Mitos y verdades sobre el fr¨ªo y los ni?os

Todo el mundo sabe que hay que abrigarse; llevar bufanda; vestir a los ni?os como buzos; no andar descalzos o no salir a la calle con el pelo mojado para evitar resfriarse, constiparse, coger una gripe o una pulmon¨ªa. Y ahora resulta que si no queremos acatarrarnos (generalizando, la covid-19 es un resfriado) hay que pasar fr¨ªo, comer en una terraza a seis grados, tomar el aperitivo a diez metros de la puerta del bar o ver a nuestros hijos en el parque bajo el fr¨ªo invernal. Es parad¨®jico que el a?o que m¨¢s fr¨ªo vamos a pasar todos, incluido ni?os, es el a?o que menos vamos a constiparnos.

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Mentiras y verdades sobre el resfriado en ni?os: el fr¨ªo no constipa

Los coronavirus causan resfriados, se sabe desde hace mucho. Hay por lo menos siete tipos, de los cuales tres cursan con s¨ªntomas graves. Uno de estos tres, desgraciadamente, es la covid-19 que causa un extra?o resfriado. Normalmente, se muestra como muy leve para ni?os, j¨®venes y adolescentes, leve para adultos, en la mayor¨ªa de estos casos asintom¨¢ticos, pero puede presentarse con efectos muy graves para personas con problemas previos o mayores de 60 a?os.

Realmente, el primer p¨¢rrafo muestra muchas inexactitudes, aunque muy arraigadas en nuestra cultura, incluso en gente joven y formada. Antes de la pandemia, m¨¢s de una vez, he tenido que sufrir la mirada penetrante de algunos padres en la puerta de la guarder¨ªa cuando no le pon¨ªa el abrigo y la bufanda a mis hijas durante los 25 metros que nos separaban del coche. La frase ¡°va a coger fr¨ªo, o peor, una pulmon¨ªa¡± tambi¨¦n la he o¨ªdo m¨¢s de una vez. Es m¨¢s, a veces he escuchado que alguien que se encontraba en una corriente de aire dentro de una casa por abrir las ventanas, se ha constipado. Pero si ese movimiento de aire se produce como brisa en una puesta de sol en la playa, es agradable y no constipa. Curioso.

Desde el punto de vista cient¨ªfico, el fr¨ªo no se deja o se coge; si no abrigamos a nuestro hijo o a nuestro abuelo, lo ¨²nico que les pasar¨¢ es que tendr¨¢n m¨¢s o menos sensaci¨®n de fr¨ªo. Y si la temperatura baja demasiado puede enfermar, pero de hipotermia, y para que eso suceda, tiene que hacer mucho fr¨ªo, por debajo de 8 grados, y encontrarse pr¨¢cticamente sin ropa.

Igualmente, la famosa pulmon¨ªa no es una enfermedad; se denomina neumon¨ªa y es una consecuencia, casi siempre, de una infecci¨®n previa por virus o bacterias. Es decir, que constipados, gripes o similares, no se contraen por pasar fr¨ªo o mojarse.

Ha hecho falta una pandemia de un virus que afecta a las v¨ªas respiratorias para que la gente se conciencie de que solo se contagia de persona a persona (los contagios indirectos son raros) y que el fr¨ªo no tiene nada que ver de manera directa. Este se relaciona con los contagios solo de manera indirecta, ya que cuando hace fr¨ªo, la gente se encierra en casa, se convive m¨¢s cerca y no se abren las ventanas. Adem¨¢s, aunque parezca lo contrario, el aire invernal es m¨¢s seco y esto facilita el transporte del virus por el aire, cuando hay m¨¢s humedad en verano el viaje por el aire es m¨¢s dif¨ªcil para el virus. Por eso hay constipados y gripes, y por tanto coronavirus, igualmente en Suecia que en el sur de Italia, la India o Brasil donde la media de temperatura es m¨¢s alta. Hay teor¨ªas que relacionan el fr¨ªo y el debilitamiento del sistema inmune, aunque ninguna est¨¢ contrastada. No hay m¨¢s que ver la incidencia de los resfriados y la gripe este a?o para demostrar que pasar m¨¢s o menos fr¨ªo influye poco y que las medidas que tomamos contra el coronavirus son las que est¨¢n haciendo que estas enfermedades respiratorias este a?o est¨¦n bajo m¨ªnimos.

Realmente abrigarse sirve para estar c¨®modos y no pasar fr¨ªo, por eso los ni?os en cuanto juegan un poco les sobra toda la ropa y aparece la guerra con los adultos para que se abriguen, lo cual sirve para poco, salvo para discutir y que est¨¦n inc¨®modos. Siempre pasa lo mismo, salen abrigados de casa y nos pasamos el resto del d¨ªa llevando su abrigo nosotros, porque no lo quieren. Si se constipan ser¨¢ porque alguien les contagie con un virus, no porque tengan m¨¢s o menos fr¨ªo. Evidentemente si un ni?o es muy peque?o y no puede comunicarse con nosotros, la decisi¨®n de abrigarle es nuestra, pero en la justa medida. Si abrigamos un poco de menos, el cuerpo es m¨¢s eficiente a la hora de generar calor que si abrigamos en exceso y tiene que enfriarse.

Los mam¨ªferos y las aves son las ¨²nicas clases del reino animal homeotermas, es decir, que deben de mantener una temperatura interna constante para que su organismo funcione de manera correcta. Para ellos, existe una zona de confort t¨¦rmico que en los humanos est¨¢ entre 12 y 40 grados donde, si el tiempo es seco, el cuerpo tiene mecanismos para mantener la temperatura interna sin ayudas adicionales. La contracci¨®n de los vasos sangu¨ªneos, la piloerecci¨®n (piel de gallina), la contracci¨®n muscular (tiritona) y la elevaci¨®n del metabolismo basal, sirven para elevar nuestra temperatura, mientras el sudor y la vasodilataci¨®n, entre otros, sirven para bajarla. En el cerebro un grupo de neuronas situadas en el hipot¨¢lamo, que son termosensibles, se encargan de organizar la respuesta termorreguladora y funcionan muy bien.

La naturaleza nos da ejemplos de c¨®mo se genera calor corporal para no pasar fr¨ªo. Todos hemos visto la pel¨ªcula Titanic y sabemos que en el agua la p¨¦rdida de calor corporal es hasta 90 veces mayor que en la tierra, por eso, la hipotermia al caerse al agua fr¨ªa es muy r¨¢pida. Las marsopas, unos peque?os delfines, permanecen en movimiento toda su vida, incluso cuando duermen, de esa manera generan calor por la actividad metab¨®lica y muscular contrarrestando la p¨¦rdida de calor por el contacto con el agua.

Es evidente que moverse contrarresta la sensaci¨®n de fr¨ªo. Vemos continuamente a deportistas en pantal¨®n corto y camisetas haciendo deporte en invierno, incluso lloviendo, sin constiparse m¨¢s que el resto de la poblaci¨®n. Por eso nuestros hijos en cuanto empiezan a jugar les sobra toda la ropa. Si les obligamos a abrigarse haremos que su sistema termorregulador no trabaje y terminar¨¢n siendo frioleros. Es algo parecido a lo que sucede con las alergias; es bueno que el sistema inmune trabaje. Vivir en un ambiente libre de microbios puede provocar que nuestro sistema inmune se hipersensibilize y desarrolle alergias.

Las medidas que todos hemos aprendido en esta pandemia ser¨¢n las que minimicen el contagio de enfermedades v¨ªricas de las v¨ªas respiratorias como los rinovirus, coronavirus u ortomixovirus, este ¨²ltimo el causante de la gripe.

Desde el punto de vista antropol¨®gico este tipo de costumbres se originan en momentos donde la poblaci¨®n sufre una crisis importante y luego se generalizan. En nuestro pa¨ªs la posguerra caus¨® mucha hambre y el fr¨ªo era dif¨ªcil de combatir en un ambiente de pobreza. Nuestros abuelos, que la sufrieron y tuvieron que salir adelante, tienen muy arraigadas esas carencias (recordamos la frase ¡°una guerra os hac¨ªa falta¡±) y por eso te meten cinco cucharadas de pur¨¦ m¨¢s de las que necesitas y tambi¨¦n inventaron el verdugo y la bufanda de la infancia para nuestro sufrimiento. Aparte de este aspecto antropol¨®gico, es interesante entender el cuidado de los ni?os desde el punto de vista evolutivo como especie respecto de la alimentaci¨®n, el sue?o, las emociones y la salud en general.

Es decir, un humano, s¨ª, los ni?os son humanos, aunque a veces los tratemos como extraterrestres, con una camiseta y un pantal¨®n corto puede estar en ese rango sin riesgo de sufrir hipotermia o hipertermia regulando su temperatura con los mecanismos termorreguladores que la evoluci¨®n le ha dado a lo largo de millones de a?os. No se constipar¨¢n, tendr¨¢n gripe, coger¨¢n fr¨ªo o una pulmon¨ªa, salvo que otro humano le contagie un virus respiratorio, como es el caso del coronavirus.

En resumen, las medidas que estamos tomando en la actual pandemia son las que evitan los constipados y gripes, independientemente se pase m¨¢s o menos fr¨ªo.

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