¡®Trauma de traici¨®n¡¯: el abuso infantil tras el uso de la imagen de los hijos para vender en Instagram
Dentro del grupo de madres influyentes hay dos tipos: las que usan a sus reto?os mostrando sus caras y las que solo hablan de ellos, protegiendo as¨ª su intimidad. Nos centramos en las primeras

Instagram est¨¢ lleno de perfiles variopintos y, sin duda, en ellos triunfan personajes de todo tipo. Muchos de ellos son de mujeres que son madres y que, aprovechando que una progenitora utiliza todo tipo de productos para sus hijos, encuentran en la publicidad de los mismos una fuente de ingresos elevada y, a la vez, divertida, ya que solo necesitan grabarse a s¨ª mismas, hablar del producto y facturar. Eso s¨ª, sabiendo c¨®mo manejarse en las redes por excelencia para esto que es Instagram, sobre todo en los stories.
Dentro de este grupo de madres influyentes hay dos tipos: las que usan a sus hijos mostrando sus caras ante de decenas de miles de seguidores y las que hablan de ellos, incluso sacan sus voces, pero jam¨¢s sus caras protegiendo as¨ª su intimidad. Vamos a centrarnos en el caso de las primeras, en las que sacan a los ni?os a todas horas, mostrando a todo el mundo la intimidad de sus vidas. ?Qu¨¦ pasar¨¢ en el futuro con ellos? ?Les pasar¨¢ factura? ?Se preguntar¨¢n con qu¨¦ derecho sus padres mostraron su intimidad d¨ªa tras d¨ªa?
Manuel Hern¨¢ndez es psic¨®logo especializado en traumas infantiles y autor de varios libros como Apego y Psicopatolog¨ªa y Apego, disociaci¨®n y trauma. Se muestra bastante claro en su opini¨®n sobre sacar a tus hijos en redes sociales cuando eres una persona con decenas de miles de seguidores y que, adem¨¢s, lo haces para sacar un rendimiento econ¨®mico. ¡°Se habla mucho del trauma en la infancia y del apego, puesto que no podemos entender una sin la otra. La infancia es una etapa de mucha vulnerabilidad y que necesita la presencia de adultos responsables que ayuden al ni?o a madurar y desarrollarse de un modo adecuado. Cuando en la infancia alguna persona con m¨¢s poder se aprovecha de la debilidad del menor, entonces hablamos del trauma de abuso. Y es el m¨¢s dif¨ªcil de superar. Puesto que las figuras de apego son las que deber¨ªan proteger al menor, cuando se produce este abuso el cerebro activa dos circuitos emocionales que son incompatibles: el de la conexi¨®n y el de defensa. Hay muchos tipos de abusos, el m¨¢s conocido medi¨¢ticamente es el abuso sexual, pero tambi¨¦n hay abusos de maltrato, ignorar al ni?o o sobreprotegerlo y uno muy frecuente pero desapercibido, que de alg¨²n modo engloba a todos que es el trauma de traici¨®n¡±, explica.
Las personas en las que hemos confiado nos traicionan
Este consiste en que las personas en las que hemos confiado nos traicionan: ¡°Cuando ese ni?o alcance la adolescencia se dar¨¢n unos cambios biol¨®gicos con la sexualidad, que har¨¢n que tenga capacidad de juicio cr¨ªtico y de reflexi¨®n y de sacar sus propias conclusiones. Es decir, si durante la infancia tuvo que confiar y creer que lo que hac¨ªan los cuidadores era por su bien cuando llegue a la adolescencia, puede que se d¨¦ cuenta de que ha sido utilizado, y comenzar¨¢ una lucha contra sus progenitores y contra s¨ª mismo¡±.
No es un fen¨®meno nuevo, ya que durante d¨¦cadas ha sucedido en la industria del espect¨¢culo. ?Qui¨¦n no recuerda a ni?os prodigio como Joselito o Marisol? Estos ni?os prodigio, explica el experto, ¡°har¨¢n en su infancia lo que sus padres les pidan e incluso se pueden sentir muy orgullosos de ello, pero esto les obligar¨¢ a una maduraci¨®n excesivamente r¨¢pida de su cerebro y la p¨¦rdida de su infancia¡±. ¡°Como es obvio¡±, prosigue, ¡°estos padres son unos narcisistas que usan a sus hijos para saciar sus sensaciones de fracaso o de no haber triunfado en la vida, es como si a trav¨¦s de sus hijos alcanzaran la fama, el dinero o la atenci¨®n que no tuvieron en su infancia. Como sabemos todos, el dinero y el poder es un sustituto del cari?o¡±.
Cuando estos ni?os alcancen la adolescencia y la edad adulta, seg¨²n mantiene Hern¨¢ndez, ¡°ser¨¢n ni?os con ansiedad, trastornos de personalidad y conductas muy desreguladas. Y sobre todo mucha rabia hacia sus progenitores por ese abuso de traici¨®n. Podr¨ªan decir a sus padres yo cre¨ªa que todo eso era por mi bien, pero ahora soy consciente que era solo por el tuyo. Algo insoportable para cualquier ser humano. Las personas que han sufrido este tipo de abuso de traici¨®n en la edad adulta no podr¨¢n confiar en nadie, sentir¨¢n profundas sensaciones de vac¨ªo y rabia que ser¨¢n muy dif¨ªciles de gestionar. Por eso muchos de estos ni?os prodigio acaban con problemas de conducta, adicciones o trastornos alimenticios¡±.
La relaci¨®n con sus padres ser¨¢ de resentimiento y casi con total seguridad se romper¨¢ en el momento que el ni?o deje de permitir el abuso. ¡°Los padres como buenos narcisistas intentar¨¢n convencer a sus hijos y allegados que todo lo hicieron por el bien del ni?o. Estos padres narcisistas ya sin relaci¨®n con los hijos o con una relaci¨®n muy da?ada tratar¨¢n de seguir los protagonistas de la vida de su hijo, bien intentando manipularlos en el presente o usando y recordando el pasado como manera de no perder el protagonismo que su ego necesita¡±, concluye.
?Qu¨¦ dice la ley?
¡°En los ¨²ltimos tiempos ha habido un auge del uso de las redes sociales como escaparate del d¨ªa a d¨ªa de las personas. Con ello, ha surgido el fen¨®meno conocido como ¡°instamamis¡±, que hace referencia generalmente a madres, aunque tambi¨¦n pueden ser padres, que cuelgan fotos de sus hijos menores de edad en las redes sociales mostrando su identidad a sus usuarios¡±, explica Delia Rodr¨ªguez, abogada experta en derecho de familia en Vestalia Asociados. A ra¨ªz de esto han surgido muchas controversias entre progenitores con posiciones dispares: ¡°Unos permiten su divulgaci¨®n y otros consideran que se est¨¢n vulnerando los derechos de imagen del ni?o y abogan por la necesidad de consentimiento de ambos progenitores para permitir su publicaci¨®n. Aunque pueda resultar obvio, cabe recordar que los derechos de imagen se configuran como derechos personal¨ªsimos. A este respecto, tal y como viene recogido en el art. 4.1? LOPJM, los ¨²nicos titulares de estos son los propios menores de edad¡±.
?Desde un punto legal, un progenitor puede colgar fotos de su hijo menor en una red social sin el consentimiento del otro? ¡°Esta cuesti¨®n ha sido abordada por Tribunal Supremo (Sentencia 655/2015, 30 de junio)¡±, prosigue Rodr¨ªguez, ¡°la Sala declar¨® que la imagen, el honor y la intimidad, constituyen un derecho fundamental de la persona consagrado en el arti?culo 18.1 de la Constitucio?n, que pertenece a los derechos de la personalidad, con todas las caracteri?sticas de los mismos y que se concreta en la facultad exclusiva del titular de difundir o publicar su propia imagen pudiendo en consecuencia evitar o impedir la reproduccio?n y difusio?n, con independencia de cua?l sea la finalidad de esta difusio?n y que en el caso de menores tiene como presupuesto el hecho de que siempre que no medie el consentimiento de los padres o representantes legales de ellos con la ausencia del Ministerio Fiscal, la difusio?n de cualquier imagen de estos ha de ser reputada contraria al ordenamiento juri?dico¡±.
Siguiendo este criterio se pronunciaron las diferentes Audiencias a lo largo del territorio nacional, como la que estableci¨® la Sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid (684/2020 de 29 de junio), esta ¡°es una decisi¨®n que, de no mediar autorizaci¨®n, queda excluida de las que unilateralmente puede adoptar uno de los progenitores, dada su trascendencia, encuadr¨¢ndose dentro de los que la doctrina ha denominado ¡°actos de ejercicio extraordinario de la patria potestad¡±¡±, incide la abogada. Adem¨¢s, es indiferente que se trate de una red social privada de uno de los progenitores, ya que ¡°puede poner en situaci¨®n de vulnerabilidad la intimidad, imagen y datos personales de la menor al existir la posibilidad de rastreo de la p¨¢gina de la red social en que se exhiben las im¨¢genes para su posterior indexaci¨®n¡±, termina Rodr¨ªguez.
Puedes seguir De mamas & de papas en Facebook, Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.