Gu¨ªa para perderse (s¨ª, para perderse) con las amenazas de aranceles de Trump

Las amenazas de aranceles de Donald Trump no han dejado de ser cre¨ªbles, pero s¨ª han dejado de ser fiables. El presidente de Estados Unidos quiere reducir el d¨¦ficit comercial a golpe de impuestos a las importaciones, pero en su verborrea de comparecencias casi diarias, Trump es capaz de sostener una cosa y la contraria. Atender a cada una de sus indicaciones es probablemente la mejor forma de perderse.

De momento, solo hay nuevos aranceles del 10% a una parte de los env¨ªos chinos y parecen haber entrado en vigor un poco por accidente. Sin embargo, hay amenazas a diestro y siniestro por motivos diversos que se entrecruzan entre s¨ª. La incertidumbre e inseguridad sobre su pol¨ªtica comercial ha empezado a pasar factura a la econom¨ªa. Las expectativas de inflaci¨®n han aumentado y la confianza de los inversores se ha deteriorado.

¡°Arancel¡± sigue siendo una de las palabras favoritas de Trump, aunque de ser la preferida la haya degradado por debajo de ¡°Dios¡±, ¡°religi¨®n¡± y ¡°amor¡±. De tanto usarla como amenaza, sin embargo, empieza a estar un poco gastada antes de haber empezado a aplicarla siquiera. De la mano del proteccionismo trumpista, el mundo se acerca a la mayor guerra comercial en muchas d¨¦cadas. Eso, claro est¨¢, si las amenazas van en serio.

En la dial¨¦ctica de Trump se superponen aranceles a pa¨ªses con otros destinados a productos, a veces por razones econ¨®micas y en otras ocasiones, pol¨ªticas. Con frecuencia da la impresi¨®n de que usa la amenaza arancelaria como arma de negociaci¨®n para obtener concesiones. Estos son algunos de los frentes abiertos por Trump en su ofensiva.

M¨¦xico y Canad¨¢

Estados Unidos tiene con sus dos vecinos un tratado de libre comercio que fue negociado por el propio Trump en su anterior mandato, el Tratado entre M¨¦xico, Estados Unidos y Canad¨¢ (TMEC o UMSCA). Sin embargo, el d¨¦ficit comercial con ambos pa¨ªses, especialmente con M¨¦xico, se ha disparado en los ¨²ltimos a?os. Trump amenaz¨® en campa?a con aranceles a los coches mexicanos, pero cuando lanz¨® un ultim¨¢tum m¨¢s en serio fue despu¨¦s de ganar las elecciones. Dijo que impondr¨ªa aranceles del 25% a todos sus productos el primer d¨ªa si M¨¦xico y Canad¨¢ no frenaban el tr¨¢fico de fentanilo y la entrada de inmigrantes.

Lleg¨® el primer d¨ªa y Trump dijo que aplicar¨ªa los aranceles el 1 de febrero. Unos d¨ªas antes de esa fecha, la agencia Reuters public¨® que Trump planeaba retrasar los aranceles un mes, hasta marzo, y la Casa Blanca lo desminti¨® rotundamente y dijo que los aranceles se aplicar¨ªan el 1 de febrero. Lleg¨® ese d¨ªa y las mercanc¨ªas segu¨ªan circulando libremente. Esa tarde, Trump firm¨® un decreto para que los aranceles se aplicasen desde el 4 de febrero, provocando un terremoto en los mercados. Sin embargo, luego Trump habl¨® con la presidenta de M¨¦xico, Claudia Sheinbaum, y el primer ministro de Canad¨¢, Justin Trudeau, y a cambio de unas concesiones menores, aplaz¨® los aranceles un mes, hasta el 4 de marzo.

Esta semana, Trump ha insistido varias veces en que la fecha segu¨ªa en pie, pero lleg¨® la primera reuni¨®n de su Gabinete, este mi¨¦rcoles, y dijo a la vez eso y lo contrario: que la aplicaci¨®n ser¨ªa desde el 2 de abril. ¡°No voy a detener los aranceles¡±, dijo primero, antes de describir c¨®mo cre¨ªa que Estados Unidos hab¨ªa sido v¨ªctima de a?os de maltrato por parte de sus vecinos. Y luego le preguntaron cu¨¢ndo entraban en vigor y contest¨®: ¡°El 2 de abril¡±. El peso mexicano y el d¨®lar canadiense reaccionaron al alza. El secretario de Comercio, Howard Lutnick, trat¨® de intervenir para aclarar la situaci¨®n, pero al final no qued¨® del todo claro si los aranceles a M¨¦xico y Canad¨¢ se aplazan otro mes o si Trump se estaba liando con algunos otros de sus aranceles.

Este jueves, el propio Trump trat¨® de deshacer el l¨ªo. Asegur¨® que los impuestos a los productos mexicanos y canadienses se aplicar¨¢n desde el 4 de marzo y que el 2 de abril es para lo que llama aranceles rec¨ªprocos. Aun as¨ª, habr¨¢ que esperar a ver qu¨¦ ocurre de aqu¨ª al martes.

China

En campa?a, Trump prometi¨® imponer aranceles del 60% a todos los productos chinos. En cambio, pasadas las elecciones, amenaz¨® a sus aliados y socios M¨¦xico y Canad¨¢ con un 25% y a China, con un 10%. El tr¨¢mite sigui¨® el mismo camino que el de esos otros dos pa¨ªses, con la diferencia de que Trump dijo que iba a hablar con Xi Jinping (aparentemente para aplazar los aranceles a cambio de concesiones sobre el fentanilo) y da la impresi¨®n de que el presidente chino no se prest¨® a la maniobra. Los aranceles entraron en vigor, pero las aduanas estadounidenses no estaban preparadas para aplicarlos, as¨ª que se colapsaron. Trump tuvo que dar marcha atr¨¢s y eximir a la mayor parte de los env¨ªos, los de menos de 800 d¨®lares de plataformas como Temu y Shein. Ahora, tras su metedura de pata con M¨¦xico y Canad¨¢, anuncia otro 10% de aranceles a los productos chinos desde el martes 4 de marzo.

Uni¨®n Europea

Trump tiene a la Uni¨®n Europea en el punto de mira desde su primer mandato. Equivocadamente, considera que el IVA es una medida proteccionista y discriminatoria frente a los productos estadounidenses y la culpa del d¨¦ficit en los intercambios de bienes (que en gran medida se ve compensado en la balanza de servicios).

El presidente se?al¨® espec¨ªficamente a la UE y al IVA cuando anunci¨® lo que denomina aranceles rec¨ªprocos. Aunque rompe con las reglas de la Organizaci¨®n Mundial de Comercio y su cl¨¢usula de naci¨®n m¨¢s favorecida, el principio es sencillo: poner a los otros pa¨ªses los mismos aranceles que le ponen a Estados Unidos. Suena justo. Sin embargo, cuando en la coctelera se meten toda clase de elementos subjetivos y se interpreta el IVA como lo que no es, el resultado puede ser cualquiera.

De hecho, antes de esperar a los c¨¢lculos, Trump ya dijo el mi¨¦rcoles que los aranceles a la Uni¨®n Europea ser¨¢n del 25%. En su decreto de comercio rec¨ªproco, Trump hablaba de pa¨ªses, no de bloques comerciales. De nuevo, no est¨¢ claro del todo si el 25% se refiere a un arancel general o si es para aquellos productos a proteger que ha identificado, como aluminio, acero, autom¨®viles, semiconductores y productos farmac¨¦uticos y a los que dijo que aplicar¨ªa esa tarifa.

Su animadversi¨®n hacia la UE qued¨® clara el mi¨¦rcoles: Trump dijo que consideraba que era ¡°un caso diferente¡± a otras situaciones porque consideraba que el grupo se hab¨ªa ¡°creado para joder a Estados Unidos¡±. ¡°Realmente se han aprovechado de nosotros de una manera diferente¡±, dijo.

Trump tambi¨¦n aprob¨® un decreto en el que amenaza a los pa¨ªses que tienen una tasa Google (entre ellos Espa?a) con represalias comerciales y fiscales. Incluso agita la amenaza de aranceles sin concretar a la Uni¨®n Europea (y tambi¨¦n al Reino Unido) si exigen a las redes sociales pol¨ªticas de moderaci¨®n de contenidos que combatan la desinformaci¨®n y el discurso de odio.

Aranceles rec¨ªprocos

Los mal llamados aranceles rec¨ªprocos no son solo para los pa¨ªses de la UE, sino para todo el mundo. Estados Unidos tendr¨¢ en cuenta no solo los niveles tarifarios, sino tambi¨¦n las barreras no arancelarias, incluidas las regulatorias, monetarias, fiscales o de otro tipo. Lutnick se ha comprometido a tener los c¨¢lculos listos para el 1 de abril, aunque Trump prefiere actuar a partir del 2 de abril porque el 1 es el d¨ªa de las inocentadas.

Aluminio y acero

Trump ha aprobado aranceles generalizados del 25% al aluminio y al acero que, en principio, entran en vigor el 12 de marzo. En su primer mandato, tambi¨¦n grav¨® esos productos. El presidente ha dado a entender que esos aranceles se superpondr¨ªan a los que correspondan a cada pa¨ªs. De ese modo, por ejemplo, el acero y aluminio mexicanos llegar¨ªan a estar hipot¨¦ticamente gravados con un 50%. Para otro metal, el cobre, y sus derivados, Trump ha ordenado abrir una investigaci¨®n para estudiar si impone tambi¨¦n aranceles.

Coches, chips y farmacia

El 25% parece la cifra m¨¢gica arancelaria de Trump. Tambi¨¦n ha amenazado con esos impuestos a la importaci¨®n de coches, semiconductores y productos farmac¨¦uticos. No est¨¢ claro cu¨¢ndo entran en vigor, si recogen excepciones ni si se superponen a otros aranceles geogr¨¢ficos, como los rec¨ªprocos o los previstos para M¨¦xico y Canad¨¢.

Petr¨®leo y gas

Trump anunci¨® desde el Despacho Oval de la Casa Blanca que aprobar¨ªa aranceles al petr¨®leo y el gas el 18 de febrero, una de esas fechas que de vez en cuando lanza de forma algo arbitraria sin que quede claro a qu¨¦ obedecen. Lleg¨® el 18 de febrero y no pas¨® nada. Trump apenas ha vuelto a hablar de aranceles al petr¨®leo y el gas.