Organizaciones civiles alertan del alto riesgo de contagio en los centros de detenci¨®n de migrantes en M¨¦xico

Varias organizaciones defensoras de los derechos humanos han denunciado que el Gobierno de M¨¦xico guarda silencio sobre el impacto de la pandemia en los migrantes detenidos en el pa¨ªs. El informe que publicaron este mi¨¦rcoles recuerda que el riesgo de contagio en los lugares de detenci¨®n migratoria se magnifica por las precarias condiciones de las instalaciones y pide al Ejecutivo que suspenda los ingresos a estos centros.

El Instituto para las Mujeres en la Migraci¨®n (IMUMI) asegura que el Instituto Nacional de Migraci¨®n (INM) no est¨¢ cumpliendo con los protocolos sanitarios con los migrantes porque no existen las condiciones f¨ªsicas en las estaciones para emplear los mecanismos de prevenci¨®n sanitaria. ¡°El INM ha manifestado en juicio que no ha registrado casos de covid pero podemos afirmar que la autoridad est¨¢ falseando la informaci¨®n¡±, se?ala la coordinadora jur¨ªdica de IMUMI Lorena Cano con base en testimonios que han recogido. ¡°Lo que s¨ª que hay es documentaci¨®n sobre muertes por covid. Un salvadore?o en la estaci¨®n de Ciudad de M¨¦xico y una mujer haitiana en Tapachula, pero el INM sigue insistiendo en que no¡±, sentencia.

El INM ha emitido un comunicado en el que asegura que se est¨¢n cumpliendo todos los protocolos en los centros de detenci¨®n, algunos con habit¨¢culos de solo tres metros cuadrados. ¡°Cada d¨ªa se implementan tareas de limpieza y acciones de desinfecci¨®n, prevenci¨®n, control y supervisi¨®n en todos los inmuebles del instituto¡± indicaba el documento. Sin embargo, el Informe de las organizaciones civiles han documentado que solo en dos de las 35 estaciones para migrantes se realizan controles de temperatura. ¡°Las personas [migrantes] no tienen protecci¨®n y el Gobierno mexicano no tiene un sistema para ellas frente al virus¡±, insiste la directora de IMUMI, Gretchen Kuhner. EL PA?S ha intentado en varias ocasiones ponerse en contacto con el INM sin ¨¦xito.

Los centros de detenci¨®n son instalaciones donde los migrantes indocumentados pueden pasar legalmente un m¨¢ximo de siete d¨ªas hasta resolver su situaci¨®n en M¨¦xico. Los albergues, que recogen a los que cruzan por la frontera norte hacia EE UU y el sur desde Guatemala, ya advirtieron que no podr¨ªan hacer frente a la pandemia dentro de los centros. Las estaciones operan habitualmente por encima de su capacidad, especialmente desde que el Gobierno de EE UU implementara unilateralmente el programa ¡°Qu¨¦date en M¨¦xico¡±. Este proceso de devoluci¨®n de inmigrantes regres¨® a M¨¦xico a m¨¢s de 60.000 personas tras su aprobaci¨®n en 2019 para que esperaran en ese pa¨ªs la resoluci¨®n de su caso.

Organizaciones sociales como Fundaci¨®n para la Justicia y el Estado Democr¨¢tico de Derecho y la Comisi¨®n Mexicana de Defensa y Promoci¨®n de los Derechos Humano han insistido en que la respuesta de salud p¨²blica en M¨¦xico ¡°parece haber olvidado a las personas migrantes o solicitantes de protecci¨®n internacional¡±. Uno de los reclamos del colectivo es que el Gobierno suspenda las detenciones de inmigrantes porque las estaciones no pueden garantizarles seguridad sanitaria. La falta de insumos alimentarios, agua, material desinfectante, espacios para garantizar la sana distancia, adem¨¢s de la falta de atenci¨®n m¨¦dica o psicol¨®gica en caso de ser necesaria, son algunos de los ejemplos que cita el informe para detener el proceso. Las condiciones de los centros pueden actuar como p¨®lvora ante la chispa de un positivo.

Las mujeres representan el 41% de los detenidos en estos centros y sus casos son m¨¢s vulnerables. ¡°Son detenidas con sus hijos¡±, apunta Lorena Cano, y se?ala que encerrar a un ni?o es una violaci¨®n de los derechos humanos. ¡°Se las deber¨ªa liberar por razones humanitarias. Si est¨¢s embarazada o requieres asistencia reproductiva o sanitaria no tienes acceso a atenci¨®n m¨¦dica", lamenta. El informe tambi¨¦n advierte de varios actos de maltrato f¨ªsico y psicol¨®gico, violaci¨®n de los derechos humanos e incluso posibles casos de tortura en las estaciones.