¡°El crimen ten¨ªa el sello de la narcomafia¡±: el CNI abre los archivos sobre los periodistas asesinados durante la Guerra Sucia
El servicio de inteligencia del Gobierno mexicano entrega al Archivo General de la Naci¨®n los expedientes que redact¨® sobre los homicidios de 10 periodistas mexicanos cometidos entre 1979 y 1990
El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) abri¨®, por primera vez, los expedientes que elabor¨® sobre los homicidios de 10 periodistas mexicanos cometidos entre 1979 y 1990. El periodo conocido como la Guerra Sucia se caracteriz¨® por el uso, por parte del Gobierno mexicano, de la represi¨®n y la desaparici¨®n como mecanismo de control en contra de disidentes y opositores. Las fichas y documentos, obtenidos a trav¨¦s de transparencia, muestran que tal y como ocurre en la actualidad, el crimen organizado y autoridades locales estuvieron detr¨¢s de los homicidios y que la impunidad en las investigaciones fue la regla.
Entre los expedientes revelados est¨¢n el de H¨¦ctor F¨¦lix Miranda, El Gato F¨¦lix, codirector del semanario Zeta de Tijuana, Baja California, acribillado en abril de 1988 por dos elementos de seguridad del hip¨®dromo propiedad del pol¨ªtico y empresario Jorge Hank Rohn. Y si bien, ambos fueron sentenciados y quedaron en libertad en 2015, Hank Rohn nunca enfrent¨® a la justicia aunque Jes¨²s Blancornelas, director del medio, lo apunt¨® como presunto autor intelectual del crimen que habr¨ªa ocurrido en represalia por las cr¨ªticas del periodista.
Los otros expedientes son los de Alberto Rodr¨ªguez Torres, asesinado en 1979, en Hidalgo; Javier Ju¨¢rez V¨¢zquez, en 1984, en Veracruz; Ernesto Flores Torrijos y Norma Alicia Moreno Figueroa, en Tamaulipas, Demetrio Ruiz Malerva, en Veracruz, y Odil¨®n L¨®pez Ur¨ªas, en Sinaloa, todos en 1986; Hermelinda Bejarano Le¨®n, en Chihuahua, y Ronay Gonz¨¢lez Reyes, en Chiapas, en 1988; y Elvira Marcelo Esquivel, en 1989, en Ciudad de M¨¦xico.
Desde febrero de 2019, el presidente mexicano, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, public¨® un acuerdo para que toda su Administraci¨®n, en particular la Secretar¨ªa de la Defensa Nacional (Sedena) y el CNI, enviaran al Archivo General de la Naci¨®n (AGN) todos los documentos sobre represi¨®n pol¨ªtica y social, corrupci¨®n, violaciones a derechos humanos o agresiones contra periodistas ocurridos entre 1965 y 1990.
De manera oficial, el Archivo s¨®lo recibi¨® siete expedientes por parte del CNI, entre ellos el del homicidio del periodista mexicano Manuel Buend¨ªa, ocurrido en 1984. El CNI es el nombre que la agencia mexicana de inteligencia adopt¨® en 2018, pero que anteriormente era llamado Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional (Cisen).
Desde el a?o pasado, el Mecanismo de Esclarecimiento Hist¨®rico (MEH) de la Comisi¨®n para el Acceso de la Verdad creada por el Gobierno mexicano identific¨® que estaban desaparecidos varios expedientes de periodistas asesinados que fueron transferidos al AGN en 2002 y aparec¨ªan enlistados en diversos cat¨¢logos. Lo mismo ocurri¨® con expedientes de algunos pol¨ªticos opositores: aparec¨ªan en ¨ªndices pero no se encontraban f¨ªsicamente.
Ante el hallazgo, el Mecanismo envi¨® al CNI una serie de solicitudes de informaci¨®n y se presentaron recursos de revisi¨®n ante el Instituto Nacional de Acceso a la Informaci¨®n (INAI) para obtener los expedientes de dichos homicidios. Pese a que CNI neg¨® tenerlos, al final termin¨® entregando una serie de fichas y oficios que documentan los asesinatos. Los casos corresponden a las presidencias de Jos¨¦ L¨®pez Portillo, Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari, todos del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
¡®El Gato¡¯ F¨¦lix
H¨¦ctor El Gato F¨¦lix Miranda. Naci¨® el 21 de julio de 1940 en Sinaloa. Lleg¨® a Tijuana en 1960. Fue asesinado el 20 de abril de 1988 de un escopetazo calibre 12. Era codirector del diario Zeta. As¨ª inicia el expediente de 13 p¨¢ginas entregadas por el CNI sobre el homicidio del periodista.
¡°Aproximadamente a las 09.50 horas de hoy fue asesinado de un escopetazo cal.12, quien era codirector del Peri¨®dico ZETA. Escrib¨ªa en la secci¨®n ¡®Un poco de algo¡¯, en el cual era muy notorio por sus cr¨ªticas en ocasiones con palabras soeces, incluso hac¨ªa comentarios y cr¨ªticas sobre la vida privada de quienes criticaba¡±, dice el reporte.
Los agentes de inteligencia retomaron las palabras de Jes¨²s Blancornelas, director de Zeta, quien consider¨® que si bien el crimen ten¨ªa el sello del narco eso pudo usarse para desviar la verdadera raz¨®n del crimen.
¡°Alguien o algunos podr¨¢n comentar que lo sucedido ser¨ªa consecuencia por su forma de escribir¡ La forma en que fue asesinado indica las caracter¨ªsticas de un crimen de la narcomafia, pero ser¨ªa un absurdo tan grande como su asesinato involucrado en este terreno. Podr¨ªa ser que se utiliz¨® el cl¨¢sico sistema para desviar la investigaci¨®n y cubrirla con el argumento de su inmediata y futura imposible aclaraci¨®n, como ha sucedido con otros cr¨ªmenes de igual procedimiento¡±, dijo Blancornelas, fallecido en 2006.
Victoriano Medina Moreno, exjefe de seguridad del Hip¨®dromo Caliente, propiedad de Hank Rhon, fue detenido como autor del homicidio. ¡°Aunque Medina Moreno afirma haber cometido el crimen por decisi¨®n propia esto, no lo cree as¨ª la autoridad judicial por lo que en unas horas m¨¢s habr¨¢n de catear las instalaciones del Hip¨®dromo¡±, anot¨® un agente del organismo.
M¨¢s adelante, el centro de inteligencia se?al¨® que la defensa de Medina Moreno era pagada por el pol¨ªtico y empresario y ¡°se ha lanzado de lleno para demostrar oficialmente que el Ing. Jorge Hank Rhon no es el autor material del asesinato de H¨¦ctor F¨¦lix Miranda¡±.
Los expedientes
En el periodo de 2000 a 2024, la organizaci¨®n internacional Art¨ªculo 19 ha documentado los homicidios de 166 periodistas de nacionalidad mexicana, siendo Veracruz, Guerrero, Chihuahua y Oaxaca los Estados que acumulan m¨¢s casos. Sin embargo, los casos de ataques a la prensa mexicana se han registrado desde d¨¦cadas previas.
El 13 de diciembre de 1979, el cad¨¢ver del periodista Alberto Rodr¨ªguez Torres fue hallado en calles de Pachuca, Hidalgo. Ten¨ªa golpes en el cr¨¢neo. Los directores de tres diarios locales publicaron una carta al entonces presidente Jos¨¦ L¨®pez Portillo para esclarecer el crimen y se protegiera el trabajo period¨ªstico. El crimen de Rodr¨ªguez Torres sigue impune.
El 31 de mayo de 1984, el periodista Javier Ju¨¢rez V¨¢zquez, quien editaba la revista independiente Primera Plana en Coatzacoalcos, Veracruz, fue ejecutado con cuatro disparos calibre 45, golpeado y maniatado con cables. Un agente de inteligencia escribi¨® que se perfilaban como autores materiales e intelectuales un grupo de polic¨ªas del Estado, el presidente municipal de Coatzacoalcos y un l¨ªder del sindicato petrolero, quienes lo hab¨ªan amenazado por las cr¨ªticas que hac¨ªa en su contra en su medio. Semanas despu¨¦s, dos guardaespaldas del jefe sindical que eran sospechosos del crimen, fueron hallados muertos. En 1991, el Cisen report¨® que un grupo de periodistas conmemoraron el s¨¦ptimo aniversario del homicidio de Ju¨¢rez V¨¢zquez. El fiscal estatal les prometi¨® ese d¨ªa que el crimen ser¨ªa esclarecido. Es el ¨²ltimo reporte del caso, que sigue impune.
El 17 de julio de 1986, Ernesto Flores Torrijos, director del diario El Popular de Matamoros, Tamaulipas, y la reportera Norma Alicia Moreno Figueroa fueron acribillados cuando se hab¨ªan estacionado afuera de la redacci¨®n. En su momento, la Asociaci¨®n de Periodistas de Matamoros lanz¨® una petici¨®n para que el Gobierno del presidente Miguel de la Madrid resolviera el caso. Pero al cumplirse un a?o del doble homicidio, en 1987, el medio local El Gr¨¢fico public¨®: ¡°Si entonces anticipamos que quedar¨ªa sin castigo, salvo que mediara la voluntad pol¨ªtica del presidente Miguel de la Madrid, ahora reconocemos que ni a¨²n con ella se podr¨ªa hacer justicia, puesto que su orden p¨²blica al secretario de Gobernaci¨®n, Manuel Bartlett D¨ªaz, para que sean aclarados los asesinatos de periodistas cometidos durante lo que va del sexenio, no ha tenido una respuesta satisfactoria¡±.
El 7 de octubre de 1986, el periodista Odil¨®n L¨®pez Ur¨ªas viajaba en coche por Culiac¨¢n, Sinaloa, junto con su esposa e hija cuando fueron detenidos por un grupo de ocho hombres armados. Ellas fueron abandonadas en la carretera; ¨¦l secuestrado. Su cad¨¢ver apareci¨® dos d¨ªas despu¨¦s en un predio bald¨ªo en Guam¨²chil, Sinaloa. Ten¨ªa dos disparos en el pecho. Meses antes, en marzo del mismo a?o, el hijo mayor de Odil¨®n fue asesinado y un mes despu¨¦s, en abril, el abogado que representaba a la familia en el caso fue secuestrado presuntamente por polic¨ªas judiciales de Sinaloa. Los homicidios del reportero y su hijo no han sido esclarecidos.
El 14 de julio de 1988, dos hombres llegaron a la redacci¨®n del peri¨®dico El Mundo en Comit¨¢n, Chiapas, preguntando por su director, el periodista Ronay Gonz¨¢lez Reyes. Cuando la asistente los llev¨® al ¨¢rea de prensa, donde estaba el director, los hombres abrieron fuego y lo mataron.
La madrugada del 23 de diciembre de 1989, Elvira Marcelo Esquivel, reportera del diario El D¨ªa, caminaba con dos colegas por la calle de la Ciudad de M¨¦xico despu¨¦s de celebrar una posada. Iban a sus casas cuando un grupo de cinco polic¨ªas locales, presuntamente alcoholizados, los abord¨® e intent¨® robar. Hubo golpes y forcejeos. Un agente sac¨® una pistola y dispar¨®. Elvira, de 25 a?os, cay¨® herida. Falleci¨® durante la Nochebuena en un hospital. El homicidio, ocurrido en la capital del pa¨ªs, lleg¨® a la C¨¢mara de Diputados y algunos de los agentes responsables fueron detenidos y encarcelados. Es de los pocos casos en los que hubo justicia. Como en un juego de espejos, la impunidad se repite en los cr¨ªmenes contra periodistas mexicanos del pasado y del presente.
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