El jurista Moreno Ocampo: ¡°Israel maneja a EE UU. Su impotencia sobre Gaza es absoluta¡±
El primer fiscal del Tribunal Penal Internacional es partidario de un acuerdo con Putin para acabar con la guerra en Ucrania: ¡°Dentro de un a?o ser¨¢ peor¡±
El fundador del Tribunal Penal Internacional (TPI), el argentino Luis Moreno Ocampo (72 a?os), fiscal tambi¨¦n adjunto en el primer proceso (1985) contra la dictadura argentina (1976-1983), publica Guerra o Justicia (Espasa), un libro donde analiza...
El fundador del Tribunal Penal Internacional (TPI), el argentino Luis Moreno Ocampo (72 a?os), fiscal tambi¨¦n adjunto en el primer proceso (1985) contra la dictadura argentina (1976-1983), publica Guerra o Justicia (Espasa), un libro donde analiza los actuales conflictos compar¨¢ndolos con otros del pasado. La historia, dice en una entrevista en Madrid, se repite, y la diplomacia tropieza a menudo en la misma piedra, pero es optimista. El escenario es ¡°tan cr¨ªtico¡± que puede convertirse en una ¡°oportunidad para el cambio¡±, para virar del actual modelo de guerra, al de la justicia.
Pregunta. Para definir c¨®mo se integra el Tribunal Penal Internacional en el escenario diplom¨¢tico habla de ¡°una piedra en un zapato¡±, es decir, algo que no impide seguir caminando. Tanto el presidente de Rusia, Vlad¨ªmir Putin, como el primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, tienen ¨®rdenes de detenci¨®n. ?Qu¨¦ tiene que ocurrir para no sea tan solo una molestia y la justicia funcione como m¨¦todo de disuasi¨®n?
Respuesta. El Tribunal Penal Internacional es disuasorio. Putin enfureci¨® tras la orden de detenci¨®n porque sabe que no puede viajar a determinados sitios, pero hace falta apoyo pol¨ªtico. El senador de Estados Unidos Lindsey Graham apoya la investigaci¨®n contra Putin como criminal de guerra, pero se opone en el caso de Netanyahu porque los pol¨ªticos piensan en t¨¦rminos de amigos y enemigos y los fiscales, en t¨¦rminos de crimen o no crimen. Son dos l¨®gicas distintas: la guerra o la justicia.
P. El pasado mayo, el presidente estadounidense, Joe Biden, asegur¨® que hab¨ªa advertido a Netanyahu para que no cometiera el mismo error que su pa¨ªs en Afganist¨¢n, cuando respondieron con una guerra a los atentados del 11-S, pero usted explica que EE UU sigue apoyando esa estrategia b¨¦lica contra el terrorismo por encima de la justicia y el derecho internacional. ?Es posible volver a antes de 2001, cuando el terrorismo era un asunto para polic¨ªas, jueces y fiscales?
R. Biden entiende que la estrategia de Afganist¨¢n fue equivocada, pero no presenta una alternativa. Sus generales est¨¢n b¨¢sicamente de acuerdo con lo que hace Israel. A veces piden que las bombas sean m¨¢s chicas, pero no cuestionan la estrategia. Bush instaur¨® el modelo de guerra contra el terror y Obama, que lo critic¨® y gan¨® el Nobel de la paz, lo consolid¨®. A EE UU le gusta la guerra, sobre todo cuando ellos ponen las armas y otros las vidas. EEUU utiliza la guerra para manejar conflictos, subsidia con billones de d¨®lares su producci¨®n de armas y no se aflige por las muertes de ucranianos o civiles en Gaza. Hay que ayudar a EEUU a cambiar, pero Europa, cuya debilidad me asombra, cay¨® en la trampa en Ucrania y apoya el modelo de guerra. Hay que buscar acuerdos, sabiendo que no van a ser perfectos.
P. ?Cu¨¢l ser¨ªa una paz justa en Ucrania? ?Qu¨¦ imagina en ese acuerdo?
R. Obama negoci¨® con [el dictador sudan¨¦s] Al Bashir ignorando un genocidio. Europa no quiere pactar con Putin, pero pacta con el hombre que est¨¢ masacrando a los armenios. Se debe negociar con Putin, y China puede jugar un papel importante en esa negociaci¨®n. El mayor problema es la ocupaci¨®n del territorio de Ucrania, hay que asegurarse de que no pueda seguir adelante. Lo que no tiene sentido es que Finlandia se vaya a gastar su presupuesto educativo en armas o que haya partidos verdes apoyando la guerra. Hay que negociar un concepto de seguridad nuevo que incluya que nadie puede invadir otro pa¨ªs.
P. ?Qu¨¦ garantizar¨ªa, si Putin obtiene parte del territorio en ese acuerdo, que ma?ana no quiera m¨¢s?
R. Ucrania depende de la ayuda extranjera y debe cerrar un acuerdo porque dentro de un a?o ser¨¢ peor. La idea de ganar a Rusia con una guerra es absurda, aunque Rusia tambi¨¦n se ha desgastado y por eso mismo sabe que si no ha podido tomar Ucrania no puede extenderse m¨¢s. Me asombra que los europeos no lo vean m¨¢s claro.
P. Cuenta que una embajadora estadounidense fue a verle a La Haya para pedirle que cerrara un examen solicitado por la Autoridad Nacional Palestina. Afirma que EE UU invoca las leyes internacionales, pero evita aplicarlas. Tiene una ley que incluso faculta al presidente a rescatar a personal entregado al Tribunal Penal Internacional, lo que constituye una amenaza velada de invasi¨®n de La Haya.
R. Estados Unidos es un obst¨¢culo porque comparte los principios, pero no su aplicaci¨®n. Los reclama en Ucrania, pero no los aplica en Gaza. Israel maneja a EE UU, que ha demostrado su impotencia absoluta en este caso, en lugar de permitir que el Tribunal Penal Internacional ayude a poner l¨ªmites. Netanyahu y Putin hacen cosas parecidas y lo que hace falta es que comunidades no estadounidenses ayuden a los estadounidenses a pensar distinto. Porque el presidente de EE UU influye en la pol¨ªtica mucho m¨¢s que el presidente de tu propio pa¨ªs.
P. Mantiene el contacto con amigos palestinos e israel¨ªes. ?Le dicen ahora cosas distintas que hace un a?o?
R. Cada uno protege a su grupo. Tengo amigos israel¨ªes que se manifestaban contra Netanyahu y que desde los atentados del 7 de octubre lo apoyan totalmente. Y amigos palestinos que se quejan de que diga que Ham¨¢s cometi¨® un genocidio.
P. En 1982, Israel invadi¨® L¨ªbano para expulsar de all¨ª a la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina. Murieron m¨¢s de 17.000 personas. Israel logr¨® su objetivo, pero recuerda que, como consecuencia de esa intervenci¨®n se desarroll¨® un grupo terrorista a¨²n m¨¢s poderoso, Hezbol¨¢, apoyado por Ir¨¢n. Dice en el libro: ¡°Me impresiona la incapacidad de aprender del pasado¡±. ?Es solo falta de aprendizaje o hay demasiados incentivos para seguir equivoc¨¢ndose? La guerra aument¨® la popularidad de Bush, de Putin, de Netanyahu¡
R. La guerra favorece el terrorismo. En Gaza no acabar¨¢ con ¨¦l, lo multiplicar¨¢. El problema es muy serio y para resolverlo no solo tienen que intervenir pol¨ªticos, sino los expertos. Lo que ocurre es que muchos de ellos est¨¢n proponiendo guerra. En EE UU faltan profesores independientes que propongan la cooperaci¨®n. Pas¨¦ seis a?os en Harvard tratando de abrir un debate con los otros profesores y fracas¨¦ porque es una universidad estadounidense que cree que lo importante son los intereses de EE UU.
P. Afirma que Ham¨¢s sab¨ªa que Israel iba a reaccionar como reaccion¨® y que buscaba exactamente eso, para deslegitimarles. En esa espiral de violencia, cita declaraciones muy similares de terroristas de Ham¨¢s y autoridades israel¨ªes negando la distinci¨®n entre civiles y objetivos.
R. Porque, con argumentos m¨¢s o menos sutiles, tanto Ham¨¢s como Israel ven al pueblo como enemigo. Israel cae en la trampa del terrorismo porque sobrerreacciona con una estrategia de guerra, no de justicia y lanza una bomba sobre un campo de refugiados. Pero no es un error. Es una decisi¨®n pol¨ªtica: eliminar a los palestinos. Y Biden no ha logrado pararlo ni un mil¨ªmetro.
P. ?Por qu¨¦ Donald Trump es el candidato favorito de Netanyahu?
R. Trump y [Elon] Musk son empresarios, hacen transacciones, negocios, no pol¨ªtica. El lobby jud¨ªo en EE UU es muy poderoso y Trump lo usa para acusar a Biden de no apoyar a Israel. No s¨¦ qu¨¦ va a hacer Trump, pero su diferencia con los dem¨®cratas en este caso, est¨¢ m¨¢s dentro que fuera de EE UU.
P. Dice: ¡°Como el caso de Sadam Husein puso de manifiesto, durante las guerras no se cuestiona a los aliados y en el siglo XXI esos aliados pueden ser individuos como Elon Musk¡±. ?Qu¨¦ interesa a Trump de Musk y viceversa? ?Las redes sociales son armas de comunicaci¨®n masiva?
R. Musk tiene contratos millonarios con defensa. Es parte de la estrategia de defensa de EE UU y tambi¨¦n de la estrategia de comunicaci¨®n, porque se compr¨® Twitter, ahora llamado X, y usa la plataforma para Trump. En abril de 2024, EE UU sac¨® una ley sobre seguridad que inclu¨ªa armas para Ucrania, Israel, Taiw¨¢n y la propiedad de TikTok. Las redes sociales manejan los algoritmos, es decir, lo que ves ,y ah¨ª no existe el contexto. La idea de que los extremistas manejen la discusi¨®n es rid¨ªcula. Hay que mejorar la comunicaci¨®n entre grupos opuestos.
P. Recuerda que Tinder, al ver que el hecho de que las mujeres rechazaran el 98% de las propuestas desmoralizaba a los usuarios masculinos, invent¨® un algoritmo que filtraba las respuestas negativas y plantea desarrollar una aplicaci¨®n por la paz siguiendo ese modelo. ?No es eso la diplomacia: tratar de conjugar intereses sin herir sensibilidades?
R. S¨ª, pero el problema es que el modelo lo aplican Estados independientes, actores nacionales. El modelo del Tribunal Penal Internacional moviliza al Estado de otra forma. Silicon Valley est¨¢ invirtiendo en guerra, no en paz. Estados Unidos pod¨ªa haber liderado esa cooperaci¨®n. Europa puede ayudar. Que las compa?¨ªas de software trabajen tambi¨¦n para eso, para crear un tinder de la paz.
P. Pese al sombr¨ªo panorama internacional, plantea que hay una oportunidad de acelerar el cambio y enfocarse en la justicia. Lo compara con la abolici¨®n de la esclavitud en Inglaterra, cuando los brit¨¢nicos due?os de esclavos que se hab¨ªan opuesto a la medida se transformaron en inesperados promotores del cambio para evitar que sus competidores franceses pudieran usar esclavos en sus plantaciones de algod¨®n y consiguieran mejores precios. ?Pueden Putin, Netanyahu, Ham¨¢s¡ ser parte del proceso de cambio como los esclavistas brit¨¢nicos?
R. La gente dice que es imposible, pero despu¨¦s de 50 a?os, Espa?a termin¨® con ETA; el mundo aboli¨® la esclavitud; el colonialismo era la historia de la humanidad y tambi¨¦n termin¨®. Los cambios son posibles. El problema es que los l¨ªderes del mundo occidental no est¨¢n poniendo los ideales. Y claro que hay incentivos econ¨®micos, como ha demostrado la dependencia energ¨¦tica, pero estamos invirtiendo mucho m¨¢s en guerra que en paz. La ultima gran inversi¨®n en la paz fue el Tribunal Penal Internacional.
P. La guerra en Gaza ha distra¨ªdo las fuerzas, el apoyo y la atenci¨®n. ?Cree que eso ir¨¢ a m¨¢s?
R. Cada conflicto oculta al anterior. Siria ocult¨® Darfur. Ucrania ocult¨® Siria. Ahora el conflicto en L¨ªbano oculta Gaza. Y si se va a la guerra con Ir¨¢n, ocultar¨¢ a todos los dem¨¢s. El foco siempre es limitado. En Armenia y en Venezuela no hay grupos terroristas, pero la represi¨®n en ambos pa¨ªses es una lucha por la civilizaci¨®n.
P. La crisis en Venezuela ha generado mucha pol¨¦mica en Espa?a. El PP acus¨® al Gobierno de participar en un golpe de Estado y a Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero de ser c¨®mplice de Nicol¨¢s Maduro. ?C¨®mo valora esa mediaci¨®n del expresidente espa?ol?
R. No s¨¦ por qu¨¦ se ve como un tema de derechas o izquierdas. Es un tema de derechos. Venezuela se ha convertido en un gobierno dictatorial, Maduro ha dado un golpe de Estado para quedarse en el poder. Zapatero, cualquier mediador, debe asumir que es un tiempo nuevo en el que hay un gobierno ileg¨ªtimo. Al fiscal del Tribunal Penal Internacional no le ha temblado el pulso para procesar a Putin y Netanyahu y no le va a temblar con Maduro. Pero la justicia sola no alcanza. Falta apoyo pol¨ªtico.
P. Explica en el libro que la estrategia de combatir el terrorismo con guerra provoc¨® el desplazamiento de millones de personas y que cuando parte de ellas llegaron a Europa fueron percibidas como una amenaza, lo que favoreci¨® el auge de la extrema derecha y de los discursos xen¨®fobos. La poblaci¨®n musulmana es la principal v¨ªctima del terrorismo, pero no es percibida as¨ª. ?A qu¨¦ cree que se debe?
R. Europa tiene una especie de dependencia ideol¨®gica muy fuerte de EEUU y los l¨ªderes pol¨ªticos a menudo trabajan a corto plazo, en sobrevivir sin prever las consecuencias. Esos desplazamientos masivos provocados por una estrategia err¨®nea hicieron que Europa se volviera menos hospitalaria y que muchos dejaran de distinguir entre v¨ªctimas y victimarios, de forma que las v¨ªctimas del terrorismo isl¨¢mico pasaron a ser sospechosos de ser terroristas isl¨¢micos. Un mundo que ve a amigos y enemigos es un mundo en guerra con la gente, un mundo de tribus.
P. ?Qu¨¦ escenario ve dentro de un a?o en Gaza, Israel y Ucrania?
R. Existe la posibilidad de que Israel bombardee Ir¨¢n y que haya una escalada b¨¦lica. Azerbaiy¨¢n recibe armas de Israel y las utiliza contra Armenia. Si Israel bombardea Ir¨¢n, Azerbaiy¨¢n va a invadir Armenia. Hay un efecto domin¨® que no percibimos porque faltan autoridades que piensen en global. Yo creo que en Ucrania debe haber un acuerdo. Necesitamos el liderazgo de pa¨ªses medianos y peque?os para ir caminando hacia el modelo de justicia, abandonando el de la guerra. La transformaci¨®n tiene que ser caso a caso.