Un juez suspende en Italia el bloqueo del barco de rescate de M¨¦dicos Sin Fronteras ordenado por las autoridades
El tribunal alega que parar la nave dos meses, supuestamente por no haber informado de una operaci¨®n, supone ¡°un peligro inminente de da?o grave e irreparable¡± para su actividad de socorro ¡°de indudable valor¡±
El barco de rescate de M¨¦dicos Sin Fronteras en el Mediterr¨¢neo (MSF), el Geo Barents, que estaba atracado en el puerto de Salerno desde el pasado 25 de agosto con la prohibici¨®n de hacerse a la mar durante dos meses, puede volver a zarpar. Un juez del tribunal de esta ciudad ha aceptado este mi¨¦rcoles el recurso de MSF y ha suspendido el bloqueo cautelar administrativo, a la espera de una vista que tendr¨¢ lugar en noviembre. Dentro del tenso pulso que mantiene el Gobierno ultraderechista de Giorgia Meloni con las ONG que auxilian en el Mediterr¨¢neo a embarcaciones procedentes del norte de ?frica, MSF hab¨ªa sido sancionada tras ser acusada de haber incumplido las normas italianas. El motivo, salvar a 37 personas del mar sin haber informado antes de la operaci¨®n, el pasado 23 de agosto.
El juez ¡ªque a¨²n no se pronuncia sobre la acusaci¨®n en s¨ª¡ª asesta sin embargo un severo varapalo a las autoridades al subrayar que el bloqueo de la nave en puerto implica un ¡°peligro inminente de un da?o grave e irreparable¡±, porque afecta al derecho del Geo Barents a desarrollar sus tareas de auxilio en el mar. ¡°Una actividad ¨Dse?ala¨Dque implica la persecuci¨®n de objetivos humanitarios de indudable valor ex se, en obsequio al sistema de valores constitucionales y del derecho internacional consuetudinario a los que Italia se adhiere y que adem¨¢s est¨¢ llamada a promover¡±.
El buque de MSF ya hab¨ªa sido bloqueado otras dos veces, aunque fue por 20 d¨ªas en ambas ocasiones, y no se aceptaron sus recursos. Es la primera vez que ocurre, una decisi¨®n que ha llegado horas despu¨¦s de una rueda de prensa de la ONG para denunciar la situaci¨®n ante la prensa internacional. ¡°Salimos a Sicilia, y en cuanto estemos listos, el domingo probablemente, volvemos a rescatar¡±, confirma el jefe de operaciones en el Mediterr¨¢neo central de la organizaci¨®n, el espa?ol Ricardo Mart¨ªnez. ¡°Estamos llorando de la emoci¨®n¡±. Hasta ahora, de 25 ¨®rdenes de bloqueo emitidas contra naves de ONG en los ¨²ltimos 20 meses, en aplicaci¨®n de las nuevas normas del Gobierno, los jueces solo hab¨ªan suspendido la medida en tres casos.
MSF, que rechaza las acusaciones, ha explicado sobre el rescate bajo investigaci¨®n que inform¨® a las autoridades nueve minutos despu¨¦s, porque las personas que encontraron en un bote se arrojaron al agua junto a su nave y, ante la emergencia, el equipo actu¨® de inmediato. En todo caso, a?ade la organizaci¨®n, ya hab¨ªan informado de la presencia de la embarcaci¨®n a la guardia costera libia, con la que hab¨ªan coordinado horas antes otros dos rescates. En total, salvaron a 197 personas. Pero al volver a puerto se encontraron con la orden que les imped¨ªa volver a zarpar.
El juez de Salerno, a la espera de analizar detenidamente todo el material aportado, ya dice tras una primera visi¨®n de los v¨ªdeos grabados por MSF en la operaci¨®n, que ¡°parece deducirse que la nave, sin contribuir a crear ninguna situaci¨®n de peligro a bordo, estaba ocupada en inaplazables operaciones de socorro de n¨¢ufragos¡±, y que la guardia costera libia estaba informada de ello.
Estos choques frecuentes con la ley est¨¢n condicionando el trabajo de las ONG de salvamento de migrantes en Italia, que en los ¨²ltimos 10 a?os han rescatado a 170.000 personas. Sin embargo, desde diciembre de 2022 son hostigadas por las severas normas del Ejecutivo de Meloni, que limitan enormemente su actividad. Las organizaciones y tambi¨¦n el Consejo de Europa alegan que las medidas del llamado decreto Piantedosi (por el nombre del ministro de Interior, Matteo Piantedosi), van contra el derecho internacional.
MSF ha recurrido ante la Justicia italiana, que a¨²n debe pronunciarse, la prohibici¨®n de acudir al puerto m¨¢s cercano tras un rescate y tener que ir al que asignen las autoridades, a menudo a cuatro o m¨¢s d¨ªas de navegaci¨®n en el norte de Italia, en lugares como G¨¦nova o Ravena. El decreto tambi¨¦n obliga a las naves a informar de cada rescate y pedir permiso previamente para efectuarlo y a hacer solo uno cada vez. Deben regresar a puerto en cuanto terminen y no pueden auxiliar a otras embarcaciones. Las ONG que incumplan las normas se arriesgan a multas de hasta 50.000 euros y al cuarto bloqueo de la nave, incluso a que sea confiscada. MSF, como otras organizaciones, ya est¨¢ ante su tercera orden.
Uno de los casos que simbolizan el crudo enfrentamiento de los partidos de ultraderecha italianos con las ONG llega este s¨¢bado a un momento culminante. Se trata del juicio contra Matteo Salvini, actual vicepresidente del Gobierno y ministro de Infraestructuras, acusado de secuestro de personas y abuso de autoridad por impedir en 2019, cuando era titular de Interior, el desembarco de 162 inmigrantes rescatados por el buque espa?ol Open Arms en Lampedusa. Despu¨¦s de tres a?os de proceso, el fiscal anunciar¨¢ sus conclusiones este s¨¢bado (¡±Me arriesgo a tres o 15 a?os de c¨¢rcel¡±, ha protestado Salvini), y el 18 de octubre ser¨¢ la ¨²ltima audiencia, antes del anuncio de la sentencia.
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