El juicio en Estados Unidos contra el zar antidroga Garc¨ªa Luna amenaza al entorno de Felipe Calder¨®n

La espera ha terminado. El juicio de m¨¢s alto perfil contra un exfuncionario mexicano en la historia est¨¢ por comenzar en Estados Unidos. A tres a?os de ser detenido, Genaro Garc¨ªa Luna finalmente se sentar¨¢ este martes en el banquillo de los acusados en la Corte del Distrito Este del Estado de Nueva York, el mismo tribunal donde Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n fue condenado a cadena perpetua en 2019. Es aqu¨ª mismo donde el secretario de Seguridad P¨²blica del Gobierno de Felipe Calder¨®n (2006-2012) tendr¨¢ que responder por tres cargos por tr¨¢fico de coca¨ªna, uno m¨¢s por delincuencia organizada y otro m¨¢s por falsedad de declaraciones. De ser hallado culpable, el antiguo jefe de la Polic¨ªa de M¨¦xico se enfrentar¨¢ a un m¨ªnimo de 10 a?os de c¨¢rcel o la pena m¨¢s alta, pasar el resto de su vida tras las rejas. La Fiscal¨ªa acusa a Garc¨ªa Luna, uno de los pol¨ªticos m¨¢s pol¨¦micos y temidos de los ¨²ltimos a?os, de colaborar con el Cartel de Sinaloa durante casi dos d¨¦cadas. Su destino est¨¢ en manos de un jurado an¨®nimo y de Brian Cogan, el mismo juez que sentenci¨® a El Chapo. El caso se definir¨¢ en un tribunal de Brooklyn, pero amenaza con desatar una tormenta pol¨ªtica a m¨¢s de 3.300 kil¨®metros de distancia, del otro lado de la frontera.

La Corte del Distrito Este de Nueva York, uno de los tribunales m¨¢s medi¨¢ticos de Estados Unidos, tiene programadas decenas de audiencias para este martes, entre juicios contra miembros de pandillas, fraudes multimillonarios y un esc¨¢ndalo de sobornos en la FIFA, el organismo rector del f¨²tbol internacional. ¡°?Cu¨¢l juicio es? ?El del terrorista?¡±, pregunta con curiosidad un empleado del juzgado, que da la impresi¨®n de haber visto de todo en los ¨²ltimos a?os, mientras repasa en su cabeza el apretado calendario de los jueces. ¡°?Ah, claro! El polic¨ªa de M¨¦xico¡±, dice aliviado tras acordarse, sonriendo con aire de suficiencia. ¡°Es el caso m¨¢s importante que tenemos en estos d¨ªas¡±, zanja.

El nombre de Genaro Garc¨ªa Luna no dice mucho en Brooklyn, pero el juicio contra el exfuncionario no ha pasado desapercibido. Algunos medios estadounidenses se refieren a ¨¦l como Mexico¡¯s top cop, el ¡°poli importante¡± de M¨¦xico, o como el J. Edgar Hoover mexicano. El inter¨¦s por el caso se dispara cuando se incluye en la f¨®rmula su supuesta vinculaci¨®n con El Chapo y c¨®mo este proceso se perfila como una nueva edici¨®n, una segunda parte, del llamado juicio del siglo. Hace dos semanas, los caminos del antiguo miembro del Gabinete y del cartel mexicano m¨¢s famoso del mundo se volvieron a cruzar, cuando Ovidio Guzm¨¢n, hijo del capo, fue capturado en Sinaloa, tras un operativo y un vendaval de violencia que se sald¨® con al menos 29 personas muertas, seg¨²n las autoridades. Pese a que el term¨®metro ha marcado bajo cero varias veces en los ¨²ltimos d¨ªas, cada vez se ven m¨¢s reporteros y c¨¢maras de televisi¨®n mexicanos y latinos en las calles y los alrededores de la corte.

Garc¨ªa Luna, un hombre cuyo ascenso mete¨®rico no puede explicarse sin el estallido de la guerra contra el narcotr¨¢fico durante su gesti¨®n, no ser¨¢ visto vestido con el uniforme de la c¨¢rcel durante el juicio. Fue una petici¨®n expresa hecha por sus abogados. El juez Cogan autoriz¨® que se le facilitara un guardarropas que incluye dos trajes azul marino, dos camisas blancas y dos azul claro, cuatro camisetas, tres corbatas, cuatro pares de calcetines y un par de zapatos negros. La defensa est¨¢ convencida de que podr¨¢ demostrar la inocencia de su cliente y que la Fiscal¨ªa no tiene pruebas s¨®lidas en su contra. En un sistema legal como el estadounidense, que privilegia la obtenci¨®n de acuerdos de culpabilidad a cambio de penas reducidas para dar mayor velocidad a la resoluci¨®n de los casos, la decisi¨®n de ir a juicio es en s¨ª una declaraci¨®n de intenciones.

Por las audiencias previas, se sabe que la Fiscal¨ªa planea llevar al estrado a unos 20 testigos. Los abogados de Garc¨ªa Luna han intentado que esos testimonios sean desechados y en el conflicto se han aireado algunos posibles nombres de quienes podr¨ªan hablar contra Garc¨ªa Luna, una mezcla de exfuncionarios y narcotraficantes que dicen estar dispuestos a contarlo todo, la mayor¨ªa de ellos, capturados durante la gesti¨®n del exsecretario de Seguridad. Quieren hablar de los sobornos, los pactos oscuros, la farsa de los operativos autosaboteados contra los capos. La lista a¨²n no es p¨²blica y se ir¨¢ desgranando con el avance del juicio. Lo que s¨ª es seguro es que ser¨¢ una monta?a de acusaciones y revelaciones que alimentar¨¢n una sospecha permanente en M¨¦xico: el nivel de implicaci¨®n de las autoridades con el crimen organizado.

El presidente, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, ha puesto en la mira tambi¨¦n cientos de miles de d¨®lares que Garc¨ªa Luna logr¨® amasar como contratista del Gobierno despu¨¦s de que dej¨® el servicio p¨²blico. La Fiscal¨ªa tambi¨¦n ha asegurado que va a poner bajo escrutinio la fortuna que hizo el exfuncionario en el sector privado. Las autoridades afirmaron que el acusado ayud¨® a que un grupo de compa?¨ªas recibieran millones de d¨®lares del Gobierno de Estados Unidos para instalar sistemas de vigilancia y equipos tecnol¨®gicos, y que esas mismas empresas despu¨¦s le pagaron el favor con una lujosa mansi¨®n en Florida cuando dej¨® el cargo en 2012. ¡°Los empresarios le consiguieron una casa multimillonaria y un yate en Miami, as¨ª como un contrato lucrativo¡±, se lee en un documento judicial presentado la semana pasada.

La defensa ha respondido que la faceta de su cliente como hombre de negocios es irrelevante para el caso. El juicio ser¨¢, sin embargo, una radiograf¨ªa de toda su vida. Desde el arresto de Garc¨ªa Luna en diciembre de 2019, apenas cinco meses despu¨¦s de la condena contra El Chapo, L¨®pez Obrador ha dejado claro que no piensa desaprovechar la oportunidad de que las acusaciones salpiquen a Calder¨®n, uno de sus principales n¨¦mesis pol¨ªticos. Desde un principio, Calder¨®n ha defendido que nunca supo que su secretario de Seguridad tuviera v¨ªnculos con el narco y que, si pas¨®, fue a sus espaldas.

Pero Calder¨®n no es el ¨²nico potencialmente afectado por todo el proceso y sus da?os colaterales. La Fiscal¨ªa asegura que Garc¨ªa Luna colabor¨® con el Cartel de Sinaloa desde 2001, cuando fue jefe de la Agencia Federal de Investigaciones durante el Gobierno de Vicente Fox (2000-2006). Las acusaciones de corrupci¨®n y puertas giratorias como contratista gubernamental apuntan, por su parte, a la Administraci¨®n de Enrique Pe?a Nieto (2012-2018). Incluso, se puede hablar de supuestos delitos en el c¨ªrculo cercano del actual presidente. Durante el juicio de El Chapo, algunos traficantes aseguraron que se acercaron a gente de su equipo para ofrecerles sobornos. Aun as¨ª, L¨®pez Obrador sabe que tiene la ventaja en el forcejeo pol¨ªtico. ¡°Va a estar interesante lo del juicio de Garc¨ªa Luna¡±, dijo el mandatario la semana pasada. ¡°Va a estar muy bueno, mucho muy bueno el juicio¡±, insisti¨®. Y adelant¨® que le iba a dar seguimiento.

Tras el feriado en Estados Unidos de este lunes, est¨¢ previsto que el martes concluya la selecci¨®n de qui¨¦nes ser¨¢n los 12 miembros del jurado y que despu¨¦s empiece la primera audiencia del juicio contra Garc¨ªa Luna, con los alegatos iniciales, salvo un cambio de ¨²ltima hora. El funcionario mexicano de mayor rango en ser procesado busca defender su legado. Y con ¨¦l, se pone en juego tambi¨¦n el de los primeros a?os de la guerra contra el narco.

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