?Campamentos de verano para ni?os neurodivergentes? S¨ª, es posible
Monitores especializados, entornos adecuados o que protejan su sensibilidad son algunas de las claves para hacer actividades con quienes tienen autismo, hiperactividad, problemas de aprendizaje e incluso altas capacidades
Organizar el verano en familia es un rompecabezas muy complicado. Aunque hijos e hijas tienen dos meses libres, padres y madres solo suelen disfrutar como mucho de cuatro semanas, y no salen las cuentas. Es ah¨ª donde las actividades como colonias o campamentos pueden desempe?ar un papel fundamental. Pero, a veces, estas actividades no est¨¢n pensadas para todos. As¨ª lo cuenta Roc¨ªo Cano Couto, soci¨®loga, divulgadora sobre inclusi¨®n y diversidad y madre de una ni?a con autismo: ¡°Es muy dif¨ªcil la conciliaci¨®n en Espa?a, todas lo sabemos. Si ya es muy dif¨ªcil encontrar campamentos, cuando a eso le a?ades una neurodivergencia es pr¨¢cticamente imposible. Apenas hay oferta, son much¨ªsimo m¨¢s caros y hay muchas familias que econ¨®micamente no pueden acceder a ellos¡±.
El t¨¦rmino neurodivergencia o neurodiversidad describe una forma diferente de procesar la realidad y relacionarse con el mundo. Engloba condiciones como el autismo, la hiperactividad, problemas de aprendizaje e incluso altas capacidades. Fue acu?ado por la soci¨®loga Judy Sinclair para defender el potencial de estas personas, dejar de entender estas condiciones como patolog¨ªas, erradicar el estigma en torno a ellas y reivindicar una escuela y una sociedad m¨¢s inclusivas. Y esto tambi¨¦n afecta a unas actividades de verano que tengan en cuenta estas diferencias a la hora de percibir y procesar la realidad.
Bea S¨¢nchez, experta en altas capacidades y consultora de crianzas intensas con su proyecto Mam¨¢ Valiente, cuenta por qu¨¦ las t¨ªpicas actividades de verano pensadas para ni?os y ni?as no respetan esta forma alternativa de sentir y pensar: ¡°Gran parte de la poblaci¨®n neurodivergente tiene retos sensoriales que no se contemplan en estas actividades. Se justifica como conducta: el ni?o no quiere, el ni?o rechaza o el t¨ªpico el ni?o tiene rabietas cuando... Es muy com¨²n confundir sobrecarga sensorial y colapsos con conducta y educaci¨®n. Y es injusto. Los ni?os que, por ejemplo, tienen hipersensibilidad auditiva o t¨¢ctil pueden tener desaf¨ªos tanto para comer ciertas texturas como para relajarse o mojarse la camiseta en una batalla de agua¡±. Para Roc¨ªo Cano, con este tipo de actividades estandarizadas que no tienen en cuenta las necesidades de estos ni?os ¡°no se apuesta por la diversidad, de hecho, se apuesta m¨¢s por la segregaci¨®n¡±. ¡°En cuanto te sales de la norma, ya sea por arriba o por abajo, el sistema lo entiende como algo negativo, cuando es todo lo contrario. La sociedad es diversa, todas somos diferentes. Fomentar y enriquecernos con la diversidad es lo que realmente se deber¨ªa hacer¡±, argumenta.
Y se?ala: ¡°Tenemos cada vez m¨¢s diagn¨®sticos, no es que cada vez haya m¨¢s ni?os autistas o personas neurodivergentes, es que cada vez hay m¨¢s accesibilidad a los diagn¨®sticos¡±. Tal vez por eso en la actualidad ya hay grandes superficies y supermercados que est¨¢n poniendo en marcha las llamadas horas low, una hora diaria en la que los locales tienen una luz m¨¢s tenue y no hay tanto ruido para no contribuir a la sobreexcitabilidad de las personas neurodivergentes. Para Cano esto puede ser un lavado de cara, porque ¡°qui¨¦n va a comprar en pleno mes de julio y agosto de tres a cuatro de la tarde. Realmente eso no es inclusivo. Si se quiere que sea inclusivo, se ponen otras medidas de adaptaci¨®n y, desde luego, otros horarios, por ejemplo, a primera hora de la ma?ana o ¨²ltima de la tarde¡±. Bea S¨¢nchez est¨¢ de acuerdo: ¡°Por un lado, agradecemos la visibilizaci¨®n y el comienzo del cambio. Por otro, resulta limitador que te emplacen a horas concretas, no siempre c¨®modas para las familias. Entiendo que es dif¨ªcil hacer casar la minor¨ªa con la inclusi¨®n real¡±. Ella prefiere hablar de convivir en lugar de incluir ¡°en tanto que se puedan compartir espacios y horas en lugar de seguir separando¡±. En cualquier caso, no quiere dejar de subrayar el avance que puede suponer iniciativas como esta: ¡°Es un gran paso entender que una experiencia en el supermercado puede dejar sin bater¨ªa al ni?o por el resto de la tarde¡±.
Patricia Men¨¦ndez, conocida como Patri Medio Lim¨®n en las redes sociales, ya tiene todo organizado para la segunda edici¨®n de VeganaGal, una feria de veganismo en Vigo que se celebra del 1 al 3 de julio, con muchas actividades pensadas para los ni?os y ni?as y con iniciativas dise?adas para satisfacer las necesidades y garantizar el bienestar de personas neurodivergentes. ¡°Incluir esto en una feria no es f¨¢cil, pero con medidas como horarios, auriculares de cancelaci¨®n de ruido y alguna cosa m¨¢s podemos conseguir que todas las personas que acudan a la feria se sientan c¨®modas¡±, explica. Habr¨¢ tambi¨¦n una hora low en la que ¡°las luces estar¨¢n m¨¢s suaves, no habr¨¢ show cookings ni charlas y tampoco m¨²sica¡±. Y las actividades para los peque?os se situar¨¢n en la zona con menos ruido.
Adaptar las actividades de verano para que todos puedan disfrutarlas no tiene por qu¨¦ ser muy complicado. Bea S¨¢nchez ofrece algunas claves:
- Hacerse preguntas clave: ¡°?Podemos trabajar esto de manera que sea menos abrumadora para el ni?o? ?Es este el mejor lugar para esta actividad?¡±. ¡°A veces cambiando solo el entorno, cambiamos la disposici¨®n del ni?o: interior o exterior, eco de sala, luz e incluso n¨²mero de otros ni?os pueden estar influyendo¡±.
- Crear un v¨ªnculo con sus intereses m¨¢s entusiastas. ¡°Las pasiones de estos ni?os son valios¨ªsimas, pero tenemos que favorecer el entorno adecuado para que puedan contagiar a sus compa?eros de ellas¡±.
- Proteger y respetar su sensibilidad. Para eso hay que conocer su perfil sensorial (¡°si necesitan movimiento, si se abruman con los sonidos, si necesitan contacto, si tienen desaf¨ªos motores, etc¨¦tera¡±) y explicar las actividades con claridad y concreci¨®n. ¡°Hagamos saber a los ni?os por qu¨¦ hacemos las actividades (significatividad), c¨®mo se desarrollar¨¢n (instrucciones adaptadas) y qu¨¦ pueden esperar (expectativas)¡±, detalla S¨¢nchez.
- Tener bien claro que ¡°no todos los ni?os se sienten c¨®modos en estas actividades y no ganamos nada con obligarlos¡±.
- Monitores que sean un ancla y respeten la individualidad de los neurotipos.
En resumen, concluye por su parte Cano, ¡°deber¨ªa haber monitores especializados y abogar por esa diversidad real que nos enriquece a todas¡±.
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