Marihuana, aborto y feminismo: as¨ª son las ma?aneras sin L¨®pez Obrador

Los focos y las c¨¢maras ya est¨¢n encendidos en Palacio Nacional a las siete de la ma?ana. La secretaria de Gobernaci¨®n, Olga S¨¢nchez Cordero, se planta frente a ellos, se quita el cubrebocas y comienza a dar el parte sobre la salud del presidente, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. El comentario es breve y nada especializado: ¡°El se?or presidente se encuentra muy bien¡±. M¨¦xico lleva una semana recibiendo su dosis de informaci¨®n gubernamental de la voz de S¨¢nchez Cordero en las conferencias matutinas, mientras el mandatario convalece por covid. Al mismo tiempo, el pa¨ªs est¨¢ observando que la ma?anera ¨Ccomo se conoce a la rueda de prensa presidencial¨C puede tener otras formas. La funcionaria dedicada a los asuntos internos del pa¨ªs es la primera mujer en ocupar uno de los m¨¢s altos cargos del Gobierno mexicano. El puesto la ha colocado como sustituta ¨Ccasi natural¨C para hablar desde el atril de presidencia. Pero su personalidad y carrera pol¨ªtica permiten ver los l¨ªmites del formato y que la ma?anera es un traje a la medida de L¨®pez Obrador.

Olga S¨¢nchez Cordero ha atendido esta semana cinco conferencias matutinas y ha seguido el guion organizado por el portavoz presidencial, Jes¨²s Ram¨ªrez. Un vals que durante dos a?os se ha seguido al pie de la letra: funcionarios del Gobierno exponen temas de su agenda y despu¨¦s la secretaria responde preguntas. El lunes ¨Csu primer d¨ªa¨C dud¨® sobre si deb¨ªa contestar las preguntas de los reporteros, para el jueves ya extend¨ªa los turnos de los periodistas hasta aquellos de la ¨²ltima fila. Sus comentarios y la agenda que aborda han abierto la puerta a temas que bajo la tutela de L¨®pez Obrador no estar¨ªan en una ma?anera. ¡°Estoy muy contenta de que se vaya a procesar esta ley sobre la regulaci¨®n de la cannabis¡±, ha dicho sobre la legislaci¨®n del uso de la marihuana. ¡°La Cuarta Transformaci¨®n es una transformaci¨®n feminista y hoy tenemos un gabinete paritario¡±, ha a?adido sobre los cuestionamientos al Gobierno para considerar a las mujeres. Los ¨¢ngulos de sus respuestas son refrescantes para una conferencia habitualmente con una visi¨®n sumamente masculina, pero terminan por alinearse con lo estipulado por el presidente, una visi¨®n menos progresista.

El mi¨¦rcoles, la imagen fue in¨¦dita: S¨¢nchez Cordero acompa?ada de cuatro funcionarias abordaron temas como la violencia de g¨¦nero y la atenci¨®n a v¨ªctimas de feminicidios. Asuntos que L¨®pez Obrador ha evitado abordar y que cuando le han sido planteados los atiende con respuestas llenas de desconocimiento, prejuicios y torpeza. La antigua ministra del Supremo mexicano se vio c¨®moda en un tema que ha abanderado durante toda su carrera y administr¨® a los periodistas una dosis de feminismo. Pero sus comentarios llegaron a un l¨ªmite cuando un reportero pregunt¨® puntualmente sobre el impulso del Gobierno para una ley federal que despenalice el aborto. ¡°Como el presidente lo ha dicho, esto lo van a decidir las mujeres y sus representantes en los congresos locales, porque ellas tendr¨¢n finalmente que tomar la ¨²ltima palabra¡±, dijo reconociendo que la Administraci¨®n de L¨®pez Obrador no se plantea enviar una iniciativa al Congreso. Consciente de lo que representa para las mujeres que un Gobierno de izquierda con mayor¨ªa en el Legislativo no gobierne en favor de sus derechos, la secretaria ha a?adido un gui?o sobre su opini¨®n personal: ¡°Mi posici¨®n la conocen, no tengo por qu¨¦ decir que he cambiado¡±.

S¨¢nchez Cordero es breve y su lenguaje no es un arma de ataque. Seg¨²n un an¨¢lisis de la firma de comunicaci¨®n pol¨ªtica Spin, la secretaria ha tenido conferencias con un promedio de 78 minutos de duraci¨®n, mientras que L¨®pez Obrador promedia en los 106 minutos, aunque algunas de sus ma?aneras han llegado a las tres horas. Las palabras de la funcionaria est¨¢n lejos de las del presidente, seg¨²n la misma firma, ya que en sus intervenciones no emplea t¨¦rminos como conservadores, neoliberales o corrupci¨®n. Sus respuestas son concisas y por momentos reconoce que no tiene la respuesta al asunto que se le cuestiona. ¡°Ella es t¨¦cnica y no tiene un entrenamiento en medios, su tema es la justicia, pero es evidente que no puede contestar todas las preguntas porque no son de su campo¡±, se?ala Luis Estrada, director general de Spin.

La ma?anera con Olga S¨¢nchez Cordero tambi¨¦n ha desvelado una relaci¨®n con los medios de comunicaci¨®n diferente a la que L¨®pez Obrador acostumbra. La exministra evidencia a youtubers que en lugar de preguntas le presentan comentarios que se?alan o acusan a terceros. El mi¨¦rcoles pidi¨® la participaci¨®n de peri¨®dicos con importantes trayectorias en M¨¦xico. ¡°?Alguien de Reforma y de El Universal? Para que podamos tambi¨¦n tener a aqu¨ª a los diarios m¨¢s importantes¡±, dijo entre las risas de los asistentes. Con la secretaria al frente de las conferencias, la informaci¨®n gubernamental en bruto toma protagonismo, mientras ella no desee hacer juicios y pronunciamientos en contra de alguien. Ha sido cuidadosa, quiz¨¢ en extremo, y ha desnudado la esencia de las ma?aneras: un instrumento para difundir el discurso oficial y poco m¨¢s.

L¨®pez Obrador comenz¨® con las ma?aneras en el a?o 2000 cuando gobernaba la Ciudad de M¨¦xico. Entonces, a las seis de la ma?ana charlaba con los reporteros y algunas televisiones hac¨ªan conexiones en directo a sus ruedas de prensa. El pol¨ªtico, un spin doctor nato, entendi¨® desde entonces el alcance que sus mensajes pod¨ªan tener al hacerse con un altavoz diario desde un cargo en el servicio p¨²blico. Aprendi¨® sobre su impacto en la opini¨®n p¨²blica y que son un m¨¦todo para medir las reacciones a sus decisiones. Al llegar a la presidencia en 2018, retom¨® el formato y lo molde¨® seg¨²n los intereses de su Gobierno hasta convertirlo en un espect¨¢culo que bordea la l¨ªnea entre la informaci¨®n y la propaganda. Sus opiniones en ellas son las que desvelan el discurso oficial y dan pistas a sus seguidores sobre las pautas a seguir. Las ma?aneras est¨¢n hechas para un solo hombre.