Saturnino Herr¨¢n: el artista mexicano que pocos conocen y fue fundamental para el arte moderno
Aunque su nombre se olvida al lado de los otros grandes pintores mexicanos, el legado de Saturnino Herr¨¢n lo convirti¨® en uno de los nueve artistas patrimoniales de M¨¦xico
El 8 de octubre de 1918, a los 31 a?os, muere en la Ciudad de M¨¦xico Saturnino Herr¨¢n, pintor mexicano que consideraba que el arte deb¨ªa ser el motor de transformaci¨®n del pa¨ªs y cuyo temprano final se debe a una cirug¨ªa de hernia a la que no sobrevivi¨®.
En Aguascalientes, a finales del siglo XIX, el entonces adolescente Saturnino Efr¨¦n de Jes¨²s Herr¨¢n Guinchard ya destacaba con sus dibujos originales y con buena t¨¦cnica. En esas mismas fechas conoci¨® a su gran amigo Ram¨®n L¨®pez Velarde y otros ilustres de la ¨¦poca como el pol¨ªtico Alberto Pani y el escritor y poeta Enrique Fern¨¢ndez Ledesma.
Despu¨¦s de que muriera su padre, Saturnino Herr¨¢n se muda con su madre y su amigo Carlos Ortiz a la Ciudad de M¨¦xico y toma clases en la Escuela Nacional de Bellas Artes, en donde fue alumno de Julio Ruelas, Antonio Fabr¨¦s y Germ¨¢n Gedovius, artistas que lo motivaron a crear arte. Antonio Fabr¨¦s, por ejemplo, lo hizo parte de su grupo de estudiantes avanzados junto con el pintor Diego Rivera; Gedovius por otro lado le otorg¨® un premio al ganar un concurso cuyo tema era la flora y que Herr¨¢n represent¨® con una mujer ind¨ªgena que portaba flores.
En sus a?os de estudiante pinta Labor y la vende por 500 pesos a la Secretar¨ªa de Instrucci¨®n P¨²blica y Bellas Artes. Durante esta misma ¨¦poca, luego de trabajar con el arque¨®logo Leopoldo Batres en la inspecci¨®n de monumentos de Teotihuac¨¢n y observar los murales que descubr¨ªan, Herr¨¢n cambia su manera de hacer arte y de este modo sus trabajos posteriores se convierten en un reflejo del esp¨ªritu ind¨ªgena a trav¨¦s de una t¨¦cnica moderna ¨²nica.
A pesar de rechazar una beca para estudiar en Europa, Herr¨¢n fue uno de los pintores modernistas m¨¢s destacados en M¨¦xico, incluso, cuando el Dr. Atl regres¨® de su estancia en Europa, fund¨® en los pintores mexicanos un sentimiento de arte nacionalista y con ra¨ªces propias que Herr¨¢n adopt¨® en sus obras. Los nuevos artistas buscaron un arte ¨²nico que hablara de M¨¦xico y sus ra¨ªces prehisp¨¢nicas a trav¨¦s de diversidad de estilos y sin ideolog¨ªas.
Sus maestros heredaron a su generaci¨®n una nueva imagen del artista mexicano, el que con gran libertad tem¨¢tica empieza a explorar su creatividad e intereses. Ruelas, quien fue inspiraci¨®n para Saturnino Herr¨¢n, expresa en su obra la crisis de la modernidad mexicana y la decadencia de la burgues¨ªa; crea sus personajes, criaturas y s¨ªmbolos, se r¨ªe y confronta a trav¨¦s de su arte y adem¨¢s, muestra c¨®mo recuperar el legado art¨ªstico de Europa para integrarlo a la representaci¨®n de la identidad mexicana.
De este modo, Saturnino Herr¨¢n mostr¨® la pluralidad y riqueza de Mesoam¨¦rica; el erotismo masculino, el mestizaje y la identidad nacional. Lo hace con una paleta de colores vivos caracter¨ªsticos de los pintores modernos de Europa y usa la luz para fortalecer sus obras (como los impresionistas); es decir, utiliza recursos visuales y s¨ªmbolos que nunca se hab¨ªan utilizado; crea personajes expresivos, gr¨¢ciles, sensuales y bellos que les otorgan vida a los retablos. De acuerdo con el maestro e investigador en artes Fausto Ram¨ªrez Rojas, ¡°en la obra de Herr¨¢n el asunto nacional ya no es una simple ilustraci¨®n superficial de alguna an¨¦cdota pintoresca, sino la exteriorizaci¨®n de una aut¨¦ntica preocupaci¨®n de lo que para ¨¦l constitu¨ªa el mestizaje de nuestro ser f¨ªsico y cultural¡±.
Una obra que ejemplifica a la perfecci¨®n el recorrido intelectual y representa lo que buscaba crear Herr¨¢n es La Coatlicue, pintura en la que incorpora elementos simbolistas y cuyo destino era ser parte del tr¨ªptico Nuestros dioses que estar¨ªa en el Palacio de Bellas Artes. Un monolito de piedra con cara de serpiente, lleva en medio al Cristo crucificado y un cr¨¢neo lo fusiona con la diosa mexica de la fertilidad, de la vida y de la muerte. Herr¨¢n muestra a la mexicanidad como un producto del mestizaje.
Su pintura La ofrenda fue parte de los libros de texto gratuitos otorgados por la Secretar¨ªa de Educaci¨®n P¨²blica. Espec¨ªficamente esa obra que parece un paisaje del trayecto en trajinera de una familia cargada con flores de cempas¨²chil, tiene un significado m¨¢s profundo al tocar ideas como la muerte inminente y la transitoriedad de la vida en todas las generaciones.
Otras de sus obras son La tehuana, Bugambilias, El Quetzal, Nuestros dioses, Flechador, La criolla del mango o Adonis; en total, se habla de m¨¢s de 200 obras del pintor y aunque muchas veces su nombre se olvida al lado de los otros grandes artistas mexicanos, el legado de Saturnino Herr¨¢n lo convirti¨® en uno de los nueve artistas patrimoniales de M¨¦xico, al lado de Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, Frida Kahlo, Jos¨¦ Mar¨ªa Velasco y el Dr Atl.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S M¨¦xico y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este pa¨ªs
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.