Jorge Alderete: ¡°Yo empec¨¦ a trabajar en el ¡®underground¡¯. Mis clientes eran mis amigos¡±

Por la ventana del estudio de Jorge Alderete entra una luz blanca que se vierte sobre la sala: la mesa con dos ordenadores de trabajo y algunos libros apilados; las estanter¨ªas de madera que se alzan desde el suelo hasta el techo repletas de c¨®mics ¡ªlos culpables de que empezara a dibujar¡ª, novelas gr¨¢ficas, discos. Tambi¨¦n recuerdos y reliquias de anteriores proyectos, como una cabeza de Pascua en miniatura, una de sus obsesiones personales. En una esquina, el therem¨ªn que toca en Sonido Gallo Negro, una banda de cumbia fusi¨®n considerada de culto dentro de la escena alternativa de Ciudad de M¨¦xico. Fuera de su lugar de trabajo, por los muros de los edificios de la capital, estos d¨ªas puede verse uno sus ¨²ltimos dise?os: el cartel del festival de m¨²sica Vive Latino 2022, que se celebrar¨¢ en marzo. Pero antes de eso, vino todo lo dem¨¢s.

A sus 50 a?os, Alderete, es un referente dentro del mundo de la ilustraci¨®n en Latinoam¨¦rica. Forma parte de prestigiosas compilaciones especializadas; ha expuesto en museos de renombre mundial; ilustrado las portadas de referentes del rock latinoamericano como Andr¨¦s Calamaro, Los Fabulosos Cadillacs o Caf¨¦ Tacvba; un libro junto a la aclamada escritora argentina Mariana Enr¨ªquez; el c¨®mic Black is Beltza, del m¨²sico vasco Ferm¨ªn Muguruza y Harkaitz Cano. Eso, en el plano m¨¢s comercial y conocido. Pero Alderete viene de un mundo alejado de los focos.

Naci¨® y se crio en el fin del mundo, la Patagonia Argentina, pero asumi¨® Ciudad de M¨¦xico como su hogar de acogida en 1998. De ni?o devoraba con fruici¨®n c¨®mics e historietas. De adulto, cay¨® de lleno en las subculturas urbanas que habitaban la noche de la capital mexicana; en las calles de una colonia Roma en aquel entonces todav¨ªa ajena al ambiente hipster de ahora, habitada a¨²n por artistas, profetas de medio pelo, m¨²sicos sin un peso en el bolsillo, escritores malditos. Empez¨® a frecuentar la escena del Alicia, el local que se convirti¨® en el oasis de la contracultura chilanga. Y ah¨ª empez¨® todo.

¡°Yo aprend¨ª a trabajar en el underground, en la cultura subterr¨¢nea. Mis clientes eran un poco mis amigos, las bandas que yo iba a ver. Trabajaba directamente con ellas, no exist¨ªa ni disquera ni m¨¢nager alrededor¡±, recuerda una ma?ana soleada de febrero. Ha recibido a los periodistas en su casa de Santa Mar¨ªa de la Riviera. Es una vivienda amplia, enclaustrada en una vecindad de estilo cl¨¢sico. Elegante, pero con ese toque decadente tan propio de la Ciudad de M¨¦xico.

Para Alderete sigue sin ser f¨¢cil colaborar con grandes empresas como el Vive Latino: ¡°Al tratar con multinacionales temo que no me dejen trabajar a gusto¡±. Por el momento no le va mal. A pesar de la pandemia, en 2020 no dejaron de llamar a su puerta. Aunque cada vez escoge menos encargos ¡ªespecialmente si son de publicidad¡ª, prefiere centrarse en sus proyectos personales: ¡±Cuando la empresa o el producto que quieran anunciar es un enga?o demasiado obsceno para mi gusto prefiero pasar. No son los que m¨¢s me encantan [los de publicidad], pero son los que me permiten hacer otros proyectos¡±.

Su estilo es f¨¢cilmente reconocible. Como un Andy Warhol argentino, mezcla elementos de la cultura popular con colores intensos y el lenguaje del c¨®mic en unas im¨¢genes que impactan visualmente. El equivalente gr¨¢fico de unas luces de ne¨®n parpadeando en la oscuridad.

¡ªVivimos en un mundo muy visual, pero con un mont¨®n de limitaciones. Es como si la ¨²nica forma de escribir entendible fuera la manera en que se escriben los manuales t¨¦cnicos para ensamblar una mesa: ¡®esta pata va ac¨¢, este tornillo ajusta aqu¨ª¡¯. Eso es lo que pasa con la imagen. Tiene que ser muy obvia. Nos estamos perdiendo la poes¨ªa, la novela, la canci¨®n, el ensayo, un mont¨®n de otros g¨¦neros porque lo ¨²nico que parece que podemos comprender es lo r¨¢pido, lo exacto, lo preciso. No quiero que mi trabajo sea obvio. Qu¨¦ aburrimiento si todo el mundo pensara exactamente lo mismo de cada ilustraci¨®n que hago. Me gusta pensar que el que la ve la completa con sus ideas, sus experiencias de vida.

M¨²sica e ilustraci¨®n

Su trabajo siempre ha estado estrechamente vinculado con la m¨²sica. Con Sonido del Gallo Negro, un grupo que form¨® con gente de otras bandas que rondaban el Alicia, comenz¨® dibujando en directo. ¡°La imagen y la m¨²sica van de la mano y ah¨ª quedaba muy evidente, muy en sinton¨ªa. Mi instrumento en los conciertos era una tableta y un l¨¢piz¡±. A lo largo de los a?os ha ilustrado m¨¢s de 150 discos de grupos amigos y profesionales. Incluso mont¨® una discogr¨¢fica propia, Isotonic Records.

En 2008 recibi¨® una llamada de Los Fabulosos Cadillacs. Quer¨ªan que dise?ara la portada de su nuevo disco, La luz del ritmo (2008). ¡°Al principio fue: ¡®ok, buen¨ªsimo, voy a trabajar con los Cadillacs, una banda que he escuchado siempre¡¯. Ten¨ªa miedo porque es una banda que trabaja con una disquera multinacional, pero fue buen¨ªsimo porque el trato fue directo con ellos, igual que con una banda chica. Y lo mismo con Andr¨¦s [Calamaro], trabaj¨¦ directamente con ¨¦l. Para m¨ª siempre es importante negociar esa libertad art¨ªstica¡±.

Despu¨¦s del primer disco, volvi¨® a dise?ar para los Cadillacs y se fue con ellos de gira por todo el continente americano. Dibujaba una canci¨®n en directo por cada canci¨®n. Y acostumbrado a que sus ilustraciones pasaran por mil filtros antes de ver la luz, fue un reto exponerse delante de miles de personas: ¡°Era convivir con el error, los nervios, entender que entraban en juego un mont¨®n de otros factores como el ritmo, la velocidad o el tiempo. Es m¨¢s importante que la imagen se acople con la m¨²sica a que quede perfecta. Fue un proceso mental complejo al principio¡±.

Algunos a?os despu¨¦s, contact¨® con ¨¦l Ferm¨ªn Muguruza, conocido por haber sido la voz de las bandas de punk Kortatu y Negu Gorriak. Ten¨ªa en la cabeza una idea para una pel¨ªcula animada, pero primero quer¨ªa sacarla en formato c¨®mic. Ya hab¨ªa escrito un guion y necesitaban a alguien que la ilustrara. As¨ª, Alderete empez¨® a dibujar su primera novela gr¨¢fica: Black is Beltza (2014), la historia de un joven vasco que recorre escenarios del siglo XX revolucionario: las Panteras Negras en Nueva York, la revoluci¨®n cubana o la resistencia antifranquista en Espa?a. Todo ello, sazonado con mucha m¨²sica.

¡°El guion de Ferm¨ªn [Muguruza] parec¨ªa escrito para m¨ª. Una historia de aventuras, una road movie con una ideolog¨ªa muy marcada. Y tiene todo ese otro costado musical que siempre ha sido muy importante para m¨ª¡±. Tard¨® tres a?os en dibujarlo y le cogi¨® el gusto a eso del c¨®mic. Ahora, ultima los detalles para su primera novela gr¨¢fica dibujada y escrita por ¨¦l, Olot, que ver¨¢ la luz a mediados de a?o.

Alderete nunca para. Con la pandemia, ¡°cuando estaba predispuesto a tirarme a ver Netflix¡±, se descubri¨® dibujando. Lo que al principio parec¨ªan ilustraciones independientes, empez¨® a tomar la forma de un proyecto con hilo conductor. ¡°Me dije, ¡®ok ac¨¢ hay algo¡±. Y decidi¨® hablar a una vieja amiga de la universidad, Mariana Enr¨ªquez, una autora que ha reventado las ventas en los ¨²ltimos a?os con su autodenominado terror social. As¨ª, los dibujos se convirtieron en el libro El a?o de la rata (2021). Y despu¨¦s, en un espect¨¢culo audiovisual, al que aport¨® m¨²sica el solista portugu¨¦s The Legendary Tigerman, y una amiga de Alderete transform¨® en danza. ¡°Me gusta buscar esos l¨ªmites de mi profesi¨®n. En ese sentido es un trabajo muy rico. Me permite permear en lugares donde, de otra manera, no podr¨ªa acercarme¡±.

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