Un hombre mata a tiros en un restaurante a su esposa, la cantante mexicana Yrma Lydya
Jes¨²s Hern¨¢ndez Alcocer trat¨® de pagar a los polic¨ªas para que le dejaran huir, seg¨²n un testigo
Un feminicidio ocurrido en un restaurante ha llamado la atenci¨®n en las ¨²ltimas horas. Un hombre de 79 a?os mat¨® a su esposa, de 21, en un local de comida japonesa en la colonia del Valle de la capital mexicana. Result¨® que ambos eran conocidos. Ella, Yrma Lydya, porque era cantante de sones mexicanos y participaba en la gira Grandiosas, junto a otras artistas. De ¨¦l, Jes¨²s Hern¨¢ndez Alcocer, se ha sabido que ejerce como abogado y ha tenido relaciones con gentes de reputaci¨®n muy cuestionada, como Genaro Garc¨ªa Luna, exsecretario de Seguridad y preso en Estados Unidos por sus manejos con la droga. El hombre, que hab¨ªa dejado su BMW en la puerta, sac¨® la pistola y le dio varios tiros. La int¨¦rprete cay¨® muerta en la silla del car¨ªsimo restaurante citadino. El agresor trat¨® de huir, pero no lo consigui¨®, porque en ese lugar muchos comensales son gente de poder que lleva guardaespaldas y uno de ellos lo retuvo hasta que lleg¨® la polic¨ªa.
Yrma Lydya ten¨ªa una carrera a¨²n incipiente que no acaba de despegar. Hace unas semanas, la pareja cit¨® en su gran casa del Pedregal a una comida numerosa, a la que asistieron productores, compositores y otras gentes del mundo art¨ªstico. All¨ª estaban, por ejemplo, Jaime Flores, o Reynaldo L¨®pez. Trataban de reconducir la trayectoria de la cantante, darle un impulso. ¡°Ten¨ªa posibilidades, una gran voz, pero hab¨ªa que buscarle otras canciones, porque los temas que interpretaba eran muy antiguos¡±, dice el que era su agente, V¨ªctor Hugo S¨¢nchez, que no ha podido dormir desde que supo la noticia. ¡°?l [Hern¨¢ndez Alcocer] la present¨® como su esposa y all¨ª dijo que pondr¨ªa a su disposici¨®n cuanto se precisara para que ella brillase, para que triunfara, que no se escatimar¨ªan recursos. Aquel d¨ªa cant¨® para nosotros Se?or Amor, un bolero de Armando Manzanero, lo hizo fenomenal¡±, alaba S¨¢nchez.
Jes¨²s Hern¨¢ndez Alcocer era una figura controvertida. Entre otras cosas, asisti¨® legalmente al obispo de Ecatepec On¨¦simo Cepeda Silva cuando fue acusado de fraude, seg¨²n informa El Universal. Se recibi¨® en leyes apenas en 2017, porque en realidad hab¨ªa cursado Ciencias Pol¨ªticas, dice una fuente que lo conoce. No era el primer romance de la muchacha, quien tambi¨¦n mantuvo una relaci¨®n anterior con Carlos Qui?ones, un hombre tambi¨¦n mayor, gran empresario de la radiodifusi¨®n, que fue quien lanz¨® su carrera, seg¨²n el periodista de espect¨¢culos Gilberto Barrera. ¡°No acabaron muy bien¡±, dice Barrera, tambi¨¦n director de la revista TVyNovelas. ¡°Ten¨ªa una carrera limitada, pero una muy buena voz, quiz¨¢ a¨²n le faltaban elementos art¨ªsticos para crecer como int¨¦rprete. Qui?ones fue quien la puso en el mapa¡±, a?ade Barrera.
A Yrma Lydya la esperaban este viernes para ensayar el espect¨¢culo del s¨¢bado, pero en la noche del jueves, en el Suntory, lujoso restaurante japon¨¦s, la vida de la muchacha iba a acabar a tiros. Entre los miles de homicidios que se cuantifican en M¨¦xico a lo largo del a?o, el suyo ha causado gran impacto, porque el escenario p¨²blico, el local de comidas en una colonia de clase media-alta, estaba concurrido a esa hora. All¨ª sonaron los disparos alrededor de las nueve y media de la noche. La pareja estaba cenando y garabateando notas sobre la mesa, seg¨²n han contado algunos de los comensales. Ante el asombro de todos ellos, que en el primer tiro pensaron que algo se hab¨ªa desplomado con estruendo, Hern¨¢ndez Alcocer remat¨® a su compa?era con una bala en la cabeza.
El agresor fue auxiliado en el crimen por su guardaespaldas, un hombre de cabeza rapada y gafas oscuras que trat¨® de sacarlo del lugar. No pudo, porque un empleado de seguridad privada que acompa?aba a uno de los clientes del local lo retuvo. Avisaron a una patrulla que circulaba por la calle y algo despu¨¦s, varias m¨¢s se presentaron en el lugar. Tambi¨¦n participaron en la detenci¨®n polic¨ªas bancarios, a decir de los testigos. Tanto Hern¨¢ndez como su guardaespaldas est¨¢n detenidos, seg¨²n ha informado la Secretar¨ªa de Seguridad de Ciudad de M¨¦xico.
La cantante Dulce actuaba con ella en la gira Grandiosas. Hace apenas 10 d¨ªas, comi¨® con Yrma y con su madre. Minutos antes llam¨® Hern¨¢ndez Alcocer. ¡°No le digas que estoy con mi mam¨¢, me rog¨® Yrma, y ella misma al tel¨¦fono le dijo que estaba conmigo, nadie m¨¢s¡±, relata Dulce. El agresor les torci¨® los planes. ¡°No vay¨¢is a ese restaurante, id a este otro que os recomiendo, si no te gusta te pago la comida todo el a?o donde t¨² quieras¡±, persuadi¨® Hern¨¢ndez Alcocer a Dulce. Y all¨¢ fueron. Dulce describe la relaci¨®n de ambos con la asfixia de la protecci¨®n excesiva. Como un pajarito en una jaula de la que quiz¨¢ quer¨ªa salir, pero no pod¨ªa, ¡°porque ¨¦l era el que la apoyaba, el que la ayudaba, era muy dependiente de ¨¦l¡±. A decir de Dulce, la mam¨¢ de Yrma torc¨ªa el gesto cada vez que sal¨ªa el nombre del agresor en la conversaci¨®n. ¡°Le pregunt¨¦ en aquella comida si no se llevaban bien y r¨¢pido contest¨® Yrma: ¡®No, no, es solo que ¨¦l quiere que sea segura de m¨ª misma, que sea independiente, que crezca¡¯¡±. Tres guardaespaldas segu¨ªan constantemente a la muchacha, los que ¨¦l hab¨ªa dispuesto, por lo que Dulce descarta que ella pudiera tener alg¨²n otro romance: ¡°Estaba muy custodiada, ni tiempo de ver a otros hombres¡±.
Con los tres guardias viajaron ese d¨ªa las mujers hasta el restaurante recomendado. ¡°Aqu¨ª [en M¨¦xico] es dif¨ªcil saber si los ponen por protecci¨®n, debido a la inseguridad, o porque quer¨ªa controlarla. Ella era un cascabel, ten¨ªa solo 21 a?os, 21 a?os¡±, lamenta Dulce. Describe al agresor, con quien estuvo un par de veces, como un hombre que presum¨ªa de poder. ¡°Dec¨ªa siempre que ten¨ªa muchos contactos en el mundo judicial, que cualquier problema que yo tuviera se lo hiciera saber, que ¨¦l lo arreglaba. Y dec¨ªa que a Yrma, si ¨¦l mor¨ªa, la dejar¨ªa bien situada econ¨®micamente, igual que a los hijos, ya grandes, que ¨¦l ten¨ªa¡±. Dulce recuerda: ¡°Yrma ten¨ªa que haber venido el s¨¢bado pasado a actuar, pero ¨¦l no la dej¨®, nos dijo ella, quiz¨¢ ya hab¨ªa desacuerdos¡±, aventura. Este s¨¢bado tampoco acompa?ar¨¢ a las artistas, quienes han dejado un mensaje de p¨¦same en redes sociales. Compart¨ªa escenario con Jeanette, Angela Carrasco, Mar¨ªa Conchita Alonso, Mar¨ªa del Sol, Alicia Villarreal y Dulce, entre otras.
V¨ªctor Hugo S¨¢nchez, su representante, habl¨® hace apenas una semana con el marido de la v¨ªctima para ultimar cuestiones de publicidad de la cantante. Y estuvo en aquella comida en su casa. ¡°Es una casa enorme, en el Pedregal, con piano. Al matrimonio se le ve¨ªa bien... ?Qu¨¦ se le pasa a alguien por la cabeza para matar? Arruinan la vida de una persona y la suya propia, porque supongo que ir¨¢ a la c¨¢rcel¡±, dice S¨¢nchez. Aquella noche, seg¨²n S¨¢nchez, ella vest¨ªa ¡°elegant¨ªsima, con joyas y a ¨¦l se le ve¨ªa volcado en ella¡±. Yrma Lydya, prosigue, ¡°era muy dulce, muy amable, y muy segura de s¨ª misma, yo la conoc¨ªa desde 2014 y mand¨¦ su ¨²ltimo bolet¨ªn hace apenas un mes. Su carrera estaba muy enfilada con el apoyo de este se?or que la ha matado. Trat¨¢bamos de dejar atr¨¢s los boleros y otras canciones que interpretaba para componer para ella algo m¨¢s enfocado en el regional mexicano, con toques sierre?os. Quer¨ªamos relanzarla. Ella so?aba con salir en los medios de comunicaci¨®n, pero qu¨¦ triste que haya tenido que ser de esta manera¡±, lamenta S¨¢nchez.
Un testigo que ha contado lo sucedido en el fat¨ªdico restaurante para El Universal ha relatado que trataron de ayudar a la mujer moribunda, pero ya no reaccionaba. Y que salieron a la calle a parar a una patrulla e impidieron que el agresor escapara. El testigo ha se?alado tambi¨¦n que los agentes que intervinieron chocaron entre ellos por cuestiones de competencia policial en el lugar de los hechos. Ha dicho tambi¨¦n que el esposo de la asesinada ofreci¨® dinero a la polic¨ªa bancaria para que le dejaran marchar. ¡°Se sent¨ªa poderoso¡±, a?ade la cantante Dulce.
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