Tres mujeres asesinadas en Tijuana: Baja California busca a un feminicida serial estadounidense
La Fiscal¨ªa estatal ha solicitado la extradici¨®n del sospechoso para que pueda ser juzgado por tribunales mexicanos
Un asesino en serie de mujeres anda suelto. No hay nombre, solo un apodo: el ¡®Ted Bundy¡¯ de Tijuana. Un ¡°sujeto tendiente a conductas criminales, a reaccionar con violencia, soci¨®pata¡±, en palabras del fiscal general de Baja California, Iv¨¢n Carpio S¨¢nchez, recogidas por Milenio. En un pa¨ªs en el que se cometen 11 feminicidios al d¨ªa, la realidad siempre se abre camino para tomar un cariz a¨²n m¨¢s escabroso. Del sospechoso apenas se sabe nada: que es estadounidense; que se le atribuyen al menos tres homicidios, pero podr¨ªan ser m¨¢s; que en estos momentos no se encuentra en suelo mexicano y por eso la Fiscal¨ªa ha solicitado la extradici¨®n a Estados Unidos.
Ante la falta de datos concretos, la prensa se ha apresurado a ponerle el apodo, despu¨¦s de que Carpio S¨¢nchez lo comparara con Bundy, un feminicida en serie estadounidense que asesin¨® a decenas de mujeres en la d¨¦cada de los setenta. Muri¨® en la silla el¨¦ctrica el 24 de enero de 1989, a los 42 a?os. Carism¨¢tico, narcisista y manipulador, su caso se volvi¨® tremendamente medi¨¢tico y consigui¨® que mucha gente creyera en su inocencia. Lleg¨® a fugarse dos veces.
Fue el modus operandi de ambos, el Bundy real y el homicida an¨®nimo de Tijuana, el que provoc¨® que el fiscal los comparara. Bundy ten¨ªa un tipo: universitarias, de clase media, morenas y de pelo largo. Las atra¨ªa en zonas concurridas con mentiras, las raptaba, las violaba y despu¨¦s las asesinaba. El asesino en serie de Baja California ten¨ªa puntos en com¨²n con ¨¦l: ¡°Se encuentran correspondencias de circunstancias que ocurrieron. Es un sujeto que ataca en este caso a personas en condici¨®n de vulnerabilidad, en solitario, y que las conduce con enga?os a estar en una ocasi¨®n que le permita agredirlas bajo el mecanismo de mantener una actividad privada con estas mujeres¡±, se?al¨® Carpio S¨¢nchez. Algunos medios apuntan que las mujeres asesinadas eran trabajadoras sexuales.
Elizabeth Mart¨ªnez Cigarroa se ganaba la vida bailando en un bar de Tijuana. Desapareci¨® el d¨ªa de San Valent¨ªn: el 14 de febrero de este a?o. Tres d¨ªas despu¨¦s, su hermano encontr¨® su cuerpo sin ropa en el maletero de un Jeep Liberty. El coche hab¨ªa sido abandonado en la esquina de Ni?os H¨¦roes y Michoac¨¢n, a cinco calles del lugar donde trabajaba la mujer. Solo ten¨ªa 25 a?os.
La noche que Mart¨ªnez Cigarroa desapareci¨®, tuvo una cita con un hombre extranjero al que hab¨ªa conocido en el trabajo. Ella le cont¨® a su hermano y a su madre que hab¨ªa quedado a cenar con ¨¦l. Fueron a Pampas Do Brasil, un elegante restaurante brasile?o en la Zona R¨ªo de Tijuana, de acuerdo con la prensa local. La investigaci¨®n apunta a que ella fue la ¨²ltima v¨ªctima del feminicida.
Cuando la Fiscal¨ªa comenz¨® a rastrear el caso, descubri¨® que hab¨ªa al menos otras dos mujeres asesinadas siguiendo el mismo m¨¦todo. Tambi¨¦n trabajaban en bares. Las huellas que el Bundy de Tijuana hab¨ªa dejado tras de s¨ª permitieron a los investigadores descubrir su identidad, aunque no han querido hacerla p¨²blica para no poner en riesgo la captura.
Sin embargo, un reportaje de la periodista Rosario Mosso Castro para el semanario Zeta, un medio referente de Tijuana, identifica al sospechoso como Brayan Andrade Rivera, un californiano de 30 a?os. ¡°Es moreno claro, con sobrepeso, cara ovalada, nariz recta grande, orejas sobresalientes, labios medianos, cabello oscuro, corto, aparenta tener m¨¢s edad. Luce tosco y bultoso al lado de las chicas a las que contrata, a quienes prefiere menuditas¡±, escribe la periodista.
Siempre seg¨²n la investigaci¨®n de Zeta, las tres mujeres asesinadas eran trabajadoras sexuales a las que el sospechoso hab¨ªa conocido en clubs de alterne de la zona. A las otras dos v¨ªctimas las identifica con los nombres de Karen, de 28 a?os y procedente de Veracruz, y ?ngela. Su hip¨®tesis tambi¨¦n apunta a que pudo cometer m¨¢s asesinatos, y asegura que fue el homicidio de Mart¨ªnez Cigarroa el que puso a la polic¨ªa tras sus pasos: ¡°En la camioneta dejada por el asesino en la Zona Norte, los peritos encontraron huellas y los investigadores varias im¨¢genes del homicida en su ruta, fotos a trav¨¦s de las cuales otras trabajadoras de la Zona Norte identificaron a Rivera como el cliente y agresor de Fergie [el apodo de Mart¨ªnez Cigarroa].
Ahora, la Fiscal¨ªa estatal espera la colaboraci¨®n de organismos como el FBI y la Interpol para poder extraditar al presunto asesino. Ponerle punto final a la historia de terror contra las mujeres, en un pa¨ªs con 17.776 feminicidios desde 2018, ya es otra cuesti¨®n.
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