El asesinato de un activista contra la miner¨ªa en Jalisco ilustra el poder del crimen en el corredor del Pac¨ªfico
Criminales desaparecen y luego asesinan a Higinio Trinidad De la Cruz, que desde hace a?os peleaba contra las concesiones mineras y la tala de ¨¢rboles en la sierra. Los ataques contra defensores de la tierra son una constante en los ¨²ltimos a?os
El cuerpo de Higinio Trinidad De la Cruz apareci¨® sin vida, este fin de semana, en un paraje de la sierra de Manantl¨¢n, en los l¨ªmites de los estados de Colima y Jalisco. De la Cruz y otros comuneros del ejido Ayotitl¨¢n, ubicado en medio de la sierra, se opon¨ªan desde hace d¨¦cadas a la miner¨ªa y la tala de ¨¢rboles en la zona. Colegas y familiares del activista denunciaron su desaparici¨®n el viernes, tras acudir a una reuni¨®n con el presidente municipal, seg¨²n su entorno. El cad¨¢ver apareci¨® el s¨¢bado, al menos con una herida de arma de fuego, seg¨²n la Fiscal¨ªa de Jalisco. Ten¨ªa 44 a?os.
Su asesinato constata el poder del crimen en el corredor del Pac¨ªfico, en el centro de M¨¦xico, que comprende las costas de Jalisco, Michoac¨¢n y Colima. En los ¨²ltimos a?os, los ataques contra activistas y defensores de la tierra en la zona han sido constantes. Tambi¨¦n las desapariciones. El empuje del crimen coincide con las protestas constantes de las comunidades contra la explotaci¨®n minera, legal e ilegal. ¡°El crimen organizado llega para reprimir y destruir cualquier atisbo de resistencia en esta zona¡±, dice Eduardo Mosqueda, abogado de la organizaci¨®n Tsikini, que da apoyo legal a la comunidad. ¡°Cada reuni¨®n que hacen ellos, llega el Cartel Jalisco a tratar de desintegrarla¡±, a?ade, en referencia al grupo criminal que impera en la zona.
Las condenas se suceden desde el fin de semana. Organizaciones de defensa de los derechos humanos de Jalisco, caso de Tsikini, han exigido que se deslinden responsabilidades. ¡°Pedimos que se investigue al presidente municipal, a la polic¨ªa, que se d¨¦ seguridad a la zona y que la Fiscal¨ªa federal atraiga el caso¡±, se?ala Mosqueda. La Oficina en M¨¦xico del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha pedido que se adopten ¡°las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los defensores¡± en la sierra. El caso apunta al Gobierno federal: m¨¢s de una docena de defensores de Ayotitl¨¢n gozaban supuestamente de protecci¨®n por parte de la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n, entre ellos De la Cruz
Tsikini alert¨® precisamente de la desaparici¨®n del activista el viernes. ¡°El defensor fue citado en la presidencia municipal de Cuautitl¨¢n, por la ma?ana¡±, dice Mosqueda, en referencia a la cabecera a la que pertenece Ayotitl¨¢n, Cuautitl¨¢n de Garc¨ªa Barrag¨¢n. ¡°Eso fue como a las 11.00. Luego, testigos vieron c¨®mo lo sacaron por la parte de atr¨¢s¡±, a?ade. ¡°Es importante mencionar que ¨¦l ya hab¨ªa sufrido amenazas, ataques y desaparici¨®n forzada en 2022¡å, recordaba Tsikini este fin de semana.
A mediados del a?o pasado, criminales se llevaron a De la Cruz y a otro ejidatario de sus casas. Seg¨²n relata la reportera Analy Nu?o en un extenso reportaje publicado por el portal A D¨®nde Van los Desaparecidos hace unos meses, los criminales los esposaron y les vendaron los ojos. ¡°Horas m¨¢s tarde los trasladaron ¡®con el jefe¡¯. Los interrog¨® y les reclam¨® su postura contra la mina. Despu¨¦s de d¨ªa y medio, fueron liberados ¡°, lee el texto. La mera menci¨®n de la mina no implica necesariamente que las grandes empresas mineras est¨¦n detr¨¢s o que patrocinen estas pr¨¢cticas. Podr¨ªa ser, pero la miner¨ªa ilegal prolifera en la regi¨®n y los ejidatarios la enfrentan tambi¨¦n.
Un a?o antes del levant¨®n de De la Cruz, criminales hab¨ªan asesinado a uno de los l¨ªderes de la comunidad, Isaac Ch¨¢vez. Abogado, candidato a presidente del comisariado eijdal, m¨¢xima autoridad de Ayotitl¨¢n, Ch¨¢vez enfrentaba al grupo de ejidatarios que, en los ¨²ltimos a?os, hab¨ªa apoyado a las empresas mineras que explotan los yacimientos de hierro de la regi¨®n, principalmente ArcelorMittal y Ternium. Como ocurre en otras partes del pa¨ªs, la misma riqueza del suelo y la relaci¨®n de las empresas que lo explotan con los pobladores han generado muchas tensiones en la comunidad.
Adem¨¢s del caso de Ch¨¢vez, el asesinato de De la Cruz enlaza con los ataques que han sufrido los activistas contra la miner¨ªa en el mismo corredor pac¨ªfico, en este caso un par de horas al sur, en los l¨ªmites entre Michoac¨¢n y Colima. En abril, criminales asesinaron a balazos al activista Eustacio Alcal¨¢ en Huizontla. Igual que en Ayotitl¨¢n, pobladores de Huizontla peleaban desde hace a?os contra las explotaciones mineras en la regi¨®n. En una y otra zona, las principales exportaciones mineras est¨¢n en manos de ArcelorMittal y Ternium.
El caso de Eustacio Alcal¨¢ enlazaba a su vez con el de Ricardo Lagunes y Antonio D¨ªaz, desaparecidos desde enero de este a?o. Lagunes es abogado y ha colaborado con varias organizaciones de defensa de derechos humanos en la regi¨®n. D¨ªaz es vecino de Aquila, comunidad aleda?a a Huizontla. Los dos hab¨ªan criticado la actividad minera en la zona, igual que los comuneros de Ayotitl¨¢n. ¡°En Aquila y Huizontla es lo mismo que aqu¨ª¡± dice Mosqueda. ¡°Es la misma regi¨®n, la misma etnia -son todos nahuas- y el mismo grupo criminal que les atosiga¡±, a?ade el abogado.
Otro de los rasgos comunes de los ataques y agresiones en el corredor pac¨ªfico es precisamente la organizaci¨®n criminal imperante en la zona, el CJNG, o Cartel Jalisco Nueva Generaci¨®n. Desde hace a?os, activistas y defensores, tambi¨¦n autoridades, han se?alado la presencia de grupos presuntamente ligados a la organizaci¨®n criminal, con intereses en diferentes rubros econ¨®micos, principalmente la miner¨ªa ilegal y la tala de ¨¢rboles. ¡°Ellos llegan y se presentan como que son de ese grupo, al menos en Ayotitl¨¢n¡±, dice Mosqueda.
Los ataques de la sierra de Manantl¨¢n son bien conocidos m¨¢s all¨¢ de las fronteras de M¨¦xico. En 2022, la organizaci¨®n internacional Global Witness, que cuenta los cr¨ªmenes contra defensores del medio ambiente, se?alaba: ¡°Las operaciones mineras han impulsado la deforestaci¨®n, la p¨¦rdida de vida silvestre, los cambios clim¨¢ticos y la contaminaci¨®n t¨®xica [en la sierra de Manantl¨¢n]. Sin embargo, ha sido imposible cuantificar la verdadera escala de los da?os, ya que la empresa minera mantiene un estricto control sobre el ¨¢rea¡±.
La situaci¨®n puede empeorar en los pr¨®ximos meses por la temporada electoral. El ejido de Ayotitl¨¢n elige a sus autoridades en abril, para un mandato de tres a?os. A Isaac Ch¨¢vez, candidato de la resistencia contra la miner¨ªa y la tala, lo mataron d¨ªas antes de la ¨²ltima elecci¨®n, en 2021. Cada a?o, el ejido recibe decenas de millones de pesos de las empresas que explotan legalmente las minas de hierro de la regi¨®n.
La elecci¨®n aparece igualmente como posible m¨®vil del asesinato de De la Cruz. ¡°?l estaba viendo un tema de sucesiones agrarias. Cuando los ejidatarios mueren, su derecho a la tierra se lega al viudo, a la viuda, al hijo mayor, lo que sea. ?l logr¨® 150 sentencias, o sea, que 150 personas herederas consiguieran el derecho para votar en la pr¨®xima asamblea¡±, explica Mosqueda. El abogado detalla que el bando contrario logr¨® la victoria la ¨²ltima vez por apenas un par de votos. No es dif¨ªcil ver la incomodidad que podr¨ªa haber provocado el defensor asesinado con sus movimientos de cara a la votaci¨®n.
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