Los ¨²ltimos d¨ªas de Marciano Cantero, l¨ªder de Enanitos Verdes, contados por su hijo: ¡°Tuvo un sue?o en el hospital¡±

Un viento zonda, terroso y caluroso, proveniente de la Cordillera de los Andes, le avis¨® a Javier Cantero (Buenos Aires, 31 a?os) que su padre no lo lograr¨ªa. Caminaba por el centro de Mendoza, al oeste de Argentina, cuando lo intuy¨® mientras Marciano Cantero (1960-2022) estaba internado en el hospital despu¨¦s de una cirug¨ªa complicada. Era 7 de septiembre de 2022. Horas antes la doctora le hab¨ªa explicado entre l¨¢grimas que Marciano ten¨ªa pocas posibilidades de sobrevivir y ¨¦l supo entonces que tendr¨ªa que dar un paso al frente si el cantante y bajista de Enanitos Verdes mor¨ªa. ¡°Lo sent¨ª como el momento en el que ten¨ªa que tomar las riendas de todo esto (¡­) y yo iba a tener que salir a poner el pecho¡±, cuenta Javier Cantero a EL PA?S en una entrevista por videollamada desde Argentina.

Marciano falleci¨® un d¨ªa despu¨¦s, el 8 de septiembre de 2022, a los 62 a?os, y Javier asumi¨® el papel de vocero. Se encarg¨® de llamar a su madre, Cecilia Hoffmann, a la expareja de su padre en M¨¦xico, Roc¨ªo Herr¨¢n; a Juan Mendiry, el m¨¢nager de los Enanitos, y dio aviso en el grupo de Whatsapp que cre¨® para informar del estado de salud del m¨²sico. Despu¨¦s sali¨® de la Cl¨ªnica de Cuyo, cruz¨® la calle y entr¨® en una iglesia cat¨®lica. ¡°En esa ¨¦poca estaba muy metido en la religi¨®n¡±. Regres¨® y dio un mensaje a los medios que se multiplic¨® en las redes sociales: ¡°Despu¨¦s de la operaci¨®n tuvo momentos no tan buenos. Hoy estaba un poco mejor, pero la situaci¨®n era cr¨ªtica. La verdad es que no era bueno el panorama. No s¨¦ qu¨¦ hora es ahora, pero [su fallecimiento] pas¨® al ratitito. No lo tuve mucho pero cada d¨ªa con ¨¦l fue un regalo¡±, y cerraba: ¡°Quiero que lo recuerden, no solo como el compositor, el cantante, el artista que era, tambi¨¦n como una persona maravillosa y mi mejor amigo en el mundo. ?l siempre dec¨ªa que Amigos [la canci¨®n de Enanitos Verdes] la compuso porque quer¨ªa que alg¨²n d¨ªa su hijo sea su mejor amigo, y se cumpli¨®¡±.

Los ¨²ltimos d¨ªas de su padre, Horacio Eduardo Cantero Hern¨¢ndez ¡ªconocido como Marciano Cantero por el parecido que alguien le encontr¨® con el personaje de la serie de los a?os sesenta Mi marciano favorito¡ª retratan la vida de un rockero imparable pero tranquilo, solitario y con algunos signos de agotamiento. Despu¨¦s de una gira de 42 conciertos por M¨¦xico y Estados Unidos, con la que Enanitos Verdes celebraban sus cuatro d¨¦cadas de trayectoria, el m¨²sico hab¨ªa vuelto a la soledad de su casa mendocina. ¡°?l siempre lo explicaba como que de gira ten¨ªa que estar con 650.000 personas saludando, hablando, abrazando, sac¨¢ndose fotos, porque ¨¦l siempre se sac¨® las fotos en cada show con todas las personas que iban y se quedaba hasta la ¨²ltima persona. Era l¨®gico que llegaba a su casa y quer¨ªa estar solo, y quer¨ªa estar tranquilo, y la verdad es que estaba solo en su casa viendo Bob Esponja y History Channel¡±, narra Javier.

En esa soledad fue que las se?ales de la enfermedad se hicieron impostergables. Estaba completamente debilitado, hab¨ªa estado comiendo sopa instant¨¢nea toda la semana porque no ten¨ªa fuerza para cocinarse. El hermano mayor de Marciano, Eduardo Cantero, acudi¨® a su casa para acompa?arlo a realizarse unos estudios m¨¦dicos, sin embargo, lo planeado se convirti¨® en emergencia cuando not¨® su mal estado de salud. Lo vio que se ca¨ªa, que no pod¨ªa ponerse en pie y le dijo: ¡°Ya mismo te llevo a internar¡±. En aquel momento era dif¨ªcil suponer de qu¨¦ enfermedad se trataba, los s¨ªntomas parec¨ªan estar ¡°desconectados¡± entre s¨ª: sent¨ªa picazones, le dol¨ªa el hombro y ten¨ªa molestias en un ri?¨®n. ¡°?l era medio boca cerrada en eso porque ten¨ªa miedo a los doctores¡±, dice su hijo.

Ese lunes 29 de agosto de 2022, cuatro d¨ªas despu¨¦s de su cumplea?os 62, Marciano ingres¨® en la Cl¨ªnica de Cuyo, un hospital privado de Mendoza, donde le practicaron una ecograf¨ªa (una prueba para analizar im¨¢genes de los ¨®rganos) y los m¨¦dicos hallaron un tumor en el ri?¨®n. ¡°Un tumor del que no ten¨ªamos tanta informaci¨®n en el momento, pero despu¨¦s result¨® ser c¨¢ncer (¡­) en el ri?¨®n. Parec¨ªa que hab¨ªa met¨¢stasis. Ten¨ªa [c¨¢ncer] en el diafragma y en el bazo¡±, detalla Javier Cantero.

XTC y risas en la habitaci¨®n

Hubo tiempos de optimismo en el cuarto de hospital. Javier se quedaba con ¨¦l d¨ªa y noche. Aunque sal¨ªa a conseguir sus propios alimentos, su padre le convidaba de los suyos. Eso s¨ª, rezongaba por el sabor de la comida de hospital. Un d¨ªa, a pesar de su debilidad, se levant¨® y deambul¨® por la habitaci¨®n. Le llam¨® por tel¨¦fono a Cecilia Hoffmann, la madre de Javier. Se re¨ªa con ella mientras platicaba. El hijo ocupaba la cama y el m¨²sico se sentaba en la silla para las visitas. Se ve¨ªa lejano un desenlace fatal. ¡°Segu¨ªa siendo ¨¦l, segu¨ªamos siendo amigos, los mejores amigos haciendo de las nuestras¡±.

Una noche, padre e hijo escucharon un ¨¢lbum que no conoc¨ªan de la banda brit¨¢nica XTC. Ambos fanatizados. Tambi¨¦n vieron un documental del grupo. Se quedaron dormidos oyendo a The Dukes of Stratosphear, un seud¨®nimo que us¨® XTC en la d¨¦cada de los ochenta. Es posible que los ecos de esta m¨²sica influyeran en alg¨²n punto en las composiciones de Enanitos Verdes. Ambas comparten un halo nost¨¢lgico. A la ma?ana siguiente, Marciano dijo: ¡°?Guau, qu¨¦ bueno que estuvo ese disco, qu¨¦ bueno haberlo compartido!¡±.

As¨ª como Javier Cantero tuvo una vivencia premonitoria en una caminata por el centro de Mendoza, su padre tuvo un sue?o mientras estaba internado. ¡°Creo que [para mi pap¨¢] fue como una forma de entender que si se ten¨ªa que ir estaba todo bien¡±. Javier prefiere reservarse los detalles de esta visi¨®n on¨ªrica, que Marciano le cont¨® a su hermano Eduardo.

La lesi¨®n que cambi¨® un sonido

Marciano Cantero se convirti¨® en un cl¨¢sico. Su voz al cantar, cercana a su tonalidad al hablar, ten¨ªa una claridad y un dulzor reconocibles al toque. Generaciones de latinoamericanos tienen en su memoria ese timbre vocal de canciones nost¨¢lgicas, de baladas mel¨®dicas con una base de bater¨ªa y bajo que han emanado de un bar, de la radio, de una fiesta o de una noche de bohemia. Es ¡°una de los voces m¨¢s bonitas del rock en espa?ol¡±, opina Mara V, cantante y entrenadora vocal, en un video de YouTube.

Su voz se mantuvo casi intacta con el paso de los a?os. No as¨ª el sonido de su bajo el¨¦ctrico, que sufri¨® cambios desde hace m¨¢s de una d¨¦cada a causa de una lesi¨®n, una tendinitis (la inflamaci¨®n de los tejidos que unen los m¨²sculos a los huesos), originada por una ca¨ªda en un escal¨®n que provoc¨® que su axila golpeara con una valija. Por recomendaci¨®n m¨¦dica tuvo que dejar de tocar durante un a?o. ¡°Fue muy duro para ¨¦l, porque no sab¨ªa si iba a seguir de gira o no, no sab¨ªa si iba a poder volver a tocar¡±, explica Javier Cantero.

Cuando por fin pudo retomar el instrumento, su sonido se modific¨®. ¡°A partir de ah¨ª, muy de a poco pudo volver a empezar a tocar con bajos superlivianos. Tuvo que dejar de usar bajos Fender [los tradicionales], Gibson, el Music Man que usaba en discos en vivo, y encontr¨® un lutier de Texas que se llama Scott [Beckwith], con su marca Birdsong, y los us¨® muchos a?os hasta que ¨¦l se empez¨® a hacer sus propios bajos y finalmente dio con el Fender [m¨¢s ligero], con todos los Fender, el color madera que estaba usando estos ¨²ltimos a?os, y con el Hofner¡±.

El hijo de Marciano rememora un concierto de septiembre de 2008 en el teatro ND Ateneo, de Buenos Aires, para describir el sonido que precedi¨® a la lesi¨®n. ¡°Todo ese a?o us¨® un sonido de bajo muy picante, muy ronco, brillante, jaquero, y comparado con cualquier show post-2018 , con el Fender y con el Hofner, que es un sonido super-Paul McCartney, m¨¢s apagado, m¨¢s redondo, que tiene esos graves que se sientan bien en la mezcla¡­ el sonido de la banda tuvo un cambio muy rotundo¡±.

¡®Marciano 2001¡¯

Unos meses antes de su fallecimiento, Marciano Cantero le dio un regalo a su hijo que a la distancia parece el acto simb¨®lico de entrega de un legado. En enero de 2022, le obsequi¨® uno de los bajos Fender que usaba en las giras y le dijo: ¡°Mir¨¢, si llega el d¨ªa en el que yo no pueda tocar m¨¢s el bajo, tom¨¢. Aprendete el show de los Enanitos, por si yo no puedo seguir tocando¡±.

Javier as¨ª lo hizo. Se aprendi¨® las canciones en el bajo, las letras y los coros. Pero ¨¦l no se considera un enanito verde y, aunque tiene la experiencia con su propio grupo y ha participado en algunos homenajes interpretando las canciones de su padre, asume la estafeta desde otra posici¨®n. ¡°Lo que dej¨® fueron dos discos in¨¦ditos, pr¨¢cticamente listos para lanzar, pero que necesitan los toques finales y bastante regrabaci¨®n, pero las canciones est¨¢n compuestas y su voz est¨¢ grabada y las letras est¨¢n hechas. Ahora lo veo como ¨¦l dici¨¦ndome: ¡®Mir¨¢, te va a tocar a vos, as¨ª que preparate y espero que est¨¦s a la altura¡¯¡­ y la verdad es que estoy dando lo mejor de m¨ª para que estos dos discos sean como ¨¦l los quer¨ªa¡±.

En un momento de la conversaci¨®n, Javier Cantero ense?a a la c¨¢mara la portada de un ced¨¦ que en un fondo de papel blanco tiene escrito un t¨ªtulo a mano, Marciano 2001. Este material ver¨¢ la luz pr¨®ximamente, aunque todav¨ªa no hay una fecha oficial de salida. ¡°Estoy trabajando con un equipo que me est¨¢ ayudando a restaurar el disco de 2001, para llevarlo a la calidad que esperan hoy los fans, para poder sacarlo tambi¨¦n en vinilo, en CD, y tambi¨¦n con artistas visuales. Estamos todav¨ªa en pleno trabajo. Si fuera por m¨ª, ya estar¨ªa en la calle, ya estar¨ªa en Spotify, ya estar¨ªa en disquer¨ªas, pero es un proceso lento y cr¨¦eme que el que m¨¢s ansioso est¨¢ soy yo. Me encantar¨ªa decir que saldr¨¢ este a?o [2023]¡±.

Hay un disco m¨¢s de canciones in¨¦ditas. Las composiciones de estos dos ¨¢lbumes corresponden a una etapa en la que Marciano exploraba, ¡°estaba tratando desesperadamente de pegarle a las paredes del rock y decir ¡®quiero salir del est¨¢ndar¡¯ del que ven¨ªan de tantos discos, de Big bang, Guerra gaucha, Planetario, que eran como el rock de Enanitos, la f¨®rmula cl¨¢sica¡±.

¡®El r¨ªo sigue¡¯

Enanitos Verdes surgi¨® en 1979. Comenz¨® con presentaciones en pubs de Mendoza y sigui¨® con conciertos en teatros peque?os en la misma provincia y en otras cercanas. La alineaci¨®n inicial estaba conformada por Marciano Cantero como vocalista y bajista, Felipe Staiti en la guitarra y Daniel Piccolo en la bater¨ªa. Despu¨¦s de probar suerte en Buenos Aires en 1983 sin mucho ¨¦xito, en 1984 participaron en un festival en el que fueron declarados como Grupo Revelaci¨®n. En ese mismo a?o grabaron su primer ¨¢lbum hom¨®nimo, Los Enanitos Verdes, con Sergio Embrioni (1960-2011) como m¨²sico invitado. El resto es historia.

La canci¨®n A¨²n sigo cantando, del ¨¢lbum debut, se convirti¨® en un ¨¦xito en la radio de la capital argentina y despeg¨® una trayectoria que hoy sit¨²a a Enanitos Verdes como una de las bandas de rock m¨¢s longevas de Latinoam¨¦rica, e incluso del mundo, solo detr¨¢s de grupos como Scorpions ¡ª58 a?os¡ª, Chicago ¡ª56 a?os¡ª, El Tri de M¨¦xico ¡ª55 a?os¡ª, o los legendarios Rolling Stones, que suman ya 60 a?os de trayectoria.

Felipe Staiti (Mendoza, 62 a?os), el guitarrista fundador, ha tomado la batuta para que la banda contin¨²e. Ahora tambi¨¦n es el vocalista y ha integrado una nueva alineaci¨®n junto con el baterista desde 2009, Antonio Jota Morelli (Santa Fe, 62 a?os). ¡°Creo que la mejor manera de poder luchar contra esa ausencia es con m¨¢s m¨²sica. Los Enanitos siempre fuimos en un r¨ªo, que el r¨ªo fluye, y nunca es el mismo. A pesar que la forma se ve igual, el agua pasa, y lamentablemente ahora pas¨® esto, pero los Enanitos estamos asumiendo esa tristeza y poni¨¦ndole el pecho a las balas [¡­] El r¨ªo sigue¡±, dijo Staiti en enero de este a?o, en una entrevista realizada por la Municipalidad de Mendoza a prop¨®sito de la participaci¨®n del grupo en la Fiesta de la Vendimia 2023.

Guillermo Guille Vadal¨¢ (Buenos Aires, 55 a?os) ahora es el bajista. El m¨²sico es una leyenda del instrumento que ha tocado con figuras como Pat Metheny, Luis Alberto Spinetta (1950-2012) o Fito P¨¢ez. La alineaci¨®n se completa con Damiano, Dami¨¢n Castroviejo (Buenos Aires, 43 a?os), y Arita Rockdr¨ªguez, Adriana Rodr¨ªguez (Mendoza, 45 a?os), en los coros. El mexicano Bosco Aguilar (Ciudad de M¨¦xico, 36 a?os) toca los teclados. ¡°Estar ahora en el escenario con ellos, y tocando esas canciones que me influenciaron desde muy joven, es algo alucinante que me hace sentir honrado y agradecido¡±, dice Aguilar a EL PA?S por mensaje de Instagram.

Enanitos Verdes se presentar¨¢n en Ciudad de M¨¦xico, el 29 de noviembre, y en Monterrey, el 30. En diciembre participar¨¢n en el festival B¨¦same Mucho en Los ?ngeles (Estados Unidos), y en marzo de 2024 debutar¨¢n en el estadio Luna Park de Buenos Aires, despu¨¦s de una gira que ha incluido Espa?a, Italia, Puerto Rico, Colombia y EE UU.

Quiz¨¢s Marciano Cantero ha vuelto a la Cordillera cercana a su natal Mendoza a trav¨¦s del viento. Y en alg¨²n lugar sonar¨¢, una y otra vez, la canci¨®n hom¨®nima que en una estrofa dice: ¡°Y as¨ª podr¨¢n pasar los a?os / Y yo tomar mil direcciones / S¨¦ que he dejado un mundo atr¨¢s / Siguiendo siempre un ideal / Como un valiente cazador / En las estrellas¡±.

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