¡®KeMonito: La ¨²ltima ca¨ªda¡¯, una radiograf¨ªa del ser humano detr¨¢s de la m¨¢scara y m¨¢s all¨¢ del ring

Jes¨²s Ju¨¢rez Rosales es un ¨ªdolo mexicano. Incluso internacional. Su fascinante figura ha conquistado a distintas generaciones durante sus incontables presentaciones, a lo largo de 40 a?os, en la Arena M¨¦xico, como uno de los personajes m¨¢s ic¨®nicos y queridos del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL). Todos, en realidad, lo conocen en el ring como KeMonito, el personaje que caracteriza desde hace 18 a?os. Entre aventuras, memes y su inolvidable atuendo ¡ªde un peque?o gorila turquesa¡ª, ha aportado entretenimiento y alegr¨ªa a este deporte nacional.

A pesar de convertirse en una figura viral tras la pandemia, Ju¨¢rez Rosales, de 57 a?os, lleva a?os queriendo retirarse. A¨²n con sus crecientes lesiones, movilidad disminu¨ªda y su complicada situaci¨®n econ¨®mica, esto no ha sido posible. ?C¨®mo es el d¨ªa a d¨ªa de un ¨ªcono de la lucha libre mexicana que ve el final de su carrera cada vez m¨¢s cerca? Es una de las preguntas que se plantea el cortometraje documental KeMonito: La ¨²ltima ca¨ªda, de la directora Teresa de Miguel, que se encuentra disponible en Netflix, una radiograf¨ªa al ser humano detr¨¢s de la m¨¢scara y m¨¢s all¨¢ del ring.

Ju¨¢rez Rosales naci¨® en Guadalajara, Jalisco, en 1967. Lo hizo con acondroplasia, una condici¨®n que se conoce popularmente como enanismo. Trabaj¨® desde peque?o en talleres de autom¨®viles, en carpinter¨ªas y hojalater¨ªas y hasta en circos. En 1984, luego de entrenarse durante una temporada, comenz¨® su carrera en la lucha bajo los motes de El Duende Maya y El Centavito. Pronto lleg¨® su primera oportunidad como ¡°mascota¡± del famoso luchador conocido como Tinieblas.

¡°Tinieblas andaba buscando un perrito o changuito, algo para mascota de ¨¦l. Yo entr¨¦ como Alushe, la primera mascota dentro de la lucha libre. Los ni?os y adultos dec¨ªan: ¡®?Qu¨¦ es esto? ?Un changuito!¡¯. Todos quer¨ªan tocarme por el morbo de la gente¡±, recuerda KeMonito en un fragmento del documental.

La primera vez que De Miguel (Madrid, 38 a?os) tuvo contacto con el mundo de la lucha libre fue a sus 15. A¨²n recuerda su primera vez en la Arena M¨¦xico, en un estado de ¡°shock absoluto¡±, con las gradas reventando, la gente de pie gritando, los ni?os aplaudiendo, ¡°era una locura¡±, rememora. Ver a un monito turquesa volando por los aires, con la estatura de un ni?o peque?o, ¡°sin saber qui¨¦n era esa figura¡±, le caus¨® fascinaci¨®n. ¡°A m¨ª me ha llamado siempre la atenci¨®n lo que ocurre en las gradas, lo que ocurre en el ring. Y evidentemente una de las figuras que m¨¢s despierta fascinaci¨®n, alegr¨ªa, emoci¨®n, ternura y muchos otros sentimientos es KeMonito¡±, cuenta.

El segundo momento que la llev¨® a emprender su labor f¨ªlmica fue durante una asignaci¨®n como periodista en la que realiz¨®, junto a un colega, un reportaje sobre las viejas glorias de la lucha libre y c¨®mo, en el ocaso de su carrera, batallan con problemas f¨ªsicos, de salud y econ¨®micos. Inmediatamente pens¨® en KeMonito, porque siempre lo consider¨® una leyenda. Lo entrevist¨® en la Arena M¨¦xico, pero sinti¨® que, al ser un trabajo coral, solo llegaron a capturar una breve fotograf¨ªa del personaje.

¡°Recuerdo perfectamente el momento cuando termin¨® la entrevista. Se quit¨® la m¨¢scara. Fue algo que a m¨ª me dej¨® bastante impresionada, porque los luchadores enmascarados tienen mucho cuidado de preservar su identidad y ¨¦l tuvo la confianza de sentarse a mi lado, mostrarme su rostro y seguir platicando ya fuera de c¨¢mara. Ese momento a m¨ª me gener¨® como mucha curiosidad por toda su historia y muchas ganas de explorar de una manera mucho m¨¢s extensa su persona, su personaje y toda su historia. Sent¨ª que la historia de KeMonito se merec¨ªa algo m¨¢s amplio, m¨¢s profundo¡±, afirma De Miguel.

Lo m¨¢s importante, explica la realizadora, era explorar en el documental esta contradicci¨®n absoluta de una persona que, en su mente, es famosa, reconocida y querida en M¨¦xico, pero que a la vez est¨¢ pasando por problemas econ¨®micos considerables en los ¨²ltimos a?os de su carrera. Lo cual tambi¨¦n implic¨® una dificultad y limitante para narrar su vida en profundidad. ?C¨®mo contar la historia detr¨¢s de la m¨¢scara de una persona que no quiere revelar su identidad?

¡°El desaf¨ªo es brutal. Lo que tratamos de hacer fue darle un poco la vuelta y utilizarlo a nuestro favor, porque tambi¨¦n creo que visualmente se vuelve bastante atractivo ver momentos ¨ªntimos de esta persona, por ejemplo, cuando est¨¢ en el doctor recibiendo fisioterapia y adem¨¢s con la m¨¢scara siempre puesta. En algunos lugares donde se present¨® el cortometraje, donde no conocen tanto la cultura de la lucha libre mexicana, entend¨ªan que era un recurso est¨¦tico o un recurso narrativo, cuando en realidad era una necesidad imperiosa de proteger su identidad¡±, agrega.

La realizadora, que declara su admiraci¨®n por el documental latinoamericano, cuenta que entre sus inspiraciones para KeMonito: La ¨²ltima ca¨ªda estuvo el estilo de hacer cine de la cineasta salvadore?a-mexicana Tatiana Huezo y su forma de abordar la no ficci¨®n, que trata que la historia y la acci¨®n sean las que lleven la narrativa y no sea puramente una especie de voz en off o una entrevista.

¡°El documental de Cassandro me encant¨®. Me atrajo y anim¨® mucho. Despu¨¦s otros documentales, que a lo mejor no tienen nada que ver con este tema, pero que para m¨ª son referentes y que de alguna manera uno intenta emular. Uno que me fascina se llama Paris is burning [Jennie Livingston, 1990] sobre la escena ball en Nueva York; as¨ª como Margarita, de Bruno Santamar¨ªa, tambi¨¦n muy ¨ªntimo. Trat¨¦ de alcanzar ese tipo de narrativa¡±, precisa la directora.

Aunque el documental no se adentra en aspectos judiciales respecto al litigio entre el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) y Ju¨¢rez sobre los derechos del personaje KeMonito, en 2023 el luchador dej¨® el CMLL entre denuncias de acoso laboral, despojo y fraude y pas¨® al circuito independiente. Alega que, aunque el Consejo tiene registrado al personaje, ¨¦l fue quien lo dise?¨® y desarroll¨® y quien tiene el leg¨ªtimo derecho de su uso. El caso sigue pendiente de resoluci¨®n.

La producci¨®n ¡ªcon una duraci¨®n de 23 minutos¡ª, que tuvo un recorrido por m¨¢s de 15 festivales por todo el mundo y que incluso fue nominada a los premios Ariel en la categor¨ªa de mejor corto documental, recibi¨® apoyo del Instituto Mexicano de Cinematograf¨ªa, por lo que la filmaci¨®n se llev¨® a cabo durante unos seis meses en 2021. Sin embargo, para lograr la intimidad que De Miguel consigue en su obra, han sido cinco a?os en los que la directora ha cultivado una relaci¨®n con KeMonito, su esposa y sus cuatro hijos, todos comprometidos con la carrera de su esposo y padre desde distintas ¨¢reas.

¡°Es una persona que lucha cada d¨ªa, que tiene que coser ¨¦l mismo sus m¨¢scaras en su casa con su m¨¢quina Singer y que le echa ganas todos los d¨ªas para sacar adelante a su familia. Creo que eso es muy sorprendente para la gente que lo ve como una figura superfamosa¡±, concluye De Miguel.

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