La coalici¨®n alemana se enfrenta a su peor crisis por el bloqueo del Presupuesto tras un rev¨¦s del Constitucional

Si en algo tiene experiencia la coalici¨®n de tres partidos que encabeza el socialdem¨®crata Olaf Scholz en Alemania es en capear crisis; especialmente, las que han crecido al calor de las habituales discrepancias entre la tr¨ªada. La ¨²ltima, sin embargo, es especialmente grave, pues pasan los d¨ªas y las respuestas que dan unos y otros no podr¨ªan ser m¨¢s dispares. El Ejecutivo ha tenido que decretar el bloqueo de los presupuestos de todos los departamentos gubernamentales para lo que queda de 2023 y de un importante fondo extrapresupuestario. Es la primera reacci¨®n a la demoledora sentencia de la semana pasada, que declar¨® inconstitucional una maniobra contable y ha borrado de un plumazo 60.000 millones de euros del fondo del clima. Esa cantidad equivale a un 1,5% del PIB alem¨¢n.

El tripartito de socialdem¨®cratas, verdes y liberales se enfrenta a un monstruoso problema de financiaci¨®n que, seg¨²n est¨¢n alertando algunos juristas y economistas, va m¨¢s all¨¢ de ese fondo concreto y podr¨ªa afectar a los otros instrumentos extrapresupuestarios que ha ido creando el Gobierno tras las sucesivas crisis del coronavirus y la energ¨¦tica. El Ejecutivo se prepara para consecuencias financieras mucho m¨¢s amplias, que podr¨ªan limitar su capacidad de sacar dinero de todos los fondos especiales con los que ha estado eludiendo el l¨ªmite constitucional al endeudamiento, conocido como el freno de la deuda.

El tripartito se muestra paralizado ante el enorme agujero para las arcas p¨²blicas. Sus responsables apuntan posibles soluciones, pero todav¨ªa no se ha dado una respuesta unitaria, salvo la de bloquear los pagos y limitar el gasto a lo estrictamente necesario en lo que queda de a?o. El ministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner, dio la orden el lunes por la noche para que todos los ministerios congelen su gasto. Hasta nuevo aviso, no podr¨¢n autorizar pagos.

Los debates en el seno de la coalici¨®n sobre las consecuencias de la da?ina sentencia del Tribunal Constitucional est¨¢n en pleno apogeo y evidencian lo alejadas que est¨¢n las posturas entre los socios. Los liberales del FDP, echados en brazos de la ortodoxia fiscal, no aceptan subidas de impuestos o suavizar el l¨ªmite de endeudamiento. Su soluci¨®n es gastar menos en otras partidas, y para ello han empezado a proponer recortes en prestaciones sociales. Los socialdem¨®cratas de Scholz se niegan en redondo. ¡°Si ahora seguimos la l¨®gica de los recortes sociales, lo siguiente ser¨¢n las pensiones. Luego las becas escolares, y luego¡­ Y entonces la cohesi¨®n social se nos escapar¨¢ entre los dedos. Esa no puede ser la soluci¨®n¡±, ha dicho el secretario general del SPD, Kevin K¨¹hnert.

El peor rev¨¦s judicial de la legislatura de Scholz lleg¨® el jueves pasado. El Tribunal Constitucional determin¨® que reasignar 60.000 millones de euros de deuda no utilizada durante la pandemia de coronavirus a un fondo para el clima es ilegal. El fondo financia proyectos relacionados con la independencia energ¨¦tica de Alemania, con inversiones en aislamiento t¨¦rmico de los hogares, instalaci¨®n de puntos de recarga para veh¨ªculos el¨¦ctricos o extensi¨®n de las energ¨ªas renovables. Tambi¨¦n con cargo a los 212.000 millones para el periodo 2024-2027 se iban a sufragar las inversiones en f¨¢bricas de semiconductores (prometidas tanto a Intel como a TSMC para que se instalen en el Este de Alemania) y a modernizar la obsoleta red del Deutsche Bahn, los ferrocarriles alemanes.

Las consecuencias del fallo del tribunal de Karlsruhe todav¨ªa se est¨¢n evaluando, pero todo parece indicar que otro de los fondos extrapresupuestarios, el Fondo de Estabilizaci¨®n Econ¨®mica, tambi¨¦n podr¨ªa verse afectado. Los conservadores de la CDU est¨¢n considerando emprender acciones legales contra su gesti¨®n, lo que ha provocado que el ministro de Econom¨ªa les acuse de querer sumir deliberadamente al pa¨ªs en el caos. Con este fondo, conocido por sus siglas en alem¨¢n (WSF), se pagan las subvenciones que alivian los precios de la electricidad y el gas a los hogares y las empresas. Habeck ha alertado ya de que los costes de la energ¨ªa podr¨ªan incrementarse sustancialmente este invierno. A ¨²ltima hora del martes, el Ministerio de Finanzas orden¨® tambi¨¦n congelar de momento el uso de este fondo, creado en 2022 con 200.000 millones de euros.

Esta incertidumbre es ¡°veneno¡± para la econom¨ªa alemana, asegur¨® Monika Schnitzer, la presidenta del Consejo Alem¨¢n de Expertos Econ¨®micos, conocidos como los ¡°cinco sabios¡±. ¡°Se necesitan urgentemente soluciones conjuntas porque de lo contrario crece la incertidumbre y no hay nada peor para la econom¨ªa. La gente quiere poder planificar, saber si los precios de la energ¨ªa van a mejorar¡±, dijo en una entrevista con la cadena ARD. El varapalo del Constitucional supone un nuevo bofet¨®n a la estancada econom¨ªa alemana, que entrar¨¢ en recesi¨®n este a?o y que confiaba en que las inversiones en transici¨®n ecol¨®gica la sacar¨ªan del bache con un leve crecimiento en 2024.

La crisis est¨¢ entrando en un terreno muy peligroso para la estabilidad de la coalici¨®n porque se empieza a cuestionar uno de los principios b¨¢sicos que tienen en su altar los liberales, el Schuldenbremse o freno de la deuda. A medida que pasan los d¨ªas, m¨¢s miembros destacados de los otros dos partidos est¨¢n poniendo en duda la sensatez del l¨ªmite al endeudamiento p¨²blico del pa¨ªs. ¡°No voy a negar que considero que la forma en que est¨¢ dise?ado el freno de la deuda alemana no es muy inteligente¡±, declar¨® en la televisi¨®n p¨²blica el ministro de Econom¨ªa, el verde Robert Habeck. El freno de la deuda estuvo suspendido entre 2020 y 2022 por la pandemia de covid, pero vuelve a estar vigente este a?o. Mientras tanto, los economistas coinciden en que Alemania necesita grandes inversiones para lograr sus objetivos clim¨¢ticos, entre los que est¨¢ el de alcanzar el 80% de fuentes renovables en 2030.

El sistema ¡°es muy est¨¢tico y no distingue entre los fondos que gastamos sobre la marcha, a lo largo del a?o, y las inversiones de futuro que se amortizar¨¢n dentro de 10, 20 o quiz¨¢ 50 a?os. No me parece sensato¡±, subray¨® Habeck. El freno de la deuda, que est¨¢ consagrado en la ley Fundamental (Constituci¨®n) desde 2009, se cre¨® para otra ¨¦poca: en un momento en el que Alemania ten¨ªa acceso a gas natural barato, procedente de Rusia; cuando China era un ¨¢vido comprador, y a la vez proveedor, y no un competidor; y con la seguridad de que Europa no volver¨ªa a vivir m¨¢s guerras, explic¨® el lunes por la noche el ministro de Econom¨ªa. ¡°Estas eran las condiciones entonces, y parece que han cambiado, al menos en mi an¨¢lisis¡±, lament¨®. ¡°No podremos evitar la aplicaci¨®n de la norma de exenci¨®n hasta 2024, posiblemente incluso m¨¢s¡±, declar¨® por su parte el portavoz del SPD en el Bundestag, Rolf M¨¹tzenich, a la revista Stern.

?Qu¨¦ opciones tiene el Gobierno alem¨¢n para salir del atolladero? Una de ellas ser¨ªa declarar una nueva emergencia, como se hizo durante la pandemia de coronavirus. Eso permitir¨ªa solventar el bloqueo inmediato de los fondos. Porque aunque cada vez m¨¢s voces apunten a la necesidad de cambiar las estrictas normas de endeudamiento ¡ªeste no debe superar el 0,35% del producto interior bruto alem¨¢n anual, salvo en casos de emergencia muy tasados¡ª, ese giro todav¨ªa no se vislumbra. Cualquier cambio constitucional requiere una mayor¨ªa de dos tercios, lo que se traduce en la necesidad de contar con la aprobaci¨®n de los conservadores de la CDU y CSU. Y fueron ellos quienes presentaron la demanda contra el plan presupuestario del Gobierno y en defensa del Schuldenbremse.

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