As¨ª afecta el humo del tabaco al desarrollo neuronal de los ni?os
Los efectos nocivos son especialmente da?inos durante las fases cr¨ªticas del desarrollo neuronal
Los ni?os que crecen en un entorno en el que se fuma tienen mayor riesgo de padecer ansiedad, depresi¨®n y trastorno por d¨¦ficit de atenci¨®n e hiperactividad (TDAH). Esta es la principal conclusi¨®n del estudio llevada a cabo por el equipo liderado por la investigadora cl¨ªnica y pediatra Melinda Mahabee-Gittens de la Universidad de Cincinnatti (EEUU). La investigaci¨®n ha analizado la prevalencia y las correlaciones de las condiciones actuales de salud mental y neurodesarrollo de 21.539 ni?os estadounidenses, de entre 6 y 11 a?os, que viven en entornos con humo. De los ni?os analizados que conviv¨ªan con un fumador, con o sin exposici¨®n al humo del tabaco en el hogar, el 22,1% desarroll¨® trastornos mentales, problemas de comportamiento (21,7%), trastorno por d¨¦ficit de atenci¨®n con hiperactividad (20,5%), depresi¨®n (21,7%) y problemas de aprendizaje (19,3).
El art¨ªculo considera que los efectos nocivos del tabaco son especialmente da?inos durante las fases cr¨ªticas del desarrollo neuronal. Eduardo Fern¨¢ndez-Jim¨¦nez, Doctor en Psicolog¨ªa, facultativo especialista en Psicolog¨ªa cl¨ªnica y responsable de Neuropsicolog¨ªa cl¨ªnica infantojuvenil en el madrile?o Hospital Universitario de La Paz, dice que la literatura emp¨ªrica disponible basada en dise?os metodol¨®gicos adecuados para poder hacer inferencias causales se?ala que ¡°la exposici¨®n prenatal al tabaco (ya sea por parte de una madre que sea fumadora activa o pasiva) ejerce un impacto negativo posterior tanto en el desarrollo cognitivo global, como a nivel de psicomotricidad en la primera infancia del hijo/a que se vio a expuesto al tabaco durante el embarazo¡±. A nivel neurol¨®gico, bas¨¢ndonos en modelos animales, contin¨²a este experto, ¡°la exposici¨®n prenatal al tabaco podr¨ªa impactar en per¨ªodos sensibles del desarrollo, tanto en las fases embrionaria como fetal, alterando el sistema talamocortical. Disfunciones en este sistema podr¨ªan conllevar repercusiones negativas en el desarrollo postnatal, a corto y largo plazo, tanto a nivel sensorial (en el procesamiento visual, auditivo, somatosensorial), como en el funcionamiento motor voluntario y cognitivo de los menores¡±.
Julio ?lvarez Pitti, pediatra, jefe cl¨ªnico de la Unidad contra la Obesidad y el Riesgo Cardiovascular del Hospital General Universitario de Valencia, investigador de CIBEROBN y coordinador del Comit¨¦ de promoci¨®n de la Salud de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa (AEP), hace referencia a una revisi¨®n sistem¨¢tica y metaan¨¢lisis de nueve estudios que sostiene que ¡°los ni?os y ni?as expuestos al tabaquismo de segunda mano incrementan el riesgo de sufrir TDAH en 1.6 veces frente a los no expuestos¡±. Adem¨¢s, prosigue este pediatra, ¡°estos ni?os expuestos presentan un riesgo ligeramente superior de desarrollar problemas conductuales¡±. Pese a esos datos obtenidos sobre estudios transversales, asegura el investigador del CIBER OBN que los propios autores creen ¡°que ser¨ªan necesarios m¨¢s estudios prospectivos para confirmar estas asociaciones¡±.
Asimismo, el doctor ?lvarez Pitti explica que ¡°el tabaquismo pasivo representa la exposici¨®n de los no fumadores a los productos de combusti¨®n del tabaco en los espacios cerrados, lo cual supone la inhalaci¨®n de una gran cantidad de humo, lo que convierte al tabaquismo de segunda mano en la tercera causa evitable de muerte en los pa¨ªses desarrollados, despu¨¦s del tabaquismo activo y del alcoholismo¡±. El humo del tabaco contiene m¨¢s de 5.000 sustancias t¨®xicas, pero, prosigue el coordinador del Comit¨¦ de promoci¨®n de la Salud de la AEP, ¡°por el momento no est¨¢n claramente identificadas las sustancias que podr¨ªan estar involucradas en esta asociaci¨®n observada. Sin embargo, ¡°los estudios en animales demostraron que la exposici¨®n prenatal a la nicotina se asociaba con s¨ªntomas de TDAH en la descendencia¡±, apunta este miembro de la AEP.
Por su parte, Jos¨¦ Luis Trejo, investigador cient¨ªfico del Instituto Cajal CSIC y presidente del Consejo Espa?ol del Cerebro, pone el foco en los efectos que tiene la nicotina, una de las sustancias t¨®xicas presentes en el humo de los cigarros, en el cerebro durante su desarrollo. ¡°La primera es su acci¨®n sobre los neurotransmisores cerebrales como dopamina, glutamato y GABA. Su efecto tiene especial relevancia durante la infancia y la adolescencia porque la red neural que incluye el ¨¢rea tegmental ventral, el n¨²cleo accumbens y la corteza prefrontal, que usan estos neurotransmisores, es muy vulnerable a la acci¨®n de la nicotina en estas edades. Dicha acci¨®n consiste en alterar el mecanismo de acci¨®n de estos neurotransmisores, por lo que, si se altera el medio de comunicaci¨®n entre neuronas, el circuito completo se ve alterado¡±, dice este investigador cient¨ªfico. La novedad de la investigaci¨®n llevada a cabo por el equipo de la Universidad de Cincinnatti, remarca el presidente del Consejo Espa?ol del cerebro, ¡°se encuentra ahora en la acci¨®n sobre ni?os y adolescentes que no fuman. Lo relevante es que no solo tiene problemas aquellos expuestos al humo del tabaco en casa, sino que tambi¨¦n, aunque menos, presentan problemas aquellos que conviven con fumadores, aunque no fumen en casa (seg¨²n declaran ellos mismos). El segundo mecanismo es la epigen¨¦tica, que induce las alteraciones mencionadas sobre los neurotransmisores¡±.
Cuando un ni?o desarrolla alguno de estos trastornos, es su m¨¦dico de Atenci¨®n Primaria quien realiza el manejo y diagn¨®stico de la enfermedad, teniendo en cuenta, como manifiesta el doctor Julio ?lvarez Pitti, ¡°que el que exista relaci¨®n entre la aparici¨®n del trastorno con la exposici¨®n al humo del tabaco, no implica que la causa ¨²nica sea esta. Por ello, la intervenci¨®n sobre el ni?@ ser¨¢ b¨¢sicamente la misma, que en el caso de que no hubiese exposici¨®n al tabaco, siguiendo los protocolos de cada ¨¢rea sanitaria¡±. Eso s¨ª, gracias a estos nuevos descubrimientos, el pediatra reforzar¨¢ el consejo hacia los progenitores de dejar de fumar, porque, adem¨¢s de todas las consecuencias negativas que tiene la exposici¨®n al humo del tabaco para sus hijos y para ellos mismos, puede adem¨¢s tener un papel etiol¨®gico en el TDHA de su hijo o hija¡±. Una opini¨®n que coincide con la del responsable de Neuropsicolog¨ªa cl¨ªnica infanto-juvenil en el Hospital Universitario La Paz, quien dice que en la pr¨¢ctica profesional en Atenci¨®n Temprana no se podr¨¢ discernir el factor causal directo que provoca un trastorno del neurodesarrollo en un ni?o/a, porque la evidencia emp¨ªrica apela consistentemente a un entramado multifactorial para explicar la etiolog¨ªa del mismo. Teniendo esto en cuenta, el tratamiento que ha de recibir un ni?o o una ni?a con un diagn¨®stico de trastorno del neurodesarrollo en Atenci¨®n Temprana debe ser una intervenci¨®n emp¨ªricamente validada. En este sentido, Eduardo Fern¨¢ndez-Jim¨¦nez declara que ¡°los trastornos psicol¨®gicos en la infancia m¨¢s asociados con la condici¨®n de fumador pasivo cuentan con tratamientos emp¨ªricamente validados, tales como: el an¨¢lisis aplicado de la conducta (para los problemas de conducta en discapacidad intelectual); la ense?anza rec¨ªproca, (entre otros, para los trastornos espec¨ªficos de aprendizaje de la lectura); la instrucci¨®n estrat¨¦gica (para los trastornos espec¨ªficos de aprendizaje de la escritura); la instrucci¨®n basada en estrategias cognitivas y metacognitivas (para los trastornos espec¨ªficos de aprendizaje en matem¨¢ticas); y la retroalimentaci¨®n interaccional correctiva o recast (para los trastornos del lenguaje)¡±.
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