Arturo Zald¨ªvar: ¡°No hay una sumisi¨®n del poder judicial al presidente¡±
El ministro hace balance con EL PA?S de sus cuatro a?os al frente de la Suprema Corte de Justicia de la Naci¨®n, insiste en la tragedia de los feminicidios, explica su relaci¨®n con TikTok y deja abierto su futuro tras dejar el cargo
Arturo Zald¨ªvar (Quer¨¦taro, 63 a?os) suelta una risotada profunda al decirle que le llaman el presidente tiktoker. Es el hombre al frente del m¨¢ximo tribunal de justicia de M¨¦xico y tambi¨¦n un usuario pr¨¦mium de la red social donde pasan horas los j¨®venes. El magistrado entra al trapo en casi todas las tendencias con solo una l¨ªnea roja: ¡°por dignidad¡± nada de bailes. Hace videos con las canciones que le gustan de Taylor Swift, cuenta que va en tenis a la Suprema Corte de Justicia de la Naci¨®n (SCJN) y aparece con la playera de la selecci¨®n mexicana de f¨²tbol, aunque reconoce que todav¨ªa no ha visto ni un partido del Mundial y que a ¨¦l nada m¨¢s le gusta Messi.
Los ¨²ltimos meses de Zald¨ªvar han estado al vaiv¨¦n de la gresca entre Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador y el poder judicial, que ha decidido sobre temas espinosos como la prisi¨®n preventiva oficiosa o la militarizaci¨®n del pa¨ªs. ?l le quita trascendencia a la presi¨®n del p¨²lpito ma?anero y asegura que su relaci¨®n con el presidente sigue siendo de ¡°afecto¡±. Abrigado estos cuatro a?os en la bandera de causas como el feminismo o la diversidad sexual, el ministro termina su presidencia con la mirada puesta ya en la pr¨®xima etapa, que deja cuidadosamente despejada: ¡°Estar¨¦ abierto para ver si hay alguna oportunidad de seguir sirviendo a mi pa¨ªs¡±.
Pregunta. Le queda un mes al frente de la Suprema Corte. ?C¨®mo se siente? ?A qu¨¦ suena esta despedida?
Respuesta. La verdad me siento muy contento, muy satisfecho de haber logrado todo aquello que nos propusimos. Creo que hemos tenido un equipo de trabajo en el que hay muchos j¨®venes, muchas mujeres, que hemos trabajado para tratar de mejorar el poder judicial federal de nuestro pa¨ªs. Creo que lo vamos a dejar renovado, transformado. Entonces estoy muy tranquilo y trabajando con mucha pasi¨®n hasta el ¨²ltimo d¨ªa que me toca estar en esta responsabilidad.
P. ?De qu¨¦ es de lo que se siente m¨¢s orgulloso y qu¨¦ cree que le falt¨® por hacer?
R. La verdad es que todo lo que yo ofrec¨ª que iba a ser, lo hicimos e incluso logramos llegar m¨¢s lejos de lo que nos hab¨ªamos propuesto a pesar de la pandemia. Combatir la corrupci¨®n, el nepotismo, la violencia de g¨¦nero y el acoso sexual, generar pol¨ªticas para la igualdad efectiva, avanzar hacia la paridad de g¨¦nero en las juzgadoras federales, echar a andar la justicia digital, tener una nueva carrera judicial, generar una defensor¨ªa p¨²blica muy activa y comprometida. Pero de todo lo que hemos hecho las dos cosas que me producen una mayor satisfacci¨®n interna son lo que avanzamos en igualdad sustantiva entre el hombre y la mujer y las 41.000 personas pobres que dejamos en libertad hasta el d¨ªa de hoy.
P. ?Y de lo que le qued¨® por hacer? ?Nada?
R. Afortunadamente nada, con el tiempo que ten¨ªamos y a pesar de la pandemia creo que logramos todos los objetivos.
P. Insisti¨® mucho en su ¨²ltimo informe en el mensaje de que deja un ¡°poder judicial federal aut¨®nomo, renovado e independiente¡±, pero, a nivel pr¨¢ctico, ?se ha mejorado la justicia para los mexicanos y las mexicanas en estos cuatro a?os?
R. A nivel federal s¨ª, porque se tomaron una series de medidas que han fortalecido al poder judicial. Pero eso solo es una parte de la justicia en M¨¦xico. Tenemos 32 poderes judiciales en las entidades, una serie de tribunales especializados, fiscal¨ªas en los Estados, una General de la Rep¨²blica, de tal suerte que a nivel de justicia en general sigue faltando mucho por hacer, creo que hay una agenda pendiente muy importante.
P. En una de las ¨²ltimas entrevistas que le hicimos, usted acababa de rechazar la ampliaci¨®n de mandato que hab¨ªa propuesto L¨®pez Obrador. Ahora estamos en un panorama distinto: en los ¨²ltimos meses hemos visto un presidente con cr¨ªticas m¨¢s frecuentes y m¨¢s intensas hacia la SCJN. ?Qu¨¦ relaci¨®n tiene ahora con el presidente y c¨®mo ha evolucionado, si ha evolucionado?
R. Yo tengo la misma relaci¨®n que ten¨ªa con ¨¦l, una relaci¨®n de respecto, de confianza y afecto. Y m¨¢s all¨¢ de las cr¨ªticas que el presidente pueda tener y que las hace valer de manera muy clara, ha sido muy respetuoso con la autonom¨ªa e independencia del poder judicial. Gracias a ¨¦l pudimos impulsar la reforma judicial, que hubiera sido impensable sin su apoyo, y ¨¦l no ha intervenido absolutamenteme en nada que tenga que ver con el gobierno interno del poder judicial o con las decisiones de las y los jueces federales. Entonces creo que aqu¨ª hay que distinguir entre lo que se dice, que hay que entenderlo en la l¨®gica de la contienda pol¨ªtica del pa¨ªs, y los hechos: el respeto que ha permitido precisamente consolidar esta independencia del poder judicial.
P. Entonces, ?usted o el resto de ministros no han sentido presi¨®n de lo que se dice desde las ma?aneras?
R. Yo creo que si nosotros, los juzgadores federales, cambi¨¢ramos la decisi¨®n que debemos tomar en un asunto por lo que se diga en alg¨²n lugar, mal har¨ªamos. Porque el presidente hace ciertos comentarios, pero tambi¨¦n tenemos cr¨ªticas de la oposici¨®n, de los poderes f¨¢cticos, de los poderes medi¨¢ticos, del poder econ¨®mico...
P. Despu¨¦s de las ¨²ltimas resoluciones sobre la prisi¨®n preventiva oficiosa o sobre el acuerdo de las fuerzas armadas, ?usted considera que hay demasiada cercan¨ªa entre el Gobierno y la Suprema Corte?
R. Yo no s¨¦ qu¨¦ quieras decir con demasiada cercan¨ªa, yo lo que puedo decir y adem¨¢s se demuestra con las sentencias es que la Suprema Corte y el poder judicial federal en general est¨¢ resolviendo con independencia. En muchos casos ha resuelto en contra del Gobierno o contra la mayor¨ªa parlamentaria en el congreso, en la mayor¨ªa de los casos, de hecho, y en asuntos muy importantes, trascendentes, como acaba de suceder con la prisi¨®n preventiva oficiosa. En otros casos los argumentos nos parecen que est¨¢n a favor de la postura del Gobierno y as¨ª votamos. Yo creo que en los hechos nadie puede acreditar que hay una sumisi¨®n o una subordinaci¨®n del poder judicial federal al presidente, creo que al contrario. Pero, claro, hay quienes est¨¢n interesados en generar esta narrativa con efectos claramente pol¨ªticos para deslegitimar a la corte, al poder judicial y, sobre todo, para pasarme factura porque no permit¨ª que el poder judicial fuera utilizado como un instrumento de oposici¨®n.
P. ?Est¨¢ usted satisfecho con lo que se acord¨® sobre la prisi¨®n preventiva oficiosa?
R. A m¨ª me parece que cuando uno es juez constitucional tiene que estar satisfecho con lo que uno vot¨®. Yo siempre he sostenido que la prisi¨®n preventiva oficiosa es inconvencional y que el art¨ªculo 19, donde se establece, es contrario a nuestro art¨ªculo primero constitucional y que tendr¨ªamos que privilegiar los derechos de libertad y presunci¨®n de inocencia que consagra nuestro bloque de constitucionalidad. As¨ª vot¨¦ tres veces contra la prisi¨®n preventiva oficiosa y con la misma l¨®gica vot¨¦ en contra del arraigo. En ese sentido yo estoy muy satisfecho de que durante los 13 a?os que tengo de ministro siempre he votado igual, yo no cambi¨¦ mis votos cuando cambi¨® el sexenio y ah¨ª es a donde remito a mis cr¨ªticos: chequen mis votos. A m¨ª lo que me tiene satisfecho es que fue debate constructivo, libre, aut¨®nomo, y cada ministro y ministra vot¨® y se posicion¨® conforme a sus propias convicciones.
P. Pero hab¨ªa una mayor¨ªa de ministros que considera que esta figura es violatoria a los derechos humanos, usted uno de los m¨¢s firmes, pero a¨²n as¨ª parece que no hay manera de ponerse de acuerdo para eliminarla.
R. Creo que yo fui el m¨¢s firme en eso. Pero es que no es un tema sencillo, es que est¨¢ en la Constituci¨®n. Entonces no es f¨¢cil para la corte mexicana, ni para ning¨²n tribunal constitucional en el mundo, buscar una opci¨®n para dejar sin efectos algo que est¨¢ en la Constituci¨®n. Si esto hubiera estado en una ley hubi¨¦ramos llegado a un acuerdo muy r¨¢pido. Pero de verdad a m¨ª me parece que el esfuerzo que hizo la corte es plausible. ?Qu¨¦ es lo m¨¢s importante? Por primera vez, y sobre todo derivado a que yo fui a [la c¨¢rcel de] Santa Martha, se ha puesto en el debate nacional la conveniencia o no de la prisi¨®n preventiva oficiosa. Llevamos ya varios meses discuti¨¦ndolo, algo que nunca se hab¨ªa hecho en M¨¦xico, eso ya es muy buena se?al. Vamos a avanzar.
P. ?Y le preocupa una probable sanci¨®n por parte de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que est¨¢ analizando el caso de Daniel Garc¨ªa y Reyes Alp¨ªzar contra M¨¦xico, o le parece una posible soluci¨®n?
R. Pr¨¢cticamente creo que la condena es inevitable. No me preocupa, yo hubiera preferido que hubi¨¦ramos podido resolver ese tema en la jurisdicci¨®n interna, pero si no es as¨ª, por supuesto que para eso est¨¢ el Protocolo Facultativo para que la Corte Interamericana de Derechos Humanos pueda juzgar al Estado mexicano cuando hay casos que pudieran ser violatorios de derechos humanos. Creo que est¨¢ en la normalidad de una constituci¨®n abierta, que est¨¢ en di¨¢logo constante con el derecho internacional de los derechos humanos, no hay que tomarlo a la ligera, tampoco hay que tomarlo como si fuera algo extraordinario; es parte de la vida constitucional de un derecho mexicano que ha aceptado abrirse a los derechos humanos constitucionales.
P. Pero este mismo fin de semana, en el marco de la FIL de Guadalajara, en un conversatorio que ten¨ªan algunos ministros se mencion¨® la posibilidad de no cumplir la sentencia de la Corte Interamericana en el caso de que esta sancionara a M¨¦xico y le obligara a eliminar la prisi¨®n preventiva oficiosa, ?usted est¨¢ de acuerdo en que podr¨ªa no cumplirse?
R. Yo no me voy a referir a lo que se dijo en ese conversatorio, yo no estuve ah¨ª y yo respeto mucho a las ministras y ministros. Yo creo que si hay una condena de la Corte Interamericana y M¨¦xico ha aceptado la jurisdicci¨®n de la Corte Interamericana, el Estado mexicano estar¨ªa obligado a cumplir con la sentencia.
P. Ahora le quiero rebotar una pregunta que hizo usted hace poco en una conferencia: ?qu¨¦ pa¨ªs se ha construido para que se prive la vida de 10 mujeres al d¨ªa y no pase nada?
R. Es algo extraordinariamente grave, es una tragedia colectiva. Es algo sobre lo que hemos querido llamar la atenci¨®n: hicimos la serie de Can¨ªbal, vamos a sacar una pel¨ªcula sobre la serie el pr¨®ximo 7 de diciembre en la Cineteca Nacional, presentamos un documento de trabajo a la Comisi¨®n Permanente del Congreso de la Uni¨®n con ideas sobre c¨®mo se puede legislar para avanzar, hicimos un protocolo para investigar con est¨¢ndares convencionales los feminicidios... Es algo que no nos toca a nosotros de manera directa pero con la visibilidad de este cargo yo me he sentido obligado a llamar la atenci¨®n. Tenemos que cambiar en las Fiscal¨ªas, no podemos seguir revictimizando a las mujeres. Lamentablemente en mi pa¨ªs si es es mujer y se es pobre, la pueden desaparecer y nadie la busca y no pasa nada. Ya es momento de que M¨¦xico deje de ser el pa¨ªs en el que todo pasa y no pasa nada. No seremos un pa¨ªs democr¨¢tico, un pa¨ªs justo y un pa¨ªs decente mientras esta situaci¨®n no cambie.
P. ?Qu¨¦ deuda cree que tiene la justicia mexicana con sus mujeres?
R. En M¨¦xico, como me parece que casi todos los pa¨ªses del mundo, tenemos una deuda hist¨®rica con las mujeres. A las mujeres se les discrimina en todos los lugares: en el hogar, en el trabajo, en el aula, en la calle; se les violenta, algunas violencias sutiles, las miradas, los tocamientos, los chistes, la condescendencia, que van poco a poco siendo violencia mayor, los golpes, las violaciones, hasta los feminicidios. Tenemos que generar toda una justicia con perspectiva de g¨¦nero: la Corte mexicana ha insistido mucho en eso. En el poder judicial federal mexicano hay desde hace unos meses un curso de g¨¦nero obligatorio, si alguien quiere avanzar en la carrera judicial, tiene que haberlo pasado. Estamos haciendo la parte que nos corresponde. Tenemos que voltear a ver a las mujeres, entender que la cancha no es pareja y que tenemos que igualarla. Tenemos una deuda hist¨®rica con las mujeres en la justicia claramente, pero no solo, toda la sociedad mexicana y empieza desde la educaci¨®n y el lenguaje machista. A m¨ª me parece que el tema de la mujer es algo muy delicado y por eso para m¨ª ha sido una prioridad, porque las mujeres que trabajan conmigo me reeducaron y me hicieron entender lo que ustedes viven y por eso he abrazado esta causa como aliado.
P. En temas m¨¢s livianos, le llaman el presidente tiktoker. ?C¨®mo le sienta?
R. (Se r¨ªe). Bueno, algunos lo hacen en sentido peyorativo. Al principio, muchos se rieron de m¨ª y todos los que se rieron de m¨ª ya est¨¢n ah¨ª. Hace seis meses TikTok estaba todav¨ªa muy satanizado, entonces yo sin decirle a nadie, abr¨ª una cuenta y durante tres meses estuve viendo y advert¨ª que era una plataforma muy poderosa y que era donde estaban los chavitos. Un d¨ªa llegu¨¦ con mi equipo y les dije que iba a entrar ah¨ª. Fue una decisi¨®n m¨ªa, que tom¨¦ de manera aut¨®noma sin decirle a nadie, y de la cual no me arrepiento. Tuvimos que irle aprendiendo, poco a poco, despu¨¦s he rebotado ideas con colaboradores mucho m¨¢s j¨®venes, porque hay una brecha generacional enorme entre TikTok y yo. Pero yo tengo la ventaja de que siempre he estado cerca de los j¨®venes, siempre se me ha facilitado comunicarme con ellos, entonces no me ha costado trabajo: me divierte mucho y siento que estamos realizando una labor. Me dicen que si estoy en campa?a, ?no estoy en ninguna campa?a!
P. Para terminar, ministro, su salida implica una sucesi¨®n en la Suprema Corte, dijo que hay siete candidatos, que la ministra Loretta Ortiz ha declinado presentarse, ?c¨®mo cree que va a desarrollarse esta ¨²ltima fase?
R. El 5 de diciembre es el plazo para que quienes quieren contender inscriban sus programas de trabajo. Desde mi punto de vista habr¨¢ por lo menos cinco personas interesadas en ser presidente o presidenta de la corte. Hasta este momento no hay nadie que pueda parecer como favorito o favorita. Yo creo que durante el mes de diciembre va a haber mucha intensidad en los acercamientos, iremos viendo para que podamos llegar a una transici¨®n civilizada, y ojal¨¢ quien quede sea con un n¨²mero de votos importante para que de ah¨ª se pueda generar una unidad.
P. La ministra Norma Pi?a dec¨ªa en una entrevista con nosotros que era el momento de que una mujer presidiera la Suprema Corte, ?qu¨¦ piensa usted?
R. Yo lo que puedo decir es lo que he dicho: las mujeres en M¨¦xico est¨¢n preparadas para cualquier responsabilidad que ellas quieran. Yo no creo en eso de que si la Corte est¨¢ preparada aqu¨ª las que est¨¢n preparadas son las mujeres, le tocar¨¢ a las ministras y ministros decidir quien tiene en este momento las condiciones, las caracter¨ªsticas para representar a la corte. Recordemos que es un cargo unipersonal, no es un tema paridad.
P. ?Tiene favorito o favorita?
R. No tengo candidato ni candidata. Yo ir¨¦ decantando mi voto tratando de sumarme a quien vea que puede generar un mayor consenso dentro de la corte y, obviamente, que tenga un perfil adecuado.
P. Le quedan dos a?os como ministro, ?qu¨¦ viene despu¨¦s?
R. Yo no s¨¦ que viene despu¨¦s de que dej¨¦ la presidencia de la Corte, votar¨¦, regresar¨¦ a una de las dos salas, dependiendo, y a partir de ese momento, cumplir¨¦ mi funci¨®n como ministro pero estar¨¦ abierto para ver si hay alguna oportunidad de seguir sirviendo a mi pa¨ªs, lo ponderar¨¦ y tomar¨¦ en su momento la decisi¨®n.
P. Y la ¨²ltima: ?se marcha con tristeza o con algo de alivio?
R. Ni con tristeza ni con alivio. Yo estoy convencido de que en la vida todo es impermanente, todo es transitorio, si t¨² entiendes las cosas as¨ª las disfrutas y despu¨¦s las dejas ir, no sufres cuando las etapas terminan porque entiendes que abren la puerta a otra nueva que tendr¨¢ nuevas sorpresas, emociones y sastisfacciones, porque al final del d¨ªa la felicidad no est¨¢ en el cargo que uno tiene sino en la paz mental y la paz interior.
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