¦is retenidos y repatriados¡±.

¡°La migraci¨®n es un reto com¨²n para la Uni¨®n Europea que requiere una respuesta colectiva¡±, hab¨ªa dicho Meloni tambi¨¦n tras una reuni¨®n con el primer ministro h¨²ngaro, Viktor Orb¨¢n. Ha reclamado a sus socios europeos ¡°un mayor compromiso en la lucha contra las redes de tr¨¢fico de seres humanos y una pol¨ªtica de retorno eficaz¡±.

El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha hecho un llamamiento a los pa¨ªses de la UE para que muestren ¡°un esp¨ªritu de responsabilidad compartida y solidaridad con los pa¨ªses de llegada¡±. ¡°Creemos que ha llegado el momento de que otros pa¨ªses, otros Estados, otras regiones, intenten apoyar a los italianos y a los habitantes de Lampedusa¡±, ha se?alado Matthew Saltmarsh, portavoz de ACNUR.

El respaldo a Italia llega tambi¨¦n desde las instituciones europeas. ¡°Italia cuenta con todo nuestro apoyo pol¨ªtico en la cuesti¨®n de Lampedusa, estamos trabajando con Roma desde un punto de vista financiero y operativo¡± ha se?alado la portavoz de la Comisi¨®n Europea, Anitta Hipper, a la televisi¨®n p¨²blica italiana, Rai. La portavoz ha reclamado ¡°solidaridad¡± y ¡°colaboraci¨®n estrecha¡± entre los Estados miembros, despu¨¦s de que Alemania rechazara recibir m¨¢s solicitantes de asilo procedentes de Italia.

Por otro lado, Francia ha mostrado su disposici¨®n a colaborar con Italia para gestionar la emergencia migratoria que ha desbordado Lampedusa.

El presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, que en el pasado ha mantenido tensiones con Meloni a cuenta de la inmigraci¨®n, ha hecho unas declaraciones de apoyo sin fisuras a Roma: ¡°Quiero decir muy sinceramente a todos nuestros amigos italianos que creo que es la responsabilidad de la Uni¨®n Europea, de toda la Uni¨®n Europea, estar al lado de Italia¡±.

El ministro de Interior italiano, Matteo Piantedosi, ha explicado que ha mantenido una conversaci¨®n telef¨®nica con su hom¨®logo franc¨¦s, G¨¦rarld Darmanin, para abordar la cuesti¨®n. ¡°Ambos coincidieron en la necesidad prioritaria de elaborar una estrategia que tenga como objetivo un r¨¢pido refuerzo de la cooperaci¨®n con los pa¨ªses de origen, que pueda incidir eficazmente en el bloqueo de las salidas¡±, ha se?alado el ministro italiano. ¡°Hemos acordado trabajar juntos en el seno de la Uni¨®n Europea en las pr¨®ximas horas para reforzar firmemente la prevenci¨®n de las salidas de inmigrantes y la lucha contra los traficantes de personas¡±, ha explicado Darmanin.

El vicepresidente italiano y l¨ªder de la ultraderechista Liga ha roto el tono conciliador. ¡°A Europa le importa un bledo lo que ocurra en Lampedusa y Ventimiglia. As¨ª que est¨¢ claro que en las ¨²ltimas horas el Gobierno italiano, dejado culpablemente solo por una Europa distra¨ªda, tiene que resolver el problema por s¨ª mismo¡±, ha dicho. Y ha cargado contra el Gobierno alem¨¢n: ¡°Hay instituciones alemanas que dan millones de euros a ONG alemanas para que lleven migrantes a Italia¡±.

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