As¨ª funciona el cerebro del ni?o y del adolescente
Rafa Guerrero, psic¨®logo, publica ¡®El cerebro infantil y adolescente, claves y secretos de neuroeducaci¨®n¡¯ que tiene como objetivo explicar las funcionales cerebrales de una forma pedag¨®gica, ¨²til y sencilla
Existen cuatro cerebros: el rojo, el verde, el azul y el amarillo. Esta es la met¨¢fora que usa Rafa Guerrero, psic¨®logo infantil y doctor en Educaci¨®n, en su libro El cerebro infantil y adolescente, claves y secretos de neuroeducaci¨®n que tiene como objetivo explicar a mayores y peque?os las funciones cerebrales de estas cuatro a¨¦reas de una forma pedag¨®gica, ¨²til y sencilla: ¡°El cerebro funciona como un todo, est¨¢ interconectado, y el objetivo que tenemos nosotros como padres, madres, profesores y terapeutas es pegar, unir, esas cuatro zonas. Para hacerlo muy sencillo decid¨ª diferenciarlos por colores¡±, subraya Guerrero. ¡°Primero hablo del color rojo, que representar¨ªa la parte m¨¢s primitiva, m¨¢s intuitiva y orientada a la supervivencia; este cerebro no siente emociones, no piensa, no coordina, no ejecuta, solo le interesa estar bien alimentado, estar descansado, es muy b¨¢sico y lo compartimos todos los animales¡±, prosigue el experto. Luego la cosa se va complicando. ¡°Despu¨¦s, estar¨ªa el cerebro verde. Es un cerebro emocional, y es donde se codifican los v¨ªnculos, la sociabilidad, la amabilidad, el apego y conceptos muy b¨¢sicos, como la memoria o el aprendizaje¡±, explica Guerrero. En resumen, el verde es el caj¨®n de las emociones. Estos dos cerebros forman el subc¨®rtex, anat¨®micamente hablando, son cerebros autom¨¢ticos y dirigidos a la supervivencia.
La importancia de los cerebros azul y amarillo
Los cerebros azul y amarillo se encuentran en el neoc¨®rtex, que es la parte m¨¢s externa del cerebro. Las dos terceras partes posteriores ser¨ªan el azul, ¡°y ah¨ª almacenamos informaciones, nuestra memoria a largo plazo, todos nuestros recuerdos, nuestros conocimientos, el lenguaje, todo lo que hemos ido aprendiendo, los valores que nos han dado nuestros padres, todo el conocimiento que hemos adquirido en la escuela¡ se le podr¨ªa llamar nuestra grand¨ªsima biblioteca¡±, incide Guerrero.
¡°El tercio restante ser¨ªa el amarillo, y es el m¨¢s importante, porque es el que se encarga de dirigir la orquesta, coordina todos los dem¨¢s cerebros. Por ejemplo, tan importante es sobrevivir cuando te va a atropellar un coche como poder expresar una emoci¨®n cuando estoy enfadado porque algo no me gusta; como poder pensar y acceder a la informaci¨®n cuando estoy haciendo un examen; como poder coordinar todo eso. Es el CEO de la empresa, est¨¢ ah¨ª, en la corteza frontal, y es el amarillo, es el ejecutivo¡±, sostiene el experto. ¡°Y es tambi¨¦n el cerebro m¨¢s influenciable para lo bueno y lo malo, el m¨¢s influenciable por los medios de comunicaci¨®n; por los padres, y por los amigos¡±, a?ade. ¡°Por ejemplo, mi padre, por muy buena intenci¨®n que tenga, aunque quiera movilizar el cerebro rojo, solo lo conseguir¨¢ si lo pone en riesgo, es el caso de los maltratadores o abusadores, pero recordemos que no es un cerebro a entrenar, es innato¡±, recalca el psic¨®logo. ¡°El amarillo es el cerebro m¨¢s maleable, m¨¢s influenciable¡±.
Seg¨²n explica el especialista, al amarillo hay que darle mucho cari?o, mucha paciencia, se tiene que cuidar, hay que tener un cerebro amarillo sano, ¡°un cerebro insano no puede criar a un cerebro inmaduro, es imposible¡±. Lo debemos cuidar con mucho cari?o, reitera, con mucha mirada incondicional, hay que estar muy presente, conectando con nuestros ni?os: ¡°Todos los cerebros est¨¢n interconectados, pero al final el que estructura, y el que es consciente de que lo estamos haciendo muy mal o muy bien, es el amarillo. Es el que le pone consciencia a la acci¨®n, el que se concentra, el que regula la inteligencia emocional, por ejemplo, est¨¢ en esta parte¡±.
El cerebro del ni?o es maleable e influenciable
Lo bueno y lo malo que tiene el cerebro de nuestros ni?os es que es muy maleable e influenciable: ¡°Una buena crianza es conseguir que nuestro hijo se relacione bien, que tenga empat¨ªa, que tenga pensamiento cr¨ªtico, que tenga capacidad de autonom¨ªa, que sea capaz de proteger a los suyos y un largo etc¨¦tera¡±. ?Qu¨¦ ser¨ªa entonces una madre o un padre sano? Seg¨²n especifica el experto, el padre sano debe tener ¡°presencia f¨ªsica, capacidad de conectar con sus hijos y ser emp¨¢tico, saber lo que necesita y, en ¨²ltimo lugar, ser responsivo¡±, explica Guerrero. Resumiendo: ¡°Es una manera muy simple de explicarlo, pero creo que as¨ª se entender¨¢. Si yo estoy siempre presente, empezamos bien. Si en segundo lugar conecto contigo y soy capaz de meterme en tu cabeza, meterme en tu coraz¨®n y soy capaz de sincronizar contigo, estoy en posici¨®n de pasar a la tercera fase que es la responsiva¡±, a?ade. ¡°De esta manera, si te duele la rodilla, atiendo tu rodilla. Si tienes hambre, atiendo tu hambre¡¡±.
El ejemplo de este proceso es el manejo de la frustraci¨®n: ¡°Lo primero que como padre o madre debes saber es qu¨¦ ocurre en un cerebro cuando se frustra, ya sea el de tu hijo o el tuyo o el de tu pareja¡±. ¡°Yo har¨ªa dos cosas, para hacerlo de forma gr¨¢fica¡±, prosigue, ¡°lo primero conecto contigo, es decir que entiendo que est¨¢s enfadado, luego legitimo tus emociones. La siguiente fase ser¨ªa redirigir¡ Por ejemplo, mi hijo se est¨¢ divirtiendo en un parque, pero tenemos que subir a casa. Entiendo que se enfade, pero le explico que ma?ana hay cole, que tiene que ba?arse y cenar, y despu¨¦s de razonarlo, terminamos subiendo, es lo que hay que hacer, pero esto no implica que tu hijo no siga enojado. Obviamente, no va a salir de ¨¦l: ¡°S¨ª, pap¨¢, yo creo que hay que subir porque hay que cenar y dormir. Pero le he escuchado, he entendido sus sentimientos y se lo he explicado¡±.
Peculiaridades del cerebro adolescente
¡°A m¨ª me gusta usar una met¨¢fora que sirve para entender c¨®mo es el cerebro adolescente¡±, prosigue el experto. ¡°Su cerebro¡±, contin¨²a, ¡°es como un m¨®vil al que le ha llegado una notificaci¨®n por la que debe ser actualizado. En el momento que t¨² le das al OK, el tel¨¦fono deja de funcionar. La buena noticia es que cuando recuperes el m¨®vil, este va a ser mucho mejor y m¨¢s operativo, va a estar mucho m¨¢s adaptado, te vas a encontrar con unas funciones que antes no ten¨ªas, pero que finalmente vas a tener¡±. Seg¨²n sostiene, esto es lo que le pasa al adolescente, que no es un ni?o, pero tampoco es un adulto, est¨¢ en impasse: ¡°El sunami emocional de la adolescencia es muy complejo. Normalmente los padres y madres lo pasan mal, porque la estructura del cerebro que m¨¢s se actualiza es la superior, es el c¨®rtex, es decir el cerebro azul y el amarillo, lo humano. Lo que provoca que funcionen solo las partes rojas y verdes del cerebro: el instinto y las emociones¡±.
?Podemos hacer algo los padres y madres en la infancia, para no llevarnos sorpresas en esta etapa? ¡°Lo bueno que tiene el cerebro es que es acumulativo, toda la inversi¨®n que hagamos a todos los niveles [social, operativo, ejecutivo], luego van a ser factores de protecci¨®n y todo lo que no hagamos en los primeros a?os de vida, ser¨¢n factores de riesgo¡±, concluye Guerrero.
?Por qu¨¦ es b¨¢sico que los padres y madres conozcan el desarrollo y partes del cerebro? Seg¨²n expone Guerrero, todo el mundo deber¨ªa tener unas nociones b¨¢sicas de c¨®mo funciona el cerebro: ¡°Y, ojo, esto no implica que usted se tenga que matricular en medicina. Yo creo que con dedicarle dos horas de nuestra vida a tener unas nociones b¨¢sicas, y poder aplicarlas en el d¨ªa a d¨ªa, es suficiente¡±.
Puedes seguir De mamas & de papas en Facebook, Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.