Peleas entre hermanos: c¨®mo controlarlas en cinco pasos
Comprender las emociones de los hijos y ayudarles a procesarlas son los primeros y ¨²nicos pasos hacia el buen entendimiento entre los convivientes
Todos los que tenemos hermanos nos ha pasado. Ya seas la mayor, la mediana, el peque?o o el beb¨¦, lo cierto es que los problemas entre hermanos, desde esas peque?as ri?as, hasta las discusiones, grandes peleas, y hasta los golpes, son uno de los problemas que m¨¢s traen de cabeza a muchos padres. Y es que, muchas de esas inocentes disputas, no se trata solo de ¡°cosas de ni?os¡±, sino que, en ellas se esconden emociones no resueltas que, en realidad, no saben y no pueden manejar.
Un tema que los expertos han analizado, hasta descubrir, por ejemplo, en un estudio publicado en la revista especializada Trauma, Abuso y Violencia (TVA) que podemos llegar a pelearnos hasta ocho veces en una hora. Sin duda, un dato muy curioso, ya que se trata de un tema que nos puede ir de las manos. Algo que, quiz¨¢s, y al final, no sea m¨¢s que algo en nuestro interior; y de nuestro complejo mundo de la mente y de las emociones. Pues, el hecho de entenderlas y saberlas manejar, ya desde que somos unos ni?os, no es una tarea sencilla, sino que resulta, por el contrario, bastante compleja: los celos, las envidias, o la competitividad entre hermanos, no es una cuesti¨®n para nada trivial, ya que, de no saber controlar ciertas situaciones, se podr¨ªan da?ar profundamente los v¨ªnculos entre hermanos.
Usualmente, y tal y como se explica en el estudio, se aconseja empezar a pasar m¨¢s tiempo con ellos, con cada uno de los hermanos para atender de manera individual sus necesidades espec¨ªficas, pero tambi¨¦n realizarlas todos juntos. Si bien, este es el primer paso esencial para evitar tanto conflicto, la atenci¨®n no es suficiente para sanar o disminuir lo que est¨¦ pasando.
Para la psic¨®loga cl¨ªnica de la Universidad de Columbia, Laura Markham, y autora del blog Aha Parenting, cualquier ni?o que pega una y otra vez a su hermano o hermana sabe en su interior que su actitud es la de un peque?o monstruo, pero, adem¨¢s, tambi¨¦n puede interiorizar el hecho de que sus padres no entiendan esos malvados comportamientos. ¡°El ni?o puede guardarse esos sentimientos, no sacarlos y llegar a desconectarse de los padres hasta el punto de no llegar a aceptar su amor, as¨ª que, es importante construir una red de confianza, comunicaci¨®n, seguridad y conexi¨®n emocional, para luego ayudarle con sus enredados sentimientos¡±, explica. As¨ª, esta experta recomienda algunos m¨¦todos para evitar que ciertas situaciones se controlen de forma adecuada.
1. Conectar de manera reconfortante
Generar confianza y conexi¨®n emocional con tu hijo, pasando media hora al d¨ªa con ¨¦l, es un buen comienzo. La experta asegura que a ¨¦l le encantar¨¢ ser el centro de tu atenci¨®n y saber que quieres hacerle feliz, pues esto reforzar¨¢ las bases de sus sentimientos de autovalidaci¨®n. ¡°Deja que decida ¨¦l mismo qu¨¦ hacer con ese tiempo, ignora cualquier distracci¨®n y tan solo dale todo el amor que sea posible¡±, comenta.
2. Generar seguridad y ayudarle a re¨ªrse de sus preocupaciones a trav¨¦s de los juegos
Todos los ni?os necesitan re¨ªrse a diario, y un ni?o que pega constantemente, mucho m¨¢s. As¨ª que, para esta experta, es esencial que se r¨ªa de esas agresiones por extra?o que parezca, y de su propio miedo, por lo que recomienda cualquier juego de agresi¨®n fingida que lo haga re¨ªr, pues esto le ayudar¨¢ a sanar y fortalecer¨¢ su conexi¨®n con los padres.
¡°A la mayor¨ªa de los ni?os se les ocurren los juegos que, en realidad, necesitan, por ejemplo, el hecho de jugar a que es un monstruo y te asusta, as¨ª que, si empieza una guerra de almohadas, te quiere asustar y se r¨ªe, sabr¨¢s que vas por el buen camino¡±, contin¨²a.
3. Cuando pegue a tu hermano, ac¨¦rcate primero al agredido
Al principio, sentir¨¢s una necesidad urgente de ense?arle al ni?o que ha pegado una lecci¨®n; pero detente y respira. ¡°En ese momento, te necesita la persona que ha sido agredida, as¨ª que habla con aquel de tus hijos que le peg¨® un poco despu¨¦s, que no se va a ir a ning¨²n lado. As¨ª, consuelas a tu hijo herido, te entran ganas de castigar a su hermano, pero lo que realmente quieres es detener los golpes, as¨ª que solo trata de entender qu¨¦ ha sucedido¡±, dice Markham.
4. Ay¨²dale a superar su enfado para que llegue a sus temores y derrame l¨¢grimas
Cuando el ni?o pega, aunque no veas ninguna se?al de emoci¨®n espec¨ªfica, podemos estar seguros de que sus sentimientos est¨¢n impulsando sus acciones. ¡°Despu¨¦s de comprobar de que el ni?o golpeado est¨¢ bien, la meta es ayudar a su hermano a que saque sus emociones a la luz, mostr¨¢rtelas y dejarlas ir, porque una cosa muy buena sobre las emociones humanas es que una vez que las sentimos, desaparecen¡±, asevera.
5. Ante todo, prevenci¨®n
Al final, es nuestra responsabilidad mantener a nuestros hijos seguros. ¡°Podr¨ªamos pensar que s¨ª es posible dejar a un beb¨¦ de nueve meses con un ni?o de cuatro a?os, pero ahora sabemos que no es del todo posible¡±. Existen los matices, y desear que las cosas sean de otra forma, no ayuda.
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