La importancia del tacto y los masajes en los beb¨¦s

El ser humano al nacer es el mam¨ªfero m¨¢s indefenso. Depende de los otros para alimentarse, para los cuidados y para que le protejan hasta que, bastante tiempo despu¨¦s, pueda valerse por s¨ª mismo. El olfato es el sentido m¨¢s primitivo e instintivo. Hace que un reci¨¦n nacido sepa d¨®nde est¨¢ su alimento por su olor y puede incluso reptar hasta el pecho de la madre. Es el tacto y la piel, el otro sentido trascendental en los meses iniciales. Nacemos y necesitamos que nos abriguen, que nos toquen, que nos palpen. La piel es el ¨®rgano que les va a transmitir m¨¢s informaci¨®n del exterior. Notar el calor de la persona que les acuna o abraza, as¨ª como sentir el latido del otro coraz¨®n, les da tranquilidad y seguridad.

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Natalia Libr¨¢n es experta en m¨¦todos naturales y trabaja en el Centro Gong Sun del barrio madrile?o de Aluche: ¡°A los adultos el tocar la piel de un beb¨¦ nos genera oxitocina, las conocidas hormonas del amor, acariciarlos nos provoca ternura que nos inspira el cuidar y proteger a esa criatura indefensa. Adem¨¢s de generar el v¨ªnculo entre adultos y beb¨¦ para comunicarse y entenderse, es una manera natural de asegurar la supervivencia del peque?o¡±. La ternura y el amor son los mecanismos de defensa para no olvidarnos del cuidado o del abandono de la criatura. Marta Saeta es fisioterapeuta en Criar con Sentido Com¨²n, y nos cuenta que para la mam¨¢, el pap¨¢ o para el cuidador los masajes y acariciar al ni?o o ni?a es bueno porque le da confianza en s¨ª mismo, ¡°permite tambi¨¦n detectar y responder a los mensajes no verbales del beb¨¦ adem¨¢s de saber si algo le gusta o le disgusta. Tambi¨¦n es bueno para que ambos se relajen. Lo puede hacer el progenitor no gestante (si lo hay) para aumentar el v¨ªnculo entre ambos, incluso los hermanos o hermanas mayores pueden estrechar lazos a trav¨¦s del masaje¡±.

La matrona Esther Esteban lleva muchos a?os impartiendo talleres de masajes para beb¨¦s. ¡°Cuando comenc¨¦ mi andadura por el masaje infantil me sorprend¨ªan los comentarios de las madres sobre todo lo que aprend¨ªan de sus beb¨¦s al realizar el masaje. Para muchas familias supone un momento l¨²dico especial en el que intentan entenderse¡±. La matrona considera que el posparto en una ¨¦poca que puede resultar dura, y el masaje ayuda a comprender las se?ales del beb¨¦ y ayuda a las madres a sentirse m¨¢s conectadas: ¡°Hay estudios que afirman que incluir grupos de masaje infantil en las terapias de mujeres con depresi¨®n posparto mejora la recuperaci¨®n de estas¡±. Esther Esteban se muestra tajante: ¡°Un beb¨¦ sin contacto f¨ªsico se muere. Lo s¨¦, suena catastr¨®fico, pero despu¨¦s de d¨¦cadas expandi¨¦ndose frases como no le cojas que le malcr¨ªas y similares (que desafortunadamente todav¨ªa se oyen) hay que hablar claro: no es un capricho, es una necesidad. A trav¨¦s del contacto los ni?os se sienten seguros, contenidos, amados y cuidados. Es su forma de sentir el mundo, de comunicarse y de recibir mensajes. De esta forma est¨¢n tranquilos, pero no quiero decir solo que est¨¦n calladitos o dormidos, sino que su cerebro est¨¢ en calma sinti¨¦ndose seguro, sin un torrente de neurotransmisores de estr¨¦s que sabemos que alteran el desarrollo de su cerebro¡±.

Los masajes, aparte de ser una forma de comunicaci¨®n en s¨ª misma, tienen la capacidad de estimular y relajar. Por una parte estimulamos el desarrollo en general, porque al tocar se fomenta la creaci¨®n de mielina en los nervios, que refuerza al desarrollo del sistema nervioso. ¡°Tambi¨¦n mejora el tr¨¢nsito intestinal, que seguramente sea lo m¨¢s buscado por las familias por el tema de los gases; estimula el sistema circulatorio y mejora la respuesta de movimientos del beb¨¦; y protege el sistema inmunitario porque, al prevenirse la segregaci¨®n de neurotransmisores y hormonas del estr¨¦s como el cortisol, el estado defensivo del ni?o/a se mantendr¨¢ m¨¢s fuerte¡±, afirma la matrona Esther Esteban. Natalia Libr¨¢n cree que los primeros masajes suelen ser m¨¢s caricias que otra cosa. ¡°Crea un momento de intimidad y ayuda a coger confianza el uno en el otro. Se crea esa mirada de conexi¨®n¡±. El contacto de las manos con el cuerpo del beb¨¦ estimula la percepci¨®n de su cuerpo. ¡°Con el masaje se puede ver si el cuerpo del beb¨¦ tiene alguna cadena muscular bloqueada por la postura fetal dentro de la tripa materna tantos meses, o alguna manipulaci¨®n en el proceso del parto. Con el masaje se puede ayudar a que el cuerpo encuentre su equilibrio f¨ªsico tambi¨¦n¡±, asegura Natalia Libr¨¢n.

Marta Saeta nos habla de los movimientos para trabajar el masaje infantil: ¡°Se pueden dividir por zonas del cuerpo: abdomen, brazos, piernas, cara y espalda. En general el abdomen es la primera zona a tratar, con movimientos circulares en sentido del reloj (sol y luna), hacer como si hici¨¦ramos un agujero en la arena, pases deslizantes laterales, o el I LOVE YOU, un movimiento en ¡°U¡± invertida para trabajar el intestino grueso. Tambi¨¦n en brazos y piernas se pueden hacer movimientos circulares de pie a cadera o de mano a hombro, masajes en palmas y plantas, y pases deslizantes ascendentes. En cara haremos movimientos suaves para relajar la musculatura y favoreceremos el contacto visual. Y si nuestro peque?o nos lo permite, terminaremos en la espalda, haciendo roces deslizantes en todas las direcciones¡±.

Si a?adimos m¨²sica con canciones y juegos, mucho mejor. No solo se trata de hacer masaje, sino de un momento especial de juego y diversi¨®n. ¡°Y un aspecto importante: no solo el masaje es para los beb¨¦s, se trata de un h¨¢bito para practicar durante a?os, adaptando e incluyendo m¨¢s movimientos, se puede dar masaje a los ni?os hasta que ellos quieran, incluso a adolescentes. Seg¨²n crecen les ense?amos a trav¨¦s de masaje a c¨®mo es ser tocado desde el respeto, fomenta una forma de relajarse soltando tensiones a trav¨¦s de tacto y estrecha la relaci¨®n mejorando la comunicaci¨®n entre la familia¡±, concluye la matrona Esther Esteban.

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