Los casos penales contra Trump reaparecen en la recta final de la campa?a de EE UU

Donald Trump no solo compite por volver a la Casa Blanca y recuperar el poder en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre. Es posible que para ¨¦l est¨¦ en juego evitar ir a la c¨¢rcel por las decenas de delitos de que le acusa un fiscal especial nombrado por el Departamento de Justicia en dos casos diferentes. Ambos casos parec¨ªan en el limbo. El de los papeles clasificados de Mar-a-Lago por la sorprendente decisi¨®n de la jueza de archivarlo. El de la interferencia electoral de Washington, por la sentencia sobre inmunidad presidencial del Tribunal Supremo. Los dos han reaparecido esta semana a poco m¨¢s de dos meses de las elecciones. Junto con la sentencia pendiente del caso de Nueva York y la instrucci¨®n del caso de Atlanta, pueden marcar la recta final de la campa?a electoral, aunque su impacto es incierto.

Hace unas d¨¦cadas, una acusaci¨®n penal como alguna de las que pesa contra Trump habr¨ªa acabado con la carrera de cualquier pol¨ªtico. Ning¨²n presidente ni expresidente hab¨ªa sido imputado por un gran jurado hasta el republicano, que lo ha sido en cuatro casos diferentes por decenas de delitos. Un jurado popular declar¨® a Trump culpable de 34 delitos por falsedades en facturas, cheques y apuntes contables para ocultar pagos a la actriz de cine porno Stormy Daniels ¡ªpara que guardase silencio y no perjudicase sus opciones electorales en las presidenciales de 2016¡ª. Adem¨¢s, otros jurados le han declarado culpable de fraude, abuso sexual y difamaci¨®n en casos civiles. Pese a ese historial, Trump maneja con maestr¨ªa sus dotes de comunicaci¨®n, sus bulos y sus redes de propaganda para presentarse como un m¨¢rtir, una v¨ªctima de la persecuci¨®n pol¨ªtica.

Ese es el guion que ha seguido esta semana. Dos casos que parec¨ªan aparcados vuelven al primer plano, aunque ninguno de ellos ir¨¢ a juicio antes de las elecciones del 5 de noviembre. La jueza federal Aileen Cannon, nombrada por el propio Trump, decidi¨® archivar en julio de forma sorprendente el caso de los papeles de Mar-a-Lago con la tesis de que el nombramiento del fiscal especial, Jack Smith, era ilegal porque no lo hab¨ªa designado el presidente (lo hizo el fiscal general) ni hab¨ªa sido ratificado por el Senado. Trump celebr¨® la decisi¨®n de la jueza, que romp¨ªa con todos los precedentes al respecto. Sin embargo, Smith present¨® el lunes un recurso ante el Tribunal de Apelaciones del und¨¦cimo circuito o divisi¨®n judicial, que ya ha propinado varios varapalos jur¨ªdicos a la jueza por sus decisiones favorables a Trump. El caso, por tanto, sigue vivo y coleando.

El otro caso que hab¨ªa quedado en el alero es el del mismo fiscal ante un juzgado de Washington D. C. en el que se acusa a Trump por sus intentos de alterar el resultado de las elecciones de 2020, que perdi¨® contra Joe Biden. El juicio estaba fijado para comienzos de marzo, pero los abogados del expresidente recurrieron una y otra vez alegando inmunidad presidencial. El Tribunal Supremo, de mayor¨ªa conservadora, le concedi¨® una amplia inmunidad por los actos realizados en ejercicio de su cargo, convirtiendo en papel mojado parte del escrito de acusaci¨®n inicial, pero dejando que los tribunales inferiores continuasen con el caso y trazasen la frontera.

El fiscal ha conseguido una nueva imputaci¨®n votada por otro gran jurado que considera que se adapta a la nueva doctrina y que mantiene la acusaci¨®n por los cuatro delitos de la anterior. En ella, deja al margen aquellos actos que, en su opini¨®n, quedan amparados por la sentencia del Supremo, principalmente sus interacciones con el Departamento de Justicia, y se presentan como actos privados de un candidato las presiones sobre autoridades para alterar el resultado. Trump y sus abogados creen que la nueva acusaci¨®n sigue violando su inmunidad. La jueza Tanya Chutkan, nombrada por Barack Obama, tendr¨¢ que decidir, al menos en primera instancia.

A la espera de condena

La misma sentencia del Supremo sobre inmunidad llev¨® al juez Juan Merchan a aplazar la sentencia por el caso Stormy Daniels, inicialmente prevista para el 10 de julio. El juez la aplaz¨® hasta el 18 de septiembre para dar tiempo a las partes a alegar si dicho fallo del alto tribunal afectaba a su caso o no y tomar una decisi¨®n, esta prevista para el 16 de septiembre. Los abogados de Trump solicitaron la semana pasada al juez que aplazase la condena hasta despu¨¦s de las elecciones. En teor¨ªa, la decisi¨®n de Merchan podr¨ªa poner a Trump entre rejas durante a?os, aunque lo m¨¢s habitual en casos como el suyo es que quede en libertad condicional.

Que Trump prefiera que la condena se aplace es se?al de que cree que le puede perjudicar electoralmente, aunque el efecto sobre los votantes no est¨¢ del todo claro. El expresidente cay¨® algo en las encuestas despu¨¦s de ser declarado culpable a finales de mayo, pero con frecuencia ha utilizado sus problemas judiciales para movilizar a los suyos y lograr donaciones para su campa?a. Tras las decisiones del fiscal especial, Trump ha insistido sin fundamento en que se trata de una ¡°caza de brujas¡±. Ha dicho que la acusaci¨®n de Washington es ¡°rid¨ªcula¡± y deber¨ªa ser desestimada inmediatamente y que todo es un intento de ¡°interferir en las elecciones¡±.

Curiosamente, la campa?a dem¨®crata, por lo general muy agresiva contra Trump, ha guardado silencio sobre las ¨²ltimas decisiones de Smith. Durante la convenci¨®n de Chicago de la semana pasada, varios dirigentes del partido trazaron el contraste entre la fiscal Kamala Harris y el delincuente convicto Donald Trump. Es una comparaci¨®n que muchos en el partido esperan que emerja tambi¨¦n en el debate del pr¨®ximo 10 de septiembre. Sin embargo, los dem¨®cratas no han hurgado esta semana en la herida, acaso temerosos de dar credibilidad a la tesis trumpista de la persecuci¨®n pol¨ªtica.

Los m¨ªtines de esta semana servir¨¢n para medir qu¨¦ aproximaci¨®n hacen a la cuesti¨®n los candidatos. Harris est¨¢ de campa?a en autob¨²s por Georgia, uno de los Estados decisivos, junto a su candidato a vicepresidente, Tim Walz, y dar¨¢ un mitin en Savannah este jueves. Trump tiene programado un mitin La Crosse (Wisconsin) este jueves y otro en Johnstown (Pensilvania) para el viernes, en otros dos Estados decisivos.

Harris, adem¨¢s, ha concedido por fin su primera entrevista desde que el presidente Joe Biden se retir¨® y le dio paso como candidata hace m¨¢s de un mes, en la que tambi¨¦n puede aparecer la cuesti¨®n de las imputaciones de Trump. Se emitir¨¢ en la CNN este jueves a las 21.00 horas del Este de Estados Unidos, las 3.00 de la madrugada del viernes en la Espa?a peninsular, con la peculiaridad de que Harris la da acompa?ada por Tim Walz.

J. D. Vance, candidato republicano a la vicepresidencia, se burl¨® de ello este mi¨¦rcoles, diciendo que es como si un adolescente llevara a su madre o a su padre a su primera entrevista de trabajo. ¡°Esa es un poco la sensaci¨®n que da¡±, dijo Vance en WISN-AM, una radio conservadora de Wisconsin, seg¨²n recoge AP. ¡°Kamala Harris est¨¢ un poco demasiado nerviosa, un poco demasiado ansiosa, por esta entrevista. As¨ª que va a llevarse a Tim Walz para que la ayude y asegurarse de que si se mete en un charco, ¨¦l pueda sacarla de apuros¡±, a?adi¨®.

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