Una regi¨®n en llamas: los 11 focos de conflicto en Oriente Pr¨®ximo
Los ataques de Ham¨¢s del 7 de octubre y la respuesta militar de Israel desencadenan nuevas y viejas tensiones en una regi¨®n del mundo que re¨²ne a 10 Estados donde vive el 5,6% de la poblaci¨®n mundial
Desde los escombros a los que ha quedado reducida Ciudad de Gaza ¡ªen la Palestina ocupada y asediada por Israel, junto al Mediterr¨¢neo¡ª hasta Panjgur ¡ªun oasis en medio de las ¨¢ridas monta?as del Baluchist¨¢n paquistan¨ª refugio de insurgentes independentistas de esa minor¨ªa repartida en tres pa¨ªses¡ª, 2.900 kil¨®metros al este. Desde el corredor de Lach¨ªn ¡ªen el C¨¢ucaso, que une Armenia con lo que fue Nagorno Karabaj (el desaparecido enclave en territorio de Azerbaiy¨¢n)¡ª hasta el puerto yemen¨ª de Hodeida ¡ªa la entrada del mar Rojo, donde los rebeldes hut¨ªes hostigan a los cargueros de una de las principales rutas comerciales que une el sudeste asi¨¢tico con Europa¡ª, 2.800 kil¨®metros al sur.
Desde el pasado 7 de octubre, cuando Ham¨¢s atac¨® Israel causando 1.200 muertos y llev¨¢ndose por la fuerza a Gaza a 240 rehenes, el Gobierno israel¨ª lanz¨® una campa?a militar por tierra, mar y aire contra la Franja que roza ya las 25.000 v¨ªctimas mortales, de las que se estima que el 70% son civiles. Esta en¨¦sima resurrecci¨®n del conflicto entre Israel y Palestina se ha extendido y ha multiplicado o endurecido las hostilidades en un ¨¢rea de 10 Estados con una superficie de 3,7 millones de kil¨®metros cuadrados (superior a la India) en la que viven 454 millones de habitantes, el 5,6% de la poblaci¨®n mundial.
A lo largo de ese vasto territorio, las acciones armadas las han ejercido ej¨¦rcitos regulares (Israel, Ir¨¢n, Pakist¨¢n), milicias apoyadas por Ir¨¢n (Ham¨¢s, Hezbol¨¢, grupos chi¨ªes de Siria e Irak, los hut¨ªes de Yemen) y grupos terroristas como el Estado Isl¨¢mico o los separatistas baluch¨ªes de Yeish al Adl, en Ir¨¢n. En la violencia generalizada est¨¢n involucradas, adem¨¢s, dos potencias nucleares: Israel y Pakist¨¢n. Sobre el terreno tambi¨¦n han actuado otros actores externos, como Estados Unidos (en Irak y Yemen) y el Reino Unido, que tambi¨¦n ha atacado a los hut¨ªes en la Operaci¨®n Guardian de la Prosperidad, de la que forman parte otros 10 pa¨ªses, entre los que est¨¢n Alemania y Canad¨¢.
Han pasado ya m¨¢s de tres meses desde los ataques del 7 de octubre y la respuesta militar israel¨ª, un c¨®ctel que ha puesto en llamas a toda la regi¨®n. Estos son los principales frentes en los que se combate.
1. Gaza: 25.000 muertes en tres meses
Es el centro de la crisis que asola Oriente Pr¨®ximo. De este min¨²sculo territorio empobrecido, masificado (60 veces m¨¢s densidad de poblaci¨®n que Espa?a) y sin horizonte de esperanza tras 16 a?os de bloqueo y cuatro ofensivas, salieron el 7 de octubre los milicianos que mataron a unas 1.200 personas y secuestraron a m¨¢s de 200 en Israel. Ese mismo d¨ªa, comenzaron los bombardeos masivos contra la Franja.
El resto es conocido: una invasi¨®n terrestre, el desplazamiento forzoso al sur de casi toda la poblaci¨®n, arrestos masivos y una crisis humanitaria causada por la decisi¨®n de Israel de limitar el combustible, comida y agua que entra. Los muertos se acercan a los 25.000, m¨¢s del 1% de la poblaci¨®n. Son, en su mayor¨ªa, mujeres y menores. Se estima que hay otros 8.000 cad¨¢veres bajo los escombros de una Gaza con barrios enteros en ruinas y m¨¢s edificios da?ados que intactos.
El d¨ªa a d¨ªa de la poblaci¨®n ¨Dapi?ada en su mayor¨ªa en el sur, donde fue obligada a desplazarse y ahora se centran los bombardeos¨D consiste principalmente en lograr comida al menos una vez al d¨ªa (de la ayuda humanitaria o en el mercado negro) y agua e ingeni¨¢rselas para calentarse y cargar el m¨®vil. Faltan porque Israel los limita, como parte de su estrategia b¨¦lica. En el norte apenas hay hospitales operativos.
La intensidad de los bombardeos no tiene parang¨®n desde la II Guerra Mundial. Sud¨¢frica ha llevado a Israel al Tribunal Internacional de Justicia, con sede en La Haya, por su matanza. Lo acusa del delito de genocidio, es decir, de actuar con la intenci¨®n de eliminar, total o parcialmente, a los palestinos como pueblo.
El primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, reiter¨® este jueves su determinaci¨®n a continuar la campa?a hasta la ¡°victoria total¡± sobre Ham¨¢s, el movimiento islamista que gobierna Gaza desde 2007 y planific¨® el ataque, lo que requerir¨¢ ¡°muchos m¨¢s meses¡±.
2. Cisjordania: vasos comunicantes
2023 ya era el a?o m¨¢s violento en Cisjordania desde el fin de la Segunda Intifada (2005) cuando lleg¨® el 7 de octubre. Pese a su separaci¨®n geogr¨¢fica, Gaza y Cisjordania suelen ser vasos comunicantes, as¨ª que prendi¨® la violencia. Unos cuatro palestinos mueren hoy de media all¨ª cada d¨ªa, principalmente por fuego de soldados israel¨ªes y, ocasionalmente, de colonos radicales, que han forzado el desplazamiento de comunidades aprovechando que todas las miradas est¨¢n en Gaza. Seg¨²n datos de la ONU, el a?o acab¨® con 509 muertos. Es el triple que el total entre 2008 y 2015.
El ej¨¦rcito israel¨ª ha retomado t¨¢cticas que apenas us¨® en dos d¨¦cadas. Cada vez efect¨²a m¨¢s ¡°asesinatos selectivos¡± con drones. Decenas de muertos son milicianos, sobre todo en redadas. Otros, civiles, como los dos ni?os de Yen¨ªn cuyas im¨¢genes dieron la vuelta al mundo, un se?or que abr¨ªa una barrera para entrar a su pueblo, o un joven disparado a quemarropa por un colono.
Los habituales retenes, controles militares y barreras al movimiento se han incrementado. Es dif¨ªcil desplazarse de una y otra parte del territorio, ocupado militarmente desde la Guerra de los Seis D¨ªas de 1967. La poblaci¨®n, en cualquier caso, suele quedarse en su localidad. Gran parte del 22% de la fuerza laboral est¨¢ en casa. Son las decenas de miles de palestinos que entraban a trabajar a Israel o a las colonias. Sus permisos est¨¢n congelados desde el ataque de Ham¨¢s. Es habitual verlos ahora de dependientes o camareros, contratados como favor por un tercio de lo que sol¨ªa proveer a su familia.
Los funcionarios a¨²n no han cobrado diciembre. La Autoridad Nacional Palestina paga sus salarios en parte con tasas que Israel recauda y est¨¢ obligado a transferirle. El ministro de Finanzas, el ultranacionalista Bezalel Smotrich, rechaza desde octubre transferir la parte correspondiente a los funcionarios en Gaza: ¡°Ni un s¨¦quel ir¨¢ a los terroristas nazis¡±.
3. Israel: del ¡®shock¡¯ a la guerra multifrente
Desde el 7 de octubre, la jornada m¨¢s letal de su historia, Israel est¨¢ inmerso en una guerra multifrente, como la define su ministro de Defensa, Yoav Gallant. Cada uno, con diferente intensidad. El m¨¢s delicado, por su potencial explosivo, es L¨ªbano, desde donde Hezbol¨¢ lanza a diario proyectiles antitanque, cohetes o drones cargados de explosivos. Uno de los ¨²ltimos lleg¨® a explotar la pasada semana en el cuartel militar del mando norte en Safed, a 15 kil¨®metros de la frontera. Tambi¨¦n atacan desde Siria, de forma m¨¢s espor¨¢dica, grupos armados proiran¨ªes o palestinos.
Aunque la atenci¨®n sobre los hut¨ªes se ha centrado en su hostigamiento a los barcos en el mar Rojo y los bombardeos de represalia estadounidenses, la milicia yemen¨ª ha lanzado cinco misiles (todos interceptados) contra Eilat, la ciudad que alberga a decenas de miles de evacuados de otras partes de Israel.
En Gaza, pasadas las primeras semanas de castigo a¨¦reo, los soldados israel¨ªes pisaron el suelo y entraron con blindados en las ciudades, donde los milicianos palestinos emplean t¨¢cticas t¨ªpicas de guerrilla contra un enemigo superior. Les tienden emboscadas, disparan a trav¨¦s de la ventana, lanzan proyectiles de mortero contra los blindados o se acercan a adosarles un explosivo y huyen. Ya han muerto 194.
Desde finales de diciembre, Israel ha pisado el acelerador de los asesinatos selectivos en otros pa¨ªses, abriendo el camino a una escalada. No solo un l¨ªder de Ham¨¢s, Saleh Al Aruri, en Beirut, sino tambi¨¦n hombres m¨¢s directamente vinculados a Ir¨¢n, al que Netanyahu gusta de definir como ¡°la cabeza del pulpo¡±. Ha matado a dos mandos de la rama militar de Hezbol¨¢ ¨DWissam Al Tawil y Ali Hussein Burji, al que vinculaba al dron lanzado contra Safed¨D, a un general de la Guardia Revolucionaria iran¨ª, Razi Mousavi, y a otros cinco de sus miembros, este s¨¢bado, tambi¨¦n en Damasco.
4. L¨ªbano: una crisis monumental y una posible guerra
Hasta el 7 de octubre, los libaneses se preocupaban por el presente. Con el pa¨ªs inmerso desde 2019 en lo que el Banco Mundial define como una de las tres crisis econ¨®micas m¨¢s graves del planeta desde el siglo XIX, la prioridad era ir tirando. El presidente del banco central, Riad Salameh, acababa de dejar el cargo tras 30 a?os con una ristra de acusaciones de corrupci¨®n y el pa¨ªs segu¨ªa ¡ªy sigue¡ª sin presidente, por falta de acuerdo sobre el sucesor.
Hoy, preocupa el futuro: la posibilidad de una guerra. La decisi¨®n no depende del Estado, sino de Israel y de la milicia Hezbol¨¢, con decenas de miles de misiles y combatientes con experiencia en la guerra siria. Primero t¨ªmidamente y cada vez m¨¢s abiertamente, mantienen enfrentamientos diarios en la frontera. El l¨ªder de Hezbol¨¢, Has¨¢n Nasral¨¢, ha dado varios discursos en los que la ret¨®rica grandilocuente no esconde la escasa voluntad de ir con todo contra uno de los ej¨¦rcitos m¨¢s poderosos del mundo
Aunque se miden muchos pasos, aumentan los signos preocupantes. Tras los asesinatos selectivos este mes de un l¨ªder de Ham¨¢s en Beirut, y de un comandante de la rama militar de Hezbol¨¢, un proyectil antitanque mat¨® a dos civiles en Israel. La respuesta fueron los bombardeos a¨¦reos m¨¢s intensos desde octubre. En otro contexto, todo habr¨ªa degenerado ya en conflicto abierto. Este mi¨¦rcoles, el jefe del Estado mayor israel¨ª, Herzi Halevi, admiti¨® que la probabilidad de guerra en los pr¨®ximos meses es ¡°mucho mayor¡±.
Israel quiere garant¨ªas para devolver a sus hogares a los 80.000 nacionales que ha desplazado de la frontera. Se plantea dos formas: con un acuerdo ¡ªcomo negocia EE UU¡ª o con una guerra que empeque?ecer¨ªa a la de 2006 y devolver¨ªa a L¨ªbano ¡°a la Edad de Piedra¡±, en palabras de ministro israel¨ª de Defensa.
5. Siria: bombas turcas, jordanas e israel¨ªes
Opacada por Gaza, Siria se aproxima a los 13 a?os de una guerra que supera el medio mill¨®n de muertos y ha expulsado de sus hogares a m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n. A la sensaci¨®n de que el tiempo se ha detenido contribuye que las l¨ªneas de frente no han cambiado apenas esta d¨¦cada, con el r¨¦gimen de Bachar El Asad al frente de la mayor parte del territorio, incluidas las principales ciudades, reabriendo las puertas al turismo y regresando a la Liga ?rabe entre los abrazos de quienes trataron de derrocarlo. El resto es un puzle bajo control kurdo, yihadista o de otras fuerzas rebeldes en el que entran en juego las pugnas entre potencias extranjeras.
Algunos acontecimientos recuerdan que Siria sigue existiendo. Hace un a?o fue el terremoto con epicentro en Turqu¨ªa, que arranc¨® unas 6.000 vidas en Siria, sobre todo en el noroeste, donde se api?an tres millones de desplazados. Luego, una localidad de mayor¨ªa drusa leal al r¨¦gimen, Sueida, core¨® lemas contra El Asad que no se o¨ªan desde la revuelta ciudadana, en plena Primavera ?rabe. En octubre, drones cargados de explosivos causaron 80 muertos en una academia militar, en uno de los ataques m¨¢s letales en la zona bajo control de El Asad.
Mientras, un 90% de la poblaci¨®n sigue en la pobreza. El contagio de la crisis libanesa, la covid y el impacto en el precio del trigo de la guerra de Ucrania han empeorado su situaci¨®n. En 2022 la inflaci¨®n roz¨® el 85%.
En r¨ªo revuelto, Turqu¨ªa bombardea el Kurdist¨¢n; Jordania, a los narcotraficantes cerca de su frontera; e Israel, a las milicias proiran¨ªes o palestinas, que han lanzado desde octubre cohetes o drones contra los Altos del Gol¨¢n. Hace a?os que Israel bombardea Siria cada mes, pero la guerra en Gaza ha aumentado el fuego cruzado.
6. Irak: de potencia regional a zona de fricci¨®n entre Washington y Teher¨¢n
Antes de 2003, Irak era una de las mayores potencias regionales de Oriente Pr¨®ximo, uno de los apoyos de las facciones palestinas y enemigo declarado de Israel. La invasi¨®n de EE UU sumi¨® a Irak en el caos, provocando una serie de conflictos encadenados ¡ªinsurgencia y represi¨®n estadounidense, violencia sectaria, expansi¨®n del Estado Isl¨¢mico¡ª que han provocado la muerte de cientos de miles de civiles y de los que el pa¨ªs no se ha recuperado, dej¨¢ndolo a merced de la influencia de las potencias extranjeras.
El modelo pol¨ªtico impuesto por la ocupaci¨®n estadounidense acentu¨® las divisiones ¨¦tnicas (¨¢rabes, kurdos, turcomanos) y religiosas (musulmanes chi¨ªes ¡ªmayoritarios¡ª, musulmanes sun¨ªes, cristianos, yazid¨ªes), lo que permiti¨® a Ir¨¢n incrementar su influencia en un pa¨ªs que hasta entonces le estaba vedado. Varios partidos pol¨ªticos chi¨ªes y las milicias Unidades de Movilizaci¨®n Popular se coordinan directamente con la Guardia Revolucionaria iran¨ª y con Teher¨¢n.
Desde el 7 de octubre, las milicias proiran¨ªes han llevado a cabo cerca de un centenar de ataques contra las bases de EE UU en Irak, provocando decenas de heridos. Washington, que todav¨ªa mantiene unos 2.500 militares en suelo iraqu¨ª, ha respondido matando a una treintena de milicianos chi¨ªes, incluido a uno de sus principales comandantes, Mushtak Taleb al Saidi, en un ataque con drones en Bagdad el pasado d¨ªa 4.
El Gobierno iraqu¨ª ha denunciado los ¨²ltimos bombardeos de Ir¨¢n en suelo iraqu¨ª ante la ONU y tambi¨¦n ha pedido a Washington que retire totalmente sus tropas del pa¨ªs.
7. Ir¨¢n: el l¨ªder del Eje de Resistencia con m¨²ltiples v¨ªnculos
En 2002, el presidente estadounidense George Bush acu?¨® el t¨¦rmino ¡°Eje del Mal¡± para referirse a Corea del Norte, Ir¨¢n e Irak, pa¨ªs que invadir¨ªa el a?o siguiente. Parad¨®jicamente, la destrucci¨®n del r¨¦gimen de Sadam Hussein en Bagdad ¡ªun viejo rival de Teher¨¢n¡ª y el caos que desat¨® permiti¨® a Ir¨¢n expandir su influencia regional y establecer lo que llamar¨ªa ¡°Eje de Resistencia¡±, una serie de alianzas destinadas a contrarrestar la presencia estadounidense y luchar contra Israel.
De la mano de un brillante estratega, Qasem Soleimani, comandante de la fuerza de operaciones exteriores de la Guardia Revolucionaria ¡ªasesinado por EE UU en Bagdad en 2020¡ª, Ir¨¢n increment¨® el apoyo pol¨ªtico, econ¨®mico y militar a actores en Irak (milicias y partidos pol¨ªticos), Siria (el r¨¦gimen de Bachar el Asad), Gaza (Ham¨¢s y la Yihad Isl¨¢mica), L¨ªbano (el partido-milicia Hezbol¨¢) y Yemen (el movimiento hut¨ª). Esto ha contribuido a que, por ejemplo, el r¨¦gimen sirio se mantuviera en pie frente a las ofensivas de los rebeldes; que los hut¨ªes hicieran frente a los ataques de la coalici¨®n liderada por Arabia Saud¨ª o que Ham¨¢s y Hezbol¨¢ puedan reconstruir su estructura tras las guerras con Israel.
En respuesta, Israel ha golpeado a Ir¨¢n dentro de su territorio con drones, atentados con bomba y sabotajes en instalaciones militares y at¨®micas. El Mosad ha asesinado a media docena de cient¨ªficos involucrados en el programa nuclear iran¨ª, se cree que con la cooperaci¨®n de militantes de los Muyahidines del Pueblo, una organizaci¨®n islamista que rompi¨® con la Rep¨²blica Isl¨¢mica poco despu¨¦s de la Revoluci¨®n de 1979 y ha cometido numerosos ataques en Ir¨¢n. Adem¨¢s, Ir¨¢n se enfrenta a atentados del Estado Isl¨¢mico, y de grupos kurdos y baluch¨ªs.
8. Yemen: la guerrilla que amenaza el comercio mundial
Uno de los actores que m¨¢s ha contribuido a amplificar la dimensi¨®n del conflicto ha sido la guerrilla yemen¨ª Ansar All¨¢ (Partidarios de Dios), tambi¨¦n conocida como Huthi, por el apellido de sus principales l¨ªderes. Gracias al estrat¨¦gico territorio que controla esta milicia apoyada por Ir¨¢n, junto al estrecho de Bab el Mandeb ¡ªentrada y salida del mar Rojo hacia y desde el canal de Suez, que une el Mediterr¨¢neo con el ?ndico¡ª sus continuos ataques sobre los mercantes que transitan esta ruta mar¨ªtima, la principal entre Asia y Europa y por la que circula entre el 12% y el 15% del comercio mundial, han triplicado el precio de los fletes a nivel mundial, obligando a varias de las principales navieras a rodear ?frica para evitar ese punto.
La ofensiva de los hut¨ªes y su influencia econ¨®mica global ha provocado la formaci¨®n de una coalici¨®n internacional liderada por Washington y de la que forman parte el Reino Unido, Alemania, Bar¨¦in, Canad¨¢, Dinamarca, Grecia, Pa¨ªses Bajos, Noruega, Seychelles y Singapur. La alianza ha puesto en marcha la Operaci¨®n Guardi¨¢n de la Prosperidad para garantizar una navegabilidad segura por la zona. El pasado 11 de enero, tras 27 ataques hut¨ªes, EE UU y el Reino Unido bombardearon m¨¢s de 60 objetivos en territorio yemen¨ª controlado por los rebeldes.
Al inicio del conflicto, en las primeras semanas de octubre, los hut¨ªes tambi¨¦n lanzaron misiles y drones contra el sur de Israel, aunque todos ellos fueron derribados antes de alcanzar sus objetivos. Los restos de algunos de ellos cayeron sobre Egipto.
9. Kurdist¨¢n: divididos entre Turqu¨ªa, Irak y Siria
Tras tres d¨¦cadas de lucha contra el PKK que dejaron m¨¢s de 45.000 muertos, Turqu¨ªa ha logrado en los ¨²ltimos a?os neutralizar la presencia en suelo turco de este grupo armado kurdo, por lo que la mayor¨ªa de los combates se han desplazado a Irak y Siria. En la regi¨®n del Kurdist¨¢n iraqu¨ª, Ankara ha establecido bases militares y peri¨®dicamente bombardea las posiciones del PKK en las monta?osas fronterizas entre Turqu¨ªa e Irak e Irak e Ir¨¢n, pese a las quejas de las autoridades regionales del Kurdist¨¢n y del Gobierno federal en Bagdad, que lo consideran una violaci¨®n a su soberan¨ªa. Adem¨¢s de los bombardeos turcos, Ir¨¢n y sus milicias aliadas llevan tres a?os incrementando sus ataques mediante artiller¨ªa, misiles, drones y asesinatos en el Kurdist¨¢n iraqu¨ª, contra objetivos de Estados Unidos, empresarios kurdos que considera cercanos a Israel y exiliados kurdoiran¨ªes que han buscado refugio en el pa¨ªs vecino.
En el norte de Siria, al que los kurdos se refieren como Rojava o Kurdist¨¢n sirio, una milicia vinculada al PKK, las Unidades de Protecci¨®n del Pueblo (YPG), actualmente integradas en las Fuerzas Democr¨¢ticas Sirias (SDF), han establecido una administraci¨®n aut¨®noma en medio de la guerra civil, gracias al apoyo de EE UU (pese a que el PKK est¨¢ incluido en las listas de organizaciones terroristas de Washington y Bruselas). Pero adem¨¢s del millar de militares estadounidenses desplegados, en la zona tambi¨¦n hay presencia de soldados del r¨¦gimen de Bachar el Asad y de fuerzas rusas. Esto no ha sido ¨®bice para que Turqu¨ªa ataque la zona, por considerarla un refugio de ¡°terroristas¡±.
Desde octubre, el Gobierno de Recep Tayyip Erdogan ha iniciado una campa?a de bombardeos contra la infraestructura de la zona, en especial las instalaciones el¨¦ctricas y petrol¨ªferas. A la vez, en los ¨²ltimos meses, las tribus ¨¢rabes de las zonas des¨¦rticas del este de Siria se han levantado contra la administraci¨®n kurda, molestos con su Gobierno, y los combates se han intensificado.
10. Baluchist¨¢n: el contagio al subcontinente indio
La inestabilidad en Oriente Pr¨®ximo traspas¨® el pasado martes las propias fronteras de la regi¨®n para entrar de lleno en el subcontinente indio. Adem¨¢s del Kurdist¨¢n iraqu¨ª y Siria, Ir¨¢n lanz¨® misiles y drones ese d¨ªa contra objetivos del grupo yihadista sun¨ª e independentista Yeish al Adl en el Baluchist¨¢n paquistan¨ª. El ataque elev¨® la preocupaci¨®n por afectar a Pakist¨¢n, una potencia nuclear. Islamabad, que hizo p¨²blica una en¨¦rgica protesta y llam¨® a consultas a su embajador en Teher¨¢n, respondi¨® dos d¨ªas despu¨¦s en la parte de ese territorio que controla Ir¨¢n con el bombardeo de supuestas bases insurgentes baluch¨ªes. Pese a ambos incidentes y las quejas rec¨ªprocas de ambos gobiernos, los dos pa¨ªses se han apresurado a subrayar sus buenas relaciones.
El intercambio de fuego en Baluchist¨¢n no est¨¢ directamente relacionado con el conflicto de Gaza. Los analistas lo interpretan como una demostraci¨®n de fuerza de Teher¨¢n contra las organizaciones de resistencia que operan en su territorio. El 15 de diciembre, Yeish al Adl atac¨® una comisar¨ªa de polic¨ªa en la ciudad iran¨ª de Rask (provincia de Sist¨¢n-Baluchist¨¢n) causando la muerte a 11 agentes. Su ataque sobre Pakist¨¢n se produjo tambi¨¦n despu¨¦s de los atentados de Kerm¨¢n, donde dos terroristas suicidas provocaron la muerte de m¨¢s de 80 personas el 3 de enero en una acci¨®n que se atribuy¨® el Estado Isl¨¢mico.
Algunos expertos s¨ª encuentran, sin embargo, una relaci¨®n indirecta con el conflicto soterrado que, a trav¨¦s de sus organizaciones sat¨¦lites, Ir¨¢n mantiene con Israel desde el 7 de octubre. Aunque esos atentados forman parte de otras guerras y responden a fricciones internas, Teher¨¢n, en este contexto, no puede permitirse mostrar ninguna vulnerabilidad. Ni frente a sus enemigos, ni frente a su opini¨®n p¨²blica.
11. Armenia y Azerbaiy¨¢n: otro escenario de enfrentamiento entre Israel e Ir¨¢n
Con una campa?a de bombardeos y avances terrestres a finales de septiembre, Azerbaiy¨¢n inici¨® su ofensiva final sobre Nagorno Karabaj, un territorio de mayor¨ªa de poblaci¨®n armenia dentro de las fronteras azerbaiyanas. Los m¨¢s de 100.000 armenios que viv¨ªan en el enclave huyeron a la vecina Armenia (solo han quedado una veintena de personas), con lo que se pon¨ªa fin, por la fuerza, a un conflicto que, desde la ca¨ªda de la URSS, hab¨ªa motivado dos guerras abiertas entre ambos pa¨ªses e incontables enfrentamientos fronterizos con un saldo de m¨¢s de 40.000 muertos y m¨¢s de un mill¨®n de desplazados. El Gobierno de Armenia, m¨¢s pobre y peor armado que su vecino, busca ahora firmar una paz definitiva con Azerbaiy¨¢n, pero las crecientes demandas de Bak¨² y la tensi¨®n en la frontera com¨²n ¡ªdonde son habituales los intercambios de fuego y donde la UE ha desplegado una misi¨®n de observaci¨®n¡ª hacen temer que el proceso descarrile.
Israel y Turqu¨ªa son los principales suministradores de armas de Bak¨². Pakist¨¢n es tambi¨¦n un firme aliado que ha enviado instructores militares a Azerbaiy¨¢n, adem¨¢s de realizar peri¨®dicos ejercicios militares conjuntos. La alianza azerbaiyano-israel¨ª y las veleidades expansionistas de Bak¨² molestan en Ir¨¢n, donde viven minor¨ªas azer¨ª y armenia, importantes tanto en tama?o como en influencia. En varias ocasiones durante los ¨²ltimos a?os, Ir¨¢n ha desplegado fuerzas militares en su frontera con Azerbaiy¨¢n para enviar un mensaje al gobierno de Bak¨². Rusia tambi¨¦n mantiene tropas desplegadas en ambos pa¨ªses cauc¨¢sicos.
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