La victoria laborista en una circunscripci¨®n de Escocia apunta a un posible vuelco electoral en el Reino Unido

La arrolladora victoria del Partido Laborista en las elecciones parciales celebradas este jueves en la circunscripci¨®n escocesa de Rutherglen y Hamilton, cuyo esca?o qued¨® vacante despu¨¦s de que la diputada Margaret Ferrier fuera expulsada por saltarse las reglas del confinamiento, ha inyectado de optimismo al principal partido de la oposici¨®n. El candidato laborista, Michael Shanks, ha obtenido m¨¢s del doble de votos que la candidata del Partido Nacional Escoc¨¦s (SNP, en sus siglas en ingl¨¦s), Katy Loudon. Un 58,6% de los apoyos frente a un 27,6%, respectivamente. El Partido Conservador apenas ha ara?ado un testimonial 3,9%, que confirma la irrelevancia de los tories en territorio escoc¨¦s.

El valor de este resultado deriva de su proyecci¨®n en unas hipot¨¦ticas elecciones generales previstas, como muy tarde, para enero de 2025. Hubo un tiempo no muy lejano en que Escocia era dominio absoluto del laborismo, y los resultados en ese territorio serv¨ªan para consolidar mayor¨ªas en todo el Reino Unido. En las elecciones generales de 2010, con Gordon Brown al frente del partido, los laboristas se hicieron con 41 de los 59 diputados que aporta Escocia al Parlamento de Westminster. En 2019, con Jeremy Corbyn como l¨ªder del laborismo, obtuvieron un diputado.

Durante todo ese tiempo, el independentismo escoc¨¦s, impulsado primero por el carism¨¢tico Alex Salmon, y reforzado despu¨¦s por su sucesora, Nicola Sturgeon, arrebat¨® a la izquierda nacional los votos y conquist¨® pr¨¢cticamente todo el apoyo de los votantes. A pesar de la derrota del refer¨¦ndum de 2014, en el que la secesi¨®n fue rechazada con un margen del 10%, factores como el Brexit (rechazado mayoritariamente por los escoceses) y el profundo rechazo a la figura de Boris Johnson, catapultaron al SNP en Escocia.

¡°Este resultado es s¨ªsmico¡±, ha asegurado el l¨ªder del Partido Laborista, Keir Starmer. ¡°Los votantes de Rutherglen y Hamilton han enviado un mensaje muy claro. Ha llegado el momento del cambio. Siempre he dicho que resultaba clave la recuperaci¨®n de la confianza de los ciudadanos de Escocia. Esta victoria supone la culminaci¨®n de tres a?os y medio de duro trabajo¡±, ha a?adido. Ese es el tiempo que Starmer lleva al frente del partido, en sustituci¨®n de Corbyn. Un periodo que ha dedicado a devolver a la formaci¨®n a posiciones centristas que asemejan aquel Nuevo Laborismo con el que Tony Blair arras¨® en las urnas.

John Curtice, el soci¨®logo y analista electoral m¨¢s respetado y escuchado en el Reino Unido, ha expresado su sorpresa ante el resultado. ¡°Victorias de la oposici¨®n en elecciones parciales como esta suelen suponer, hist¨®ricamente, que el partido se dirige hacia un triunfo en las elecciones generales¡±, ha dicho Curtice en la BBC. Aunque tambi¨¦n ha advertido del uso que los electores suelen hacer de estos comicios limitados para expresar un sentimiento de protesta. ¡°Los votantes que han apoyado al laborismo no est¨¢n necesariamente comprometidos con este partido. Simplemente, han querido decir que no les gustaba ninguna de las otras opciones¡±, ha se?alado Curtice.

Autocr¨ªticas de los nacionalistas escoceses

Entre las filas del SNP, sumergido en una crisis interna despu¨¦s de la dimisi¨®n de Nicola Sturgeon, investigada por la polic¨ªa por presunta malversaci¨®n de los fondos recabados por el partido para impulsar una nueva campa?a independentista, han comenzado a surgir las cr¨ªticas y reflexiones ante la derrota electoral. ¡°No podemos esquivar el hecho de que los resultados han sido muy malos¡±, ha dicho Stephen Flynn, el portavoz en el Parlamento brit¨¢nico de los nacionalistas escoceses, que ha exigido a su partido que empiece a plantearse c¨®mo recuperar la confianza de todos los votantes ¡°que se han quedado en casa y no han votado por el SNP¡±. La participaci¨®n de estas elecciones parciales ha sido especialmente baja. Seis de cada diez electores han optado por no acudir a las urnas.

El SNP eligi¨® el pasado marzo como nuevo lider del partido y ministro principal de Escocia al musulm¨¢n Humza Yousaf, de origen paquistan¨ª. La irrupci¨®n en pol¨ªtica de Yousaf, que podr¨ªa haber supuesto un soplo de aire fresco, se vio enturbiada por el modo en que la direcci¨®n del partido, af¨ªn a Sturgeon, interfiri¨® en el desarrollo de las primarias. El nuevo dirigente no ha logrado despertar entusiasmo entre los votantes, que lo han visto desde el principio como un candidato de continuidad, incapaz de poner orden en el SNP.

Aunque las pr¨®ximas elecciones generales del Reino Unido est¨¢n previstas para enero de 2025, cada vez cobra m¨¢s vigor la idea de unos comicios adelantados a la pr¨®xima primavera. Todas las encuestas otorgan al laborismo una ventaja de poco m¨¢s de veinte puntos porcentuales frente al Partido Conservador. El actual primer ministro, Rishi Sunak, se ha embarcado en una estrategia, que los m¨¢s moderados de su formaci¨®n tachan de populista y reaccionaria, para intentar remontar el desgaste de permanecer 13 a?os en el poder. Durante todo ese tiempo, se han acumulado factores negativos como las consecuencias del Brexit para la econom¨ªa brit¨¢nica o el nefasto periodo protagonizado por Boris Johnson. A lo largo de ese tiempo, el sentimiento independentista en Escocia fue aumentando. La victoria laborista de este jueves es una se?al a?adida de que la situaci¨®n, tanto en territorio escoc¨¦s como en todo el Reino Unido, puede estar comenzando a dar un giro hist¨®rico.

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